–Tengan – dijo el omega de cabello rubio mientras deslizaba un sobre sobre la mesa hacia su hermano y su mejor amigo.

La pareja observó confundida.

–¿Qué es esto? –preguntó Jimin.

–Un regalo, cara

–¿Regalo? ¿Por qué?

Jungkook y Taehyung se observaron mutuamente, para luego volver su vista a la pareja contraria.

–Sabemos que aún no se han dado el tiempo de una Luna de miel. –mencionó Taehyung–han estado muy ocupados. JiYoon ya está grande y puede quedarse con nosotros.

El Alfa mestizo sonrio mirando a JiMin.

–Son boletos de avión para Italia. –informó con una sonrisa. –En Bergamo.

YoonGi soltó una carcajada llamando la atención de todos los presentes.

–Veo que se me adelantaron –Entrelazo los dedos con los de su Omega– Pensaba llevar a JiMin en un viaje por algunos países de latinoamerica.

El omega observo perplejo a su Alfa.

–Yoonie...

El Alfa dejo un beso en su mejilla.

–Pensé que podríamos llevarnos a JiYoonie, pero ya que se ofrecen a cuidarla.

La otra pareja soltó unas carcajadas mientras asentían.

–Por nosotros no hay problema, YoonGi. La cuidaremos mucho.

JiMin quien aún se encontraba perplejo por la confesión de su Alfa, tomó el sobre que Taehyung había deslizado sobre la mesa.

–Les agradecemos mucho este gran regalo. Pasaremos unos días es Bergamo. –afirmó mirando a su Alfa, quien asintió.

–No tienes que agradecer nada, cara. Mi familia estará feliz de recibirlos y conocerlos. No se preocupen que no se quedarán con ellos en casa. Tenemos una casa disponible para ustedes, los días que decidan quedarse en el lugar.

JiMin los observó con los ojos llorosos y se acercó a abrazarlos a cada uno.

–Te lo mereces, Mimi. –susurró su amigo. – Quizás cuando vuelvas del viaje, ya este hechos los mellizos que me prometió YoonGi.

–Ay, Tata. Espero que seas paciente, porque pasará un largo tiempo, para eso.

El omega volvió a sentarse a lado de su Alfa, y este lo miró sonriendo.

–¿Cuando pensabas decírmelo? –preguntó.

YoonGi hizo que se sentará en sus piernas y beso sus mechones rubios.

–Dentro de unos días –informo– Pensaba entregar algunos planos pendientes y cerrar algunos tratos. Nos iríamos por dos meses.

–¿Es por eso que mi Alfa no ha estado muy pendientes de sus omegas?

Hace semanas que JiMin había notado la falta de atención hacia él y su hija de parte del Alfa. Si bien era consciente de que no era una infidelidad ni falta de amor, por que no sentía nada más que paz y cariño a través del lazo. Empezó a preocuparse, YoonGi iba muy temprano y volvía muy tarde, cuando sus omegas ya estaban dormidos. Tenía miedo de que volviera a ser el mismo Alfa de antes, quien se cargaba de trabajo hasta el cuello, olvidándose de todo, hasta de él mismo.

Su hija no sintió tanto la ausencia de su padre ya que este la veía de noche y la rodeaba de su aroma a Madera, haciéndola sentir tranquila.

–Sí, cariño. Lo siento, era una sorpresa. No podría simplemente soltartelo.

El rubio sonrió y enredó sus brazos alrededor del cuello del Alfa y dejó un beso en sus labios.

–Bien, suficiente. –interrumpió Taehyung a la pareja. – No me parece justo, que viajen por todo latinoamerica sin mí.

–No olvides, amore mío, que nosotros aún tenemos pendiente nuestra luna de Miel. –atrajo al omega en un beso.

Taehyung tomó entre sus dientes le labio inferior del Alfa con saña, jalando del piercing que lo decoraba con el ceño fruncido.

–Alfas –susurró entre dientes con el ceño fruncido.

JiMin observo divertido la escena.

–Ah, pues olvídate de una Luna de Miel –comenzó JiMin– Se casaron en Italia, por lo tanto aquí Taehyung sigue siendo soltero y un Min.

–Pero ya nos caso un cura.

–No importa. Quiero estar en la boda de mi mejor amigo, por lo tanto, no permitiré algo como una luna de Miel.

Taehyung sonrio y fue a abrazar a su amigo y hermano. Dejando de lado a JungKook al que tal vez se le estaba ocurriendo grandes ideas.

–Estoy emocionado–dijo el omega mientras abrazaba a su Alfa por la espalda.

YoonGi sonrio de lado y apagó la estufa, se encontraba cocinando un poco de carne, para su Omega. Volteó sin romper el abrazo y se apoderó de sus labios en un beso lento llevándose todo el sabor al Caramelo que estaba comiendo JiMin.

–Yo también, lo estoy –dijo al separarse– Te dije que no comieras nada, mientras te hacia la cena. Omega desobediente.

El omega hizo un puchero y escondió su rostro en el cuello del Alfa.

–Tenía mucha hambre. –se justifico.

–Te dije que haría algo rápido.

–Tardaste mucho, eres un Alfa muy lento. –dijo alejándose.

El Alfa lo miro indignado y volteó para seguir cocinando.

La comida estuvo lista luego de unos cuantos minutos. JiMin sentó a su hija para darle algo de papilla, carne y una zanahoria para morder. El Alfa solo los observaba en silencio y se acercó al omega que daba un sorbo a su copa de vino.

–Veremos que tan lento crees que soy más tarde, Omega desobediente –susurró en su oído, emanando su aroma. Vio al omega apretar el muslo y sonrío de lado llevando sus manos bajo la falda del omega, quien acostumbraba solo a usarlos en casa, deleitandolo con sus muslos de miel. Y es que Jimin con el pasar de los años, se liberaba más y confiaba en él, mostrandole algo nuevo de él mismo, que lo hacían enamorarse más de él.

–Estoy preocupado –informo el omega– JiYoonie se va a quedar sin nosotros mucho tiempo.

Esa mañana se levantaron listos para el vuelo que debían tomar hacia Italia. JiMin no había querido separarse de su hija pero también le emocionaba viajar por algunos países y se sentía en una encrucijada. Quería estar con su hija pero también disfrutar de su matrimonio.

Su madre lo calmó diciéndole que era normal tener esos pensamientos, ya que tuvo a su nieta muy temprano y que ella también pasó lo mismo cuando lo tuvo, pero que no debía sentirse culpable, les quedaban muchos viajes con ella.

–Ya hablamos de esto, cariño –mencionó YoonGi– Nuestra niña esta en buenas manos, Tae y Hye prometieron llamar cualquier emergencia.

–Pero es muy chiquita, Yoon.

El alfa soltó un suspiro. Hace más de una hora habían despegado y ya podían quitarse los cinturones de seguridad. Así que los desabrochó y tomó a su Omega en sus brazos, llevándolo en la habitación que se encontraba en el Jet privado. Donde lo recostó en su pecho.

–Ella estará bien. Sabes lo independiente que es para tener dos años, cariño. Es muy inteligente.

–Lo sé, es nuestra hija. Solo que me iré lejos de ella, por dos meses. Siento que estoy siendo egoísta. –sollozo.

–Cariño, no eres egista. Se trata de tu Luna de Miel. Algo que no pudimos hacer. No es egoísta que queramos tener un momento a solas. Que seamos padres, no quiere decir que le debamos todo nuestro tiempo a nuestros hijos. También necesitamos un descanso, un tiempo para nosotros, para amarnos sin terceros. Solo tú y yo, como Alfa y omega, como Esposos y como dos seres humanos que se aman. JiYoonie no nos odiara por eso.

JiMin soltó un sollozo y YoonGi solo lo abrazó.

–Te amo. –susurró.

–Yo te amo más.

Y ambos se quedaron dormidos.

Bien un extra que se me acaba de ocurrir de la nada e inmediatamente lo trabaje. Si bien quería hacer un extra de la luna de miel. No sabía cómo, me salió esto. Así que estoy satisfecha.

No quiero alargar más este fic, así que se queda aquí. Imaginen ustedes los hermosos países que llegaron a visitar por latino América.

Nos leemos pronto♡♡.