Habían pasado varios días y Jungkook estaba realmente ocupado como le había dicho a Jimin. Entre sus reuniones con muchos clientes y todos los preparativos para deshacerse de todos los negocios ilegales estaba realmente ocupado.

También se había reunido con todos sus hombres y les había explicado su decisión de dejar la mafia y les dió la opción de quedarse y continuar con el en lo que pensaba hacer negocios ahora o buscar su propio camino, pero todos decidieron quedarse, no importaba lo que hiciera ellos lo seguridad y varios de ellos se alegraron de que ya no se arriesgarían tanto.

[¿Volverás tarde esta noche?] La voz de Jimin se escuchó suave del otro lado de la línea.

Jungkook estaba en el bar esperando hablar con otro cliente.

—No lo sé, pero será tarde, duerme y no me esperes —le respondió sintiéndose mal por no haber tenido mucho tiempo para el castaño en los últimos días.

[¿Ya comiste?] volvió a preguntar Jimin.

—Sí, he comido a tiempo como ordenaste, los chicos no permiten que me salte una comida, no quieren verte enojado —dijo el pelinegro con simpatía.

[Bien]

—Jimin.

[Si]

—¿Qué pasa? —preguntó el mafioso al sentir el tono triste del joven.

[Nada]

—Dime que tienes, ¿no te sientes bien? Tu voz se escucha diferente —insistió Jungkook antes de escuchar suspirar a Jimin.

[Es solo que me siento…] comenzó a decir Jimin.

—Solo —continuó Jungkook con una pequeña sonrisa.

Jimin se quedó atónito al instante. Cuando escuchó lo que dijo el pelinegro, porque realmente coincide con cómo se siente en este momento, pero no se atrevía a decirlo en voz alta.

—¿Me equivoco? —le preguntó Jungkook queriendo escucharlo de su boca.

[Bueno ... un poco, no es tan grave, solo te llamaré y hablaré contigo ¿Cuando volverás?] respondió Jimin tratando de ocultar lo que sentía.

—Ya que no es tan grave y no te sientes solo, no volveré está noche a casa, no te importa, ¿verdad? —preguntó el mafioso, con fingida indiferencia.

[Cómo quieras] respondió Jimin pero su voz se notaba molesta y Jungkook juraría que estaba haciendo pucheros, se rió suavemente.

—Jimin, no entiendo porque no me dices lo que sientes, además de que saber que te sientes solo ahora me hace feliz, porque sé que es porque me extrañas y me quieres cerca —le dijo serio.

[Tienes que trabajar, no puedo decirlo, no quiero ser egoísta ni malcriado al querer que estés a mi lado]

—Eh, te dije que puedes ser tan malcriado como quieras. Volveré contigo de inmediato, ¿de acuerdo?

[Sí] respondió el castaño brevemente.

Pero en su corazón, se sentía bien que Jungkook volviera pronto con él.

—Tengo que colgar ahora, pero esta noche, me apresuraré a regresar a casa temprano —repitió Jungkook.

Después de colgar apoyó la cabeza en el respaldo del sillón y suspiró pesadamente.

—¿Cuánto tiempo más tardará Wonho en terminar sus negocios y volver? —murmuró mientras entraba Namjoon a dejarle algunos documentos.

—Nam ¿Yugyeom ha molestado a Jimin últimamente? —le  pregunto porque sabía que el moreno había sido quien estaba con su pareja en los últimos días.

Aunque el moreno le había prometido al joven no decirle nada al pelinegro, optó por hablar, pero suavizando lo ocurrido.

—Solo un par de conversaciones subidas de volumen, sin nada drástico por parte del señor Yugyeom.

—Muy bien, sigue cuidandolo Nam, en caso de que tú no puedas estar al pendiente, deja que Jin o Yoongi lo hagan por favor, así como hasta ahora.

—Si señor, ahora mismo el que está con su esposa es Jin.

—Bien, entonces llama a Hoseok y…

Sus palabras fueron interrumpidas cuando dos suaves toques sobre la puerta llamaron su atención. Casi al instante el joven ruso entró acompañado por sus dos guardaespaldas.

—Esperaba que ya te hubieras ido —le dijo Jungkook a modo de saludo.

Yugyeom ignoró su comentario y le sonrió dulcemente.

—Sabes que me extrañarías, ¿lo hiciste? —pregunto pues hacía dos días que no se encontraban.

—No sabes cuánto —respondió sarcástico el mafioso —. En realidad estaba pensando en cuándo regresarás a Rusia, no tengo ganas de seguir soportando tu visita por más tiempo.

Por toda respuesta, el rubio le sonrió lentamente de manera burlona y con cierto brillo de malicia en sus ojos azules.

—En lugar de quejarte por mi presencia deberías de agradecer el que yo sea tus ojos y oídos —habló por fin Yugyeom y sus palabras solo lograron que el pelinegro lo mirará con incredulidad.

—¿Eres mis ojos y oídos? —le preguntó mientras el chico se sentaba junto frente a él, antes de volverse para ordenar a los subordinados de Jungkook que le sirvan un vaso de licor.

Todo eso lo hacía para generar la curiosidad del mafioso, lo conocía bien y sabía que no le gustaba quedarse sin saber las cosas.

—Si no piensas decir nada, puedes salir, estoy esperando a un cliente —le dijo Jungkook en voz baja.

—Tranquilo, todo a su tiempo, aunque si te dijera que se algo de tu amada esposa ¿podrías estar tranquilo? —soltó de pronto Yugyeom sonriendo maliciosamente.

Jungkook que estaba por darle un trago al vaso de licor que tenía en la mano, se detuvo al instante y se volvió para mirar al ruso.

—¿De qué estás hablando? ¿Qué tiene esto que ver con Jimin? —preguntó con voz severa.

—Tal como supuse actúas como si no quisieras saber —se burló el rubio antes de tomar su copa de vino.

El mafioso sujetó con fuerza la muñeca de Yugyeom no dejando que el joven levantara su mano.

—Dímelo ahora, Yugyeom. ¿Qué le hiciste a Jimin? —le dijo ne tono severo.

El rubio lo miró con dolor reflejado en sus ojos y un poco de envidia hacia el castaño. Él nunca había visto a Jungkook actuar así por nadie, ni siquiera por él.

—¿Quieres que hable delante de los empleados? —le preguntó, apretando los dientes, antes de volverse hacia sus guardaespaldas.

—Salgan ahora —le ordenó Jungkook a los dos hombres que estaban en la oficina y también a los guardias de Yugyeom.

Los hombres asintieron dejándolos solos.

—Puedes soltar mi mano, tengo dolor —se quejó el ruso, cuando Jungkook apretó con más fuerza su muñeca.

Jungkook lo soltó y volvió a darle un trago a su caso hasta vaciarlo, buscando calmarse.

—O dices lo que tengas que decir o le ordenó a mis hombres que te saquen de aquí —le dijo Jungkook una vez más.

—¿Qué tan bien conoces a Jimin?

—Sé todo de él, así como él sabe todo de mi —le respondió el pelinegro.

—He podido averiguar cómo se conocieron —dijo Yugyeom.

—¿Y eso qué?

—Nada, creo que es un cualquiera,  solo quería olvidar a alguien y estaba buscando quien lo ayudará —dijo Yugyeom en tono burlón.

El mafioso no dijo nada y continuó escuchando, pensando que probablemente el ruso solo estaba dando vueltas a las cosas y no le dió mucha importancia a sus palabras burlescas.

—Fuiste muy amable en ofrecerte como voluntario para hacerle olvidar a esa persona de su pasado, sin saber nunca quién era.

—No me importa el pasado de Jimin, a él tampoco le importa el mío —respondió Jungkook, y el rubio se mordió el labio con frustración—. Honestamente, ¿por qué estás aquí para hablar de esto? Si solo vas a insultarnos a mí y a Jimin, está bien, porque de todos modos no me importan estas cosas, no importa si fue un buen o mal encuentro, hoy los dos nos entendemos, y eso es suficiente —concluyó el pelinegro con indiferencia.

Después se puso de pie y caminó hasta el panel de vidrio donde se quedó viendo hacia la multitud de gente en su bar.

—¿Así que no quieres saberlo? ¿De verdad no quieres saber quién es el pasado de tú esposa? —volvió a preguntar Yugyeom con cierto tono de escepticismo en la voz.

—Ya te lo dije, no estoy interesado en el pasado —le respondió Jungkook.

Yugyeom sonrió burlonamente antes de levantarse y caminar despacio hacia él.

—Si no estás interesado, está bien. Pero quiero decirte, porque es posible que no puedas evitar pensar en eso más tarde —le dijo desde atrás, como una víbora sobre su hombro—. Probablemente jamás habrías pensado en eso, que el pasado de tu amada esposa, la persona que tu esposa quiere olvidar, es él tu subordinado más cercano… Jackson —dijo en un tono ligeramente satisfecho.

Jungkook se giró de golpe para mirarlo, sus ojos estaban abiertos desmesuradamente por la sorpresa.

—¡¿Qué dijiste?! ¿Quién es el pasado de Jimin? —preguntó Jungkook gritando con voz ronca.

Yugyeom sonrió satisfecho.

—¿No lo sabías? Dijiste que conocías todo sobre Jimin. Pensé que estabas enterado de que Jackson quienes como un hermano para ti, fue el primer marido de tu esposa. Pero bueno ahora ya lo sabes —se burlo el ruso.

Jungkook lo tomó por el brazo apretando con fuerza.

—¿Estás bromeando? ¡Solo quieres provocarme, ¿verdad?! —le gritó.

—¿Por qué tengo que provocarte? Solo quería que lo supieras, ¿cómo estás? ¿Cómo te sientes? Por cierto, ¿Jackson nunca te lo dijo? ¿No sabía que su ex esposa estaba contigo? —siguió provocando.

Jungkook perdió los estribos antes las burlas y abofeteó al rubio antes de empujarlo.

—Aaahhh… —grito Yugyeom cuando el pelinegro lo arrojó sobre la mesa, rompiendo la copa de vino y cortándose la mano.

Los hombres de ambos que estaban parados fuera de la oficina entraron apresuradamente, al escuchar el ruido.

—¿Qué pasa, señor? —preguntaron con nerviosismo.

Los guardaespaldas de Yugyeom lo ayudaron a sostenerse mientras, envolvían en servilletas la mano herida.

— Dzhordan, Aleks, nemedlenno uvedite otsyuda svoyego bossa! (Jordan, Alex, saquen a su jefe de aquí ¡Ahora!) — gritó Jungkook en Ruso.

—Ot pravdy ne uyti, Chonguk. Ty dolzhen perestat' delat' vse, chto delayesh' dlya etogo parnya. Vernis' ko mne i Vonkho, kak vsegda (No puedes escapar de la verdad, Jungkook. Tienes que dejar de hacer todo lo que haces por ese tipo. Vuelve a mi lado y al de Wonho como siempre) —dijo Yugyeom también en ruso.

—!Fuera! —le gritó Jungkook de nuevo.

Sus ojos teñidos de rojo por la furia, el ruso se sorprendió al verlo tan furioso, y asintió con la cabeza a sus guardias e inmediatamente salieron de la habitación. Jungkook apretó los puños con fuerza.

—Jungkook —Hoseok lo llamó.

El mafioso respiró hondo antes de pedirle a sus demás hombres que salieran, quedándose solo con su amigo.

—No creo que sea verdad, Yugyeom solo pretende burlarse de ti, supo que eran compañeros y armó todo lo demás —le dijo Hoseok después de escuchar la historia de lo que había pasado.

—No lo sé, tú hiciste la búsqueda de información de Jimin, y solo dijiste que habían sido compañeros de estudio, averigua si es verdad o mentira —respondió Jungkook.

—Jungkook, no digas que estoy interfiriendo, es solo que… ¿Que harás si la historia que te contó Yugyeom es verdad y esa persona del pasado de Jimin es…

Las palabras de Hoseok fueron interrumpidas por la mano de Jungkook deteniéndolo.

—Cállate, no digas nada ahora mismo. Todavía no quiero pensar en el futuro, ve y ocúpate de lo que ordené antes de irte. El señor Kim vendrá a hablar sobre el último lote de productos que enviamos. Llama a las mucamas para limpiar estos vidrios rotos también —dijo Jungkook en un tono plano, no queriendo saber más por ahora.

—Sí —respondió Hoseok sin querer hacer más preguntas, y salió dejando a Jungkook solo.

El mafioso apoyó la cabeza en el respaldo del sofá y cerró los ojos lentamente.

—¿Por qué no estás aquí ahora? —murmuró suavemente.

Levanté la mano quien le quiere dar la siguiente cachetada al rubio jejeje

¿Que pasará ahora?

Nos leemos bellezas...
        Besitos 😘😘😘