Una voz masculina se hacia escuchar desde la planta baja, en cuanto escuchamos que aquella persona subía rápidamente las escaleras, Sehun se apartó y yo trate de arreglar mi vestimenta, en cuanto estuve lista me posicione de manera poco sospechosa, observe el rostro de Sehun y note que lucia enfadado, era obvio que Sehun quería llegar a más.

Un sonriente y animado Chanyeol se abrió paso hacia la habitación en la cual nos encontrábamos, al observar la fría reacción de Sehun y las sabanas de la cama en desorden, su hermosa sonrisa se desvaneció.

-¡Oh!, lo lamento, ¿Interrumpí algo?- El decadente tono de voz de Chanyeol expresaba arrepentimiento, era notorio que el chico no se la estaba pasando bien ahí, su expresión de culpabilidad me hizo querer correr y abrazarlo, -¿En que diablos pensaba?- gire mi vista hacia el rostro de Sehun, su mirada oscura amenazaba a la de Chanyeol.

-¡Si!..¡Si interrumpiste algo!- Finalmente Sehun se atrevió a hablar.- ¿Por que diablos no vas con Baekhyun y se entretienen juntos?

El hermoso rostro de Chanyeol se arrugo más en vergüenza.-¡Lo lamento Sehun-ah!, hablaremos más tarde.

Sehun liberó un suspiro de frustración, el escuchar la culpable voz de Chanyeol hizo que Sehun se sintiera culpable por su actitud.- ¡Esta bien!, estaremos en la terraza si nos necesitas. Sehun tomó de mi mano y me dirigió hacia un largo pasillo, en la habitación de Sehun habíamos dejado a un apenado y triste Chanyeol, me sentí preocupada y apenada con él, Sehun lo notó.

-¿Gatita?, no te preocupes por Chanyeol, él estará bien.

Sehun esperó a que asintiera, en cuanto lo hice me sonrió, la travesía por aquella casa continuaba con la mano de Sehun sosteniendo la mía, aquella estructura resultaba ser la 8va maravilla del mundo, sus amplios ventanales resultaban ser paredes echas de cristal, una extensa cocina equipada con lo más vanguardista, un acogedor salón capaz de albergar a 12 personas en sus cálidos asientos y una hermosa chimenea lista para brindar calor hasta el mas frió rincón, mi boca caía abierta al ver lo elegante y sutil que se veía aquel lugar.

Sehun me guió de su mano a unas pequeñas mesitas de picnic que se encontraban en la parte delantera de la hermosa casa, desde aquel ángulo se podía observar a lo lejos un hambriento río que caía en picada desde la montaña, se podía escuchar desde nuestra posición como rugía su corriente boca abajo, amenizando el ambiente.

Sehun se sentó a lado mío, la luz del sol traspasaba aquel par de ojos cáfeces para sumergirlos en un color ámbar que lo hacia lucir mucho más hermoso y ameno.

-¿Por donde quieres empezar?- Su mirada encontró vacilante a la mía, mi cerebro entendió al instante aquel juego de palabras y entonces fue cuando decidí preguntar hasta el mas mínimo detalle de su existencia.

-¿Cuál es tu verdadera fecha de nacimiento?

Sehun bajo la mirada a la pequeña mesita de madera ahí disponible y dejó salir un gran suspiro.- 12 de Abril de 1924.

Mis ojos salieron de sus cuencas, Sehun lucia un rostro hermoso y jovial, las personas a su alrededor lo trataban como a un joven en plena gloria de sus 20's, ¡Sehun lucia como un hermoso joven de 24 años!, cuando en realidad poseía 91 años de existencia, ¿Como podría resultar posible?, Sehun observó mi rostro desencajado y se dio a la tarea de contestar mis preguntas mentales.

-Se que te preguntas, ¿Como sucedió eso?... una vez que eres convertido en hombre lobo, jamás envejeces.- Su expresión facial se enfrió.- No retrocedes, ni avanzas, solo te estancas en un punto muerto, de esta forma para toda la eternidad.

"Estancado", mi voz interior susurraba en mis oídos, Sehun estaba estancado en un mar de desesperación y jamás seria capaz de salir de aquella etapa.

-Es maravilloso ser joven y tener el mundo a tus pies.- trate de sonar suave, quería decir las mismas palabras que él dijo pero con un significado distinto, quería que él se sintiera mejor, no tuve éxito con ello. ¿En que momento la atmósfera se torno sombría y oscura?

-¡No es maravilloso ver morir a las personas que amas!, ni tampoco ver como los demás prosperan, forman familias, envejecen con las personas que amas, y tú solo te quedas ahí, observando, viviendo tus propios sueños a través de los demás, ¿Que clase de vida es aquella en la que se te obliga a no soñar?

Los sueños e ilusiones resultaban ser el fuego que alimentaba las almas humanas, y a Sehun se le fue arrebatado aquel fuego con que alimentar la suya.

-Pero, ¿Como es que sucedió?, es decir, ¿C-cómo es que te convertiste en..- Me resultaba tan difícil poder decir aquellas dos simples palabras, era como si mi garganta se cerrara automáticamente al tratar de decirlas -..en Hombre Lobo?

Sehun me miro con aquellos ojos ámbar y me dedico una melancólica sonrisa.

-Mi madre murió al darme a luz, así que no la conocí en persona, los únicos recuerdos que tengo de ella son viejos papeles arrugados de fotografías suyas, en algunas aparecía sola, en otras acompañada de mi padre.- Sehun dejo salir otro suspiro.- Era una mujer muy hermosa, mi padre tuvo que hacerse cargo de mi él solo, todo el día estaba fuera de casa, obteniendo recursos para poder darme una vida "normal" como todos los demás lo tenían.- El hecho de que Sehun hubiera vivido situaciones similares a las que yo viví, me hacia sentirme más cercana y unida a él.

-Aún recuerdo, fue en el invierno de 1943 cuando mi padre se enfermó de tuberculosis, fue uno de los inviernos más crudos que jamás halla recordado, yo soporte las gélidas temperaturas bajo cero, pero mi padre no lo hizo, el cansancio y la fatiga de su extensa jornada de trabajo debilitaron su cuerpo, la enfermedad jugo con él a su antojo y simplemente él cayo en un eterno y profundo sueño.

La mirada de Sehun comenzaba a cristalizarse, podía ver que fruncía el ceño para disimular su llanto, Sehun evitaba a toda costa que aquellas amenazantes lagrimas lograran romper  la frontera de sus ojos, mi corazón se entumeció ante la imagen que tenia justo enfrente de mi, mis ojos comenzaron a  romperse, fue como si ellos pudieran absorber todo el liquido salado que se reunía en las esquinas de los ojos de la persona que amaba.

Sehun tragó saliva ruidosamente y prosiguió.- No sabia que hacer, la única compañía que había conocido en esos 19 años fue la de mi padre, al morir me sentí completamente solo, sentí como si el mundo me diera la espalda y me dejara morir lenta y dolorosamente, no sabia a donde ir, a quien buscar, que hacer, estaba completamente solo.

-Mientras tanto, en Europa Adolf Hitler aniquilaba a millones  y millones de judíos, Canadá al pasar a ser una nación libre decidió declararle la guerra a Alemania, justo después de que Inglaterra y Francia lo hicieran, así que el gobierno canadiense se agilizó e hizo un llamado para inscribirse al servicio militar, me encontraba solo y sin rumbo, así que vi muy fácil el enlistarme y poder servir al pueblo al que pertenecía, pensé que tal vez el estar ahí dentro mantendría mi mente ocupada y no pensaría más en el dolor.

Su mirada volvió a normalizarse, en cambio yo estaba a punto de estallar en ríos de lagrimas.

-Los primeros meses fueron duros, dormíamos solo las horas necesarias, eran comunes las actividades y practicas de combate nocturnas, los tenientes nos vendaban los ojos y posteriormente nos hacían entrar a un transporte, para después abandonarnos a varios kilómetros del campamento teniendo que regresar por nuestros propios medios y orientación, a más rápido regresáramos, más tiempo teníamos para dormir, por la mañana, nuestra principal actividad consistía en correr 15 kilómetros montaña arriba, para después nadar 1000 metros en las congeladas aguas del océano, el desgaste físico era arduo, sin embargo, todo tiene su recompensa, en aquel lugar nos enseñaron a defendernos, a utilizar distintas clases de armas de fuego y armas blancas, y lo más importante.- La expresión de Sehun se oscureció.- ¡Nos enseñaron a matar, sin sentir culpa alguna!

-Meses después de enlistarme, la verdadera acción militar comenzó, fue el 6 de junio de 1944 que  arribe en la Playa de Juno, en la Francia Nazi, junto con la 3° División Canadiense de Infantería.-  Sehun observo directo a mis ojos, tal vez para asegurarse de que cada palabra emitida por su boca quedara tatuada en mi cerebro para siempre.- ¿El objetivo? , matar Nazis, ésas hazañas quedaron grabadas en la historia como" la Batalla de Normandía", pero para los militares que nos encontrábamos ahí fue la "Operación Overlord", recibimos refuerzos de las fuerzas aéreas canadienses y de la 2° Brigada Acorazada Canadiense, pero fue inútil, las innumerables perdidas se registraron al instante, era devastador ver los cuerpos mutilados de mis compañero ahí, en el suelo, envueltos en su propia sangre, la situación era grave, se trataba de Matar o Morir.

No podía creer lo que me narraba Sehun, estaba tan concentrada y hundida en sus hechos, que no me fije en la hora en que mis lagrimas adornaban mi pálido rostro, a pesar de eso, él continuo.

-Un mes después de nuestra llegada a Francia y con las evidentes bajas en nuestra infantería, refuerzos llegaron a nuestro rescate, la 2° División de Infantería desembarcó en tierras Nazis, y en Agosto llego la 4° División Acorazada Canadiense, con ellos llegó la persona que salvaría mi vida, el comandante Wu Yi Fan, mejor conocido como Kris, durante el mes de Septiembre la guerra se había adentrado  a los profundos bosque de la Francia Nazi, ahora la misión ya no se llevaría a cabo en las costas, si no en el territorio del enemigo, con los militares restantes se armó un escuadrón y con Wu Yi Fan al frente de todos nosotros, nos dirigimos hacia el norte.

-La estrategia del teniente Wu era muy convincente, nos separaríamos a una distancia de 250 metros y cada quien iría por su rumbo así cubriríamos mucho más territorio y si atacaban a alguien, la perdida no seria muy notoria. Yo me dirigí hacia el este, después de atravesar un sinfín de tupidos pinos, logre salir hacia una pradera, el pasto estaba acobijado por la densa capa de nieve que caía, camine sigiloso, con arma en mano y alerta a cualquier sonido o movimiento.- Sehun tomó una gran bocanada de aire, se acomodo en su asiento y prosiguió.- Enfoque mi mirada hacia el frente y note un bulto negro descansado en la nieve, mis instintos hicieron que bajara el ritmo de mis pasos y apuntara mi arma hacia lo que se encontraba ahí, camine sigiloso y tenso como un arco, una vez que pude estar lo suficientemente cerca de aquello, note que era una persona, sus ropas estaban desgarradas y había sangre en sus brazos y piernas, inmediatamente corrí en su dirección y lo levante ligeramente para ver de quien se trataba, era un hombre joven, no mayor a 30 años, no tenia uniforme militar o algo que indicara que pertenecía a la guerra, así que concluí de que se trataba de un lugareño, él mantenía los ojos cerrados y su piel era lo suficientemente pálida como para pensar que aquella persona había perdido la vida, así que baje mis oídos a su pecho y trate de captar algún sonido que me indicara lo contrario, su corazón latía débil y lentamente dentro de sus músculos, en aquel instante fue cuando sentí su mordida justo en mi brazo derecho, clavo sus dientes en mi tensa carne para después parase con una velocidad sobrehumana y salir corriendo de aquella pradera.

-Lleve mi mano hacia la herida que comenzaba a bombear sangre al exterior, me preguntaba, ¿Cómo era posible que una dentadura humana dejara cortes tan profundos como los que yo tenia?, amarre un torniquete para detener el sangrado y continúe con mi misión, jamás imagine que una mordida cambiaría por completo mi vida.

Fue ahí cuando entendí todo, Sehun había sido convertido por un perfecto extraño en su intento de servir a su país, fue cuando me pregunte ¿Por qué él?, ¿Por qué no alguien más?, puse mi mano sobre la de Sehun, él la recibió cálido y apretó de ella como si fuera en lo único que podía sostenerse.

-Estaba oscureciendo y la escasa luz hacia mucho más difícil mi recorrido por territorios desconocidos, camine y camine hasta que a lo lejos pude escuchar lamentos de niños, me acerque y pude ver alrededor de 8 niños, sus escasas ropas permitían mostrar lo afilado de sus huesos, ellos corrieron a buscar algún escondite al oír el crujido que hacían mis botas al impactar con las hojas congeladas, inmediatamente les dije que salieran, que no tuvieran temor de mi, los pequeños tal cual venados salieron sigilosos y con cuidado, comenzaron a rodearme y a mirarme con curiosidad, tocaban mi arma y cualquier otra cosa que les llamara la atención de mi vestimenta, al parecer se estaban divirtiendo conmigo, les di mis provisiones: pan, carne y agua, ,mi corazón sintió una profunda opresión al ver como comían desesperadamente los alimentos, ni siquiera se preocupaban por masticarla completamente, el bocado solo pasaba de largo en sus pequeñas bocas hambrientas, el ver a aquellos indefensos seres alimentarse de una manera tan miserable y desesperada, hizo preguntarme, ¿En que clase de infierno vivíamos?, me jure a mi mismo que si salia vivo de aquella guerra, aquellos pequeños regresarían a Canadá conmigo.

Sehun entrelazo su mano con la mía y la sostuvo fuerte, a tal grado de triturarme los huesos, su mirada comenzaba a cristalizarse de nuevo, esta vez no se mostraba reacio a contenerse.

-Les dije a aquellos pequeños que me esperaran justo en aquel lugar, que no se movieran solo si la situación lo indicaba, tenia que terminar con mis deberes y después de aquello iría donde el comandante Kris para informarle de mi prematura decisión y así trate de hacerlo, retorne mi camino con rumbo a comandante Wu por horas me olvide la enorme mordida que tenia en el brazo, pero al salir de las sombras del bosque y entrar a la luz de aquella luna llena, fue cuando la pesadilla comenzó-.La primera lagrima cayó en la mejilla de Sehun.

-Mi cuerpo comenzó a sentirse extraño, mis costillas comenzaron a expandirse, así como mis extremidades, por un instante sentí que mis piernas flaqueaban lo que ocasionó que cayera al suelo, estaba aterrado, mi corazón latía demasiado rápido, a tal grado de pensar que podría explotar, podía sentir como cada musculo y órgano se expandía dentro de mi, mis ojos veían con miedo como comenzaba a crecerme oscuro pelaje en mi piel y en un instante estaba convertido en una bestia, mi mirada era nublada, no podía encontrarle forma a lo que veía, sin embargo dentro de mi crecieron las inmensas ganas y deseos por matar, comer y desgarrar lo primero que encontrara, y al parecer así fue.

Otra segunda lagrima cayó en la mejilla de Sehun, él mismo se torturaba con aquellos hechos que sabia perfectamente no le gustaba recordar.

-Abrí mis ojos ante la brillosa luz que emitía el sol, mi cuerpo se sentía cansado y débil, me impulse poco a poco para orientarme, me levante por completo y descubrí a mi cuerpo desnudo con rastros de sangre seca y adherida a mi piel, instantáneamente mis ojos se abrieron ante mi cuerpo bañado en sangre, inspeccione a mi alrededor y lo que encontré me dejó sin aliento.- Sehun no contuvo su llanto, su respiración era agitada y pesada, yo estaba esperando lo peor.- Pequeños brazos y piernas se encontraban dispersos sobre el pasto rociado del bosque, aquellas partes desmembradas tenían su carne rasgada y quebrantada, reconocí al instante de quienes pertenecían así como al asesino. !Yo había matado a aquellos seres que horas antes les había prometido la vida!, la bestia en la que me había convertido se encargó de desmembrar y comer cada pedazo de sus cuerpos.- No soporte más, mi labio inferior comenzó a temblar, mis lagrimas corrían como ríos sobre mis mejillas, simplemente no existían las palabras para describir lo que sentía en aquel momento.

-En aquel instante nació un enfermizo odio hacia mi, odiaba a la persona que me había maldecido, simplemente quería morir, yo merecía ser castigado y torturado, así que comencé a acribillarme a mi mismo con piedras y objetos pesados, bastaron pocos segundos para que el comandante Wu detuviera mi crimen, Kris notó su preocupación ante la imagen que tenia delante de él, me persuadió a que no me me hiciera daño y lo logro, me confesó que él había sido testigo de todo lo ocurrido en aquella noche, él intentó parar a mi bestia interior pero simplemente yo no tuve cordura ni razón, solo me dejaba guiar por mi instinto asesino, su secreto me fue revelado, él también era hombre lobo, Kris me juró protección y discreción, una semana después la infantería regreso a Canadá con bajas muy significativas, 1,1 millones de canadienses sirvieron en las fuerzas armadas en la Segunda Guerra Mundial de ellos, aproximadamente 42.000 miembros de las fuerzas dieron sus vidas, y otros 55.000 fueron heridos, yo regrese a casa con una herida distinta, una mucho más grande y duradera que cualquier otra.

Al llegar a Canadá me mude con Kris y con otras 10 personas más, ahí fue donde conocí a Luhan, Yixing, KyungSoo, Chanyeol, Minseok, JongIn, Baekhyu, Tao ,Jongdae y Jun Myeon, todos con una maldición en común, se trataba de una casa de 12 hombres lobo, el pasar de los meses y de las cosas que teníamos en común, hicieron que nos acercáramos como toda una familia, Kris se encargaba de nosotros como un verdadero líder, se preocupaba y cuidaba de todos, sin menospreciar a nadie y sin  juzgar los actos que muchos de nosotros hicimos en el pasado, sin embargo él se largo, en 1975 Kris desapareció una noche, había informado que saldría por algunos objetos y jamás regreso, hicimos búsquedas nocturnas, visitábamos lugares que el frecuentaba y nada, los 11 miembros restantes sentimos mucho su perdida, hubo noches que incluso no podía dormir preguntándome por que nos había abandonado, al necesitar de un líder, Jun Myeon, "Suho" pasó a ser nuestro líder, él nos dejo en claro que jamás trataría de suplantar el lugar de Kris, aquel lugar siempre seria exclusivamente para él y siempre estaría dispuesto para cuando regresara, 5 meses después LuHan desapareció, siguio los mismo pasos de Kris y simplemente se fue, ¿La razón?, no lo se, me sentía devastado,él era la otra parte de mi corazón, en mi hermano de sangre, él me supo comprender perfectamente y a pesar de saber los atroces actos que cometí siempre estaba para mi, Luhan dejaba cualquier cosa solo por escucharme, hubiera dado mi vida por él.-Limpie mis lagrimas con el dorso de mi mano y Sehun me imitó, ambos teníamos la mirada quebrantada y enrojecida,Sehun sonrió irónicamente.

-Al pasar el tiempo todo cambio, los 10 miembros restantes nos unimos más fuerte que nunca, juramos que daríamos todo por todos y que si moría uno, morían todos, y fue hace 6 años que la agonía me sentó bien.- Sehun observó profundamente mis ojos.- Me encontraba cazando en el bosque en mi forma sobrehumana cuando un par de balas impactaron a la altura de mis costillas, se trataba de leñadores, trataban de deshacerse de mi, intente escapar y en mi intento llegue al bosque cercano a la casa de tu abuela, emití aullidos para pedir ayuda de los otros miembros, ellos no llegaron, en cambio fue una hermosa niña de pupilas rojas y con un rostro bañado en lagrimas la que salvó mi vida.- Sehun levanto mi mentón e hizo que lo observara a los ojos.

- ¡Esa pequeña y hermosa niña, eras tú!