El Primer Dominante

El Klawf dominante empezó a acercarse a Juliana lentamente, por lo que a ella no le quedó de otra que sacar a Spring a combatir. Spring atacó con hoja mágica y después recibió un tumba rocas que redujo su velocidad. Spring logró conectar otra hoja mágica que dejó a Klawf muy débil, pero esto activó su habilidad coraza ira que, a cambio de reducir en un nivel sus defensas, aumentó sus ataques y su velocidad, gracias a esto el tumba rocas fue mucho más potente. Debido a la reducción de velocidad, Klawf fue más rápido y derrotó a Spring con agarre, por lo que Juliana sacó a Nieve. Al utilizar sorpresa, potenciada por experto, Nieve impidió que Klawf atacase. Nieve ahora usó mordisco, provocando que Klawf acabase muy dañado y empezase a alejarse.

Juliana: - pensando - Está muy débil. Es nuestra oportunidad de derrotarlo... Pero, ¿para qué? Lo que buscamos son las especias ocultas, no nos sirve de nada derrotar a los pokémon dominantes si seguimos sin saber donde están - notó como el pokémon estaba preparándose para abalanzarse, pero no hacia ella o Nieve, sino hacia la pared agrietada que estaba detrás de ellos -. Me atacó cuando me acerqué a esta pared. Muy bien, voy a dejar que haga lo que sea que vaya a hacer.

Juliana se subió a lomos de Koraidon y regresó a Nieve antes de apartarse, dándole vía libre a Klawf de lanzarse hacia la pared, rompiéndola y entrando a la cueva de su interior. Juliana se asomó a ver que estaba haciendo y le vio comiendo una planta con un brillo rosado.

Damián: ¡Eh, July! ¡Ya estoy aquí!

Juliana: - Pensando - ¡¿Me ha llamado July?! S-Sólo Mencía me llama así. ¿P-Por qué ha usado un apodo tan cariñoso? Ni siquiera somos amigos.

Damián: ¿Pasa algo? - Juliana negó con la cabeza y entonces Damián miró hacia Klawf - ¿Está comiendo la especia oculta? Oh, no.

Juliana: T-Tranquilo, ya está muy débil.

Damián: Gracias a la especia oculta aumentará su poder de manera temporal y se recuperará. Aprovecha mientras puedas para curar a tus pokémon.

Gracias a un revivir de Damián y a sus pociones caseras, Juliana curó a Spring y este ya estaba listo para el combate. En cuanto acabó, el pokémon dominante se envolvió en un aura rosada y fue donde ellos para combatir.

Juliana: - Pensando - Tengo que guardarme a Spring para cuando coraza ira se active. Así podré atacarle con todo y derrotarle.

Juliana sacó a Nieve y Damián a Shellder. Nieve hizo retroceder a Klawf con sorpresa y Shellder usó pistola agua. Nieve ahora atacó con mordisco antes de recibir un golpe roca que le causó mucho daño y redujo su defensa, aunque Shellder logró conectar otra pistola agua para compensarlo. Nieve volvió a usar mordisco y Shellder pistola agua, pero otro golpe roca derrotó al primero.

Juliana: - Pensando - Si coraza ira no se activa, Spring no podrá derrotarle fácilmente. ¡Tengo una idea!

Juliana sacó a Leo y Damián la miró de lado con confusión.

Juliana: ¡S-Sé lo que hago!

Leo usó rugido de guerra, reduciendo el ataque y el ataque especial de Klawf y logrando así resistir un tumba rocas y después de eso Shellder usó pistola de agua de nuevo. Leo volvió a usar rugido de guerra para debilitar a su oponente, aunque otro ataque lo derrotó; por suerte, otra pistola agua de Shellder logró activar la habilidad coraza ira de Klawf.

Juliana: ¡Bien! ¡Adelante, Spring!

Damián: ¿Qué tienes en mente?

Juliana: S-Si ahora que tiene las defensas bajadas Spring conecta un buen golpe, s-seguramente ganaremos.

Damián: No será potencia suficiente; usa esto.

Juliana: - Apenas llegó a atrapar el objeto en el aire - ¡¿Un orbe teracristal?!

Damián: Estuviste en el curso de teracristalización, ¿no? Sácale provecho.

Juliana teracristalizó a Spring a tipo planta, con lo que el poder de hoja mágica fue suficiente para derrotar a Klawf y que este redujese su tamaño hasta perderlo de vista. Gracias al combate, Spring evolucionó a Floragato.

Damián: ¡Bien hecho, July!

Juliana: - Pensando - ¡Y dale con llamarme July! ¡Se necesita confianza para llamar a la gente por sus apodos!

Damián: ¿A qué viene esa expresión?¿Estás bien, July? ¿Pasa algo, July?

Juliana: - Pensando - ¿¡Lo hace aposta!?

Damián: ¿He dicho algo malo?

Juliana: ¡No! Bueno sí, bueno no...

Juliana: - Pensando - ¿Qué estoy diciendo?

Damián: ...Vamos adentro a por las especias ocultas.

Juliana sólo asintió y entró a la cueva junto a Damián. Allí, unas pequeñas plantas rosas crecían del suelo. Damián las recogió todas y volvió a plantar algunas semillas, aunque otras se las quedó para él.

Damián: Según el libro esta especia ayuda con los problemas estomacales y cosas del estilo... Tengo que prepararle algo cuanto antes...

Juliana: - pensando - ¿Por qué dice "prepararle" en vez de "prepararte" o "preparar"? Nunca me lo imaginé como alguien que habla con sí mismo.

Damián: ¡Muy bien, July! ¡Vas a presenciar mis fabulosas habilidades de cocina!

Damián colocó un mantel sobre una piedra y sacó varios ingredientes envueltos en papel de plata. Sprigatito no tardó en salir de su pokeball y tumbarse sobre una de las piedras. Mientras Damián hacia lo suyo, Juliana aprovechó para reponer las pociones que había ido gastando. Sacó un frasco de vidrio e hizo básicamente zumo de baya aranja para después mezclarlo con unas hierbas troceadas.

Juliana: - Pensando - Puede que su verdadero propósito fuese encontrar las especias para cocinar y no para curar a los pokémon.

Damián: ¿Necesitas algo más para tus pociones?

Juliana: N-No, gracias.

En cuanto acabó, trasladó el líquido de la botella de vidrio a una de plástico. Poco después, Damián ya había terminado con los dos bocatas.

Damián: Espero que te guste, July. Es difícil trabajar con algo tan dulce.

Juliana: ¿P-Por qué me llamas July?

Damián: ¿No te llamas así?

Juliana: No, bueno sí. Mi nombre es Juliana. Solo Mencía me llama July.

Damián: Oh, ya veo. Como yo sólo había escuchado a Mencía referirse a ti, pensé que así te llamaba todo el mundo.

Juliana: No me molesta, p-pero me extrañaba que usases un apodo.

Damián: ¿Y eso?

Juliana: - Pensando - ¿Cómo que "y eso"? Está claro que los de apodos sólo se utilizan cuando tienes un mínimo de confianza y nosotros apenas nos conocemos.

Juliana: S-Supongo que no estoy acostumbrada.

Damián: ¿Entonces cómo quieres que te llame?

Juliana: - Pensando - Ahora me sabe mal decirle que me llame Juliana...

Juliana: Llámame como prefieras.

Damián: Está bien.

Juliana: - Pensando - ¿No me lo va a decir? ¿Me va a dejar con la intriga? Seguro que esto si lo ha hecho aposta - le dio un mordisco a su bocadillo y se le abrieron los ojos de par en par - Esto está mucho más bueno de lo que imaginé.

Damián: Por tu expresión diría que te ha gustado. ¡Me alegra saberlo!

Mientras comían, Koraidon salió de su pokeball y empezó a mirar fijamente el bocata de su amiga.

Damián: ¡De eso nada! ¡A ti no te doy ni las migas!

Juliana: No seas tan duro con él. Tal vez le ayude a recuperar capacidades.

Damián: ¡No se lo des! ¡No lo he hecho para él!

Juliana: - Pensando - ¿Eso significa que le molesta que se lo dé porque lo ha hecho especialmente para mí? Nah, seguramente sólo le tiene tirria al pobre Koraidon.

Juliana: - Extendió su bocadillo hasta donde estaba Koraidon - Vamos, por un poco no pasa nada - notó como su mano pesaba mucho menos de golpe -. ¡¿Te lo has comido entero?!

El pokémon se entristeció por el grito y retrocedió con la cabeza agachada. Juliana se levantó y empezó a acariciarle la cabeza.

Juliana: Si es que no puedo enfadarme contigo, lindura.

Damián: Te dije que no se lo dieras.

Koraidon se apartó un poco y empezó a brillar con el color rosa de la especia oculta dulce. Después de un rugido, el brillo se disipó.

Juliana: ¿Cómo estás Koraidon?

El pokémon asintió muy alegre empezó a correr alrededor de la cueva.

Juliana: ¿Soy yo o ahora es más rápido?

Damián: - Una sonrisa se formó en su rostro - Parece que la especia oculta ha hecho que mejoren sus capacidades.

Juliana: - Pensando - Al final, no odia tanto a Koraidon.

Damián: Lo siento por ti, pero ya no hay más. La próxima vez veré si puedo hacer uno para Koraidon.

Juliana: Jo... - realmente le gustó el bocadillo.

Damián: - Suspiró y partió su bocadillo en dos para darle la mitad a Juliana - Ten. No me mires con esa cara de pena.

Juliana: ¡Gracias!

Los dos disfrutaron del bocadillo mientras veían a Koraidon y Sprigatito jugar juntos. Comieron tranquilamente bastante relajados, pero no tardaron mucho en acabar.

Juliana: ¡Casi se me olvida! - Agarró su mochila y sacó el orbe teracristal que le dio antes - Muchas gracias por habérmelo prestado.

Damián: No me lo devuelvas. Considéralo un regalo por ayudarme con esto.

Juliana: ¿Seguro?

Damián: Sí, tú tranquila. Bueno, es el momento de recoger todo esto. No hace falta que me ayudes. Puedes volver a Ciudad Meseta o ir a donde sea que quieras.

Juliana: ¿No vamos a ir a por la siguiente especia oculta?

Damián: Primero tengo que enterarme de cual es el más débil y ver donde podría estar.

Juliana: ¿Y cómo vas a hacer eso?

Damián: No me gustaría seguir haciéndote perder tiempo, así que deberías ir yéndote.

Juliana: - Pensando - Está claro que me oculta algo.

Juliana, aún desconfiando de Damián, le hizo caso y empezó a alejarse de la cueva caminando. Regresó a Sprigatito a su pokeball y subió encima de Koraidon para marcharse del lugar, pero Damián la interrumpió.

Damián: ¡Espera! Ten esto.

Damián le entregó una pequeña medalla de plata con el grabado de una gema marrón.

Damián: Pensé que te gustaría guardarla de recuerdo. Me base en las medallas oficiales de Paldea para hacerlas.

Juliana: ¿Has hecho una por cada dominante?

Damián: Sí, pero tendrás que derrotarlos a todos para verlas.

Juliana: Gracias por el detalle. Llámame para ir por el siguiente.

Damián: Eso haré.

Juliana y Koraidon salieron de la cueva y cogieron el camino hacia Pueblo Altamía para que Juliana se disculpase con su hermano.

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