-¿No lo recuerdas?- ¿Recordar que? Fue entonces cuando me fije en la venda manchada de rojo en su brazo izquierdo.

Baekho lo miro con ojos tristes y suspiro.

-flashback

Baekho miraba al rubio mientras este dormía, tan lindo y frágil, desbordando inocencia, y al mismo tiempo, aterrador, tan aterrador como su exceso de belleza lo permitía.

Dejo que durmiera, así no le dolería tanto lo que estaba a punto de hacer, perdieron mucho tiempo, ya no llegarían, era de noche y ellos estaban cerca, y no dejaría que obtuvieran sus almas.

Lo abrazo y levanto la catana en el aire, solo los atravesaría, pero entonces el rubio se removió y abrió sus ojos mirándolo fijamente, bajo el arma y fingió una sonrisa. -duerme, por favor duerme- el solo parpadeo tiernamente y frunció el ceño.

-yo preferiría correr mientras pueda- la vos gruesa a sus espaldas los hizo saltar, al fondo de la tienda había una sombra de un hombre, Chanyeol se acercó con una mochila llena de sangre.

Ren se separó del mayor y observo fijamente al otro con terror en la mirada, -Aron, Minhyun, ellos...- -ellos ya están en los submarinos, solo faltamos nosotros tres- Ren asintió y se levantó, apoyándose en el más alto de la habitación.

Baekho solo miro con molestia al orejón, -no llegaremos- Chanyeol sonrió de medio lado y asintió -pero al menos lo intentaremos-

-fin de flashback

Ren seguía viendo al otro a la cara, este sonrió de medio lado y comenzó a hablar. -Dormimos demasiado, la noche nos ganó y no era seguro, Chanyeol regreso por nosotros y los tres caminamos lo más rápido que pudimos, pero ellos nos rodearon, entre ChanYeol y yo logramos controlarlos, pero no fue suficiente- Ren se temía lo peor.

-¿pero y Aron y Minhyun?- Baekho bufo y continuo -ellos ya habían subido, ese idiota regreso solo por nosotros- Ren asintió aliviado.

-el, ChanYeol, creo una distracción y logramos huir, intento salir, casi lo logra, pero uno de ellos lo mordió en la pierna, solo sonrió y... ya sabes- Ren quería escuchar más, pero Baekho no continuo, era su turno de subir, pronto les dieron un cuarto junto a los otros dos chicos y una pareja de casados con una bebe hermosa.

Baekho nunca le conto el final, y resulto que aquella pareja conocía al gigante, el hombre era rubio y probablemente la persona más alta en toda la tierra, su esposa era completamente adorable, pero muy distraída, a veces actuaba como si ellos siguieran ahí, aun cuando todos intentaban decirle que todo había terminado, pero ella solo lloraba y abrazaba muy fuerte a la bebe sonriente con lindos ojos de ciervo.

Pero al verla Baekho no pensaba que estaba loca, solo afilaba la catana y los mantenía a todos vigilados, no cometería el mismo error que aquel que sacrifico su vida por ellos, aquel que lo salvo a el y a su rubio amado.

-flashback 2-

Baekho miraba al más alto que cargaba a un durmiente rubio en su espalda.

-no me mires así, no planeo nada con él, yo solo puedo tener a una persona en mi mente- dijo con alegría, pero luego su voz se hiso sombría y rasposa -es en el único lugar donde puedo tenerla- Baekho recordó entonces a la castaña que había puesto a NU'EST de cabeza.

-¿Qué sucedió con Baekhee?- el pelinegro lo miro y saco un gruñido acompañado por una lagrima.

-ella fue uno de los primeros, aquellos que alimentaron a las primeas bestias, aquellos que eran considerados locos, yo creía que estaba loca, y por no creer en sus palabras, en sus historias, termine metiendo los pedazos de su cuerpo en una caja de madera, nunca poder verla de nuevo, ni en esta vida, o en cualquier otra- Baekho trago saliva, el no podría vivir sin Ren eso lo tenía claro, el no sería tan fuerte como ese poste, el se mataría como un cobarde, esperando una nueva vida, donde nunca llegaría su amado.

Ellos llegaron demasiado rápido, pero los controlaron, cuando se hicieron menos Chanyeol le aventó a Ren y le señalo un muro, si eran lo suficientemente rápidos podrían escalar y saltarlo, y pronto llegarían a los submarinos a salvo.

Chanyeol tomo su cuchillo y se aventó contra un nuevo demonio matándolo para crear una distracción, Baekho y Ren llegaron a tiempo pero Chan no tuvo la misma suerte, desde lo alto, Baekho podía verlo, sonriendo en el suelo.

-protégelo, y no lo olvides, ¡siempre cree!, si no lo haces podrías perderlo todo- y sujetando el arma, la encajo en su corazón, antes de que el virus se extendiera en su cuerpo, antes de que ellos lo atraparan.

-fin flashback2-

Y ahora Baekho miraba fijamente a Laila, mientras esta sujetaba a la pequeña Lulu fuertemente contra su pecho y los demás dormían, mientras ella miraba el oscuro armario y susurraba

-ellos están aquí-