No podia creer lo que veía.
No solo Audrey estaba besando a Tyler, quien era su primo, sino que pilló a su hermano acariciandola a la vez.
-¿Que demonios es esto?
-James...
-¿Que mierda haceis? Mierda, Audrey. Tyler es tu primo...
-No lo soy. Deja que te expliquemos, por favor.
-Entra en casa James. Te lo contaremos todo.
A pesar de sus reservas cerró la fila y entró tras ellos.
Para sorpresa aun mayor, ellos tres se sentaron en el sofa, con ella entre los dos,como si quisieran protegerla, dejandole a él el pequeño sillón.
Maldita sea. Ambos la aman.
-Audrey, dime. Sabes que puedes confiar en mi.
-Les amo a los dos, James. No se como pasó pero es la verdad. Y por increible que parezca, ellos me aman.
-Pero Tyler...
-Ya te dije que no somos primos. Recién me lo contaron mis padres. Soy adoptado.
-Pero mantener una relación los tres no va a funcionar. Teneis que saber eso.
-¿Por que no?-interrumpió Chris.- Se que no es frecuente. Yo nunca crei que me veria en esta situación pero aquí estoy. Aqui estamos.-dijo mirando a los otros dos implicados.-Los quiero en mi vida, James. A ambos y nada de lo que digas tu o cualquier otro impedirá eso.
-Tyler es menor. -se obligó a recordarles.
Estaba completamente descolocado con todo eso.
Él solo habia ido a visitar a su hermano para ver como estaba. Después de enterarse de que amaba a Audrey no tenia muy claro que Chris estuviese bien.
Y sin embargo se encontró con una situación inesperada.
-Lo soy.
-Se lo que me juego, hermano. De verdad que si.
-Por Dios Chris, podrias ir a la cárcel.
Audrey rompió a llorar y ambos se desvivieron por calmarla.
Nunca había presenciado algo asi. Un amor tan...puro.