Acabo de pedirles a los dos que se casen conmigo.
Posiblemente me he vuelto loco, pero entonces los miro de nuevo y jamás he visto algo tan claro.

Convencí a Audrey para que viniese a casa.
Sé que aun tiene una conversación pendiente con sus padres y con sus amigas pero temo que si dejo que se vaya, ella quiera alejarse de nuevo.

Sinceramente, ya he pasado por eso y no me gustó.

Tyler conduce en silencio.
Afortunadamente conduce una camioneta, de modo que Audrey puede sentarse entre ambos.

No me atrevo a soltarle la mano.
No es como si pudiese saltar del coche.
Ty y yo bloqueamos ambas puertas.
Solo... necesito tocarla y creo que a Tyler le pasa lo mismo, dado que la toca cada vez que puede.

Sigue sorprendiéndome no sentir celos al verles juntos.
Es curioso. La primera vez en treinta y tres años que me enamoro y comparto a mi novia con otro.

Llegamos a mi casa y el recuerdo de ella marchándose me está comiendo vivo.
Necesito sustituir ese recuerdo por otro.

La veo mirar alrededor.
Esta nerviosa.
Una ojeada a Tyler y compruebo que el también lo ha notado.
Solo un breve gesto por su parte es suficiente para mi.

Nos acercamos a ella, cada uno desde un punto distinto.
La veo morderse el labio y como su pecho sube y baja más rápido cada vez.

Ty se deja caer frente a ella, pone uno de sus pies en su rodilla y le quita uno de los zapatos.
Luego hace lo mismo con el otro.

Yo estoy a su espalda. Aparto su cabello a un lado y ella inclina la cabeza para que pueda acceder a su cuello.

Dejo que mi lengua haga el camino desde su hombro hasta detrás de la oreja.
Sus gemidos no tardan en oirse junto con la respiración acelerada de los tres.

Tyler le desabrocha el pantalón.
Apenas un pedazo de tela tejana que no le cubre los muslos lo suficiente.
De estar en otra situación me replantearia arrancar los ojos de cada cabrón que la ha visto asi vestida.

Yo deslizo los tirantes de la camiseta y los del sujetador por sus brazos dejando libres sus hermosos pechos.

Retuerzo los pezones entre mis dedos a la vez que Ty introduce un dedo dentro de ella.

Quiero que se corra asi. Entre nuestros brazos.
Me acerco a su oido tanto que mi cuerpo la roza.
Jadea cuando froto mi erección contra sus nalgas.
Quiero sentir mi polla profundamente enterrada en ellas.
Estoy empezando a cambiar de idea ya que no soporto no estar dentro de ella.

Veo a Tyler patear sus deportivas y desnudarse en cuestión de segundos.
Le imito y ayudo a nuestra chica a ponerse a horcajadas sobre él.

Acaricio mi miembro mientras les veo moverse.
Tengo que apretar la base un par de veces para no venirme antes de tiempo.

Tyler me mira, la sujeta por las nalgas mientras sigue moviéndose dentro de ella y las abre para mi.

Es hora de estar juntos de nuevo. Los tres.
Me introduzco despacio. No quiero herirla.
Se siente tan bien que no creo que aguante mucho.
Al estar Ty dentro de ella la abertura es aun mas estrecha y está volviendome loco.

Oigo a ambos gemir.
Un poco mas y estaremos completamente unidos.
Hago un último esfuerzo y me adentro de golpe.
Audrey se corre.
Tyler no tarda en seguirla.
Y yo estoy igualmente perdido.

Alcanzo mi liberación al sentir la de ellos y aunque me sorprende, comprendo que esto no fue sexo.
Hicimos el amor. Los tres.
Y los amo a ambos.