POV Nicolás.

—La escuela le ha notificado esto a todos los padres, para que estemos más al pendiente de ustedes, ya son dos asesinados, cariño, por favor prométeme que tendrás cuidado.

Mi madre se veía bastante preocupada, vaya, eso es muy nuevo en ella, quizá está comportándose distinto ahora que ella y mi padre se van a divorciar.

—Estoy bastante segura que Hugo lo hizo —mi hermana aseguró como si realmente supiera de lo que estaba hablando.

Sin decir nada más, subí a mi habitación, cerré mi puerta y me tiré en la cama, maldición, alguien más está tratando de jugar el mismo juego que yo, y eso no lo voy a permitir, no dejaré que me adjudiquen muertos.

Tomé mi celular y le mandé un mensaje a mis amigos, en el pequeño grupo que teníamos.

Grupo: "Evan se la come."

Nicolás: ¿Ya se enteraron que Susana no se suicidó?

Esto no me hace sospechoso de nada, debo actuar normal, y hacer lo que hasta ahora he hecho muy bien, no dejar que nada, ni nadie me vincule con ella.

Kenia: Hugo me lo contó hace un momento, los padres de Susana lo están culpando a él.

Pablo: Yo también lo culparía, la verdad.

Kenia: No digas, estupideces, él no lo hizo.

Evan: Eso significa que hay un maldito asesino en la ciudad, ya van dos, ¿Quién será el tercero?

Nicolás: Espero que ninguno de nosotros, pero no me molestaría que fuese Hugo o alguno de sus amigos.

Kenia: Vete a la mierda, Nico, ¿Cómo mierda se te ocurre decir algo así?

Danna: Tú has andado muy rara estos días, muy cercana a la manada de ese imbécil, ¿Tienes algo que contarnos?

Kenia: Para nada.

Pablo: Estoy seguro que escondes algo, Kenia, y lo voy a averiguar.

Deje mi celular de lado y puse algo de música, tal parece que mis planes tendrán que pausarse por unos días, por lo menos hasta que se sepa qué pasó con Tom. Me quité la ropa que tenía puesta y decidí meterme a bañar, tras meditarlo un poco, decidí salir a correr, el clima esta perfecto para correr.

Unos pequeños recuerdos de la última vez que salí a correr vinieron a mi mente, fue ese día cuando de pura casualidad me encontré con Ariana, bonito nombre por cierto, igual al de Ariana Grande.

Me puse un short deportivo, una camisa con tirantes y mis tenis para correr, metí la navaja que mi madre me había entregado a mi bolsillo y me dispuse a salir de mi casa, antes de hacerlo, me encontré a mi hermana en la puerta.

—¿A dónde vas? —preguntó ella inmediatamente.

—A correr, ¿A caso no me veo como una persona que va a correr?

—Si, pero hace bastante que no salías, y no puedes hacerlo ahora, hay un asesino que va detrás de tus compañeros de clase, no salgas, Nico —mi hermana me miro con cara de gato triste, pero la ignoré.

—Volveré rápido.

Me hice paso entre sus brazos los cuales intentaban torpemente impedirme salir por la puerta y cuando lo logré comencé a correr.

El clima estaba perfecto, suspiré hondo y decidí meterme a través del bosque, digo hay que ser precavidos, sé que soy un asesino, pero hay otro asesino y no quiero morir.

Después de correr por algunos minutos, recordé que no había traído mi celular, así que decidí recostarme en el pasto un momento, ya que no haber hecho ejercicio en bastante tiempo ya me tenía muy cansado.

—¿Nico? ¿Qué haces aquí?

Abrí los ojos y pude verlo, era Rubén, un compañero de clase, de los más raritos y serios del salón, casi como yo, pero en comparación yo si tengo amigos.

—Estaba corriendo y decidí descansar un poco, ¿Tú qué haces aquí?

—Me gusta salir a caminar, más bien es a lo que me dedico, a salir a caminar, es de las formas en las que logro desestresarme después de perder tantas veces.

Parecía emocionado de estarme contando sus cosillas, no es como que se me haga raro que juegue videojuegos, si no que la forma en la que lo dice me hace tenerle lastima.

—Pues ya somos dos, yo también salí a desestresarme, lo del asesinato de Susana y de Tom me tiene muy asustado.

—Fue Hugo, estoy seguro.

Wow, vaya que todo mundo sabe del carácter de mierda que tiene Hugo, ya son muchas personas que creen que fue él quien asesino a ambos.

—¿Por qué tan seguro?

—Es obvio, todos veíamos a diario los tratos de Hugo a Susana, al inicio con la noticia del suicidio era obvio que ella lo había hecho para huir de esa relación toxica, pero ahora que sabemos que fue asesinato, pero por supuesto que fue Hugo, quizá en una de sus golpizas diarias a esa pobre chica se le pasó la mano.

Tiene razón, ahora estoy completamente convencido que cometí un error, no debí matar a Susana, debí matar a Hugo, ese infeliz lo único que sabe hacer es hacer daño, son sus modos de tratar a los demás.

Lo siento mucho por ti, Kenia, realmente no entiendo que le viste a ese idiota, siempre viste en la escuela o en fiestas como la trataba y terminaste ahí metida, no nos lo has dicho, pero estoy seguro que te traes algo con él.

—¿Qué tanto piensas? —Rubén decidió invitarse a sentarse a mi lado, yo solo me alejé un momento pensando en lo raro que se había convertido esta conversación, fue entonces que lo decidí.

Los pensamientos desde lo de Susana me han estado queriendo comer vivo, pero ahora que vi la oportunidad de hacerlo, no voy a desperdiciarla, ¿Es inocente? Pues claro, pero ¿No lo somos todos?

—Te voy a matar.