"En la secundaria Bangtan todo podía pasar en un festival de primavera"

PARTE 6

Mientras Nicole corría a advertir a Yoongi y compañía sobre la situación de Mimi y Ayelén, Kim Taehyung observaba con sorpresa y entusiasmo el momento exacto en que Estefi y Jin eran declarados ganadores del concurso de comidas. Los "hermanos" volvían a coronarse como la pareja capaz de comer más rápido en todo el colegio, rompiendo su propio record del año anterior de cantidad de hamburguesas ingeridas por minuto.

Estefi se puso de pie alzando sus brazos mientras el público vitoreaba y sus rivales caían rendidos por el esfuerzo sobre las mesas llenas de hamburguesas o sobre el piso. Jin se puso de pie con dificultad, alzando sus brazos también para celebrar el triunfo con su hermana, pero de pronto se tambaleó y cayó sobre la silla con su rostro muy pálido. Estefi comenzó a abanicar sus manos para darle aire al muchacho mientras algunos profesores se acercaban a ofrecer ayuda.

Taehyung colocó una mueca de preocupación mientras veía lo que ocurría, pues todo era muy similar a un sueño que había tenido esa noche previa al evento. Las voces de sus amigos atrajeron su atención, sacándolo de sus cavilaciones.

-¿Otra vez Seokjin? - Jimin intentó contener una risa al ver la cara pálida del aludido a lo lejos.

-Hasta aquí llegó su fama legendaria de "Eat Jin" - sentenció Tony llevándose una mano a la frente en señal de frustración.

Jimin se giró a observar a su amigo con una clara expresión de duda en su rostro. Tanto Mica como Jungkook rieron divertidos por el comentario de Tony.

-Ni tú te lo crees Tony - dijo Mica sin dejar de reír. - Ese chico seguirá comiendo de la misma manera sin importar si se desmaya en el intento.

Todos rieron y estuvieron de acuerdo con las palabras de la chica. Tony también rio divertido por su propia ocurrencia. Entonces dijo: - Taehyung ayudemos a llevar a Seokjin a la enfermería, ¿Quieres? - Taehyung se sobresaltó un poco al escuchar su nombre, pues seguía meditando sobre su sueño, pero se encogió de hombros indicando que no había otra opción más conveniente. - Chicos debemos prepararnos para "La Gran Broma", Kokkie ya sabes qué hacer.

-¡Oh, claro hyung! - exclamó su primo poniéndose de pie listo para comenzar el plan, con más ánimo del que había mostrado hasta entonces después de la derrota en la carrera de obstáculos.

Jimin observaba en la dirección por donde Hoseok, Mimi y Gabi habían salido corriendo para alcanzar a Nicole. Hacía casi una hora que se habían ido y eso era preocupante, pues el tiempo pactado para comenzar "La Gran Broma" se estaba por cumplir.

-Mica iré a buscar a Hoseok y a los demás, ayuda a Jungkook por favor -. Jimin le pidió el favor a su amiga mientras salía corriendo hacia la consola de sonido, el único sitio donde podía llegar a encontrar pistas de sus amigos.

Jungkook y Mica intercambiaron miradas de intriga, pero al instante se pusieron en marcha hacia las aulas del segundo piso.

En la enfermería, Taehyung observaba lo más serio posible la escena frente a él, aun cuando le fuera difícil no expresar su desacuerdo con aquel alboroto. Tony intentaba contener el enojo de su novia Estefi por el comportamiento de su hermano Jin.

-¡Te dije que no te esforzaras más de la cuenta, pero nunca me escuchas! - Los gritos de Estefi iban en aumento, de la misma forma que la palidez de Seokjin. Tony la sujetaba un poco, tratando de que ella no se alterara más.

-Lo hice bien, no tienes por qué enojarte así - murmuraba Seokjin mientras acariciaba su estómago hinchado y tomaba un poco de agua para ayudarse a ingerir el medicamento que la enfermera le había dado. - Ganamos y no me desmayé en mitad del concurso, somos campeones. ¿Nos dieron la medalla? Quiero colgarla en la pared de casa junto a los diplomas de alumno destacado. SeokJung nos tendrá envidia.

-¡Podrías estar en una ambulancia ahora camino a un hospital!

-Al menos tú no terminaste en un hospital, y yo tampoco porque estoy aquí esperando a que el medicamento haga efecto - refutó Jin muy tranquilo mientras se recostaba en la cama y cerraba sus ojos para descansar un poco.

Estefi cerró sus puños con furia contenida ante la actitud despreocupada de su hermano. Podría estar sufriendo de una fuerte indigestión, pero a él le importaba más competir contra su hermano mayor. Sólo había sido un estúpido concurso de comida, ¿Qué tenía eso de impresionante al lado de los logros académicos de su hermano SeokJung?

-Como sea, ganaron y ahora lo importante es que todos nos reunamos para comenzar "La Gran Broma" - se atrevió a interrumpir Tony acariciando los hombros de su novia. - ¿Aún recuerdan nuestro plan, verdad?

-Claro que sí cuñado, dame unos minutos para ponerme en forma y estaré como nuevo - respondió Seokjin con la mejor de sus sonrisas aun cuando su rostro continuara viéndose pálido.

Estefi tomó una de las toallas que estaban sobre el pequeño escritorio de la enfermería y, tapándose el rostro, gritó muy fuerte ahogando su furia en la suave tela. Tony rio por lo bajo, pero Taehyung se quedó inmóvil en su lugar, intentando descifrar las palabras que había escuchado pronunciar a Seokijn.

"Al menos tú no terminaste en un hospital". ¿Qué significaba eso? En su sueño, Taehyung recordaba que Estefi sufría un desmayo en plena competencia y debía ser hospitalizada de urgencia. Que Jin hubiera dicho aquella frase le parecía demasiada coincidencia, lo perturbaba y le hacía sentir inseguro. ¿Acaso su sueño le había querido mostrar algo real?

-Cielo estás haciéndote demasiado problema, ya antes has visto a tu hermano así o peor - le recordó Tony acercándose a ella una vez que la chica soltara la toalla y se sentara con la mirada perdida en las baldosas marrones del piso. - Es hora de la verdadera diversión, ¿No lo crees?

Estefi observó a Tony aun con enojo en su mirada, y luego agregó: - Voy a hacer que lo lleven a una enfermería de hospital si se levanta de esta cama sintiéndose mal, ¿Entendiste Tony?

-Claro pero... - El joven sintió que la amenaza era demasiado seria como para hacer un chiste al respecto. Una vez que Estefi se enojaba era muy difícil hacer que ese enojo pasara rápidamente. Lo mejor era dejarle tranquila. - Lo necesitamos, igual que a los demás.

-¿Hoseok y Gabi aún no han vuelto? - Estefi se mostró preocupada.

-No habían llegado cuando vinimos aquí, tal vez ahora ya estén con los demás... - respondió Tony mirando a Taehyung quien se había acercado a ellos.

-Chicos, vayan ustedes a preparar lo que necesiten, yo me quedaré con Jin hasta ver que se sienta mejor - se ofreció amablemente Taehyung. Estefi notó que los gestos y la mirada de Tae no eran del todo normales, parecía ansioso y bastante nervioso. Sonreía disimulando sus nervios, los cuales eran notorios por cómo movía de forma exagerada sus manos.

-De acuerdo - aceptó la chica poniéndose de pie y mirando a Tae a los ojos. - Pero no dejes que se levante a menos que sus labios vuelvan a estar rojos y sus nauseas se hayan ido. Promételo Kim Taehyung.

-¡Lo prometo! - se apresuró a responder el joven erguido, elevando una mano, mostrando la palma junto a su típica sonrisa, temblando ligeramente.

Estefi sonrió divertida por la actitud de su amigo, y luego se giró hacia su hermano quien comenzaba a recuperar los colores de su rostro.

-No causes más problemas y apúrate, "La Gran Broma" no sería lo mismo sin ti, tonto - dijo antes de tomar la mano de Tony y salir de la enfermería.

-¡Gracias hermanita! - gritó Jin intentando que sus palabas fueran escuchadas. Tae volvió a su lado y lo observó cerrar los ojos viéndose un poco más tranquilo ahora. - Tengo una gran hermana, ¿Verdad Tae Tae? Ella es muy buena...

Kim Taehyung sólo sonrió tratando de no mostrarse más perturbado de lo que ya se sentía por todo lo sucedido. Pues repentinamente las circunstancias comenzaban a tomar similitudes con su sueño, del cual no recordaba el final. Sólo había quedado impresa una gran angustia en su pecho, junto a las lágrimas en su rostro al despertar. Pero esa mañana era el festejo del último festival de primavera junto a sus amigos, y por eso había decidido olvidar los sueños y sonreír ante el hermoso cielo que había visto por su ventana una vez que secara sus lágrimas.

Jungkook arqueó una ceja en el momento justo en que Mica entraba a la sala de maestros tratando de no ser vista por nadie más.

-¿Está listo Kokkie? - preguntó la chica asomando su cabeza por encima del hombro del joven.

-Sí, pero no podemos hacer mucho más hasta que todos estemos reunidos. Una vez que esta cosa se encienda, nada va a detenerla - respondió Jungkook con cierta emoción en su voz. - ¿Terminaste con los baldes de pintura?

-Sí, eso ya estaba listo, sólo necesito encontrar más rollos de papel para baño - respondió Mica mordiéndose un labio con preocupación. - No pude conseguir la llave del conserje...

-¿Necesitas las llaves del armario del primer piso o del cuarto? - Jungook tomó un manojo de llaves que tenía en el bolsillo de su pantalón y comenzó a buscar las etiquetas. Mica sólo lo observó sorprendida, sin necesidad de hacer alguna pregunta, pues su expresión lo decía todo. - Oh, no te preocupes, sólo las tomé prestadas. Pienso devolverlas antes de graduarme.

Mica tomó la llave que su amigo le extendía y lanzó un suspiro divertida por las ocurrencias del joven Jeon. Definitivamente sus amigos eran personas muy especiales a las cuales apreciaba mucho. No quería pensar en cómo sería su vida lejos de ellos ahora que la graduación no estaba tan lejos, pero tampoco quería empañar aquel día de primavera con preocupaciones banales. Ya habría tiempo de sobra para pensar en el futuro, el presente era el mejor regalo que tenía en ese momento.

Para cuando Estefi y Tony habían vuelto al punto de encuentro con sus amigos, se sintieron aliviados de verlos a todos ahí. Jimin había logrado volver con Gabi, Hoseok y Mimi, así como también con Yoongi, Ayelén y Nicole. Jungkook y Mica estaban con ellos, y todos hablaban animados, especialmente Hoseok, quien parecía estar relatando una emocionante aventura. A su lado, Mimi sonreía un poco nerviosa, y el rostro de Yoongi se coloreaba de un fuerte rojo cuando las risas de todos estallaban. Verlos así de animados sólo aumentaba las ansias por poner en marcha "La Gran Broma".

-¡Entonces no lo pensé ni un segundo y golpeé con todas mis fuerzas la cara de ese soquete! - Relataba Hoseok haciendo una demostración con el rostro de Jimin, quien por instinto elevó sus puños para cubrirse y alejó a su amigo con un empujón lo suficientemente fuerte como para hacer que el chico se tambaleara.

Pero Hoseok, muy concentrado en su relato, no prestó atención a las acciones de Jimin y continuó hablando para sus amigos. A su lado, Mimi observaba la forma en que Nicole evitaba estar cerca de Jungkook. Fuera o no del agrado de su hermana, Mimi lograría hacer que dejara el orgullo de lado y pidiera una disculpa al muchacho. Aprovechando el júbilo de los demás, Mimi se acercó a su hermana y la empujó en dirección a Jungkook.

-¿Qué haces? - preguntó Nicole tomada por sorpresa. Al adivinar las intenciones de su hermana, la joven intentó huir pero no pudo hacer nada en cuanto la mano de Mimi se cerró alrededor de su muñeca. - ¡Mimi, suéltame!

-Harás lo que debes hacer si no quieres que hable yo por ti - sentención su hermana mayor con una sonrisa de triunfo en su rostro. - No lo ocultes Nicole.

Nicole quiso gritar, golpearla y luego correr, pero nada de eso sería prudente. Una vez más, su hermana le había ganado. Así que, resignada y refunfuñando por lo bajo, Nicole caminó pisando fuerte las baldosas hasta estar junto a Jungkook, a quien le hizo un gesto brusco con su cabeza indicándole que la siguiera. Sólo se alejaron unos cuantos pasos de los demás para tener cierta privacidad al hablar.

-Oye Jeon - habló Nicole una vez que pudo contener su vergüenza y enojo. Jungkook se giró en su dirección de inmediato, todavía sorprendido de que hubiera sido ella quien se acercara a él en primera instancia. Por instinto, el chico retrocedió un paso con los ojos muy abiertos. - ¿Qué te pasa idiota? No voy a golpearte.

-Gracias, eso es un alivio - respondió el muchacho evitando contacto visual con la chica.

Nicole volvió a maldecir por lo bajo y rodó sus ojos con fastidio. Se sentía como una estúpida por tener que pedir perdón después de haber hecho un papel lamentable en la carrera y frente a ese chico, pero la figura de Mimi seguía observándola con los brazos cruzados en señal de que no la dejaría volver a su lado a menos de que hablara con Jungkook.

-Escucha Jeon, yo... - Nicole clavó sus ojos en el piso y apretó sus puños. De verdad era difícil pedir perdón a alguien a quien consideraba culpable de su desgracia.

-No voy a irme, puedes continuar... - comenzó a hablar Jungkook curioso ante la actitud de la chica, buscando su mirada por primera vez.

-¡Ya lo sé, no me molestes! - gritó Nicole sintiendo el sudor en su frente. Jungkook pegó un pequeño salto y se quedó inmóvil en su lugar mirando un punto fijo, temeroso de decir algo más. Esa chica era admirable, pero también daba miedo. - ¡No lo hagas más difícil, así que cállate y escucha!

-No estoy hablando - refutó Jungkook, esta vez molesto. Sus amigos habían entendido que ellos dos debían hablar a solas, pero desde la prudente distancia que los separaba, todos reían observándolos. Que humillante.

-¡Cállate idiota!

-¡Deja de insultarme, eso sí que es molesto!

-¡Tú eres el molesto!

-¡¿Yo?! La que no puede decir una simple palabra eres tú -. Jungkook utilizó su sarcasmo cansado de comportarse como una buena persona ante alguien tan maleducado. - Si tanto quieres hablar y eres tan buena como dices, sólo dilo. ¡Anda, dilo! ¿Acaso tienes algo que ocultar?

-¡Perdón! - gritó Nicole con todas sus fuerzas, cerrando los ojos con furia y hundiendo sus dedos en la carne de sus brazos. - ¡Lamento los insultos, el haberte empujado y el haberte conocido también Jeon Jungkook!

Mimi cubrió su boca sorprendida y avergonzada por la contestación de su hermana, y el resto de los chicos temió que las cosas volvieran a estar tensas entre esos dos, pues el grito había sido demasiado fuerte como para pasar desapercibido. Pero al contrario de lo que todos imaginaban, Jungkook comenzó a reír con una risa sonora y alegre. Finalmente, apoyó una mano en un hombro de Nicole y le miró sin dejar de sonreír.

-Eres muy divertida aun cuando seas un poco desagradable Nicole. Acepto tus disculpas, por favor también acepta las mías, mi forma de actuar tampoco fue correcta-. La sonrisa de Jungkook era tan sincera que Nicole no logró formular una protesta en contra de ese gesto, sólo se le quedó mirando a los ojos totalmente petrificada ante el cambio de humor del joven. - Ahora que serás parte de nuestro plan, demos nuestro mejor esfuerzo para divertirnos juntos, ¿De acuerdo? Volvamos con los demás, Tony hyung debe estar explicando los pasos a seguir. - Jungkook se apresuró a volver con sus amigos, pero antes de continuar se giró a observar a la chica que seguía de pie en su lugar sin terminar de procesar aquel momento, y le dijo: - Yo agradezco haberte conocido.

Nicole sintió que su rostro enrojecía y que sus puños volvían a cerrarse con impotencia y mucha vergüenza. Jeon Jungkook, ¿Quién demonios te creías que eras?

-¡No se quedará así! - Se atrevió a exclamar la chica entre tartamudeos, acomodando sus lentes con nerviosismo. Kokkie la observó con paciencia, esperando a que continuara hablando. - Nos enfrentaremos en otra competencia y voy a ganarte limpiamente, ¿Entendiste?

-¡Por supuesto que sí! - Y aquella respuesta fue suficiente para darle paz al corazón de Nicole, quien sonrió sintiendo que había ganado un amigo muy importante sin proponérselo.

Para cuando Kokkie y Nicole volvieron junto al grupo, la expresión en los rostros se había vuelto un tanto sombría.

-El plan tiene que funcionar si o si, necesitamos que Namjoon y Diana participen juntos de la siguiente carrera de parejas - habló Gabi muy seria.

-¿Qué les vamos a decir para convencerlos? Ellos no tienen la obligación de participar si otros alumnos de la clase pueden hacerlo - le recordó Jimin.

-Pero no podemos, los que íbamos a participar éramos Jin y yo, y él sigue en la enfermería - les recordó Estefi. - Lo cual lo convierte en la excusa perfecta para que ellos tomen nuestros lugares.

-¿Están seguros que caerán en la trampa? - Mica era quien se mostraba más reticente ante la idea. - Necesitaremos mucha suerte para juntarlos.

-Ese es el plan, tenemos que hacerlo - dijo Yoongi igual de serio que Gabi.

-Anunciaré que los necesitamos aquí para poder hablar acerca del concurso - dijo Ayelén comenzando a caminar hacia la consola de sonido. - El tiempo sigue pasando y tenemos que ponernos en marcha.

-Buen punto, no lograremos activar a tiempo el compresor si seguimos demorándonos - apremió Tony.

-Bien, en estos momentos necesitamos separarnos para poder cubrir más terreno - comenzó Gabi. - Jungkook y Tony, terminen de revisar el compresor. Estefi, Mica y Nicole, revisen que los papeles de baño sean los necesarios para comenzar en el tercer piso. Jimin, Hoseok, Mimi, ustedes vayan a terminar de verificar los tarros de pintura. - Señaló a Mimi y Nicole - Ustedes nos ayudarán en tanto Taehyung y Jin puedan volver. Mientras, Yoongi y yo nos haremos cargo de Diana y Namjoon.

-¡De acuerdo! - gritaron todos.

-¿Segura que estarán bien solos? - preguntó Jimin antes de irse.

-Por favor Park, no olvides que hablas con la "Genius Line" - se mofó Yoongi, lo cual provocó cierto enojo en su amigo. Era muy divertido molestar a Jimin bajo presión. Luego se dirigió a Gabi: - ¿Ya pensaste qué les diremos cuando vengan?

-No tengo idea, pero algo se nos va a ocurrir - respondió su amiga elevando su dedo pulgar con una sonrisa de triunfo. Yoongi quiso tomar aquel gesto como algo positivo y no como señal de un posible desastre.

-¡Jimin muévete! - le apremió Hoseok junto a Mimi. Jimin sintió que su sangre comenzaba a hervir ante las exigencias de sus amigos, pero se apresuró a alcanzar a sus compañeros.

Mientras "La Gran Broma" comenzaba a ponerse en marcha, Namjoon y Diana escucharon sus nombres a través del altavoz. Ambos habían terminado de encargarse de Nicolás dejando al muchacho al cuidado de los profesores de su colegio.

Diana se sentía extrañamente eufórica, pues había sido una mañana muy agitada, yendo y viniendo con mucho trabajo para hacer, pero siempre en compañía de Namjoon. Sin necesidad de forzar absolutamente nada, ambos habían pasado de no dirigirse la palabra a trabajar como un verdadero equipo solucionando los problemas que surgían en aquel festival. Definitivamente jamás olvidaría ese día.

-¿Ahora qué problema habrá que resolver? - suspiró Namjoon después de reconocer la voz de Ayelén en el parlante.

-No seas pesimista, después de todo es nuestro último festival escolar como alumnos y compañeros, y casi no hemos pasado tiempo con ellos - le recordó Diana.

-Wow, eso sí que no lo esperaba de ti. ¿Estás diciendo que podemos dejar de lado nuestras obligaciones y divertirnos con nuestros amigos? - preguntó Nam exagerando una expresión de sorpresa, lo que provocó que Diana se sonrojara molesta. - ¿Presidenta Diana, es usted?

-Claro que soy yo, ¿necesitas que te lo demuestre? - le respondió la chica elevando un puño con una mirada amenazante, pero todo rastro de amenaza se borró de su rostro cuando se percató de lo cerca que se encontraba Namjoon de ella.

Estaban muy juntos, frente a frente. Él demasiado alto y perfecto, y ella demasiado desprevenida y embelesada como para reaccionar de forma coherente ante esa situación. La Diana del pasado hubiera empujado a aquel chico lejos de ella y se hubiera mostrado ofendida, pero por el contrario, ahora sólo deseaba acortar la distancia que los separaba. Namjoon estaba frente a ella, observándola a los ojos, desviando ligeramente sus pupilas hacia sus labios para volver a atraparla en su mirada. Y ella estaba ahí, con un puño elevado pegado a su pecho, sintiendo su corazón latir con mucha fuerza, y deseando que la distancia entre ambos se acortara de alguna manera. Quizás podía hacerlo, podía acercarse más a él, ponerse en puntas de pie y robar un beso sutil e inocente de aquel joven que la hacía suspirar.

-No hace falta que me demuestres nada - habló finalmente Namjoon con una sonrisa un tanto tímida, tomando la mano que la chica aún mantenía elevada para luego entrelazar sus dedos unos segundos, pues inmediatamente después ambos se distanciaron un poco, sin saber qué más decir. Ninguno de los dos había esperado encontrarse en aquella situación un tanto incómoda pero excitante.

-Mejor vamos a ver por qué nos llaman - propuso Diana cuando recuperó su compostura, a lo que su amigo estuvo de acuerdo y ambos comenzaron a caminar hacia la consola de sonido aun con sus corazones latiendo de forma desenfrenada.

En la enfermería, Seokjin comenzaba a sentir que el dolor de estómago y las náuseas lo abandonaban. Ya no estaba hinchado ni incómodo, sólo tenía sed y ansias por ir a ayudar a sus amigos. Vaciando su vaso de agua nuevamente de un solo trago, se sentó en la cama, dispuesto a levantarse hasta que recordó que Taehyung estaba con él. Efectivamente Tae lo observaba sentado en un pequeño banco a su lado.

-¿Ya estás mejor? Tus labios han recuperado color - afirmó Taehyung observando a su amigo con una mirada seria, carente de su característica picardía, mientras jugaba con un plástico entre sus dedos.

-Sí, gracias por acompañarme Tae, creo que ya puedo volver con los demás - le dijo Jin con una sonrisa de forma muy amable, como siempre hablaba él. - Disculpa las molestias.

-Está bien, no es ninguna molestia porque yo quería hablar contigo a solas -. Taehyung confesó aquel deseo tratando de mantener su seriedad, pero no pudo evitar temblar un poco ante la ansiedad que parecía sentir. Nuevamente comenzó a jugar con el plástico apretándolo con sus dedos.

Seokjin tragó saliva con dificultad, intimidado por el comportamiento de aquel chico a quien conocía hacía años pero nunca dejaba de sorprenderle. Tratando de aliviar la tensión que parecía querer crecer entre ellos, el joven comenzó a ponerse sus zapatillas mientras respondía: - Entonces aprovecha el momento y dime de qué quieres hablar.

-¿Recuerdas los sueños horribles que solía tener? - La pregunta de Taehyung tomó a Seokjin por sorpresa, por lo que observó al chico a la cara nuevamente y asintió de forma silenciosa. Después de ver aquel gesto, Tae continuó su relato sin dejar de jugar con el plástico. - Sólo hablé de ellos con Namjoon, Estefi y contigo.

-Nos dijiste que ya no los habías tenido, que ya no soñabas ese tipo de cosas - añadió Jin recordando aquellas charlas del pasado. Era extraño que Tae quisiera hablar de algo que él mismo había jurado nunca volver a mencionar.

-Volví a soñar de esa manera desde que Estefi y Diana pelearon - la voz de Taehyung se quebró en aquel momento, y esta vez clavó su mirada desesperada en el rostro pálido de Jin. - Hoy soñé que Estefi sufria una descompostura por haber comido más de lo que su cuerpo le permitía, pero en realidad fuiste tú el que terminó en esta enfermería, exactamente igual que el año pasado.

-Bueno, es sólo un sueño Tae, y por fortuna nadie fue hospitalizado - sonrió Jin terminando de acomodar su calzado.

-En cada sueño que recuerdo, algo siempre cambia a tu alrededor. Siempre eres tú Seokjin. - La manera en que Taehyung remarcó aquel hecho, hizo a Jin sentir un nerviosismo repentino. ¿Qué pensamiento peculiar pasaba por la cabeza de Kim Taehyung en se momento que lo hacía verse tan nervioso y perturbado? - Y esa frase que acabas de decir es la que más me atormenta: "Nadie fue hospitalizado"... ¿Acaso sabías que alguien iría al hospital?

-No sé por qué estás hablando de esto cuando todos nos deben estar esperando para poder festejar este festival como se merece -. Jin se puso de pie finalmente y se mostró un tanto molesto ante la actitud de su amigo. - Si quieres que hablemos de sueños podemos hacerlo cuando terminemos, pero no aquí ni ahora.

Seokjin comenzó a caminar hacia la salida del cuarto, pero Taehyung lo sujetó por un brazo obligándolo a darse vuelta. La mirada en el rostro de Tae seguía mostrando desesperación y hasta un poco de miedo. Jin le enfrentó con seriedad, oponiendo resistencia a su agarre, sin dejar de verlo a los ojos.

-Seokjin, ¿Acaso ocultas algo?

CONTINUARÁ