Semana larga 4/7
Primer día
Domingo de descanso para Atsushi donde Osuya no se separó de él por ningún momento, jugaron, leyeron, incluso bailaron con videojuegos, Akutagawa había ido a trabajar pero para la media tarde había vuelto, al entrar a su casa, odio inmensamente el olor que Osuya había dejado en su casa; suspiro y se adentró en su hogar, encontrando a Atsushi y Osuya preparando la cena – bienvenido Ryu – sonrieron ambos chicos
- Estoy en casa...
- Osuya ¿preparaste el baño?
- Si – sonrió Osuya – todo está listo, toma tu baño
- Gra-gracias...
Y aunque en todo momento se sintió raro, Osuya se comportó en todo tiempo, no molesto al azabache, ni dijo nada desagradable. Por la noche, el menor hablo por teléfono con sus padres alegando que estaba feliz y era bien tratado, y después de un "buenas noches" Osuya colgó – Atsushi ¿me leerás un cuento?
- Si – sonrió Atsushi – vamos a tu cama
- ¿contaras un cuento?
- Si, se lo prometí a Osuya, iré en un rato
- Bien
En cuanto el niño se marchó con el albino, Akutagawa suspiro profundo, el azabache decidió ir a su habitación, no era como si el niño le molestará, es que... si, le molestaba, Osuya se pegaba a su omega como si fuese una chinche y solo era el maldito primer día que estaban juntos ¿Cómo iba a soportar eso?
Una hora después, Atsushi llego a la habitación donde se quedaba con el mafioso, lo vio cruzado de brazos en la cama y Atsushi ya sabía que vendría – te tardaste
- Contaba un cuento
- ¿Cuánto puede durar un cuento?
- Más de lo que crees
- Jinko – hablo molesto
- ¿puedes parar con eso?, como sea, necesito dormir, mañana debo llevarlo a la escuela temprano
- ¿la mañana no estará?
- No, debe ir a la escuela, pero debo ir a la agencia
- Quédate –dijo el mafioso abrazando al albino
- Tengo mucho sin ir
- Quédate un poco más – apretó al agente – con Osuya aquí no podemos hacerlo – dijo besando el cuello del albino
- ¿Qué es lo que te ocurre? ¿Dónde quedo el señor "me tocas y corto tus dedos" "te matare" y - Akutagawa callo al albino con un beso, uno que profundizo rápidamente haciendo al albino querer huir – A-Akutagawa
- Tu eres el que me descontrola
- Es tu culpa por todo lo que yo tuve que pasar
- Vamos Jinko, me tienes hecho un lió – dijo acariciando las mejillas del albino – quiero hacerte mío cada momento
- A-acordamos algo
- Lo sé... y lo odio
Día dos
Akutagawa se había despertado por el ruidoso y doloroso sonido del despertador, jamás había escuchado ese maldito artefacto, Atsushi se levantaba con pesar – apaga ese maldito sonido – se quejó mientras Atsushi lo apagaba
- Lo siento, debo hacer el desayuno de Osuya
- Déjalo por el amor de satán
- ¿Qué?
- ¿esperabas que glorificará a Dios?
- Como sea – suspiro Atsushi levantándose – vuelve a dormir, lo llevaré a la escuela
- Tiene 5 años ¿Qué se supone que es todo esto?
- ¿Qué se supone? Bueno, eso es educar a un hijo – dijo retador haciendo a Akutagawa tapar su rostro con su almohada
El menor se apresuró a lavarse, cambiarse, no era nada en particular, no uso su ropa de agencia, solo unos jeans y una playera, uso un suéter largo de mangas tres cuartos, una vez listo, Atsushi había ido al cuarto donde Osuya se quedaba, entró y miro al menor dormir, sonrió de verle, parecía el niño más feliz de todos, se acercó, acomodo el fleco en su cara y le hablo suave, y lindo – Osuya, cariño... Es hora de despertarse – hablo Atsushi y Osuya se removió abriendo lento los ojos
- Atsushi
- ¿si?
- Hablas igual a mamá... y tus feromonas son... relajantes
Atsushi sonrió al niño y suspiro alegre – levántate Osuya, es hora de ir a la escuela
- Si – obedeció
Atsushi preparaba el almuerzo de Osuya mientras el pequeño se aseaba, Akutagawa despertó por el ruido, odiaba la situación de Osuya pero no le quedaba más que aceptarla, realmente actuaba como alguien amargado más que nunca, llego hasta el comedor donde vio al albino terminar de cocinar - ¿Por qué te levantaste? – pregunto el albino confundido
- Hacen mucho ruido
- Lo siento, es normal
- Supongo que si – suspiro el azabache dejándose caer en la mesa, unos minutos después sintió el calor cerca de su rostro, miro a Atsushi sonriente quien dejaba una taza de té de hiervas
- Solo será una semana, bébelo y ve a la cama – sonrió Atsushi.
Akutagawa suspiro y lleno sus fosas nasales del té, sonrió ligeramente antes de beberlo, Osuya había llegado a la escena, - Atsushi. Estoy listo – dijo Osuya sentándose
- Bien, desayuna – menciono dejando el plato de arroz al lado del chico y acariciando su cabello
- Esto es suuuuper – dijo Osuya mientras Atsushi se sentaba también
- ¿Por qué?
- Mama y papá siempre desayunan conmigo, pensé que Akutagawa no iba a venir – dijo el castaño sonriente
- Si, bueno....
- No me extrañaría que Dazai-san también desayune, son muy ruidosos – dijo burlón y Osuya sonrió
- Oye Ryu no digas cosas así
- Digo la verdad – decía burlón Akutagawa – desayuna bien, tienes clases ¿no?
- ¡Si! – dijo Osuya alegre
Día tres
Después del desayuno, Akutagawa decidió acompañar a Atsushi a dejar a Osuya a la escuela, dejaron al menor en su colegio, donde se despidió de ambos, de camino de regreso Akutagawa fijo su mirada en el albino – sigues sin ir a la agencia
- Si, bueno... soy un omega y en la agencia casi todos son alfas, realmente podría afectarles con mi estado actual – suspiro – tenías razón Ryu, necesito reponerme antes de regresar
- No siempre tengo razón – suspiro – pero intentaré hacer lo mejor para ti... De eso, trata el ser uno ¿no?
- N-no lo sé...
- Vamos Jinko, todos estos años... ¿no me anhelaste?
- Te había olvidado ¿lo olvidas?
- Sí, pero ¿nunca quisiste una relación?
- Una vez... una vez leí un libro de romance – sonrió ligeramente – estaban muy enamorados, fue en un baile, mientras lo leía pensé que sería increíble enamorarme... - hizo una pausa y miro al mafioso – sus familias se odiaban, a muerte – expreso dramático y suspiro – al final... ambos mueren, ella después de él. Recuerdo pensar... que el amor era raro
- Yo no he tenido una relación, y es cierto que soy de la mafia y tu un agente... - Atsushi trago saliva – pero no morirás después de mi – dijo serio – ni moriré tampoco por eso, nuestras organizaciones tienen un trato y no importa si es mafia o agencia, yo siempre te elegiré a ti
- Ryunosuke...
- ¿Qué?
- Yo... eso me ha sorprendido
- Puedo decir algunas cosas, no sabré tratarte pero se lo que mi instinto me hace hacer o decir y eso me hace saber... - dijo mirando fijo los ojos del albino – por ti lo haría todo sin dudar
Cuarto día
Akutagawa había ido por Osuya a la escuela, aquel día Atsushi estaba teniendo problemas con su celo y el salir sería perjudicial para todos, el castaño caminaba tomando la mano de Akutagawa mientras volvían a casa – Akutagawa
- ¿si?
- ¿Atsushi se encuentra bien?
- Sí, pero salir es peligroso
- ¿puedo verlo?
- Quizá, tomo unos medicamentos y está en cama
- Akutagawa
- ¿si?
- ¿Me ayudarás con mi tarea?
- Haré lo que pueda
Por la tarde, Akutagawa y Osuya hacían la tarea del menor, casi al anochecer fue que Atsushi salió de la habitación - ¿pudieron convivir sin matarse? – pregunto el albino viéndolos sorprendido
- Soy más maduro de lo que crees Jinko
- No es cierto, si me quiso matar
- Oye niño – le llamo molesto, Atsushi comenzó a reír
- Les preparare la cena
- Está bien – lo miro Akutagawa – quédate con Osuya, lo haré yo
- Ah pero
- Ven Atsushi – sonrió Osuya – revisa mi tarea
- Bie-bien...
La cena se llevó a cabo por Akutagawa, Atsushi y Osuya comieron alegres, aquello era un... gran ambiente familiar, los mayores no le conocían bien pero Osuya se sentía igual que en casa
Para dormir, el cuento de Atsushi hizo a Osuya caer mientras Akutagawa le esperaba – hoy fue más rápido – dijo Akutagawa viendo al albino entrar
- Al parecer lo canso jugar contigo
- No jugué con él
- Bueno, me dijo que Rashoumon hizo un columpio y
- Era porque no se callaba – se quejó – apúrate y acuéstate, hay que levantarse temprano
Atsushi sonrió desde el marco de la puerta, fue hasta la cama, se acomodó en ella y abrazo al azabache - ¿eso?
- Gracias... - sonrió Atsushi – esto hace más fácil todo...
Akutagawa acaricio el cabello del albino – tienes razón, un bebe es mucha responsabilidad, no es tiempo pero estoy seguro que podemos hacerlo – Atsushi miro al azabache sorprendido y sonrió, beso al mafioso sorprendiéndolo, ese era el primer beso que le daba Atsushi sin tener un celo involucrado o alguna hormona, sintió la felicidad recorrer su cuerpo y la noche pronto les dejo descansar...
¡Hola a todos!
Se que Red quedo abandonado por un tiempo pero estoy retomando mis fanfic's ahora que todos los pedidos han terminado, aunque queda Idols, no es lo mismo a todos los demás
pronto también actualizaré otros como Falling in love, gracias por su espera, y aunque las historias se quedaron cerca de su final quizá así puedan emocionarse más por la espera, bueno no sé, solo diré que en serio les agradezco la paciencia
¡Gracias por leer!
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