Capítulo 6

El azabache lo llevó por detrás de su casa, quería levantar un poco el ánimo del pequeño -te enseñaré algo, ven -el pequeño confirmó, se dejaba guiar por Itachi sin oponer resistencia, llegaron a un cobertizo lleno de gallinas. Naruto sonrió divertido, entró sin vergüenza alguna a querer atrapar a una, hizo un puchero, tenía cero habilidad ninja en ese momento, suponía que en ese momento ni siquiera era rival para un aldeano, cayó frustrado trás una gallina, se levantó lleno de lodo, sonrió divertido, hizo la pose de un monstruo, comenzó a seguir a las gallinas quienes corrían aterrorizadas por el monstruo de lodo. Itachi sonrió divertido, Naruto se dio cuenta de lo que hizo, se puso rojo, aún podía ser muy infantil, giró su rostro al mayor, este tenía una ligera sonrisa divertida -vamos pequeño, te llevaré a tu departamento para que te asees -el Uzumaki confirmó con pena, cruzaba sus manitas con vergüenza, tratando de limpiarlas. El Uchiha sacó un pañuelo de su equipo de herramientas, se agachó un poco para limpiar sus manos con cuidado, el rubio podía verlo de cerca, su amabilidad era asombrosa, recordaba su rostro en ese sueño, sus ojos se dilataron viéndolo con cariño y anhelo, bajó el rostro para ocultar su sonrojo.

En lugar de cruzar por el barrio Uchiha, caminaron por el bosque rodeando el lugar para que el pequeño no tuviera que enfrentar sus miradas, de igual forma con la aldea, cuando llegó a los límites, Itachi lo tomó en sus brazos con cuidado colocándolo en su espalda. Naruto se había sorprendido, pero se dejó hacer, se abrazó con cariño a su espalda absorbiendo su aroma, olía a bosque como aquel claro del bosque de su otra vida, ocultó su rostro en su espalda queriéndolo sentir más cerca -¿dónde vives pequeño? -el rubio apuntó hacia la zona roja. Itachi analizó el lugar, asintió, comenzó a brincar sobre las casas y edificios, podía ver prostitutas en las esquinas, pordioseros pidiendo limosna, borrachos vomitar en los callejones, vagos pintar las paredes y pequeñas bandas, ese no era un lugar apropiado para un niño que vivía solo -¿Hokage-sama no ha puesto a alguien para cuidarte?- el pequeño asintió, apuntó con su mano una sombra en un edificio -es la primera vez que me pone un guardia, por eso estaba en su oficina -Itachi asintió, debía ser un anbu de nivel para no haberlo ubicado, aunque él apenas era un chunin, le sorprendía más que el pequeño lo ubicara, tal vez lo había visto pasar, dejó de lado su pensamiento.

Al llegar al lugar lo veía con curiosidad, el pequeño sacó una llave de su pequeño short, abrió la puerta. El lugar se veía descuidado y vacío como el pequeño dijo, con una mirada pudo darse cuenta que sólo tenía una manzana y un plátano para comer, respiró hondo -dame un momento, ahora vengo -Naruto lo vio fijamente, cuando salió el chico de su departamento se tiró en el suelo recargado en la pared, tal vez había huido de él al ver el lugar donde vivía, tal vez creyó que era un problema estar cerca de él por el odio de la gente, levantó el rostro observando el lugar oscuro y frío donde vivía, debería buscar un lugar diferente donde vivir, ese lugar le traía demasiados recuerdos tristes, su soledad, mordió sus labios recordando dónde estaba su herencia, su abuela le había dicho que la casa de sus padres había sido destruída en el ataque de Kurama, su herencia estaba en la bodega Hokage, estrelló levemente su cabeza en la pared, se levantó con tristeza caminado hacia la cocina lentamente, abrió su refrigerador, sólo había un cartón de leche caduca, lo sacó del lugar, lo metió en una bolsa y lo tiró a la basura, vio su departamento sucio, comenzó a recoger la basura lentamente con una bolsa en su mano. Al terminar cerró la bolsa y se dirigió a su cuarto, comenzó a sacudir su cama y tenderla con cuidado, cuando terminó tomó un trapo, lo colocó en el suelo, comenzó a correr con él limpiando su piso bastante sucio, lo lavó adecuadamente y volvió a pasarlo por el suelo.

Por la terraza Itachi sonrió al observar limpiar al pequeño su hogar, abrió un poco la puerta corrediza, entró -veo que limpiaste tu departamento -el rubio brincó del susto, no se había dado cuenta que estaba ahí, lo vio con sus grandes ojos azules, estaba sorprendido -creí que ya no volverías, lo lamento- el azabache entendió el porqué de sus dudas -no te preocupes, traje algo para que comas -el rubio negó con vergüenza -no, no es… -Itachi negó -no te preocupes, lo hago porque quiero, me tengo que ir pequeño, nos veremos en otro momento -Naruto se sonrojó demasiado por la comida que le había traído el Uchiha, asintió lentamente, en un susurro habló -eres muy bueno, gracias -Itachi levantó dos dedos, con ellos dio un leve golpecito en su frente con una sonrisa, salió del lugar dejando a un sonrojado rubio inmóvil viendo a la nada.

Cuando Naruto salió de su shock sonrió un poco, tocó su frente suavemente, corrió a terminar de limpiar su departamento y guardar la despensa que le había llevado el chico, preparó un poco de arroz y verdura, no tenía dinero para comprar un ramen con Teuchi, así que decidió ser medido y cuidar lo que tenía o acabaría comiendo de la basura o en el bosque como en su otra vida.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top