Yuri Plisetskiy x Male Lector
Yuri on ice!!
Advertencia: lenguaje  no muy apto. Yuri ya es un adulto de 20 años en este one shot.

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Practicabas patinaje desde que eras pequeño, tu hermano te enseñó y desde ese momento nunca pudiste parar. Lamentablemente nunca tuviste la oportunidad de hacerlo profesionalmente; más tú hermano tubo la suerte de hacerlo, tu hermano: Ben Hamish representante de Inglaterra en múltiples concursos (y la mayoría los ganó). Siempre lo acompañas a todas sus competencias (el dice que eres como su amuleto de la  suerte); aunque te alegras por el y todo siempre te has preguntado: ¿como se sentirá que la gente te adore por patinar?.

Tu hermano había terminado una de sus competencias, la cual había sido en Berlín y había ganado 2º lugar, estabas orgulloso de él, y habían decidido ir a festejarlo en un pequeño restaurante con algunos de los patinadores de la competencia. No los conocías (al menos a la mayoría) por lo que estabas algo nervioso, nunca fuiste lo que se le puede llamar "sociable". El restaurante era bonito, al aire libre y con plantas casi por todas partes, a ti te gustaban las plantas sueles plantar de vez en cuando, tu mamá plantaba con tigo aveces cuando eras un niño. Cuando entraron al lugar unas personas gritaron el nombre de tu hermano, por obvias razones era ahí donde se iban a sentar. Tardaron en notar tu presencia y cuando lo hicieron se presentaron ante ti con algo de pena:

-Lamentó no haberme presentado antes, mi nombre es Víctor. -su cabello era plateado casi rosando a lo blanco, era alto y sentías que aunque se veía un poco intimidante por su altura (ya que debes de admitir eras bastante bajo), era bastante agradable y gentil.

-Hola, mi nombre es Yuuri, un gusto-al decir esto izo una pequeña reverencia. El era diferente al anterior, se ve amable y agradable, y es como se ve, te sentiste menos nervioso al saber que el estaba igual que tú.

-Yurio, es tu turno- el de pelo plateado había llamado a un chico de pelo rubio que había estado callado durante todo este tiempo, tenía una cara de pocos amigos que te alteraba mucho y te puso más nervioso cuando te volteó a ver con esa misma cara, y por más que tratabas de apartar la mirada el solo te observo durante unos minutos para luego soltar palabra.

-¡¿Y quien te crees que eres para obligarme a presentarme, eh?!-supusiste que tenía un mal temperamento pero aún así estabas algo sorprendido de que reaccionara así.-Ademas ese idiota ni siquiera a dicho palabra!! Ni siquiera se su jodido nombre!!-en cuanto acabo de decir aquello Víctor le dio un golpe en la cabeza que hasta a ti te había dolido.

-Después de tantos años y te sigues comportando así, ¿Cuando vas a aprender?-parecía sus padres regañándole así. ¿Quizá lo eran?

-No importa, el siempre a sido de pocas palabras!!-Ben había entrado de nuevo a la conversación para tratar de que dejaran de regañar a Yurio (así recuerdas que lo llamaron).

-Mi nombre es Simon.-soltaste tan de repente que te voltearon a ver como si un mudo hablara de repente, volteaste a ver a Yurio que te miraba con una cara de enojo y sorpresa, no sabias decir muy bien que estaba pensando (aunque tampoco te creías Sherlock Holmes).-Por si querías saberlo.-la respuesta que diste solo le izo enojar mucho mas.

-Bueno, Simon te he visto en las competencias con Ben; pero nunca te he visto competir.-Yuuri al parecer quería cambiar el tema de conversación, y le agradecías por aquello, ya no aguantabas la mirada fulminante del rubio.

-Si, bueno siempre me a gustado patinar; pero nunca e tenido la oportunidad de hacerlo profesionalmente, y Ben siempre me lleva con el a sus competencias para que no deje de ir a las pistas de hielo.

Después de toda esa situación incómoda la conversación siguió su rumbo de manera norma, te sentías en confianza con ellos (aunque dudabas de Yurio algunas veces) y creías que podían llevarse bien. Cuando tenían que irse y Ben estaba despidiéndose de Víctor y Yuuri afuera del restaurante, Yurio se acercó a ti fulminado te con la mirada, y con el tiempo que llevabas conociéndolo ya te habías acostumbrado (un poco solo un poco).

-¿Te vas a ir son al menos presentarte como se debe?-parecía enojado y te veía con un poco de molestia, tú solo te dedicabas a no mirarlo, sabías que si lo hacías empezarías a ponerte nervioso (en parte por que debías admitir que era guapo).

-Ya te había dicho mi nombre.-todavía no te atrevías a verlo a la cara, ¿por que te ponía tan nervioso? No podía ser la ansiedad.

-Escucha idiota!!-cuando dijo eso al fin lo viste a la cara, pensabas que iba a empezar a gritarte de nuevo; pero enseguida se corrigió y calmo-Mira "Niño", los idiotas de haya no dejaran de molestarme hasta que me presente bien contigo asi que agradecería que cooperaras, ¿Quieres?-si algo no te gustaba era que te llamaran niño.

-Mejor escucha tu "¿Quieres?", si tanto quieres presentarte bien conmigo te recomendaría que me hables bien. Además tranquilízate soy una persona tranquila; pero no me vuelvas a llamar "Niño", por lo que se debo de tener tu misma edad!!

Te alejaste de el  para ir con tu hermano e irte lo más rápido posible, no sueles darte por vencido con la gente; pero el era desesperante y no era una persona que digamos muy respetuosa.

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Pasaron algunos días desde la cena y seguías hablando con Yuuri y Víctor, los cuales no dejaban de decirte que le dieras una oportunidad a su "pequeño punk"; debes de aceptar que te estabas sintiendo algo culpable por como lo trataste la última vez. Hoy era el último día que pasarías en Berlín y como no querías desperdiciarlo querías pasar todo el día en la pista de hielo más cercana que encontrarás, ya que no patinabas hacía mucho tiempo.

Caminando unas cuantas calles encontraste una pista enorme y para ganar puntos a su favor estaba casi vacía. Decidiste esperar un poco para que estuviera vacía, no te gustaba que otras personas te vieran patinar (era una de las razones por las que no competías),  cuando estuvo vacía te dispusiste a poner una canción con tu teléfono y empezar a patinar. Elegiste "El Vals del Minuto" por Chopin, te gustaba la canción, podía pasar desde rápida asta parecer una cuna para un niño en menos de un segundo. Tus movimientos eran hermosos y agraciados (era una pena que no compitieras hubieras ganado sin duda muchas competencias) era como ver a un pequeño zorro bailando; aunque si lo piensas de esa manera solo suena gracioso. Nunca repetías los mismos movimientos seguidos, por ponerlo de una manera siempre patinabas una coreografía diferente era lo que le daba encanto. Al momento de hacer un salto una persona grito desde afuera de la pista:

-No mentían cuando me dijeron que sabias patinar, eh?- Yurio....fallaste, te desconcentro y caíste sobre tu tobillo y por si fuera poco no podías levantarte. Supones que se dio cuenta de que de verdad te dolía cuando trataste de levantarte y te resbalaste. Entró a las pista para ayudarte, te levanto y te sentó en una banca para que pudieras quitarte los patines.

-¿Que haces aquí?-directo al punto, así eras tú algunas veces.

-Aquí entrenó, ¿Y tú?-se había sentado contigo y miraba directamente a la pista, como si su mirada estuviera perdida y aun así te aterraba.

-Quise pasar mi último día aquí.

-¿Todo el día? ¿Esa es tu idea de visitar una nueva ciudad?-te había volteado a ver con extrañeza, aunque para ti sonaba bien pasarlo en el hielo.

-Si, dijo no es que conozca la ciudad y Ben esta con su entrenador hoy.-te habías quitado los patines  y puesto los zapatos, te pusiste tu chamarra ya que pensabas descansar un poco. No pudiste evitar verlo a la cara por un momento -"Es lindo cuando no está gritando."-borraste ese pensamiento de tu cabeza al instante y apartaste la mirada.

-Vámonos-jalo tu mano levantándote de la banca y arrastrándote hacia la salida de la pista, sentiste una pequeña punzada en el pie y diste un pequeño alarido y tropezándote- Mierda, lo olvidé tú pie -parecía haberse olvidado de eso.

-¿Como es posible que se te haya olvidado tan rápido algo que tú provocaste?-te ayudo a pararte bien y te izo una palanca para que pudieras caminar y seguirle el paso- ¿He-Hey qué haces?, ¿a donde vamos?¿!Que no ves que me duele el pie?!

-¿Podrías sólo callarte? Te ago un favor imbecil!!.

-Hey!! Yuri, no seas tan rudo con el!!-una chica pelirroja le había gritado desde las gradas al otro lado de la pista, era algo bonita y parecía estar en confianza con el.

-Cállate bruja!!!-cuando dijo esto te soltó por un momento y en un intento de no caerte te agarraste de el, y ahora que lo pensabas mejor se te hacía mejor idea caer al piso que estar un segundo más con el. (Se siente el amor bro :v).

-Que les vaya bien en su cita!! Y tu, el bajito no le tengas miedo que no muerde!!!

Toda esta situación no ayudaba a tu ansiedad. Yurio te llevo a un lugar cerca de la pista, era como un parque y a unos cuantos pasos de ahí había una cafetería, al parecer estaba cansado ya que en cuanto diviso una banca libre pareció correr hacia ella. Se sentaron y tú trataste de pararte para ir a la cafetería y pedir unas cuantas vendas, más en cuanto te paraste te volvió a jalar al asiento.

-¿Que mierdas estás haciendo?

-Voy a la cafetería de haya para pedir vendas-lo miraste como si tu acción no ya fuera obvia.

De inmediato se paró y se dirigió a la cafetería sin ni siquiera voltearte a ver, al cabo de unos minutos regreso y al parecer venía con compañía. Cuando Yurio llegó varias chicas lo siguieron y al ver la pequeña multitud que se había hecho más personas se acercaron. Algunas de las chicas de la multitud gritaban cosas afectuosas hacia el, otras pedían autógrafos y fotos y un pequeño grupo solo trataba de robarle ocasionalmente un abrazo o al menos eso querías creer. Por desgracia en tu intento de pasar desapercibido mientras Yurio trataba de darte las vendas una chica te noto.

-¿Eres su novio?-la pregunta te había tomado un poco por sorpresa-"¿Eso parecemos?¿Es enserio?"- la idea no se te hacía mala, el era guapo y si no tuviera mal temperamento sería perfecto; pero ellas no veían esto.

-Nooo, Yuri tiene novio!!-una de las chicas de la multitud dijo el comentario que empezó la guerra, todas dejaron de ponerle atención al rubio para voltear a verte a ti, te hacían preguntas, se acercaban demasiado  a ti y juras que una de ellas te toco el trasero.

Yurio no aguanto todo esto mucho tiempo y solo te cargo como saco de papas y te saco de ahí. Algunas chicas los siguieron y otras solo pusieron en redes sociales que habían conocido a Yurio. Esta vez te llevo a un lugar sin gente, era una iglesia y aunque no entraron a verla de cerca sabias que era hermosa, tenía adornos dorados y parecía que brillaba con los faroles que se estaban encendiendo. Te sentaste junto con el en los escalones mientras rogabas que no te hubieran tomado fotos a ti.

-¿Te pasa muy seguido?- al final fuiste tú quien rompió el hielo.

-Si, y no sabes cuanto lo odio.

-Entonces no me sorprende que tengas tan mal humor.- aunque esperabas un comentario hiriente de su parte solo escuchaste una risa, una pequeña risa.-¿Por que me estás llevando por la ciudad? El gran patinador Yuri Plisetsky no tiene nada mejor que hacer?.

-De echo, si...pero el viejo de Víctor me dijo que tenía que hablar contigo.

-¿No eres bueno para las palabras verdad?- te estabas haciendo amigo del sarcasmo.-de todas maneras, gracias y disculpa aceptada.

-No te creas mucho pequeña mierda, además no podía ver como te aburrías en esa pista con esa bruja ahí dentro.

-¿Eso fue una broma?.

Debías aceptarlo el era divertido cuando quería y también podía ser lindo también. Se estaba haciendo tarde y las luces se estaban encendiendo tanto en las tiendas alrededor como en los faroles de la pequeña iglesia, no había sido como te imaginabas tu último día en la ciudad pero no fue para nada malo. Yurio te había acompañado a la entrada de tu hotel para que no tuvieras que recorrer todo el camino con tu pie lastimado (aunque ya no te dolía tanto).

-Gracias de nuevo.-no pudiste evitar sonreírle al decir esto, dpero es que estabas realmente agradecido.

-Es cierto lo de los ingleses y sus modales al parecer-más chistes salían de su boca y pensabas que el ya tenía confianza contigo.

-Y de los rusos y su mal humor- aprovechaste que no estaba enojado para darle un pequeño beso en el cachete como agradecimiento y despedida, apartaste la mirada por un segundo mientras el té miraba un poco atónito.

-Tu eres...

-Si, si lo soy.

-Genial por qué ya no sabía si besarte yo primero.- te beso, y no solo te beso el de verdad puso esmero, este chico no era tan inocente como pensabas. Lo estabas besando de vuelta. Besabas a Yuri Plisetsky, y estabas en la gloria.

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Un año, una año es lo que llevabas con el, para algunas personas no será mucho pero teniendo en cuanta el temperamento del rubio era casi imposible tenerlo cerca por más de 1 hora. De verdad estabas enamorado, no podías evitarlo, se te había propuesto antes de que partieras junto con Ben a Londres ya que Yuuri y Víctor le habían dicho si quería  ir a despedirlos al aeropuerto, y vaya que quiso ir. Víctor casi llora cuando vio como se besaban en el aeropuerto por el contrario de Ben que solo quería golpear al más alto de ustedes por besarte con cierto aire de erotismo.

Ben tubo que acostumbrarse a sus muestras de afecto en público, pero que podían decir de verdad no le importaba. Yurio no era la persona más romántica del mundo pero tenía sus detalles, lo malo de todo esto es que dejaste de acompañar a Ben a sus competencias tan seguido ya que tenías que acompañar a Yuri a las de el. Un día Yurio y Ben tuvieron una discusión de más de una hora sobre cómo Yuri te robaba toda la atención. Estabas en el jodido cielo.

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