Perseguida
Una mujer joven de unos 24 años de edad, siendo ya casi media noche era perseguida. Tras ella, un hombre alto caminando y en su rostro se le esboza una sonrisa malévola esperando atraparla.
Logra esconderse en un callejón, respira agitadamente tratando de calmarse y así no ser escuchada por él. Se adentra más en el callejón viendo unas pequeñas cajas así que se dirige a aquellas cajas y se asoma constantemente para ver si él se aparece ahí.
Se sienta y junta sus piernas abrazadolas, se encuentra realmente asustada por lo que vió, queriendo no haberlo visto.
+ Sé que estás aquí, no hay otro lugar a donde puedas correr mujer. -dijo fríamente de manera tranquila-
Se acerca lentamente, muy tranquilo. Ella pensando en qué hacer para poder huir pero no encuentra un camino, está atrapada.
Tn: (Debo salir de aquí) (Tengo mucho miedo de lo que él pueda hacerme) -se pone a ver a su derecha lo que puede encontrar para lanzarle y así huir aunque de huir sus probabilidades son muy bajas. Lo vió matar a alguien de la manera más fría- (Mi celular... ¡Maldición!, está en sonido)
Se había calmado pero aún seguía nerviosa, teme por su vida.
Vive sola, tiene un trabajo estable, se comunica con su madre todos los días en las noches y también con su hermanita.
Pero, precisamente esta noche es que había salido a una reunión con sus amigos pues salió temprano y fue a reunirse con ellos. Había comido bocaditos y bebido gaseosa, todo risas entre ellos pero ya era tarde y debía volver a casa y para hacerla larga el camino ya que la noche era preciosa se encuentra con algo desagradable y es que ve a un hombre matando a otro hombre y por el horror es que emite un sonido y el tipo observa el lugar donde se encuentra ella y corre haciendo que ella se asuste y salga huyendo de ahí sin saber a dónde se estaba dirigiendo. Una vez en el lugar es que él pudo caminar pues allí no hay salida alguna, de alguna forma había conseguido que ella se dirigiese hacia ese lugar sin salida.
De pronto, el celular de ella suena haciendo que se sobresalte que rápidamente saca el celular de su bolsillo de casaca y lo pone en silencio pero contesta y luego lo vuelve a poner en su bolsillo, mira hacia al frente y ve unas piernas que se asusta y alza la vista lentamente que se levanta de inmediato y le lanza la caja pero él lo arroja y ella sale huyendo adentrándose más al callejón habiendo allí una pared muy alta.
+ Estás atrapada, ¿qué harás ahora? -dijo tranquilo y hasta cierto punto amable en su voz siendo irónico-
Tn: ... Por favor, déjame ir, prometo no decir nada, prometo guardarlo pero déjame ir. -decía rogando-
+ ¿Y crees que con dejarte ir estaré tranquilo?
Tn: Ahm... Creo que sí. -dijo nerviosa y sonrió tímida-
+ ¡Estúpida! -gritó enojado-
Se acercó a ella poniendo su mano en la pared, al costado de ella estando muy cerca el uno del otro.
+ Vendrás conmigo quieras o no. -la toma de la muñeca y ella llorando internamente por su vida-
Abre la parte trasera de su auto, aún la tiene agarrada de la muñeca y saca unas cuerdas que le amarra las muñecas pero sus brazos estaban hacia atrás y le amarró las piernas. Cierra la parte de atrás y la carga poniéndola en la parte de copiloto y le pone el cinturón de seguridad. Se sube al auto y llega a su casa, la carga y la baja estando en la puerta para abrirla, ella camina muy lento, este cierra la puerta y le pone seguro. Antes de cargarla y de llevarla arriba rebusca el bolsillo de ella y ve que su celular está en llamada encendida así que corta la llamada y avienta el celular que al caer se rompe en pedazos y ella llora más internamente ya que todavía no había terminado de pagarlo.
Ya arriba es que este la avienta en la cama y se quita la casaca y luego el polo haciendo que ella abra mucho sus ojos pensando en que él la va a violar sin siquiera poder defenderse. Se quita el pantalón y luego su boxer que es ahí que ella cierra sus ojos temiendo lo peor, él al verla así es que esboza una sonrisa y se mete al baño. Ella, sintiendo todo tranquilo es que abre sus ojos lentamente y no lo ve que la hace suspirar tranquila solo unos momentos pues está en una situación crítica. Está tratando de quitarse las cuerdas pero le duele, él las ajustó bien y luego escucha algo y es que él se está bañando.
Él acaba y se seca para luego ponerse la toalla alrededor de la cintura y al salir es cuando la ve que ella se había quitado las cuerdas de las muñecas y que acababa de quitarse las cuerdas de abajo y ambos se miran que es que ella sale huyendo de ahí que él va tras ella. Baja las escaleras a toda prisa y se adentra a la casa ya que él le había puesto seguro a la puerta, estando ambos en la cocina es que ella saca el cuchillo y lo agarra amenazando lo.
+ ¿Acaso has apuñalado a alguien? -dijo muy sereno acercándose a ella-
Tn: ... Lo haré si te me acercas, no dudaré en hacerlo.
+ Jajaja quiero ver eso.
Tn: No permitiré que me hagas daño.
+ Entonces, si prefieres morir a que te haga daño, ¿por qué no mejor te ayudo?
Él se acerca rápido a ella que no le da tiempo a siquiera defenderse que le quita el cuchillo y lo arroga lejos. Le aprieta las mejillas enojado y la pone hacia adelante que la noquea.
Ella despierta y ve unas cadenas en sus tobillos y atada a la cama, solo tiene permitido asomarse a la puerta más no salir de ahí.
Tn: (Mamá... Hermana...) -de pronto, se revisa y se ve que está bien, su ropa está puesta y tal como ella lo recuerda así que supone que él no le hizo nada. Ve que la habitación está oscura así que se asoma a lo que es una ventana pero hay madera que deja ver un pequeño agujero a través de él y es que ve un patio no tan grande con una cerca alta y se da cuenta que está en el primer piso. Se asusta cuando oye la puerta detrás de ella-
+ Al fin despiertas.
Tn: S-sí.
+ Quieres irte de aquí sin decir nada. -ella asiente rápidamente- Está bien... Pero, a cambio debes darme algo. No estás tan mal después de todo. -ella se agacha y se cubre haciendo que él ría- Descuida, no vi tu cuerpo mientras estabas inconsciente.
Tn: ¿Quién eres? ¿Por qué mataste a ese hombre?
+ En esta situación y todavía preguntas.
Tn: Si vas a matarme, al menos debería saberlo.
+ ¿Y quien ha dicho que voy a matarte?
Tn: ¿Vas a torturarme?
+ ¿Debería hacerlo? -ella traga saliba de los nervios- Jajaja no haré eso, jugaré contigo. Dime tu nombre.
Tn: ¿Por qué? ¿Qué harás? ¡Espera! No voy a darte mi nombre, buscarás todo sobre mí para así amenazarme.
+ Que inteligente. Échate en la cama. -ella hace caso y mirándolo fijamente-
Se acerca a ella y hace que se extienda para luego ponerse encima de ella y ella le dice que él había dicho que no le haría nada.
+ No puedo creer que te lo hayas creído. -esboza una sonrisa-
Tn: ¿Qué? Creí que eras un hombre de palabra.
+ Ya veo, quieres jugar.
Tn: (Ups, se dió cuenta) Está bien, has lo que quieras pero déjame ir, te diré todo pero déjame ir. Verás que no diré nada. -dijo muy firme-
La retuvo una semana ahí encerrada, su familia preocupada por ella por el susurro que habían escuchado a través del celular de ella, querían poner una denuncia ese mismo día pero debían esperar así que al día siguiente de haber escuchado eso, en la noche es que Tn se comunicó con su madre haciéndole saber que no había pasado nada y a raíz de eso, había perdido su trabajo. Ella vive a dos horas de dónde vive su madre y hermanita.
Tras esa semana, él va junto a ella a su departamento y examina todo a lo que ella lo observa nerviosa. No la pasó tan mal allí encerrada, ella pensando lo peor y no pasó nada.
+ De acuerdo, te dejaré aquí. Te voy a vigilar y pobre de ti si te cambias de lugar. Vendré todas las noches a las 21h y quiero encontrarte aquí. Veré qué haré contigo, no pienso matarte.
Tn: De acuerdo. -dijo nerviosa y él se retira- Uff estoy a salvo, pero creo que tenerme así sí que es una gran tortura, yo sin saber cuándo será mi fin y ahora por culpa de él perdí mi trabajo.
Había pasado ya dos meses en que él iba a visitarla y se había quedado hasta medianoche, él pedía que lo alimente y así lo hacía haciendo que ella pruebe primero para ver si metía algo en la comida o bebida.
Un día, ella se siente mal así que va a la clínica y se sorprende de verlo a su salida tras haber sido atendida.
Tn: Tú... ¿Trabajas aquí? -él sonríe ante ella y la lleva a su consultorio empujándola que casi se cae- No sabía que trabajas aquí y deberías tener cuidado. -analiza el lugar y en una pequeña placa dice el nombre- Trafalgar Law, ese es tu nombre. Espera, si trabajas aquí, ¿qué hacías asesinando a ese hombre? Si trabajas aquí es porque salvas vidas, ¿no? ¿Por qué las arrebatas también?
Law: ¿Acaso eso debería importarte? No te metas o ya verás.
Tn: Estás en mis manos. -se armó de valor para decir eso pues está en un lugar público-
Law: Ay esta tonta, ¿crees que así estoy en tus manos? -ella asiente- Te equivocas, yo no dejo rastro alguno y contigo he sido blando. Soy médico, sé cómo funciona el cuerpo, puedo matarte haciéndolo ver como un suicidio así tu muerte quedará impune, creerán que te suicidaste a pesar de no tener tendencia suicida. -eso la hizo palidecer- Ahora sí cambia todo, ¿verdad?
Tn: Oye, Trafalgar, eres médico, no puedes matar gente, tú las salvas, sí, las salvas. -dijo nerviosa y algo de tartamudeo mientras se acerca a él- Digo, escogiste esta profesión, amas esto, ¿cierto? Los doctores, enfermeras y enfermeros son personas de profesión que se dedican a salvar vidas y no a quitarlas, puede que una que otra se les haya ido de las manos y han muerto pero ustedes hacen todo lo posible. Creo en ustedes.
Law: Que lindo de tu parte. -siendo irónico así que de su bata saca un bisturí y agarra el brazo de ella y acerca la punta de este hacia el brazo de ella pero ella no trata de zafarse, solo observa- ¿Acaso no vas a intentar sacar tu brazo?
Tn: Aquí eres médico, no puedes hacer algo así. -dijo tranquila- Supongo que va en contra de ti.
Él se molesta y aleja el brazo de ella molesto guardando su bisturí.
Tn: ¿Esa cosa es tu arma para cuando sales de aquí? -la observa muy serio- Solo pido saber por qué mataste a ese hombre, estaba suplicando que no lo hicieras pero parecías que disfrutabas. Sabes que no iré a ningún lado, sabes dónde encontrarme, estoy segura que averiguaste todo de mí o está en proceso mi información.
Law: Creo que debí haberme deshecho de ti cuando tuve la oportunidad.
Tn: Creo que supiste que no era mala y por eso no me hiciste nada, y supongo que ese tipo sí lo era. No debiste matarlo, deberías haberlo denunciado al menos.
Law: La justicia suele ser una basura la gran mayor parte del tiempo y fue un encargo, ese malnacido mató a muchas personas, yo solo le hice el favor, finalmente muerto. ¿Contenta?
Tn: ... Entiendo que a veces la justicia no hace cosas del todo bien pero estaría bien que vaya preso por lo que hizo y no que tú lo hicieras.
Law: ¿Eres estúpida acaso? La justicia no iba a poder con él y no sabes nada de él así que cierra esa boca.
Tn: A pues, lo siento señor si no entendí, disculpe por entrometerme en donde no me llaman.
Law: Que bueno que entiendes, ahora lárgate de aquí.
Tn: ¿Acaso esta clínica es tuya?
Law: Así es, soy dueño de esta clínica.
Tn: ¿Eh? Este... ¡Ah, ya sé! Haces ambas cosas.
Law: Metete en tus asuntos. Así que ya sabes, te vigilo.
Se acerca a ella demasiado haciéndola retroceder hasta que su espalda toca la pared y lo mira algo nerviosa.
Law: Pensándolo bien, mejor me divierto contigo.
Tn: (Ay, creo que ya fui) No soy un juguete.
Law: ¿Y eso qué? Estás viva por mí.
Tn: No debiste hacerlo, debiste matarme. -lo provoca-
Law: Estás nerviosa. -le toca la cara, pone sus manos en su mejilla y baja lentamente por su cuello, hombro y brazo para luego agarrarla del cuello pero no pone presión-
Tn: Hay gente aquí.
Law: Soy el dueño, ¿lo olvidaste acaso?
Tn: Hmm... Ah, ¡te gusto! -se suelta bruscamente de él- ¿Por qué otra razón me dejarías viva? -se aleja de él-
Law: ... -él encuentra divertido esto-
Tn: Puedo conocerte más y tú dejar mi cuello en paz.
Law: Ok, ok. Dejaré esto por la paz.
Tn: No pareces tan malo aquí a comparación de lo que vi la otra vez... Realmente me asustaste.
Law: Soy ambos.
Tn: Quiero ver este Trafalgar, solo este.
Law: Depende de ti.
Iba a agregar más pero alguien toca la puerta y él le dice que guarde silencio. Abre y es la gran doctora, este la invita a pasar.
Doctora: Oh, estás ocupado con tu novia, sabes que hay otro lugar a donde puedes ir jajaja. -la joven se sonrojó por aquello y se voltea pero a Law le dio igual.
Law: En unos minutos acaba mi turno.
Doctora: Ok. -le dice algunas cosas en los cuales Tn está presente pues no hay en no ocultarle. Piensa que es la novia del doctor- Bueno, me retiro. -se va-
Law: Hablando de cosas, vayamos a mi casa, puesto que ya lo conoces y deberás acceder a mí.
Tn: No estoy obligada.
Law: Y a mí qué.
Tn: ... -molesta- No soy objeto. Consiguete otra.
Law: ¿Qué es lo que está pensando esa cabeza tuya? Mira, si piensas que es para acostarme contigo te digo que estás equivocada, no soy así, no obligo a las mujeres a que hagan eso. Es depende de ellas.
Tn: ... Ah, bueno... (¿Cómo sé que dice la verdad? Aunque parece sincero con esas palabras)
Law: Al parecer te gusta y piensas en ello con frecuencia.
Tn: ¿Qu-qué? No es así, es lo normal pensar así en esta situación y lo que está pasando hoy en día. Pero me doy cuenta que al parecer no haces ese tipo de cosas pero sí matar gente.
Law: Matar gente... Solo los que no me agradan y por encargo, nadie sabe mi nombre, soy muy cuidadoso.
Tn: Pues si quieres que esté contigo cambiarás.
Law: Ja, termino aquí y nos vamos.
Tn: Te espero. -va a sentarse en el pequeño sillón-
FIN.
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