Había vuelto a ocurrir. Una presentación tensa, un invitado difícil y las constantes amenazas de su directora habían sido el cóctel perfecto para sacar a Nadja Chamack de sus cabales y hacer que sus emociones más negativas estuvieran a flor de piel.

Para Hawk Moth aquello era una invitación a carta abierta, así que sin dudarlo un solo momento envío a su violáceo emisario en busca de su antigua victima.

Prime Queen se había adueñado del estudio dos de TVi y tenia a todo el personal retenido ahí, a la espera de que los héroes hicieran su aparición.

Ladybug y Chat Noir para ese momento ya habían llegado a la sede de TVi y raudos avanzaban por los pasillos en busca de la villana. Al llegar frente a las puertas del estudio se encontraron con que estas estaban completamente bloqueadas, por mucho que las embistieran estas no se movían ni un milímetro.

- ¿Mi Lady? – inquirió Chat Noir, esperando que su compañera ya tuviera algún plan que les permitiera entrar y derrotar a Prime Queen.

- Lo único que podemos hacer es usar tu cataclysm para abrirnos paso y una vez adentro lanzarnos rápidamente contra ella para tratar de liberar al akuma. – sin estar convencida del todo de ese plan, que mas bien parecía un ataque a la desesperada en lugar de una estrategia bien planeada, dejo que su compañero actuara.

Chat Noir retrocedió un par de pasos e invocando su poder se lanzó contra la puerta, la cual se desintegró al contacto de la mano del héroe. Al ver el camino despejado ambos paladines corrieron hacia el interior dispuestos a plantar cara a la villana y liberar a los rehenes.

En un descuido de principiantes no vieron la gran pantalla que había a sus pies, que cuando quisieron darse cuenta esta se iluminó con un potente haz de luz para luego engullirlos. Habían caído sobre blando y una completa oscuridad los envolvía, aquello que amortiguó su caída era de una textura granulosa y escapaba entre sus dedos cada vez que tomaban un puñado, frente a ellos una pequeña pantalla de unas quince pulgadas comenzó a parpadear y ahí apareció la imagen de su rival.

- Hola Ladybug y Chat Noir, - con una sonrisa de satisfacción saludaba a los héroes – volvemos a vernos.

- Prime Queen, libéranos. Sabes que todo esto no esta bien, Hawk Moth te esta controlado. – intentaba la heroína hacer que entrara en razón.

- Ladybug, tenemos una entrevista pendiente, ¿recuerdas? – dejando de lado las palabras de la heroína se centro en su cometido, aquel que aun le carcomía al no haber obtenido su exclusiva.            

- ¿De que esta hablando mi Lady? – Chat Noir miraba desconcertado a su compañera.

- Parece que el gatito tampoco lo recuerda. Es muy simple, no saldrán de aquí hasta que obtenga mi exclusiva. – sentenció severa – Y no piensen en escapar ya que no podrán. – indicó con una taimada sonrisa.

Varias luces se encendieron mostrando una pequeña habitación de dos por dos y repleta hasta la mitad de arena, la cual caía por cuatro pequeños conductos colocados en cada esquina. Varias cámaras ubicadas por las paredes y el techo los enfocaban cortantemente, si ellos se movían las cámaras los seguían.

- Como pueden ver puedo cubrir todos sus ángulos, así que comenzamos. ¿Son ustedes dos algo más que compañeros?, - miraba atenta la expresión de sorpresa de los héroes – pueden tomarse su tiempo en responder, pero no demasiado ya que la arena pronto llenara la habitación.

- Mi Lady, ¿Qué hacemos?, no puedo usar mi cataclysm y tengo menos de tres minutos antes de transformarme.

Ladybug observaba preocupada cada rincón de aquel reducido recinto buscando algún punto por donde escapar pero no encontraba nada. En un rápido movimiento entrelazo su mano con la Chat Noir y las levantó hacia la pequeña pantalla.

- Muy bien Prime Queen. No podemos engañarte, Chat Noir y yo nos…nos amamos. – al igual que la primera vez le costó pronunciar aquellas palabras pero no tenía otra opción si querían salir de ahí y derrotarla.

- No Ladybug, esta vez no me engañaras. – la miró con intensidad y mostrando una sonrisa triunfal – Quiero algo más, ¡Todo París quiere algo más!.

-  ¿Mi Lady?. – el héroe le mostraba preocupado las marcas de su anillo.

- Esto es una tontería. – farfulló antes de lanzar su yoyó al aire e invocar su lucky charm .

Ante sus ojos apareció un pequeño objeto el cual tomó entre sus manos. Al verlo con mas detenimiento se dio cuenta de lo que era y una expresión de espanto se mostró en su rostro mientras que sus mejillas se cubrían de un tenue rojo.

- Mi Lady, ¿Esta todo bien?.

Dando un profundo respiró se colocó frente a su compañero y le mostró lo que el lucky charm le había dado. Las mejillas del héroe rápidamente adquirieron un profundo rubor y una gran sonrisa se dibujaba en sus labios al ver el pequeño lápiz labial.

- No te hagas ideas Chat. Será pequeño y solo para poder salir de aquí. ¿Esta claro?. – con toda seriedad advertía a su compañero.

- Muy bien Prime Queen, si quieres una prueba, aquí esta.

Apoyándose en el fornido pecho del héroe se puso de puntillas y ligeramente alcanzó a rozar sus labios. Lo que no se esperaba es que Chat Noir la abrazara y con toda temeridad profundizara en el beso.

Ladybug quiso separarse pero la tersura de aquellos dulces labios y el agradable calor que de su pecho comenzaba a emanar la dejó indefensa, al punto de no importarle ni el lugar, ni el tiempo. Correspondió al abrazo pasando sus finos brazos por el torso el héroe, hubo un momento en que sus piernas llegaron a flaquear que si no hubiera sido por el cariñoso agarre de Chat Noir habría terminado sobre la arena.

Poco a poco se separaron, anhelantes de aire, ruborizados, él feliz y ella sorprendida por su propia reacción.

- Ya…ya lo has visto Prime Queen, ahora sácanos de aquí. – exigía la heroína aun falta de aire.

Exultante la villana miraba como su indicador de audiencia llegaba a lo más alto, olvidándose de las palabras de Hawk Moth se dirigió hacia su publico.

- Ya lo han visto queridos televidentes. Ladybug y Chat Noir son…

- ¡¡ESPERA!! – sin ningún reparó Chat Noir interrumpió a su captora quien lo miraba desconcertada.

- Aquellas cámaras estaban descentradas, - señalaba hacia dos dispositivos en el techo – deberíamos de repetirlo por si alguien aun no esta convencido.

- ¡¡CHAT!! – se quejaba mas abrumada que desconcertada.

- Lo siento bichito, es por el plan y además al público hay que darle lo que pide. – sonriente le hacía un guiño.

FIN

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