Bill estaba en frente de su ex, quien a duras penas evitaba sonreir, ella sabia de la relación que tenia el castaño y Bill, ella odiaba al castaño a muerte.

-Asique, como va tu vida Bill? – Dijo sacarronamente la chica de esbelta figura.

-No te interesa, ¿Para que me llamaste?

-Y yo que queria ser linda contigo – Dijo dramatica antes de ver al interior de su auto para seguidamente volver con el rubio – Pero basta de atrasos, vengo a darte una segunda oportunidad – El rubio alzó una ceja un tanto convencido de lo que pasaria a continuación – Volvamos a casarnos amor.

No habia que pensarlo dos veces para saber la respuesta.

-No.

-Disculpa?

-¿Qué estas sorda? Dije que no, ahora largo. – Dijo molesto dispuesto a irse hasta que su ex lo detuvo del brazo.

-Vamos, he cambiado, todo será diferente ahora ¡Solo tienes que firmar los papeles!

-¡¿Qué no entiendes?! ¡¡Te dije que no maldita ramera!!

-¡¡¿QUÉ TIENE DIPPER QUE YO NO!!?

-¡¡ÉL NO ESTÁ LOCO COMO TÚ MABEL!!

La castaña de ojos avellana lo miraba mas que molesta, pero se lo merecia ella hizo llorar a Dipper cuando eran niños, ella se merecia el odio del rubio, se merecia todo lo malo que le estaba pasando.

Como olvidar el llanto de Dipper al ser maltratado por sus padres y hermana; como olvidar la veces que Dipper huia de casa para estar en sus brazos y sentir aunque sea un poco de amor unos miseros segundos; como olvidar las veces que el rubio tuvo que presenciar como el castaño se cortaba o hasta intentaba ahorcarse con sus corbatas cuando el no estaba para cuidarlo.

Tantos años de odio y dolor se dispersaron cuando Bill se hartó del trato de los padres y los denunció haciendo que tanto Dipper como Mabel a sus 12 y 20 años se quedaran a vivir con Bill, Mabel siendo la mayor con 20 y Dipper el menor con 12, Bill estaba a sus 20 también y ya habia terminado la universidad a temprana edad; todo parecia en orden, pero cuando el rubio salia al trabajo Mabel se encargaba que ese hermoso pedazo de nube se volviera un infierno para el castaño, algo que Bill aun ni se enteraba.

-¡¡ERES UN INGRATO BILL!! ¡Te arrepentiras de estar con esa escoria que es mi hermano!

-Creeme, ya estaba arrepiento de haberme casado contigo antes de haber aceptado en el altar. – Sin más se encaminó a su auto dandole la espalda a la castaña.

La antes mencionada no aceptaria tal respuesta, asique sin pensarlo fue a su auto y sacó el rebolver que tenia escondido en la guantera, y sin siquiera parpadear le disparó a Bill.

La bala habia dado en la pierna derecha del rubio haciendo que cayera de rodillas, sangrando y gritando ante el dolor de la herida a quema ropa.

Mabel satisfecha fue con el rubio a paso lento dandole la lamentable esperanza de aun poder huir e ir con su dulce castaño para disculparse, más sin embargo eso no parecia estar en los planes del destino; mientras se arrastraba a su auto Mabel lo alcanzó y lo detuvo pisandole la pierna herida; sonriente; alegre; apunta el arma a la cabeza del rubio que yacia a sus pies adolorido y pidiendo piedad con la mirada, tan solo pensando en el hermoso castaño que ha de estarlo esperando en casa; preocupado; desesperado; con los brazos abiertos esperando verlo a traves del humbral de la puerta con una sonrisa que lo haga sentir seguro como cuando era pequeño y le curaba las heridas que se encontraban en su bella piel de porcelana, heridas que se encargó de borrar con años de dulzura y amor que solo el rubio podia darle.

Viendo el cañon siendo apuntado a su cabeza susurra unas ultimas palabras antes de no volver a despertar.

-Podras quitarme la vida, pero el amor que nos une a tu hermano y a mi es inmortal, eso es algo que no nos podras quitar Mabel, tenlo en la mente maldita.

-Conmovedor, que lastima que Dipper no podra reconocerte.

Antes de oir el disparo del cañon del arma, recordó los ultimos momentos de dolor del castaño, el momento en que llegó a casa, notando lo silenciosa que estaba, fue a la cocina encontrando el cuerpo golpeado y maltrato del castaño en una esquina totalmente inconsciente, preocupado soltó sus cosas y llamó a emergencias, los paramedicos llegaron lo antes posible llevandose el cuerpo, el rubio cuando fue al hospital no lo dejaron pasar a la habitación por ser sospechoso.

Los policias le interrogaron queriendo escuchar alguna confesión, más sin embargo se dieron cuenta que el rubio no podria haber hecho tal cosa, pero las apariencias engañan, para confirmar su inocencia le mostraron fotos de Dipper, en todas ellas estaban varios angulos del castaño, su cuerpo estaba lleno de cicatrices, cortes, golpes, raspones, algunas heridas eran díficiles de saber como fueron causadas, ante la imagen Bill quedó en shock, el aire le faltaba y sentia desmayarse, se rompió y sin poder soportarlo más vomitó en la sala de interrogación del asco de persona que se sentia, se sentia sucio y marginado por haber permitido tal atrosidad; ciento cuarenta, ciento cuarenta cicatrices estaban en el cuerpo del pequeño niño de apenas sus cumplidos 13 años, algunas aun no cicatrizaban, otras llevaban meses ahí, era algo que el rubio no podia soportar.

Encontraron a Mabel en un centro comercial, parecia neutra a la situación, cuando la interrogaron era obvio que ella habia sido la causante de tal horrendo abuso al menor, cuando despertó el pequeño castaño lo primero que vió fueron las maquinas que estaban en la habitaión, al verlo despierto el rubio no resistió más y lo abrazó con todas sus fuerzas evitando dañarlo más de lo que estaba dañado.

La castaña habia resibido cuatro años por abuso infantil, una victoria agridulce para el rubio ya que deseaba con todas sus fuerzas que se muriera la castaña, el dolor fue mayor para la castaña quien tuvo que firmar a duras penas los papeles de divorcio, el rubio estaba felíz de ello y, tras darle de alta al castaño, lo llevó a un lugar mejor lejos de la castaña para comenzar desde cero con Dipper y tener una mejor vida juntos.

La bala atravesó su craneo, matandolo al instante. La de ojos avellana no estaba satisfecha con esto y le disparó otras 18 veces hasta que se quedó sin balas, el cuerpo estaba casí irreconocible, sonriente dejó caer el arma y se fue escuchando las sirenas de las patrullas policiales de lejos.

Habia matado a su ex y dañado por ultima vez a su hermano, y aunque estaba tras las rejas estaba feliz de haberse deshecho de toda la felicidad que contenia su hermano. Ella estaba loca, ella pensaba que solo su persona podia tener felicidad y por eso maltrataba a su hermano con tal de verlo triste, desahogaba su tristeza e ira en él con tal de ser feliz todo el tiempo, siendo el menor el que pagara en su lugar, pero no logró su cometido.

Las almas de Dipper Pines y Bill Cipher siempre estarán conectadas por el sincero amor que se tenian y que aun tienen, no importa si uno está en el infierno y el otro en el cielo, siempre estarán juntos aun si el destino no lo quiere.

La castaña estaba sufriendo por eso, le dieron una cucharada de su propia medicina despues de años de haber implando dolor en miles de almas inocentes.

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Ya pagué mi deuda :v