Capítulo 23
-¿A él?- preguntó Peter -¡No vino con el auto!
-¡Mierda!- grité -¡No importa, llámalo, ya, llámalo!
(Bruno):
-¡Papá! ¡Papá!- escuché a lo lejos la voz de Peter -¡Tienes que venir!- dijo al acercarse a mí
-¿Qué pasó?
-Mi mamá...- respiró -Mi mamá va a dar a luz
Corrí desesperado a la casa, entré tumbando la puerta y la vi sentada en el mueble, quejándose entre llantos.
-¡Bruno!- gritó -Por favor, ayúdame
Me acerqué a ella y tomé su mano, ella la apretó con todas sus fuerzas.
-Tranquila, llamaré a Phil- marqué su número
-¿Aló?- dijo al contestar
-¡Phil, necesito que vengas acá ahora mismo!- grité
-Allá, ¿A dónde?
-¡Sólo rastrea mi celular y trae una ambulancia lo más rápido que puedas!- colgué -Tranquila _______, ya viene una ambulancia, ¿podrás aguantar?
-Creo que no- apretó mi mano y soltó un gran gemido -Nunca llegarán a tiempo...- respiró -Voy a dar a luz aquí
-¿Estás loca? ¡Yo no sé de eso!
-¡Yo peor! Pero cuando nacieron Peter y Pauleth lo hiciste increíble, sé que podrás hacerlo, por favor- se le quebró la voz
-Lo haré- limpié el sudor de su cara y besé su frente -Peter, vayan los dos a su habitación- ambos obedecieron -Espérame aquí- le dije y corrí a su habitación a ordenar varias cosas: toallas, agua, guantes y una tijera
-¡Bruno, apúrate!
Bajé corriendo, la tomé en brazos, estaba demasiado pesada, pero no me rendiría.
Llegué al fin y la recosté en la cama, acomodándola en las almohadas. Le quité su interior y levanté un poco su vestido.
-Ok...- dijo respirando -Voy a comenzar
-¡No espera! ¿Cómo sabemos eso de la dilatación?
-¡No me importa Bruno, no soporto más!
-Debemos esperar ______, quien sabe qué le pase a la bebé o a ti
-Ya no lo soporto- dijo rompiendo en llanto
-Tranquila, escúchame- acaricié su mejilla -Todo saldrá bien, ¿sí? Sólo debemos esperar un poco para estar seguros. Eres muy fuerte ________, puedes aguantar hasta que llegue la ambulancia- ella asintió
-Siéntate a mi lado- lo hice y la abracé, tomé su mano y con la otra acaricié lentamente su vientre
-Respira, tranquila
--------------------1 hora después-----------------
(Narrador omnisciente):
-¡¿Cuánto tiempo más se van a tardar?!- chilló ______
Desde hace una hora _______ no dejaba de quejarse y gritar, Bruno se sentía fatal al verla así, estaba desesperado, Phil y la ambulancia debían haber llegado hace algunos minutos; si hay algo que él odia es ver a _______ sufriendo. A cada minuto llamaba a su amigo, pero éste le respondía que ya casi llegaba, y que su tardanza se debía al gran tráfico que había en la autopista.
-Sólo espera un poquito más- Bruno intentó calmar a _______
-Ya no puedo, nunca llegarán a tiempo, necesito...
________ fue interrumpida ante la repentina urgencia de pujar, soltó un fuerte grito, apretó con fuerza la mano de Bruno y los dientes.
-¿Qué pasa?- le preguntó asustado debido a que se sorprendió de lo que _______ comenzó a hacer
-No lo sé, sentí la urgencia de pujar, creo que ya es hora
-¿Estás segura?- los nervios se apoderaron de Bruno, tenía miedo, mucho miedo
-¡Sí! ¡Siento que quiere salir!
-Ok...- Bruno se colocó delante de _______, era ahora o nunca
(Bruno):
-Dame tu mano, por favor
-Pero debo...
-¡Dámela!- su fuerte grito me interrumpió
Me acerqué a ella y tomé su mano.
-Vamos, ahora _______, hazlo- tomó aire y comenzó a pujar con todas sus fuerzas mientras gritaba y apretaba mi mano, parecía que en algún momento iba a explotar
Tras varios segundos, dejó de hacerlo.
-Tú puedes hacerlo, vamos respira, con calma- le susurraba al oído y escuché un sollozo de su parte -Calma mi vida, no llores
Así continuó haciéndolo por unos minutos más, pero nada de nada.
-¡Bruno ya no puedo, ya no puedo! Dios me quiero mori...- no pudo seguir hablando, ya que la interrumpí con un suave beso
Disfruté cada segundo de ese beso, ella lo correspondía, lo cual me encantaba, ya que al parecer aún siente algo por mí.
Me sentía vivo de nuevo, un calor se apoderó de mi cuerpo, nuestras lenguas jugueteaban a un ritmo lento, podía sentir su respiración chocar contra mi boca.
Quería gritar de felicidad, pero prefiero seguir saboreando esos labios que no he probado en 5 meses. Espero que volvamos, es lo único que quiero.
Se retiró lentamente de mí, mirándome a los ojos, un poco asombrada.
-¿Mejor?- le pregunté y ella asintió con la cabeza -Nunca digas que no puedes, ahora trae a la vida a Romi- volvió a hacerlo y yo limpié su sudor con un pañuelo -Piensa en lo bella que será, piensa en su primer día de escuela, piensa en que será tierna y hermosa como tú
-¡Bruno!... ¡YA VIENE!- gritó
En un parpadeo ya estaba en frente de ella, era verdad, la cabeza de la bebé casi estaba afuera.
-Hazlo una vez más, vamos ________, tú puedes- lo hizo mientras apretaba las sabanas con sus manos -Un poco más, eres excelente, vamos, ya casi
Me coloqué unos guantes mientras _______ seguía haciendo lo suyo, tomé delicadamente la cabeza de mi hija y la saqué soltando un grito de victoria.
-¡Lo hiciste!- chillé y ella cayó rendida en las almohadas
Ya la tenía en brazos, era la cosa más preciosa del mundo, tan tierna y tan frágil. No lloraba, sólo hacía un leve sonido que parecía un gemido.
Le di una leve palmadita en su trasero y Romi comenzó a llorar.
Agarré unas tijeras y corté el cordón umbilical; fui al baño que había en la habitación y la bañé delicadamente, con agua a temperatura ambiente, admirando lo linda que era. Rápidamente, la envolví en una toalla. Me acerqué a _______, acostándome a su lado y ambos la contemplamos.
-Es hermosa- dijo ella llorando y se la di para que la tome en brazos -Hola bebé, hola- la abrazó y lloró aún más fuerte, yo también estaba llorando, giró su cabeza y me miró -Gracias Bruno, gracias- le sonreí aceptando sus agradecimiento
Acaricié la cabeza de mi hija y luego miré a ______. Ambos nos sonreíamos, creo que éste es el mejor momento que he pasado en toda mi vida con ella. Nunca creí que traería a la vida a mi hija.
______ bajó la mirada hacia mi pequeña, pero yo tomé su mentón, haciendo que me mirara y en menos de un parpadeo junté sus labios con los míos en un delicioso beso.
Después de varios segundos, ambos nos quedamos sin respiración, por lo que nos separamos.
-Eso no hacen los amigos- dijo sonriéndome
-Al diablo con esta amistad- volví a besar sus labios
-Te... amo- habló con dificultad y sentí que el corazón se me paralizó -Bruno... te... te amo
La miré y me di cuenta de que sus ojos estaban cerrados.
-______- la sacudí -No, no, no; no hagas esto por favor- me acerqué a su pecho, no respiraba -¡Mierda!- grité y tomé a mi hija para dejarla en la cama
De pronto, escuché la puerta principal abrirse.
-¡Bruno, ¿Estás aquí?!- era Phil, gracias al cielo
-¡Phil corre, estoy arriba!- grité y de inmediato se escucharon varios pasos
La puerta se abrió y vi a varios paramédicos entrar.
-¡Dios mío!- gritó Phil
Los paramédicos se acercaron, tomaron a Romi en brazos e hicieron lo mismo con _______, para así llevarla a la ambulancia.
-¡No respira, ayúdenla por favor!- les grité algo alborotado
-¡¿En serio hiciste eso?!- me preguntó Phil asombrado
-¡No tenía más remedio! ¡Aparte, nunca llegaste!
-¡Como si esta casa estuviera en la esquina de mi casa!- me gritó
-Chicos, ¿Van a pelear por esto o por quién irá en la ambulancia?- nos dijo un paramédico
-¡Yo voy!- grité y bajé corriendo las escaleras
Me subí a la ambulancia y me senté al lado de ella. Traía una máscara de oxígeno, estaba muy pálida.
-No vayas a dejarme, no de nuevo, por favor- le hablé llorando, mientras tomaba su mano
Si algo le pasa, no me lo perdonaría nunca.
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