————-««

Los días iban pasando, la fiebre alta en Jacob mantenía preocupada a la mente de la albina, para no recordar su exilio y lo demás. Solo se mantenía firme en cuidar entre escalofrios y sofoques adoloridos al pequeño Black, quien lloriqueaba por ver a Bella. Tenía alucinaciones.

Era lo peor de lo peor, pero allí estaban ellos como familia, sabían que las cosas empezarían a complicarse. En las veces que la fiebre menguaba la batalla en el cuerpo de jake con la paz, Kuarahy y Billy se encontraban revueltos en la cama hablando de las posibilidades a futuro hasta que el último cayera en el mundo onírico y fantasioso.

Por culpa de la muerte de Bella, las emociones que pesaban y eran demasiadas para el joven, quien solo fingía ante la gran felicidad de su padre al escuchar que Jared bromeaba con ellos diciendo: {¿Que se siente tener a una futura madrasta?, ¿ahora tendrás que teñirte el pelo para parecerle? ¿De verdadestas de acuerdo con todo esto?}

Mientras que Jared cuidaba al pequeño Black debido aque Billy y Kuarahy hablaban de como arreglar algunos líos que empezaban a cruzar sus fronteras. Cada día aparecía una noticia mas de animales atacando a campistas.

Pero Kuarahy percibía que no eran esas cuestiones. No eran arañazos de animales lo que encontraba en el lugar ocurrido. Con ayuda de Sam y los demás sabían que podría tratarse de vampiros nómadas. Tan solo tener todo eso en mente la tensaba pero su mirada fue parpadeando hasta enfocar su mirada en las piernas ortopédicas puestas en un rincón de la habitación de Billy.

Desde aquel problema de sentimientos, y su depresión suicida al buscar su muerte frente a Sam. Billy no había dejado que se marche a su hogar con el aquelarre Denali. No quería perderla de vista, sabía que si se iba, este iría a donde fuera necesario para cuidarla.

Además que debían dar la noticia de su compromiso. Perocon todo lo sucedido, les daba las preocupaciones el cambio y las matanzas o desapariciones.

—Rahy.

—¿Uh?—preguntó volviendo a la realidad, pestañeando un poco pero no veía por ningun lado a Billy.

Hasta que sintió un beso en su hombro desnudo, y luego en su cuello en la parte izquierda, dejando que esas pequeñas caricias la tranquilizaran y erizaran su ser. La calidez de su tua cantante con esos besos desprevenidos eran lo que mas empezaba a encantarle. Por lo que tan solo deja caer lentamente su cabeza sobre el lado derecho, mientras suelta un suspiro mas cuando percibe una ligera mordida en su lobulo, soltando un gemido de protesta.

—Ngh... ~ Billy —protesta con la voz ida.

—Estas muy tensa, y lo comprendo, pero, prefiero mil veces que estes asi por mí a que te pierdas entre el vacío.—decía Billy entre besos contra el cuello hasta la mejilla de la mujer.

—Ni que le tuvieras celos a la pared. —se mofa burlona.

—Y si pues, es mas plano que yo. Despues de todo es frío, debo cuidar lo que es mío —contraataca con bromas y picardía, entre una pequeña sonrisa al lograr que lo mire.

Esta entrecierra los ojos, para luego soltar una leve carcajada ronca, pero corta, para no despertar a Jake.

—Usted señor Black es un sinvergüenza.

—Solo tuyo, dame merito mujer.

—Solo mío, y mi futuro esposo.

Susurra mientras desliza su mano derecha a la mejilla derecha de Billy, acariciando y rizando sus labios para unirlos en un dulce beso. Mientras que ambos se separan levemente mirándose con una sonrisas que se complementaban como piezas una con la otra.

Pero un pequeño jalon de Billy por la cintura de Kuarahy, logra hacerle cosquillas y sacarla una carcajada de sorpresa.

—¡B-billy! Jajaja ~

Billy la había atraído mas al centro de la cama para abrazarla contra su cuerpo, le encantaba tenerla cerca, sentirla cerca, y mas aun cuando lograba alegrarla, porque aunque quisiera mantener un equilibrio en ella por su don y los malos ratos con la "enfermedad" De jacob, ella seguía guardando su vacío, su tristeza ante la falta de esa familia que la había alejado de ellos por un error.

—¿Y ahora de que te quejas, mujer?—pregunta con diversión, mientras rozan sus narices.

—¿Como que de que? Estaba comoda entre las maravillosas vistas lejos de tu abrazo tan...—su voz murió cuando la besó aprisionandola contra la cama.

—¿Tan que? Dime...niegame si no te gusta, cariño —contraataca Billy muy jugueton, besandola en el cuello.

Escuchando perfectamente sus jadeos de gustos, y su voz romperse entre la busqueda de palabras. Pero al escuchar su voz ronca y la frase, sabía que pronto se acercaba ese momento especial, ese momento de marcarla como suya.

—Me vuelves loca, te deseo pero...

—Lo tengo controlado, con mis labios ahogaré tus gemidos, porque de hoy ya no pasas de tenerme para ti, toda la vida, cariño —dice mientras desliza sus manos por la cadera y posa directamente en bajo vientre, deslizando hasta mas abajo del pubis, y acariciar en ese punto, que la hace temblar bajo su tacto.

Los ojos de Kuarahy se habían vuelto oscuros, por lo que, solo constó de un beso mas y la perdición se vino en jugueteos y roces. Ambos se habían perdido en ellos para poder seguir adelante tras las mil tensiones.

[...]

Al día siguiente, Jacob se había repuesto, había dicho que iría a visitar a Bella, pero para su sorpresa Kuarahy se había ofrecido a acompañarlo.

—De verdad que puedo solo, les diré si me siento mal.

—¿Que había dicho hace mucho tiempo atrás? Haber dime Billy, que era que dije ante su manejo del auto. —dijo cruzada de brazos, desde que ambos se habían perdido en un mar de sensaciones, marcación y mas aun el hecho de que Billy no la soltara, pues se había vuelto mas maternal, no se sabía el porque.

—"Claramente con la compañía de un mayor, el hecho que tu padre sea yo y te deje manejar para llevarme a todos lados, no significa que seas adulto"—modificó un poquito las palabras pero lo había dicho tal cual ese día, por ende.

Jacob bufa frustrado, por lo que toca las llaves con la cola entre las patas seguido por los adultos.
Siendo así como, el camino hacia el cementerio fue pasando tranquilo con un silencio algo incomodo pero necesario.

Hasta que Billy le da la oportunidad que su hijo siga su camino a pie hasta el lugar que le dieron a la difunta. Este miraba triste y preocupado de las reacciones de su hijo ante aquel día, Kuarahy despues de haberse dejado llevar por las horas de la madrugada, había dejado en clao que sería lo mejor decirle la verdad a Jacob.

La verdad de la vida de Bella. Ella se lo merecía, y él mas que nada, porque esta era su amiga.

Por lo que, Billy había dejado un espacio entre los momentos de Jacob con el pilar, para luego soltar a regañadientes a su impronta, de algun modo desde que la había marcado y sentido como la hacía suya, lo había dejado mas protector y territorial que de costumbre.

—Tranquilo, si algo pasa, puedes llegar a interferir.—le besa los labios cortamente antes de salir.

—Lo se, pero me preocupo igual.

—Relaja la ceja que sino te volverás mas viejo~

Bromeó la albina ante de retirarse y dejarlo con la boca abierta en incredulidad. Sin embargo la cerró al observar cuidadosamente a lo lejos a su hijo e impronta. Parecían estar hablando bien, Jacob de un momento a otro la miraba incrédulo, luego sus puños se volvieron blancos y estaba temblando mucho.

—¿Quiere decir que por tu culpa, Bella me dejó?—la pregunta había sonado gruesa y enojada.

—Fue un accidente, pero esta con vida. La podrás ver, pero no puedo dejar que sigas visitando una tumba vacía. Perdón pero no soy de mentiras. —dice dolida Kuarahy, mientras retrocede por reflejo.

—¡Fue tu culpa y la del maldito Cullen! Lo sabía!—exclamó gruñendo a tal punto de saltar y convertirse en un enorme lobo canela rojizo.

Menos mal, Kuarahy se había separado, se había logrado salvar por los pelos de ser despedazada, pero al evadir este había caído al suelo duramente, por lo que se preocupó y se acercó, grave error. Este le empezó a gruñir mientras se recuperaba pero lo que no se había esperado era:

—¡Jacob Black detente, a la de ya!

Billy Black se había puesto enfrente a su impronta, gruñendo, protector ante la amenaza, al principio estuvo en shock al ver como su pequeño hijo al fin cambiaba pero luego al sentir el miedo y dolor en su impronta no pudo mas.

Siendo así como el aroma se percibía mejor, estando en la forma lobo, Jacob había agachado su cabeza ante el regaño por su padre, pero al respirar profundo todo habia empeorado; el aroma distinto en la albina le quemaba el olfato, le ardía tanto como para gruñir de molestia, pero lo que lo confundió fue olfatear el aroma de su padre enlazandose con la de ella.

—Kuarahy es un vampiro, pero tambien es mi impronta. No la puedes dañar Jacob.

Fue allí cuando todas las costumbres y tradiciones, junto las leyendas hicieron clic en la mente de Jacob, las historias sobrelos frios, las historias sobre el peligro pero mas que nada, uniendo cabos de las veces que comía con ellos, todo se empieza a quedar atrás, podía entender el motivo del porqué Paul nunca estuvo de acuerdo, nunca se acercó mas de lo debido a ella.

Sin embargo, cuando quiso saltar a atacar por la molestia y enojo, debido a que empezó a escuchar mil voces, la de Sam intentando calmarlo hasta que el llegara, explicandole algunas cosas.

Pero las cosas parecían mas amenazantes, porque Jacob le gruñía a su padre y a la albina que preocupada, intentaba proteger a su padre.

El instinto de Jacob inexperto pero justo, era que la albina por el aroma emanaba peligro, por lo que su cabeza solo decía una y otra vez que su padre estaba en peligro, que no podía seguir.

Sin embargo, las palabras mas firmes y doblegadas por un gruñido superior, lo hicieron retroceder, el gruñido habia sido emitido de la garganta de Billy.

—No puedes dañarla, romperás una ley muy sagrada hijo. Ella es mi impronta, mi alma gemela, soy lo que ella necesita apesar de todo lo que ella represente.

(¡Pero es un maldito chupasangre!)exclamó contrariado, entre gruñidos.

(¡Eso mismo decía yo! Pero no... "Paul calmate, Paul cállate, Paul esto", pero miren que Jacob esta de acuerdo y...)fue festejando el lobo pero un gruñido se escuchó.

(Paul Lahote, cállate) habló la orden con el tono alfa Sam.

Logrando que solo chillidode cachorro se escuchara, bastando lo suficiente para que Jqcob notara la presencia del gran lobo negro que lo observaba amenazante, mientras Billy tenía triste en sus ojos, como si lo hubiera decepcionado. Mientras que al ver en los ojos ambar de Kuarahy tan solo veía un halo maternal, preocupación y tristeza. Por lo que antes de poder seguir con eso, Jacob tan solo salió huyendo.

Casi dañaba a su padre, casi dañaba a Kuarahy, y aunque pudiera ser la culpable de la muerte de Bella, no podía dañarla, habían muchos motivos y le dolía la cabeza por tanta conmoción que solo decidió huir.

■□■□■□■□■
Ufff, se vino, sin embargo, no pasó nada malo.
Pero se sabe que el ambiente tenso aun no desaparecerá. Porque tengan por seguro que el aroma que todos percibirán en Kuarahy levantará muchas bromas y disgustos.

¿Qué les pareció?

¿Querían el lemon de billy con rahy?