8. Hasta que cumplamos nuestro objetivo

—De acuerdo tenemos que hablar, pero entremos a la casa.— Me dijo Thomas, mientras encaminaba a todos adentro de la casa, nos sentamos en la sala, me puse un suéter y me acomodé para escucharlos, todos se sentaron pero durante la explicación sólo Thomas habló.

—Te voy a explicar, pero promete que vas a escuchar todo, hay cosas importantes que debes entender.— Comenzó Thomas.

—Lo prometo los voy a escuchar, ¿qué ocurre?

—Nosotros no somos hermanos, no exactamente, somos algo así como cuatro fases de uno mismo, eso te debe explicar muchas cosas, como por ejemplo el que nos quieras a los cuatro, el que nunca peleamos y porque somos tan parecidos. Cuando nos crearon nos dividieron para darnos poderes especiales, al final cuando cumplamos nuestro objetivo, la razón por la que fuimos creados, volveremos a ser uno, sé que es difícil de entender y muy absurdo pero debes creerme, jamás te mentiría.— Explico esperanzado Thomas.

—Les creo, pero no entiendo qué significa eso de que fueron creados, y poderes especiales, ¿estás hablando de magia real?

—Hay mucha magia alrededor que los humanos no conocen, pero siempre han estado involucrados, debes de conocer todas esas historias de ángeles y demonios, la eterna lucha entre el bien y el mal es real. Entre los demonios también hay jerarquía, nosotros somos los más poderosos únicamente está por encima de nosotros el príncipe y recibimos órdenes de él.

—¿Demonios?

—Por favor no nos temas, nosotros no elegimos ésto, el demonio original fue el que nos creo a todos a base de magia negra, es como nacer con un chip tienes que seguir órdenes y estás destinado para algo, a nosotros nos creó como un arma especial que iba a sacar en el momento indicado, nuestra historia los humanos la conocen solo que la deformaron para adaptarla a sus creencias, nos conocen como los cuatro jinetes del apocalipsis.

—¡Oh por Dios! ¡No es verdad!— dije aterrada, comenzaba a ponerme histérica, pero al ver sus caras​ de vergüenza me obligue a tranquilizarme.— Conozco la historia, el caballo blanco que me enseñaste es el tuyo, eres el primer jinete, Hunter.— Voltee a ver a Hunter el me observó esperando mi respuesta.— eres guerra ¿no es cierto? Eres bueno con las armas, Alec... Eres hambre, no puedo creer que nuestro chef sea hambre, pero junto a ti siento frenesí y ansías, la sensación que sientes cuando algo te falta... Me enferme cuando Ian me besó, eres epidemia.— Estaba aturdida y lo último lo dije casi en un susurro, ellos lucían preocupados.

—Algunos me llaman muerte, lo siento no fue mi intención lastimarte, aún no sabía controlar mis poderes frente a tí.

—Pero estoy bien, ¿qué era esa medicina que me dieron?

—Imitamos a los humanos ellos algunas veces utilizan el veneno para crear el antídoto, eso fué lo que hicimos ahora eres inmune a mi poder, ya no hay nada de que preocuparse.

—No era eso lo que me preocupaba, sé que no me van a hacer daño.— algo vino a mi mente que me hizo recordar otra cosa que faltaba por aclarar.— Aquella noche en el bar ¿que fué lo que hicieron?

—Comenzamos el apocalipsis, para eso fuimos creados.— Retomo la conversación Thomas.

—No puede ser ¿mataron a esas personas?— Me tape la cara con mis manos reprimiendo un sollozo.

—Los infectamos, con ira para generar peleas, les quitamos sus recursos para que padezcan de necesidades, y estos días hemos extendido el virus, las personas se están matando entre ellas, a causa de lo que hicimos. Hay más enfermedades, caos, histeria, la gente ya sabe que algo está pasando.

—¿Para qué me trajeron?

—Para protegerte del mal que íbamos a desatar, escucha ningún demonio te lastimaría nunca, te pareces a Aria, nos enseñaron a respetarla desde que nos crearon, aunque sabemos que no eres ella esa imagen siempre te defenderá, pero no de los humanos, podías quedar atrapada en una pelea o en el arrebato de pánico.— Seguía explicando Thomas.

—¿Quién es Aria y por qué me parezco a ella?

—Aria fué la primera esposa de ... — hizo un gesto señalando hacía abajo, con lo que entendí que se refería al demonio original.— Ella murió al dar a luz al príncipe, pero su imagen está muy presente en nuestras memorias, no te preocupes no eres una reencarnación de un demonio ni nada así, eres totalmente humana, nuestra teoría es diferente, creemos que tenías un ángel muy poderoso, algunos ángeles pueden bendecir, él debió darte esa imagen para protegerte de todos los demonios.

—Olviden lo de los ángeles ahora, entonces todo este tiempo sólo estaban viendo a la reina, no era yo.— me pare furiosa.

—Tu porte y estilo es de una reina, sin duda eso te hace lucir atractiva, pero no es eso lo que vemos, yo ahora veo como tus ojos se oscurecen cuando te molestas.— Comenzó Thomas.

—Como frunces los labios, es la primera vez que lo haces, siempre sonríes.— Siguió Alec.

—Como usas tus manos para enfatizar, pero usualmente caen naturalmente y con elegancia a tus costados excepto cuando tienes que sostener un arma, en ese momento se vuelven seguros.— Dijo Hunter.

—El como estás aquí enfadada, no por el hecho de que somos malos, y estamos por destruir a la humanidad, sino porque no te queramos sinceramente.— Añadió cariñosamente Ian, con lo que me regreso al presente.

—Estoy siendo absurda, hay creo que me voy a volver loca.— Me senté, respire hondo e intente aclarar mí mente.

Pensé que mi peor problema era haberme enamorado de cuatro chicos, ahora resulta que ellos son algo así como fases de un ser, que son sumamente poderosos y pueden acabar con todo lo que conozco. Son buenos lo sé, pero ellos hablan como sí no tuvieran elección. Ahora recuerdo la frase de Thomas: nos va a odiar cuando lo sepa. ¿Podré hacerlo?

Isa

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top