-Carol, disfruta de la fiesta, ¡nos hemos graduado!.- Gaela - mi mejor amiga- empezó a bailar a mi alrededor.

-Estoy cansada.- hice una mueca, miré a todos los adolescentes bailando y bebiendo cómo si nada, el gimnasio del instituto se convirtió en una gran discoteca llena de borrachuzos pervertidos. Estaba harta, lo raro es que tendría que estar bailando ya que como dijo Gaela nos habíamos graduado pero estaba cansada y lo único era vacaciones.

La canción del momento era Black Widow el alcohol iba de mano en mano, no se como permitía esto el director pero yo me iba a largar.

-Ga, ¡me largo!.- grité a la rubia. Sonrió y alzó el dedo pulgar estaba demasiado ocupada saltando al compás de la canción.

Apartaba como podía a las personas hasta que por fin pude respirar aire fresco.- Dios.- cogí aire. Estaba completameto oscuro lo bueno es que mi casa quedaba a cuatro calles y que los auriculares con la música a tope me tranquilizaba. Pero me sentía intranquila a cada rato me daba la vuelta, me sentía observada.

Hacía calor por lo que no llevaba chaqueta. Alguien jaló mi auricular derecho y me asusté dando un bote, con terror reflejado en mi cara me di la vuelta y nada. Trague saliva corriendo y poco a poco dejé de sentir esa sensación tan, por así decirlo extraña.

Entré a mi casa decorada a el gusto de mis padres y un poco pintoresca. Mi madre con su habitual costumbre inglesa (aunque no lo fuera) de tomar un té verde sin nada de azúcar y un chocolate de naranja para acompañarlo y mi padre observando por el laptop los nuevos partidos de la liga con una cerveza negra. Como podéis observar no tengo hermano pero tampoco lo necesitaba ya que mis padres eran cómo un poco mis hermanos.

-¿Carol, porqué llegas tan temprano?.- observé la hora en el reloj de mesa que teníamos. 21:00pm.
La fiesta empezó a las siete, tres malditas horas sentando con unos tacones insoportables cuándo habría estado viendo mi serie favorita.

-Si mamá, me aburría.- liberé mis pies de tal asesinato, los tacones.

-Quien te entiende pequeñaja.- era el apodo que mi padre me puso al cumplir el primer año.- Pon las noticias haber si hay algo interesante.

-Claro, antes voy a cambiar.- subí las escaleras.

-¡Hasta que te cambies yo ya lo habré hecho pequeñaja!.- reí.

Rápidamente me di una ducha y me coloqué el pijama más cómodo, bajé las escaleras lentamente para secarme el pelo con la toalla.

-Pobre gente Jack.- pasé al salón donde mis padres miraban atentos al televisor.

-Y hoy en la ciudad de New York damos un día de luto por las tantas muertes por esta causa trágica de la naturaleza y les damos las gracias.

Mi padre apagó el televisor.

-¿Qué ha pasado papá?.- alze una ceja.

-Un terremoto en New York.- abrí los ojos de par en par.- Una desgracia.

-¿No salió nada más?.- miré a mi madre que ahora leía un libro

-Dicen hacer encontrado pintadas negras en los edifios destruidos por el terremoto.

-¿Qué clases de símbolos?

-Cómo un símbolo pero sólo han enseñado una vez.- asenti.- ¿No tienes hambre?.

-Nop, me iré acostar ahora empiezan mis vacaciones.- dije sonriente.

-Qué descanses.- repitieron a la vez.

Bostece y me acosté en mi cama cerrando la puerta. Era un mugar seguro o eso me imaginaba.

No se que hora era lo que sentía era un dolor cómo de piel quemada. Chillé y me mordí el labio, ¿qué era este dolor?.- ¡Mamá!.- caí de la cama gimoteando. Levanté la manga de camiseta y vi con horror un símbolo en mi piel.- ¡MÁMA!.- nada, mierda.

Toqué con cuidado el símbolo pero mi piel ardía cómo cuando a las vacas le hacían la señal. Estaba ardiendo.

-Carol.- mamá entró a mi socorro y asustada me llevó hasta la cama.

-¿Qué te pasa Carol?.- le señalé la zona afectada y me miró.- ¿Qué pasa?.- ¡¿enserio no lo veía?!

-Mamá, el símbolo.- toqué la zona que aún ardía y me mordí el labio inferior.- Duele.

-¿Qué símbolo?, Carol, yo no veo nada.- tocó la piel y me retorcí.- Caroline, vete a dormir, seguro fue el dolor por caerte de la cama.

-Pero mamá.- me acosté.- Me arde.- un beso en la mejilla y un "hasta mañana" y se fue.

Seguro era una pesadilla, seguro.