A penas pasaba la media noche y Min Yoongi seguía sin aparecer. 

¿Dónde se había metido? se preguntaba impaciente junto a sus amigos en Macity esperando al protagonista del evento.

O sea, ¿Qué se supone que haría sin Yoongi no aparecía? arruinaría el punto más importante de su tan desarrollado plan.

—Ya Taehyung— dice Jimin abrazándolo y acariciándolo, haciendo aún más dramática la situación para sus ojos.

—No va a aparecer porque me odia— decía fingiendo un llanto y volviendo a ocultarse en los brazos de su mayor.

Jimin estaba como mamá pollo mientras que Jungkook desinteresadamente permanecía allí parado sin molestarse por su actitud.

—Ayer dijiste que te amaba— le dice el azabache rodando los ojos.

Taheyung aprovecha para lanzar una mirada asesina hacia su dirección no solo por su comentario, sino porque debería estar allí consolándolo junto a Jimin.

—Eres malo conmigo, Jungkookie— dice mientras abultaba sus labios y Jimin volvía a acariciarlo más fuerte para que ignorara al menor.

—Ya TaeTae— le dice el mayor separándolo de su pecho y tomando su rostro. —Yoongi vendrá y cuando el organizador diga, te vendaras los ojos y nosotros te guiaremos a él. Ya veras como todo sale perfecto.

Taehyung asiente desesperadamente ante su comentario eligiendo creer en sus palabras.

—Tienes razón— dice separándose y poniéndose de pie. —Vendrá, él dijo que vendría y vendrá. ¿Verdad?— dice eso último hacia Jungkook, queriendo escuchar su confirmación también y la obtiene por lo que sonríe satisfecho. —Bien, será mejor que vayamos a buscar bebidas porque tanto drama me dio sed.

—Voy yo— dice Jungkook apresuradamente intentando no ser tan evidente al querer huir de allí.

Toma la delantera del grupo y se dirige hacia la barra en busca de bebidas para todo el grupo.

—¿Podrá solo?— pregunta dudoso al ver al azabache marchándose solo. —Será mejor que lo ayude.

—Dejalo— dice Jimin y toma de su mano dirigiéndose más hacia el centro de la pista. —No parece de buen humor, creo que quiere alejarse por un momento.

Taehyung asiente aunque no le gustara del todo la idea de que su amigo estuviera malhumorado ese día

Llegan al centro de la pista, la cual era el centro del living y se dejan caer en uno de los bonitos sofás que allí decoraban el espacio.

El lugar se caracterizaba en una casa abandonada y posteriormente refaccionada de una manera simple y moderna a la vez. El espacio principal era un living de doble altura y las habitaciones de la casa tenían diferentes estéticas y decoraciones según lo que requería el evento que se llevará a cabo en el momento.

Era de lo mas popular de la ciudad sobre todo por sus fiestas temáticas, como la que en ese momento se estaba dando y era de lo que más gustaba al castaño. Le gustaba la idea de prepararse para algo y que sea más que una simple fiesta con música de siempre.

—¿Jungkookie sabrá que nos movimos?— pregunta al mayor, notando que se habían alejado bastante de donde habían dejado al azabache y temiendo que éste se perdiera luego intentando enconttarlos, ya que la casa era algo grande.

—Tranquilo— le dice Jimin guiñándole un ojo, lo que no le sorprende para nada pues su amigo tendía a tener una actitud coqueta con todo el mundo. —Jungkookie nos encontrara incluso con los ojos vendados.

—¿Qué?

—Oh mira, allí esta Yoongi— dice Jimin levantando la mano hacia el chico quien parecía mirar confundido todo el lugar desde la escalera, casi que dudando entre sí salir por donde vino o permanecer donde se encontraba.

La mirada de Yoongi se topa con la de su amigo ya que este agitaba su mano frenéticamente intentando llamar asi su atención. El rostro del azabache toma un color nunca antes visto a sus ojos y luego se acerca hasta donde estaban con la mirada algo gacha por la vergüenza.

—Hola Yoongi— dice Tae alegremente al ver al mayor frente a ellos. Le sorprende a Taehyung observarlo con vestimenta muy alejada a la del color negro, ya que llevaba una llamativa camisa roja con unos jeans claros. —Este es mi amigo Jimin— le dice señalando al rubio a su lado.

Jimin lo saluda alegremente obteniendo un tímido "hola" como respuesta.

—Jungkookie nos alcanza enseguida, es mi otro amigo— le aclara haciendo que el mayor asintiera menos sonrojado. —¿Quieres que bailemos?—pregunta levantándose inmediatamente de donde estaba sentado.

—No es música bailable— contesta Yoongi sin más.

Era cierto, el lugar estaba con una música agradable y relajante de fondo, sin llegar a estar del todo fuerte y ser del todo movida. Suponía que se debía a la temática más bien romántica de la noche y que cuando ya todos obtuvieran a su pareja a ciegas, la verdadera fiesta comenzaría.

También dudaba que Yoongi quisiera bailar en esa situación, pero valía la pena intentarlo.

—Quizás podamos ir al jardín y charlar allí— dice sonriendo, intentando encontrar algo por hacer y que Yoongi no se aburriera y se fuera, pues todavía faltaba quién sabe cuánto tiempo para que la verdadera acción sucediera.

—La noche está algo fresca, TaeTae— objeta Jimin ante su comentario.

Yoongi asiente mirando fijamente a Jimin. 

—Es cierto, preferiría quedarme acá, si no te molesta— le dice todavía sin apartar la mirada de su amigo.

—Oh, bueno entonces podemos, podemos....

—Puedes ayudar a Jungkookie a traer las bebidas, si no te molesta— dice Jimin sonriendo inocentemente hacia el azabache. Este asiente inmediatamente, quizás intentando ser amable con el nuevo grupo de amigos que se estaba integrando. —Esta por allá, mide casi metro ochenta, cabello largo y azabache y está todo de negro, de seguro lo reconoces enseguida.

—Sé quien es— dice Yoongi seriamente. —Vuelvo enseguida— dice antes de girar e ir detrás del menor.

—¿Por que hiciste eso?— pregunta sorprendido cuando ve a Yoongi lo suficientemente lejos como para no escucharlos. —Intentaba romper la tensión.

—Está nervioso, Tae ¿No vez lo tímido que está?— le dice su amigo señalando la espalda del azabache quien se seguía alejando. —Le dije que vaya a ayudar a Jungkookie para que hablemos— objeta acusatoriamente. —Yoongi parece una persona con la que más bien hay que avanzar un paso a la vez, no hostigarlo de preguntas y actividades como lo estás haciendo.

Taehyung asiente ante eso porque también lo notó, solo que no sabía cómo actuar diferente ya que en él los nervios funcionaban de manera contraria a los de Yoongi y le generaban una intensidad a la hora de acercarse a las personas.

—¿Estás seguro de que está es la forma?— pregunta su amigo haciendo que lo mirara sorprendido. —Quizás sería mejor si solo charlan y no fuerzas todo para que...

—Por supuesto que es la forma, Jimin— interrumpe apresuradamente. —¿Cómo se dará cuenta que está enamorado de mi sino?

—Ay Taehyung— dice su amigo rodando los ojos mientras se reía. —En serio eres tan ciego, creo que ya tienes puesta una venda en los ojos, de hecho.

Taehyung lo mira confundido y señala el pañuelo que esta sobre su cuello, esperando hasta que llegue el momento de ponérselo en los ojos.

—No lo tengo en los ojos, está aquí— le dice señalando el pañuelo y Jimin solo rueda los ojos nuevamente.

En ese momento la música y las luces se apagan para alumbrar únicamente a la cabina del DJ, donde aparece el presentador con un micrófono.

—Buenas noches a todos— dice generando un saludo colectivo de parte del público. —¿Quieren saber la razón por la que estamos reunidos aquí está noche?

Algunas personas comenzaron a decir que si mientras otras simplemente siguieron calladas desde su lugar.

—El día de hoy estamos aquí con la intención de poner en manifiesto la más linda de las emociones— dice sonriendo, mientras una leve música romántica comenzaba de fondo. —Los invito a sentir y buscar el amor con el corazón. Para eso necesito que cada uno de ustedes se venden los ojos y dejen que sea el amor quien los encuentre, dejen a los sentimientos ser, ser libres sin ataduras y permítanse amar y ser amados.

Observa como casi la mayoría de las personas del sitio comenzaba a colocarse una venda en los ojos por lo que se apresura en mirar a Jimin. Su amigo le sonríe dulcemente con el pulgar arriba por lo que una vez que obtiene su aprobación, se coloca también la venda en los ojos y comienza a caminar en dirección a la barra en busca de su amor, sabiendo que Jimin estaría cerca para que todo saliera como lo habían planeado.

Da pasos completamente a ciegas, con los brazos extendidos para no chocarse con nada ni nadie aunque de todas formas se llevó a una que otra persona por delante, pero no obteniendo a nadie verdaderamente interesado al recibir los contactos con las manos.

—Jimin, ¿ves a Yoongi por ahí?— pregunta a la nada.

No está seguro de qué tanto avanzó pero si que suponía que ya debía estar cerca de la barra.

—¿Jimin?— vuelve a preguntar y siente a alguien tomar de sus manos extendidas con cuidado, evitando así que siguiera en la deriva.

Taehyung sonríe ante el contacto y procede a extender sus brazos sobre el rostro de la persona frente suyo para confirmar que era quien él creía y sonríe aún más grande al sentir el suave cabello.

—Sé quien eres— dice sonriendo y baja sus manos, acariciando suavemente el rostro del chico deteniéndose particularmente sobre sus labios húmedos, probablemente porque de los nervios se los estuviera mordiendo. 

—Sé quien eres— vuelve a confirmar dejando sus brazos sobre los hombros un poco más altos que los suyos por la leve diferencia de altura que había entre ambos y lentamente rodea su cuello con ambos brazos acercando así más sus cuerpo.

Notaba que el azabache no lo abrazaba de nuevo, sin embargo tampoco lo alejaba, más bien parecía a penas tocarlo y dando su completa voluntad a lo que fuera que Taehyung decidiera hacer.

Taehyung vuelve sonreír ante eso.

—Sé quien eres— vuelve a confirmar antes de acercarse y besar suavemente los labios de su menor.

Es a penas correspondido en el movimiento, ya que más bien el chico prefería dejarse llevar por los deseos del castaño y disfrutando de lo que sea que éste hiciera. 

Taehyung se toma de ambos lados del rostro del azabache profundizando así el beso que llevaba años deseando, logrando introducir levemente su lengua y atrapando el labio superior del menor haciendo que ambos soltasen un gemido de placer y siendo rápidamente apartado por la misma persona que tanto deseo le había causado.

—Espera— le dice haciendo que rápidamente se arrepintiera de haber seguido a sus emociones. —Creo que en realidad no sabes quien soy.

La sonrisa en el rostro de Taehyung no tarda en caer ante el shock de realidad que le había llegado y saca su venda lentamente, temiendo lo que se encontraría del otro lado.

Jungkook lo miraba con los ojos grandes y lagrimosos, llenos de sentimientos. Eran sus famosos ojitos de bambie, los mismos que tenía el día que lo conoció en preescolar, cuando tenía miedo de hacer amigos nuevos y fue Taehyung quien se le había acercado dándole confianza.

Solo que esa vez, era él quien se la había sacado. Notaba la tristeza en el rostro del azabache mientras lo miraba a punto de llorar.

—Jungkookie...— dice, haciéndose el desentendido para no lastimar más al menor de lo que ya lo había hecho. —¿Qué estas haciendo aquí?

—Te vi solo y... y...

—¿Dónde esta Yoongi?—se apresura a preguntar, no queriendo que el menor dijera en voz alta lo que había pasado.

Jungkook lo mira aún más triste y niega con la cabeza, de manera desentendida.

—Taehyung...— dice. No "hyung" como acostumbraba, sino que esta vez era llamado por su nombre —tengo que decirte algo importante.

—Jungkookie...— le dice negando con su cabeza.

—Me gustas, me gustas desde siempre— dice su menor no dejando así que lo interrumpiera. —Siempre lo haz hecho, siempre me gustaste y...

—Jungkook...

—Lo sé — dice el menor de manera decepcionada, mirando hacia el suelo y alejándose de él lentamente. —Lo sé — le repite mirándolo por última vez antes de salir del club.