—"¿Qué debería hacer?"

Sonic se encontraba esperando sentado frente a una cafetería. Quedó con Infinite de encontrarse en ese lugar para ir a comprar algunas cosas para su hogar, pero justo en ese momento se encontraba observando al chacal que compraba las bebidas.

Inconscientemente lanzó un suspiro mientras su mirada descendía hasta su mano.

Pocos meses habían transcurrido desde que comenzó a salir con Infinite. Se dio cuenta de que era algo distinto estar con él. Durante su última relación salió muy confundido y hasta deseó jamás volver a sentir nada por nadie.

Pero en ese momento pensó que aquellas ideas eran un poco torpes, si antes de conocer a su primer amor hubiera conocido a Infinite estaría seguro de que no tendría ese mismo pensamiento. Durante han estado saliendo, el chacal ha sido muy distinto con él. Palabras dulces, bromas que no lo hieren, gestos de amor que no esperaba recibir de nadie más excepto de una persona.

Su sonrisa se borra de golpe al recordar el por qué está allí y quién fue el causante.

—¿Sonic? —ve como un vaso se aproxima hasta su rostro.

—¡Infinite! Lo siento estaba pensando —se disculpa tomando su bebida—. Gracias... —la lleva hasta sus labios para beber lentamente.

—¿Sucede algo? —le pregunta el chacal sentándose a su lado—. De repente parecías estar muy triste.

Sonic casi se ahoga pero lo controla.

—Solo pensaba en algo sin sentido...

—¿Necesitas hablarlo? Puedo escucharte.

Sonic se encoge de hombros con mucha vergüenza.

—Es tonto Infinite... seguro te vas a reír —dice creyendo en ello, pero de repente siente como la mano del chacal busca la de él para entrelazarla.

Sonic siente algo totalmente distinto cuando el gesto de Infinite le hace sentirse completo. El calor de aquella mano le transmite confianza, seguridad y... amor.

—Puedes decirme cualquier cosa, no importa que tan grande o pequeña sea, sin sentido o con sentido... estoy dispuesto a escucharte —le corrige.

Sonic se había negado durante todo ese tiempo ha aceptar que comenzaba a tener sentimientos por ese chico. Y lo confirmó cuando tomo su mano de la misma manera en que las parejas lo hacen y enfrente de muchas personas.

—¿M-Me has tomado de la mano? —le pregunta inconscientemente.

Infinite le mira confundido.

— Claro ¿Por qué te sorprende? —le pregunta con una sonrisa—. Tomar la mano de quien amas es normal y más cuando quieres que se sienta a gusto contigo.

Sonic abrió los ojos con sorpresa. Infinite no se cansaba de hacerle demostraciones de su amor. Desvío la mirada y su mano se aferró más al agarre de él.

—Avergonzarte por qué te vean conmigo... —sus palabras salieron de sus labios sin tener mucho sentido.

Aunque no tuviera mucho sentido, el chacal logro comprenderlo.

—Es la peor idiotez que puede suceder. Quiero que me vean contigo, que digan que eres mi pareja —le afirmó con seguridad—. No tengo por qué esconderte Sonic, tú no mereces eso.

Sonic entonces se dio cuenta de lo que negaba. Sus deseos estaban volviendo a presentarse en alguien que jamás espero conocer.