Maraton 2/3

Nozomi

A pesar de la necesidad de ambos de estar cerca, la manera en que nos encontramos esta noche fue algo mas delicada, pero no por temor de dañar al bebe, si no porque la ocasión lo ameritaba así, las caricias fueron lentas, los besos eran llenos de sentimiento.

La mañana llego rápido, cuando desperté no estaba en mi cama, pero escuchaba ruidos en la cocina, fue a darme un baño rápido para salir a ver a un hombre solo con un jogger gris puesto, sin camisa, desde la puerta de la cocina tenia una hermosa vista de su espalda, sus hombros anchos me hicieron agua la boca, mataría por tener esta imagen todos los días.

—Buenos días.

—Buenos días Nozo-chi.

Me acerque y abrace su espalda.

—¿Qué cocinas?

—Hice Bibimbap, también tienes fruta y yogurt.

Fui a la cafetera y tome una taza para servirme, pero Jin se acerco quitándome la taza para poner un vaso de jugo en mis manos.

—Nada de café para ti, debemos ir a comprar descafeinado si deseas tomarlo, también debe de haber mas fruta en el refrigerador, nada de comida chatarra, debes alimentarte bien para que tus energías estén bien.

—Si me quitas mi café, gruñiré.

—Puedes hacer el berrinche que gustes pero no hay café para ti el día de hoy.

Bebí de mi vaso de jugo y fui a sentarme a la barra para esperar mi comida.

—Saldré el día de hoy debo de ir a las oficinas de mi padre a hacer algunas cosas, pero pasare por ti al trabajo, quiero que le avises a Seohyun que el cuarto del bebe, será decorado por nosotros dos, no me importa si es la tia favorita, yo soy el padre y eso pesa mas.

—Le diré, pero no creo que le guste la idea.

Dejo el plato de comida y me beso la frente.

—No esta aquí para impedirlo, deja voy a cambiarme, ¿Te dejo en la clínica?

—Si, ¿No vas a desayunar tu?

—Estuve picando la comida mientras la preparaba, solo comeré algo de fruta, ya vuelvo.

Terminamos de desayunar, terminando de alistarnos para salir, intente ponerme un pantalón pero no cerro, definitivamente mis caderas estaban mas anchas, así que termine por ponerme unas mallas y un blusón amarillo pálido.

Cuando salimos de la casa nos topamos con mi vecino peculiar, Jin inmediatamente lo noto.

—Buenos días Nam.

—¿Cuándo volviste?

—Hace poco, ten un lindo día, vamos Nozomi.

Me ayudo a subirme al auto ante la atenta mirada de Namjoon, me pareció maravilloso que no hiciera un escandalo por que estaba viviendo prácticamente al lado.

—Necesito organizarme bien estas dos semanas, tenemos que ir a ver a tus padres, y es lo primero que haremos, se que no es algo que desees hacer, pero deben de enterarse que tendrás un hijo mío, si quieren estar en la vida de su nieto yo no me negare.

Lo escuche de manera atenta, supongo que es en lo que ha estado pensando desde que se entero del bebe, no es algo que desee hacer como el lo menciona, pero no tampoco quiero ocultárselos, aunque me ellos sean como son, no dejan de ser mis padres, y la verdad si me gustaría que estuvieran en la vida de mi bebe.

Tal vez eso los cambie un poco.

—De acuerdo, estaré preparada siempre y cuando tu estes ahí.

—Lo estaré, encontrare la forma de hacerlo ya lo veras, en cuanto a los míos, tendré que decirles solo, pero sin importar lo que ellos opinen este bebe será criado dentro de una familia que lo quiere.

Esta semana se me fue demasiado rápido, todas las tardes después del trabaja, Jin y yo no la pasábamos de compras, pintamos el cuarto del bebe, en una noche, y el se encargo de armar la cuna, es demasiado bueno armando las cosas, pero antes se puso en el suelo con todas las piezas desarmadas leyendo el manual, como si fuera algo mas complicado que una de sus cirugías, tengo varias fotos de él con los labios abultados mientras lee el manual, y otras mas mientras termina de armar la cuna, le mande las fotos a la indignada de Seo, al final le gusto el resultado, el color quedo en un tono morado opaco, la cuna termino siendo de un café tenue que combinaba con las decoraciones, cualquiera que fuera el sexo del bebe estaría bien con los colores que elegimos.

Pusimos una mecedora, el cambiador de pañales que también armo el, y un pequeño closet donde Seokjin ya había llenado de muchos trajecitos de colores neutrales, algunos a juego con ropa que el tenia.

"No comprare mucha ropa, hasta saber que será"

Y aun así lleno medio armario.

Los días se me fueron volando, no querían que regresara a Canadá aunque se que es algo que no puede evitar, pero viene lo mas difícil ahora.

Estacionamos afuera de la casa de mis padres, las manos me sudaban, mi corazón latía demasiado rápido, tenia desde el accidente que no los había visto, cuando toque el timbre me paralice.

—Respira, aquí estoy.

Dejo un beso en mi sien, escuche como abrieron la puerta, mi madre me observo algo sorprendida, sus ojos se cristalizaron un poco pero cuando noto la mano de Jin sobre la mía, su rostro cambio a ese de desprecio que detestaba.

—Buenas noches Señora Kitamura, nos gustaría hablar con ustedes, si nos los permite.

—Tu no puedes entrar a esta casa.

Escuche que se acerco mi padre.

—Si vienes con este, no puedes venir a la casa Nozomi, no puedo creer que seas tan sin vergüenza —cada palabra de mi padre me estaba doliendo demasiado, mas de lo acostumbrado.

—¡Bien! No entraremos, solo veníamos a decirle, que Nozomi y yo seremos padres, no estamos pidiendo su permiso, ni su bendición porque claramente no la tendremos, pero quiero formar una familia con ella, y deben de entender que eso pasara con o sin ustedes.

—Que decepción, nosotros no te criamos así, no entiendo en que momento te volviste así, un bebe no debe nacer fuera del matrimonio, que clase de...

Seokjin levanto la mano para callarlos.

—Bendito sea que ustedes no tienen nada que ver en como es Nozomi, ella es un ser maravilloso, será una gran madre, solo queríamos que lo supiera le repito que no estamos pidiendo su opinión, este niño será amado, tanto como amo a su madre, espero tengan una vida larga y prospera, y no se arrepientan de darle la espalda a su hija y el nieto que viene en camino.

—¡Estas muerta para nosotros!

Fue lo ultimo que dijeron antes de que nos subiéramos al auto de nuevo, esa noche llore todo lo que pude abrazada de Seokjin. Sabia que no lo aprobarían pero no pensé que reaccionarían así.

Seokjin.

Si abandonar corea la primera vez que deje a Nozomi fue el tormento para mi, ahora que no solo la dejaba a ella si no también a mi pequeño creciendo dentro de ella, era como si me encogieran el corazón, ellos se quedarían con el en Seúl, mientras mi cuerpo vació viajaba a canada, para enfrentar a mi madre es a la primera que le diré la noticia.

Quisiera decir que es lo mas sencillo del mundo, se que pase lo que pase, las decisiones que tome no serán cambiadas por nada del mundo, pero aun así necesito un milagro para que el corazón de mi madre se ablande un poco, como llegue en la noche no pude hablar con ella inmediatamente así que me sirvió la noche para descansar, aprovechando que mi padre se iría a la oficina temprano alcanzándolo yo mas tarde.

—Buenos días Seokjin, el desayuno ya esta servido, tu padre dijo que habías arreglado todo muy bien en Seúl.

—Si mas o menos.

—Espero que vengas mas relajado, porque ahora si no quiero excusas para las cenas que tendremos.

—Madre necesito decirte algo.

—Si es que estuviste con Nozomi no me interesa, es lógico que te largaste con ella en cuanto llegaste, pero como fuiste responsable con lo demás, esta bien sui la vez como diversión.

—¿Cuándo entenderás que no es solo una diversión?

—Te olvidaras de ella lo se, ya has tenido otras mujeres y...

—Esta esperando un hijo mío.

La taza de café que ella tenia en las manos se cayo al suelo, quería hablar pero se le trababa la quijada.

—¡Es una estupidez! ¡No puedo creerlo!, Seguro solo lo usa para retenerte.

—Escúchate madre, conociste a Nozomi mucho tiempo, estuvo en tu mesa millones de veces, esa mujer que llegaste a tratar de manera amable, jamás haría nada malo, querías nietos, ahí los tienes.

—Ese bebe no será nieto mío, ¿No entiendes lo que le hará un bastardo a la reputación de la familia?

—Me importa un mierda la reputación de tu familia madre, pero no debes sentirte mal por eso —metí las manos a mi bolsillo y saque una fotografía y un anillo —ese niño es mi hijo por todas las de la ley, Nozomi es mi esposa desde hace dos días, y llevara mi apellido.

Me levante de la mesa dejando a mi madre con la boca abierta, escuche que venia tras de mi gritando no se que tantas cosas.

—Tu padre quedara decepcionado, ¿Te casaste sin nuestra aprobación?

—¡Tengo 30 años madre no necesito tu aprobación! ¡Por mi padre no te preocupes, seguro estará mas feliz que tu de que venga un nuevo Kim a la familia!

—Escúchame...

—No madre, escúchame tu a mi, tienes dos opciones, aceptar lo que te acabo de decirte, o darme por muerto, porque de seguir con tu actitud, con todo lo que me pesa lo que mi padre esta pasando me iré de aquí, y juro que no vuelves a saber de mi, mejor recapacita lo que vas hacer.

Me metí a mi cuarto sin saber mas de ella, me cambie y fui a la oficina con mi padre, tuvimos algunas juntas y después fuimos a comer juntos, el estaba riéndose de algún video mientras comíamos, yo solo picaba mi plato.

—Hijo, sabes que cuando quieres decirme algo, te la pasas mordiéndote los labios, tienes esa maña desde que eres un niño y aun no se te quita, ¿Debo de adivinar?

—Pensé que seria mas sencillo decírtelo a ti que a mama.

—Me ofende que no sea así ¿Sucedió algo con Nozomi?

—Pues en realidad nada grave, solo se cambio el apellido.

—¿Así a cual?

—Kim Nozomi, ¿Te gusta?

Primero me miro y después se soltó riendo de una manera escandalosa, ahora se de donde saque esa risa de limpia vidrio, después se levanto y me jalo para abrazarme.

—¿Qué dijo tu madre?

—No lo tomo muy bien, ¿Estas molesto?

—Para nada, eres como tu padre, si quieres algo moverás todo para que lograrlo, me alegra que la familia aumentara.

—Pues ahora siéntate, porque la familia seguirá creciendo —Se sentó y me observo —Vas hacer abuelo.

—¿Vas demasiado rápido no crees?, hijo esta bien que no me queda mucho en el plano terrenal, pero tampoco tenias que cumplir todos mis deseos.

La platica se hizo mas extensa, porque ahora el planeaba ir a visitar a Nozomi y estar presente en el alumbramiento.

"Así este en mi lecho no me iré sin besar la frente de mi nieto"

Yo había hecho un plan con el, para que cada visita al ginecólogo yo pudiera asistir, estaría viajando de aquí allá pero valdría la pena todo el esfuerzo al menos mi padre estaba de mi lado.

Mi madre esta semana no me dirigió la palabra, me pidió papa que le diera tiempo, pero no me interesaba si no llegaba a querer a mi hijo, se que le sobrara cariño a ese bebe.

—Creo que para cuando tu padre venga, estaré un poco mas redonda.

—Uy habrá mas Nozomi que manosear —sonrió y como me molestaba no poder besarle las mejillas en este momento —por cierto como tomo la noticia todo el mundo.

—Seohyun lloro un buen rato diciendo que ya no la amaba, que debería haberla invitado por mas que le dije que ella esta en los ángeles, nada mas no dejo de lloriquear, Hoseok solo me felicito al igual que Lily.

De la mire que se observo con extrañeza el vientre.

—¿Todo Bien?

Dejo el teléfono y solo escuche un "No", después el rostro en pánico de Nozomi, entro en mi campo de visión, su camisón estaba manchado de sangre.

—Jin estoy sangrando.

Solo uno mas, sigan leyendo....