42🍵

Epílogo

Miraba con una sonrisa cada espacio de su casa, luego de vivir en aquel apartamento durante cuatro años, se dieron cuenta que se iba haciendo cada vez mas pequeño para ellos. Estaba sentado en el sofá mirando las fotos de su boda, sintiendo las pataditas traviesas de su bebé, le contaba todo lo que había pasado hacía ya seis años...

Luego de su segundo embarazo y con la sorpresa de que se trataban de mellizos, su hermoso TaeHyung, ahora tenía seis hermosos años y sus pequeños mellizos, iban a cumplir cuatro años el próximo mes. Y él... él iba a cumplir los siete meses de gestación de su tercer embarazo. Su pequeño bebé era muy activo, y al igual que TaeHyung, se emocionaba cada vez que escuchaba la música de YoonGi.

YoonGi y él, luego de hablarlo, pensaron que tener dos hijos mas estaría bien, podían con ellos, pero al enterarse que se trataban de mellizos en su segundo embarazo, ninguno pudo evitar sorprenderse. Fue una hermosa experiencia a palabras de JiMin, quien jamás imaginó llevar mellizos, pero estaba feliz de cargar a sus bebés esos ocho meses y medio. Y aunque su tercer embarazo no había sido planeado, no se arrepentía y YoonGi tampoco.

Su carrera estaba completa, luego de que TaeHyung cumpliera el primer año, volvió a retomarla, graduandose como Licenciado en Bellas Artes, aún lo recuerda, meses mas tarde, se enteró que estaba esperando un bebé, bueno, fue YoonGi quien lo supuso.

Después de todo, él sufrió los malestares, en su segundo embarazo solo lo atacó el cansancio y los mareos, pero su Yoon, había sufrido de todo, estaba tan sensible que una vez llorando le dijo que no le dejara por tener tantos cambios de humor. Por otro lado, en este embarazo llevaban todo de manera mas tranquila, nada de nada, solo disfrutaban de ver como su bebé estaba desarrollandose.

JiMin podría describir esos años como los mas maravillosos, de cerrarse totalmente a enamorarse de nuevo a saber lo hermoso que es estar enamorado de la persona indicada.
Los recuerdos le traen mucho cariño y un sentimiento que hace latir a su corazón de manera desenfrenada por la emoción que siente cada vez que ve a YoonGi.
Había pasado a trabajar a una galería de arte, una de las mas prestigiosas de Seúl, YoonGi a pesar de que amaba ver a su esposo durante todo el día, además de la excelencia en su trabajo y porque no quería que nadie le coqueteara a su esposo, quería verlo realizar sus sueños
YoonGi se negaba a que alguien tratara de aprovecharse de su pareja, sabía y confiaba en JiMin, pero no confiaba en las demás personas, podían dañar a su pareja y él no podía permitir que tal cosa ocurriera.

YoonGi arregló su horario, para poder dejar y recoger a su esposo, todos los días, al menos durante los primeros meses, luego iba por él para el almuerzo. JiMin al principio creyó que YoonGi estaba exagerando un poquito, y decidió hablarlo con él. Claramente no se negaba a ser consentido por su pareja, pues un par de besos antes de iniciar su trabajo y un cálido abrazo al salir eran muy reconfortantes, sin embargo estaba curioso. YoonGi simplemente le respondió con una sonrisa avergonzada, "jamás duraría de mi esposo y padre de mis hijos, pero prefiero evitar que alguien te haga daño, o te pase algo, quizás soy algo paranoico... no sé..."

JiMin había sonreído con ternura, conmovido o quizás solo eran sus hormonas del embarazo de sus bebés. Pero le agradeció y esa noche se besaron entre risas y recibieron a su niño de un año y medio, que en un llanto y palabras entrecortadas explicaba que tuvo pesadillas.
Cantandole para hacerlo dormir.

YoonGi ahora tenía a quien fue su secretaria fuera de su oficina, ya que esta estaba ocupada con las cosas de sus hijos, pues TaeHyung y sus mellizos pasaban parte de su tiempo con él, para luego ver a JiMin aparecer por la puerta y llevar a sus niños con él, bueno irían a almorzar a algun lugar que les gustara a ambos, y luego YoonGi pasaría a dejar a JiMin en su hogar con sus hijos, y volvería a su trabajo. Al principio no se quejaba de su secretaria, pero no era lo mismo, le dirigía la palabra solo si fuera necesario, había notado una actitud extraña en ella y no le gustaba. Admiraba a JiMin, pues en mas de alguna ocasión ella había tratado de sobrepasar el límite, y su esposo había llegado a salvarlo en algunas ocasiones. Hasta que en el primer mes después habló con ella... "te escogí por tus recomendaciones, pero no dudaré en despedirte en ningun momento si vuelves a insinuarte de una manera inapropiada, ¿ves esto?", dijo serio mostrando su anillo de casado, "estoy felizmente casado, si quieres mantener tu trabajo, mantente en el lugar de secretaria, no más".

No duró ni una semana mas, había insultado a su pareja antes de que se diera cuenta que él había escuchado todo. Y aunque su pareja se había defendido, él no podía tolerar ese trato.
Habían tenido ese tipo de dificultades, pero que desde un principio pudieron manejarlas hablando y evitando los malos entendidos.

Aunque algunas de las anécdotas les daba gracia recordarlas, ambos sabían que eso los había hecho mas fuertes.

- Cielo...- la voz de YoonGi llamarlo aparece en su campo de audición, levanta la mirada para verlo. No evita reír pues, TaeHyung venía en su espalda y sus mellizos, HyeYoon y JiYoung, en sus piernas, sus tres hijos habían acaparado a su padre.

- Papi nos estaba contando cómo te conoció- su niña dijo emocionada y fue a sentarse al lado del pelinegro, dejando a sus dos hermanos junto a su papá Yoon.

- Uh... ¿en serio?- preguntó JiMin, dejando de lado el albúm de fotos que tenía en su regazo, para besar las mejillas de su hija. La pequeña Yoon asintió riendo por las cosquillas que provocaban las caricias de su papá JiMin, llamando la atención de sus dos hermanos. Quienes se acercaron a su papá JiMin para recibir abrazos y quizás un saludo de su hermanito, que habitaba la pancita de su papá.

- Siempre diré que ellos te aman mas que a mí...- la voz quejumbrosa de su esposo, le hizo sonrojar. Pero extendió sus brazos para que su castaño se acercara y también recibiera unos cuantos besos. YoonGi sin pensarlo tanto se acercó, colocandose a la altura del vientre de su pareja, abrazandolo, descansando su cabeza en el pecho ajeno.- Pero lo entiendo...- susurró y con los quejidos adorables de sus hijos que papá JiMin era de ellos- Tu corazón late tan melodioso que me da calma...

JiMin sonrió y besó la frente de su pareja y luego besó a sus tres hijos, quienes rieron y abrazaron a sus papás.

Luego de unos abrazos y besos repartidos en los rostros de su esposo e hijos, se levantaron para hacer la comida de ese fin de semana, y ver una película todos juntos, sobre todo porque al parecer a su bebé, le gustaba escucharlos a todos a su alrededor, armando una fiesta en su interior.

La comida transcurrió tranquila para los padres, pues estaban acostumbrados a ver a sus niños tan emotivos, hablando de todo lo que les gustaba hacer y lo que harían cuando su hermanito menor naciera.

Todos fueron a cambiarse por sus pijamas, YoonGi y JiMin ayudaron a sus hijos a ponerse su ropa de dormir para ver la película, sabiendo que no tardarían mucho en caer rendidos. Y luego JiMin fue ayudado por YoonGi, su vientre y los movimientos de su bebé no le dejaban oportunidad de hacer algunas cosas por su cuenta.

YoonGi le ayudó a poner su pijama, y le regaló caricias a su bebé, JiMin reía por algunas cosquillas y por los sonrojos que le ocasionaban las palabras del castaño, no podía evitarlo, menos cuando su bebé pateaba demostrando estar de acuerdo con su esposo. Era injusto, al menos TaeHuyng lo apoyaba a él.

Junto a sus niños se dirigieron a la sala, quienes habían cepillado sus dientes antes y se acomodaron en la sala, con TaeHyung en el regazo de YoonGi, JiYoung y HyeYoon, en medio de ambos y con JiMin tratando de mantener a su bebé tranquilo, pero incluso parecía muy despierto a esa hora de la noche.

Apenas llegaban a la mitad de la película infantil cuando los niños mas pequeños ya estaba dormidos.

- Papi...- TaeHyung llamó a su padre con voz bajita, YoonGi y JiMin le miraron- JiJi y YoonYoon...

Los adultos miraron a sus hijos mas pequeños y YoonGi se levantó para dejarlos a cada uno en su cama dentro de la habitación que compartían. JiMin recibió a su hijo mayor en brazos.

- ¿Cuando podré conocer a mi otro hermano?- preguntó abrazando la pancita de su papá. JiMin sonrió y acarició los cabellos de TaeHyung.

- Pues... no lo sé, tu hermanito aún no termina de crecer aquí...- su mano libre acarició su propio vientre.

- Yo quiero conocerlo pronto...- TaeHyung sonrió y acarició el vientre de JiMin. Sonriendo al sentir el leve movimiento bajo su manita- Se mueve papi...- TaeHyung soltó una pequeña risa, le gustaba sentir a su hermanito, incluso aseguraba que a él lo quería mas.

- Cierto... quizás este comenzando a dormirse...- dijo JiMin, pues el bebé solo se movía no eran las patadas de siempre, solo era un pequeño movimiento, como si moviera sus manitas o algo parecido.

- Papá Yoon dijo que yo también estuve aquí...- TaeHyung susurró dejandose casi vencer por el sueño.

- Así es, bebé...- JiMin susurró. Sin detener las caricias en el cabello de su bebé. No importaría cuanto tiempo pasara, TaeHyung sería su bebé siempre.

- Tenemos otro soldado caído...- YoonGi llegó a la sala para poder tomar a TaeHyung en brazos. JiMin asintió, besó la frente de TaeHyung y dejó que YoonGi tomara a su hijo mayor en brazos para llevarlo hasta su habitación.

JiMin apagó la televisión y ordenó un poco la sala, dobló la manta que habían usado minutos atrás, y apagó las luces. Caminó por el pasillo hasta llegar a la habitación que compartía con su pareja, con cuidado se sentó en la cama y YoonGi apareció con una expresión de cansancio. Desde que hacía todo solo, era un poco mas cansado para él, cada vez que regresaba del trabajo, aún no había encontrado a la persona adecuada.

- Ven...- JiMin le sonrió, extendiendo sus brazos para que YoonGi se acomodara sobre él, con cuidado de no lastimarlo. Y justo como cada noche, JiMin acariciaba sus cabellos y besa su frente.- Creo que deberías conseguir un asistente, es muy cansado para ti, tener que agendar todo y estar presente... JungKook me dijo que hay días en los cuales no estas en la oficina...

- Lo sé... buscaré a alguien, pero, quizás el proximo mes...- YoonGi susurró.

- Yoon...

- Sé que te preocupas, estoy bien- YoonGi dijo y tomó una de las manos de su amado esposo, solo para besar sus nudillos- Todo estará bien, he estado mas cansado pero nada alarmante, pediré unos días para relajarme y ayudarte con nuestro pequeño bebé...

JiMin sonrió.

- ¿Te he dicho que te amo?- preguntó haciendo a YoonGi reír.

- Creo que...- comentó, ambos rieron. Disfrutaban esos momentos antes de dormir.- Claro... me lo dices cada vez que me miras, o cuando me sonríes... de verdad que tu sonrisa es hermosa sobre todo cuando te sonrojas... ¿en qué estaba?- preguntó. JiMin solo negó con una sonrisa- Ah sí... me dices que me amas, incluso con el cuidado que le das a nuestros hijos... que tienen tu sonrisa, por cierto- JiMin volvió a reír.

- Te amo...

- Yo también te amo, cielo...

- ¿Por qué me dices cielo?- JiMin preguntó intrigado, pero con el corazón agitado y emocionado.

- Bueno... eres mi cielo...- YoonGi sonrió.

Se acomodaron en la cama y YoonGi los cubrió a ambos con las sábanas, sabían que muy pronto sus niños llegarían para dormir con ellos, pero saber que tenían esos brazos cada noche, esos contactos, esa calidez, les hizo sentir afortunados. Habían sido años hermosos, años felices y aunque tenían ciertas dificultades o desacuerdos, no habían dejado de sentir esa emoción cada vez que se miraban...

El amor era dificil, pero al mismo tiempo maravilloso, después de todo los sueños se pueden hacer realidad...

YoonGi llegó incluso mas allá de sus sueños...
Y JiMin supo que soñar y esforzarse por ello, valía la pena...

El amor traía retos y adversidades pero juntos, se sentían capaces de enfrentar cada obstaculo que tuvieran enfrente... y no olvidemos a sus impulsores mas importantes...

- ¿Papi...?- la voz de los mellizos se escucha.

- Durmamos juntos...- TaeHyung dice tomando la mano de sus hermanitos y acercandose a la cama. YoonGi se levanta y les ayuda a subir a cada uno, colocandolos en medio de ellos.

Colocan una almohada que proteja el vientre de JiMin y vuelven a acomodarse. Dejando que pequeños suspiros y suaves respiraciones se escuchen en la habitación Min...

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