El celo por fin había dado fin, pero el omega rubio Lucia más que deprimido, apenas probó algo de alimento, se dedicó a estar sentado mirando un televisor apagado en la sala, cómo si fuese el mejor programa del mundo.

Verlo callado, tan desanimado, era preocupante, así que solo podía hacer una cosa.

Deku en lugar de llamar a sus padres lo que hizo fue llamar a su pareja y contarle su preocupación y al parecer  también Kirishima estaba en la misma situación.

Les pareció que lo más lógico era reunir a esos dos y fue el rubio gruñón quien arrastró a su no-amigo hasta casa del chico eléctrico.

Al llegar simplemente el pelirojo busco a su novio, encontrando lo en la sala con una mirada muy triste, este alzó la mirada al sentir su aroma y empezó a llorar.

- perdón, perdón, perdón .... - se acercó Ejiro cautelosamente para abrazarlo.

-kiri - lloro en sus brazos.

- debí estar aquí, pero - hizo una pausa- se que aún no es tiempo, perdón por no venir.

- te estube....llamando - no dejo de llorar.

- lo se - beso su frente.

- soy tan sucio, yo....hize eso .....

- está bien, está bien, no pasa nada - lo abrazo más fuerte.

- lo...lo hize pensando en ti.

- si - en un impulso lo acostó contra el sillón mientras seguían abrazados - está bien amor - buscaron una posición cómoda para estar en el sofá recostados abrazándose - está bien eso no me molesta - ambos estaban desesperados por sentirse cerca, respirar las feromonas del contrario.

- yo, yo, te estube llamando.

- perdón por no venir - beso repetidamente su frente.

Ambos la habían pasado tan mal que al poder estar de esa manera, rápidamente se quedaron dormidos.

Olvidándose por completo de los espectadores.

Midoriya quería intervenir pero el cenizo no lo dejo acercarse, sabia que ese par no harían ninguna tontería y se confirmó al ver que esos inútiles se quedaban dormidos, así que era su turno de arreglar cuentas.

- iré a preparar algo, seguro ahora sí va a querer comer - trato de escapar a la cocina.

- explícame eso del beso - lo acoraló en el pilar de la cocina - hablá - exigió.

- te lo dije estaba mal, no significó nada, no volverá a suceder - antes de terminar de hablar fue silenciado por unos labios que lo besaban de manera experta.

Antes de darse cuenta, había sido alzado por su tracero, y él enredo sus piernas al rededor de la cadera contraria, y los besos no paraban, subiendo de tono, incluso unas manos traviesas se colaban debajo de la ropa.

- ahhh aquí no - supiraba pesadamente.

- dónde te tocó, dónde te besó - exijo saber.

- solo un ..ah beso - trato de hablar correctamente sin éxito.

- así - lo beso de manera ruda, metiendo su lengua y explorando con esta todo a su paso.

- mmmm mmm - se aferró a su espalda.

- algo así - se separó para dejarlo respirar y aprovecho para preguntar burlón conociendo la respuesta.

- no...aquí no.

- cómo dices eso - beso su cuello, subiendo hasta el oído - cuando mueves tus caderas de ese modo.

- he - recién noto que inconscientemente estaba restregando se - yo ...yo .... - estaba avergonzado pero parecía que su pareja no iba a detenerse, pero algo llamo su atención, la puerta principal, rápidamente se alejó del rubio, arreglo su ropa y salió ver qué pasaba y eran los padres de Denki.

- carajo - se molestó por ser interrumpido, arreglo su ropa y salió con su novio.

- bienvenidos - los saludo cortésmente pero nervioso.

- gracias por tu trabajo - contesto la mujer y ambos esposo se sorprendieron de ver a otro chico ahí.

- esto .... - fue interrumpido el padre por su esposa, ya que seguramente empezaría a gritar sin saber que pasaba.

- decidimos regresar calculando que ya debió terminar todo, queríamos venir rápido, esto es un poco inusual - miro al otro joven externo.

- lo que sucede es .... - comenzó a contarles, cómo sufrió y como llamaba a su alfa, pero lo más preocupante es que al salir del celo estaba tan deprimido que no vio más opción que llamar al alfa al que estubo llamando tan desesperadamente, para así conseguí subirle el ánimo.

La madre entendió un poco la situación, esos días ambos estaban estudiando y aprendiendo más sobre los omegas, no es que no les importará su hijo, al contrario les importaba tanto que decidieron que ellos no podrían ayudarlo, lo mejor era investigar, buscar ayuda y poder entender lo ocurrido, por eso confiaron en ese niño para cuidar de su pequeño.

Aún era terreno no explorado, se sentían perdidos.

Tenían miedo de causar malas impresiones sobre su hijo, querían ayudar pero al no saber cómo solo estorbarian, lo mejor era, aprender a tratar a su hijo con esta nueva condición.

El celo debió terminar sin inconvenientes, así que regresaron para darle apoyo.

Pero un omega en depresión es peligroso, así que medio entendieron que ellos no eran tan necesarios como el alfa que al parecer está saliendo con su hijo. Otro tema más para investigar.

Los esposos estaban tratando a su manera de conocer a su hijo, lo que le pasaba, cómo se sentía y con confianza Katsuki y Deku pudieron dejar ese lugar tranquilos.

Que seguramente los tortolitos los acusarían de  abandonarlos en una situación comprometedora, pero Kachan ya tenía un plan que no iba a dejar de lado, al fin de cuentas ya tenían un par de días de permiso y una tarde más no haría ninguna diferencia.

Así que arrastró a su Deku al hotel más cercano.

Para poder liberarse un poco de los celos que estubo guardando esos días.

Apenas al entrar a la habitación empezó a devorar a su presa, la ropa estorbaba y tenía que deshacerse de ella, si fuera por él la quemaría, pero elijo sentarse y esperar el espactaculo.

Pero el peliverde huyó al baño con la excusa de estar sucio.

Lo perdonaría solo porque quería darse un baño también, pero aprovecho de buscar en su mochila condones y lubricantes, que era lo que tenía ya listos para su encuentro, si no fuera por el cambio de planes con la pareja de tontos.

Al salir su chico en un bata, también entro a darse un baño, corto pues sus ansias eran muy grandes.

El peliverde ya estaba bajo las sábanas completamente desnudo esperándolo.

Bakugo solo sonrió de lado, pues apresar de todo su novio se seguía mostrando tímido a la hora de intimar.

Se acercó cuál depredador listo para devorar el manjar que estaba frente a el.

Subió a la cama quitando la sábana, se posicionó entre sus piernas las que tubo que abrir para mejor acceso y se alegro al ver cómo este se tensaba e intentaba cubrirse con sus manos esa zona.

No le funcionó ya que sus manos fueron alejadas y sus piernas aún más abiertas.

Acercó el lubricante ya listo para comenzar.

- ya me prepare - se escuchó un murmullo, casi imperceptible, de no se que la habitación estubiera tan silenciosa.

- tantas malditas ganas tienes, que ya no quieres esperar - puso lubricante en sus dedos y de igual manera empezó a meter uno lentamente.

- ahhh ahhh porfavor.

Era verdad que ya estaba dilatado, no batalló en colocar un segundo dedo, pero le gustaba esa reacción y sus súplicas, él mismo no podía aguantar las ganas de clavarse hasta lo más profundo, pero hacer suplicar a su omega era un deleite que no quería perder.

Solo unos minutos siguió con la tortura, para empezar el plato principal, entrando de una sola estocada en esa entrada que ya palpitaba de la exitacion.

Para ambos era la gloria, las embestidas fuertes del rubio eran su cosa favorita, combinada con esas grandes manos acariciando sus pezones y sus lenguas jugando entre ellas.

No se quedaba atrás arañando esa amplia espalda, esos músculos bien formados, no se resistió, al separarse del beso, mordió jugetonamente sus hombros, dejando algunas marcas.

Bakugo quería seguir, ponerlo en otras posiciones, nalgear su bonito y respingón culito, mientras su Deku rogaba por su enorme verga.

Pero estaban agotados, habían dormido muy poco y la preocupación de sus amigos los tenía agotados, después de correrse se abrazaron y se quedaron dormidos casi al instante.

Ocuparon casi todo el tiempo en eso, dormir abrazados.

Pero ya se sentían mucho mejor, regresaron a sus casas felices, aunque uno no lo demostraba mucho.

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Gracias por leer

🤭 Regresamos con la pareja principal ☺️😏