Prólogo: Bienvenido, escuadrón Gremory
Nuestra historia, por más raro que suene comienza en el infierno, más específicamente en el territorio perteneciente a la gran casa de los Gremory, una de las últimas casas de demonios puros que queda en pie.
Dentro de este gran territorio perteneciente a la casa Gremory, nos ubicamos en uno de los edificios más importantes de este territorio y ese es nada más y nada menos que las instalaciones militares de la casa Gremory. Dentro de estas instalaciones se entrena constantemente a nuevas fuerzas armadas destinadas a la protección y resguardo de la casa Gremory así como para la protección del Inframundo en caso de ser necesario. En este edificio también se llevan a cabo ejercicios de estrategia militar administrados directamente por la cabeza de la familia Gremory.
Volviendo a la academia militar, nos ubicamos en el área de despegue y llegada de helicópteros que transportan soldados de un lugar a otro y/o provisiones según se necesite y en estos momentos es justo lo que está pasando.
En estos momentos se encuentra un helicóptero aterrizando en una de las pistas disponibles, ni bien quedó perfectamente anclado en tierra, una de las puertas del helicóptero se abrió y acto seguido, un joven de cabello verde y en forma bajo de este. Una vez abajo del helicóptero, el joven solo hizo un gesto al piloto y posteriormente el helicóptero despegó una vez más.
Ni bien el helicóptero se fue, el joven solamente se limito a suspirar pesadamente para después comenzar a caminar hacia el interior de la base. Mientras caminaba a paso rápido hacia el interior recibió una llamada a través de su dispositivo COM.
*Comunicador*
-¿Ya llegaste?.- pregunto una voz femenina con algo de seriedad.
-Afirmativo, acabo de llegar a la base, ¿Algo importante que declarar?.- dijo el joven en un tono neutro mientras seguía avanzando.
El joven solamente escucho un suspiro de alivio del otro lado de la línea y posteriormente aquella voz volvió.
-Llegaste en un buen momento, por el momento ve a los vestidores, date un baño y ponte presentable. Te daré más detalles más tarde.- dijo la voz con seriedad.
-¿Ni siquiera me vas a dar una pista? Vine desde muy lejos, ni siquiera ha llegado mi equipo.- dijo el joven en un tono algo bromista y con una leve sonrisa.
Una vez más, aquella voz hizo una pausa y ante está el joven soltó una pequeña carcajada, cosa que molesto aún más a aquella voz y finalmente luego de undo segundos, está regreso.
-No (T/N), Solo haz lo que te dije, ¿De acuerdo? Control, cambio y fuera.- dijo la voz algo molesta.
*Fin de la llamada*
El joven, ahora conocido como (T/N) solamente río una vez más mientras veía como aquel camino entre el y la entrada de la base no hacia nada más que acortarse y eso lo ponía nervioso de cierta forma, pero no había tiempo para sentir nervioso, o al menos no de momento. Aunque tampoco podía negar que sentía curiosidad acerca del motivo por el cual había sido llamado al cuartel general.
-Espero que esto sea interesante.- pensó (T/N) bastante curioso mientras su expresión daba entender que esperaba un desafío.
Tiempo después/ área de barracas
En estos momentos podemos apreciar que solamente se encuentra un individuo en este lugar, este es uno de los soldados más jóvenes y hábiles que ha estado en la academia en mucho tiempo y eso ha levantado el interés de más de uno pero eso no es lo importante ahora. No, pero ¿Quien es este joven?
Este joven es, como ya mencionamos anteriormente, (T/N) Ishikawa y es uno de los pocos demonios de sangre pura que quedan en el inframundo, obviamente sin contar a los que pertenecen a las grandes de casas de demonios que aún fungen como pilares del inframundo.
Regresando con (T/N), este se encuentra sentado sobre una cama mientras tiene las manos juntas y la cabeza agachada ya que varios pensamientos surcaban su mente a grandes velocidades. Y es por esa única razón que aquella habitación estaba completamente en un silencio prácticamente sepulcral, tanto es así que parece que no hay nadie y sin embargo, así es.
En ese momento (T/N) no podía evitar sentirse algo nervioso y la razón no era para menos y es que, el se encontraba ahí solo debido a que su superior lo había citado en dicho lugar. Cosa que por si sola no es extraña pero, está vez lo había citado solamente a el y eso sí era un poco extraño, además, estaba el hecho de que cuando lo contacto a través de su comunicador se oía bastante serio y eso no ayuda en nada a aquella situación ni a los sentimientos de (T/N).
Aproximadamente unos 20 minutos después de que (T/N) hubiera llegado a las barracas luego de darse un baño. Finalmente la única puerta que había se abrió con algo de lentitud. (T/N) Al ver eso se levantó de inmediato mientras se ponía en posición de firmes mientras realizaba el saludo militar común.
Cuando la puerta se abrió por completo, ingreso en la habitación un hombre alto y robusto, parecía estar casi en sus 50 años con una expresión seria inamovible, aunque tiene mucho años más de lo que aparenta.
Cuando esté hombre estuvo delante de (T/N) contestó el saludo y posteriormente este último paso a posición de firmes con los brazos en la espalda.
-Siempre es un gusto verte (T/N), ¿Dónde está el resto de tu escuadrón?.- pregunto el hombre en un tono neutro.
-Mi escuadrón se quedó en el área de tiro como ordenó, señor.- dijo (T/N) en un tono neutro pero con claro respeto.
El hombre solamente asintió con la cabeza, antes de volver a hablar.
-Seguramente tienes muchas preguntas, pero para tu mala suerte yo no estoy autorizado para responderte, líder de escuadrón.- dijo el hombre con el mismo tono anterior.
Eso confundió de sobremanera (T/N), si antes no tenía idea del motivo del por qué estaba ahí, ahora estaba peor.
-¿A qué se refiere señor? ¿He cometido alguna equivocación?.- pregunto (T/N) con preocupación aunque supo disimularlo.
Ante la interrogativa de (T/N) el hombre solamente nego con la cabeza y posteriormente suspiró pesadamente.
-Nada de eso, líder de escuadrón. Verás, hoy nos visita alguien bastante importante y te busca a ti y a tu equipo. El quería verlos a todos pero yo le sugerí que hablara contigo primero.- dijo el hombre ahora con un claro tono de seriedad que logro ponerle la piel de gallina a (T/N).
-¿De quién se trata, señor?.- pregunto (T/N) confundido e intrigado.
-Lo siento, el quiere que no te diga su identidad hasta que no hables con el. Ahora, por favor sígueme. Nuestro invitado no es del tipo que quieres dejar esperando.- dijo el hombre con un leve tono de seriedad
Con todo dicho, el hombre saco un puro de su traje y tras encenderlo dió media vuelta para después empezar a caminar mientras le hacía un gesto con la mano a (T/N) para que este lo siguiera, (T/N) solo asintió levemente con la cabeza antes de comenzar a caminar detrás de su superior a paso rápido y en silencio.
Con cada paso que daba, los nervios de (T/N) así como diversos pensamientos no hacían otra cosa más que agudizarse. Jamás en todo su periodo de servicio había sido llamado por alguien en un puesto realmente importante y eso podía ser o algo muy bueno que impulsaría su carrera como soldado o por el contrario, sería el despido mas doloroso, cruel y vergonzoso que alguien podría experimentar jamas.
Por momentos (T/N) quería detener sus pasos y pedirle a su superior que buscará a otro candidato. No obstante, sabía que eso no pasaría ni aunque le suplicará de rodillas que lo hiciera. A mas se movían por los pasillos, más se aceleraba los latidos de su corazón.
-Ya casi llegamos, espero que estés preparado. Nuestro invitado cree que tú y tu equipo son aptos para llevar a cabo una misión de suma importancia y yo no he podido convencerlo de lo contrario así que mucha suerte.- dijo el hombre con un tono de voz casi robótico y frío.
-Pobre muchacho. Yo conozco algo que va a matarte mucho antes que una bala o agua bendita joven Ishikawa. Espero verte algún día y que no sea en tu funeral.- pensó el hombre con cierta pena y preocupación por el destino incierto del chico.
Después de ese comentario por parte del hombre mayor, ambos siguieron su camino en silencio, aunque (T/N) no pudo evitar tragar saliva después de eso.
Finalmente, luego de unos minutos que para (T/N) fueron eternos ambos se detuvieron frente a una puerta, (T/N) reconoció a la perfección el lugar pues ya había estado ahí más de una vez. Así es, estamos hablando de la sala de guerra, uno de los lugares más visitados por (T/N) pues es el lugar en el que suelen asignarle misiones y detalles de las mismas.
El hombre sin mediar palabra alguna abrió la puerta, posteriormente ingreso en la misma y (T/N) lo siguió hacia el interior.
Una vez dentro (T/N) cerro la puerta y posteriormente se quedó detrás de su superior, cosa que le impedía ver a su "invitado" y viceversa.
-Muy bien, aquí está el soldado que pidió ver. Es libre de preguntar lo que guste.- dijo el hombre en un tono de absoluto respeto y ligera cordialidad.
Inmediatamente después el hombre se hizo a un lado, permitiéndole a (T/N) visualizar a su invitado y al verlo casi se desmaya de la impresión y como no si al frente de el se encuentra uno, no. El hombre más importante en todo el infierno.
El hombre en cuestión es un hombre de cabello rojo y unos muy peculiares ojos de color azul que hacen un excelente contraste con su cabello.
El hombre al ver a (T/N) sonrió levemente y posteriormente se acercó un poco.
-¿Cómo estás muchacho? ¿Sabes quién soy?.- pregunto el hombre con un tono relajado.
(T/N) inmediatamente se puso sobre una de sus rodillas y con la mirada baja procedió a contestar a la pregunta.
-Usted es Sirzech Gremory. Nuestro actual Lucifer, es un honor estar en su presencia.- dijo (T/N) en un tono de absoluto respeto y bastante nervioso.
El hombre, ahora identificado como Sirzech Gremory solamente soltó una leve carcajada antes de voltear a ver al hombre mayor.
-Es tan educado como dijiste, me agrada mucho. Muy bien, ya puedes levantarte muchacho. Tu y yo tenemos que hablar.- dijo Sirzech tranquilamente.
(T/N) solamente agradeció y luego se levanto para posteriormente acercarse a una mesa que había en el centro luego de que Sirchez le hiciera un gesto para que se acercara a la misma. La mesa en cuestión tenía una pantalla en el centro y mostraba de manera digital diversos datos.
-Se que hace poco tu equipo cazo a un demonio renegado. Quiero que me hables de eso.- dijo Sirzech aún con un tono relajado.
-Señor, si señor.- contestó (T/N) en un tono neutro.
Inmediatamente después de eso (T/N) comenzó a mover cosas en el centro de la mesa haciendo aparecer toda la información que había obtenido y/o rescatado de su misión.
-Como bien sabe, la semana pasada encontramos y cazamos un demonio renegado. Sin embargo, tal y como reportamos al finalizar la misión este demonio renegado era totalmente diferente al resto. Estaba mejor armado y preparado, además usaba distintas estrategias para tratar de eliminarnos, incluso tenía varios humanos como rehenes, algunos intactos otros no tanto y algunos ya estaban muertos. Algo totalmente inusual en demonios renegados.- dijo (T/N) con seriedad mientras exponía la situación y le mostraba a Sirzech imagenes y documentos que respaldaban sus palabras.
Sirzech se tomó su tiempo para revisar todo lo que (T/N) le mostraba y a este último le sorprendía la velocidad con que Sirzech podía leer y analizar a la perfección imágenes y textos.
Cuando Sirzech termino de analizar la información presentada por el joven Ishikawa, centro toda su atención en el susodicho y este no pudo hacer más que prepararse para lo que fuera que el destino le tenga preparado.
-Tal y como mencionas joven Ishikawa, la actitud de demonios renegados ha cambiado drásticamente y eso ha terminado con la vida de varios demonios, ya sean soldados como tú o nobles como yo y ni hablemos de las incontables bajas humanas. No importa tu clase social, ellos han matado todo lo que se ha enfrentado a ellos y debemos averiguar cómo y por qué.- dijo Sirchez ahora con una expresión diferente y un tono de voz tan frío que (T/N) sintió que se congelaba.
A pesar de sentir un gran miedo invadir su cuerpo, (T/N) controló a la perfección su emoción y procedió a contestar con total normalidad.
-Lo entiendo señor, pero ¿Que tiene que ver mi equipo y yo con todo esto? Si necesita que asesine más demonios renegados lo haré con mucho gusto, es mi deber.- dijo (T/N) con respeto y absoluta determinación.
Sirchez sonrió al ver la llama dentro de (T/N), de algún modo le recordaba a el en a algunos aspectos, pero no es momento para eso.
-Agradezco tu compromiso y determinación para acabar con lo que amenaza nuestras vidas. Pero no, tengo algo más importante que pedirles. Yo Sirzech Gremory por la presente solicito al equipo, ahora renombrado como Black Gremory que se conviertan en los principales defensores y protectores de la heredera de la casa Gremory; Rias Gremory.- dijo Sirchez con total seriedad.
.....
.....
.....
Eso dejo frío a (T/N), el simplemente no esperaba eso de ninguna manera. De todos los escenarios posibles ese era justo el que el no esperaría ni en un millon de años. Claro el estaba dispuesto a hacer todo lo que le digan, es un soldado, ese es su trabajo pero ¿Cuidar a la princesa Carmesí? Hasta donde el sabía ella no vivía en el infierno y los rumores dicen que es alguien fuerte y hábil con la energía de la destrucción.
Sirchez, al ver la expresión de confusión de parte de (T/N) no pudo evitar reir levemente, pues esperaba esa reacción de su parte y esto solo lo hacía más divertido de lo que el pensaba.
-Va a ser muy divertido ver a mi querida hermana convivir con estos jóvenes, se que hace poco reencarnó a su peon y que este al parecer guarda una sacred gear, pero este joven es mi carta bajo la manga.- penso Sirchez con cierta emoción y complicidad.
Sirchez miraba con grandes espectativas al joven frente a el, obviamente su elección no era solo por qué sí. No, el se había tomado el tiempo necesario para anailzar y evaluar a detalle a más de un escuadrón para tomar una decisión y este joven; (T/N) Ishikawa, era el más indicado para llevar a cabo lo que el tenía planeado, además de que tenía la misma edad que el recien resucitado peon de su hermana.
(T/N), por otra parte seguía a la expectativa de que lo pudiera decir Sirzech, estaba más que claro que lo que le habían encomendado era que iba más allá de lo que le piden usualmente, pero, al final y al cabo no podía neegarse si es que ese era el veredicto final. Así que se limitaría a realizar su trabajo con la mejor actitud posible y se esforzaria por llevarse bien con la princesa carmesí.
-Bueno, ya he cubierto lo principal y no quiero quitarle más tiempo del necesario a un saldado tan sobresaliente como usted joven Ishiskawa. Por favor, valla a comer y descansar, mañana por la tarde irán al mundo humano a conocer a mi hermana.- dijo Sirchez nuevamente en un tono relajado y con una leve sonrisa.
(T/N) solo hizo una reverencia ante Sirzech y posteriormente salió de la sala en una aparente calma, como si todo lo que acababa de pasar no fuera tan grave.
Una vez fuera de la sala, (T/N) se encontraba caminando hacia las barracas nuevamente, ¿La razón? Simple, antes de llegar a la base ya había pasado por una misión que lo había dejado algo cansado, además, las órdenes que acababa de recibir no eran fáciles de digerir. Visto con perspectiva no parecía tener tanto peso lo que le habían solicitado. Pero, el sabía que esa tarea no sería sencilla y menos con el movimiento reciente que estaban teniendo los demonios renegados.
(T/N) Llegó a un punto en el que se decidió a dejar de pensar en eso para evitar estresarse innecesariamente. Ya se encargaría de resolver los problemas una vez que despertara más descansado y fresco.
-Ir a ayudar a la heredes del clan Gremory, he? ¿Qué tan difícil puede ser? Esto seguramente va a ser sencillo, ¿Que es lo peor que puede pasar?.- pensó (T/N) algo confiado y seguro para quitarse los nervios.
Fin del prólogo
Bueno, antes de irme quiero decir que este capítulo no me convence del todo y puede que lo re escriba más a delante. Pero bueno, luego de un tiempo con un bloqueo creativo me salió esto, así que no me queda de otra más que esperar que les haya gustado y nos vemos en otro capitulo.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top