Prologo


"El Diario De La Bestia"
(Un amor inmortal)
Por Mizha


Llegó un momento en el que se sentía observada por algo o por alguien. Sin importar la hora a cada momento se sentía perseguida. Imposible no mantener despierta ese corazonada de alerta que hasta el día de hoy, le mantenía con vida.

Siempre se sentía así.

El tiempo lento pasaban y una especie de humo, hacia lucir todo diferente.

El momento se acercaba.

Lo supo.

El ambiente era espeso y silencioso; la consumía en un sorbo. Y a su alrededor, con ligeros brotes de desesperación, trataba de buscar a alguien con esmero; en todo caso era mejor toparse con la propia nada, pues el miedo que le invadía le asfixiaba.

— Al no saber qué buscar simplemente ignoras, — Era la frase que se repetía como su único consuelo.

En algunos momentos la mujer azul, ignoraba lo que sucedía a su alrededor. O por lo menos hacia el esfuerzo de mantenerse “tranquila”

Y no por miedo. Sino más bien, al estar tan acostumbrada a la misma emoción, el miedo se convertía en cosa de todos los días.

— El miedo ya no — se repetía, — El miedo ya no. — respiró hondo.

El miedo ya no le calaba. O al menos eso creía.

Y ante todo se mentalizaba a la situación sin saber que la pondría en práctica.

— Corre y no pares, — se decía a si misma

Corre sin descansar.

Corre como si no hubiera mañana.

Corre y no te detengas, por nada ni por nadie.

Corre, que nadie cubrirá tu espalda.

Corre, que ya llegará el momento en el que podrás descansar.

Mientras tanto, corre y no mires hacia atrás — fruncía su ceño con decisión.

Y corrió. Corrió porque su vida dependía de ello.

— Solo debo correr. Correr y huir de todo y todos. — esa era su meta.

Huir de lo desconocido o aferrarse a ello. Pues era su decisión el continuar o no. Ella podía elegir. Pues finalmente era dueña de su vida y de su destino. Aunque pareciese todo lo contrario.

— ¡No puedo con mi propia vida!— su expresión era jadeante. Su vista mostraba el terror al dilatarse sus pupilas. Aun así continuaba corriendo porqué algo, alguien la seguía y ella lo sabia.

— ¿Pero de qué huyo? — le preguntaba a la nada — ¿De qué? Si él en realidad no existe.

Y ni existirá.

¿O si?

Solo debía correr ¿Pero hacía donde? ¿A la izquierda o derecha? ¿Qué camino debía tomar?.

— Hacia dónde tengo que ir — Desesperada observaba y se preguntaba lo mismo de siempre. — ¿Por qué a mi? ¿Por qué yo?

El simple ¿Por qué?

Aun así continuo corriendo, no sabia hacia donde iba, Era más de media noche pero eso era lo que menos le importaba ahora.

Corrió sin rumbo, sin dirección.

En la calle pasaban algunas personas que aún se mantenían en ella. Sin importar, ella solo quería estar bien. Solo quería creer que lo que había visto, lo que había vivido y lo que le había dicho; no era real.

Solo quería olvidar pero no podía.

No podía.

Tenía que correr, correr. Huir o prepararse para morir.

— ¡Estúpida! — se recriminó, —Sí, eso es lo que soy, una completa estúpida que huye de todos.

Pero esta vez, no fue su decisión. Esta vez solo hizo lo que le pidió.

Corrió.

Corrió hasta ya no pudo más.

— Debo parar, debo descansar — jadeaba — Solo debo parar, mis piernas no pueden más.

Su respiración, su corazón estaban tan acelerado que se le saldría del pecho.

Continuó sin parar.

— Ya no puedo más... — hablo a la nada, con la esperanza que él le escuchara.

Cayó al suelo, sin idea alguna de donde se encontraba. La calle estaba desolada, ninguna alma se aparecía por ahí. Ella solo corrió, pero ahora no sabía dónde estaba.

— No puedo levantarme. — hablo al borde de la desesperación.

Él se acerca y no podía, no podía continuar.

No podía.

— Dios mío, ayúdame por favor. — estaba angustiada.

— Sabes que ya nadie vendrá, ya nadie puede protegerte ahora.— le contestó una voz.

— Que quieres decir con nadie, ¿Y el otro chico?

— Digamos que ya me he encargado de él. — contestó la voz misteriosa.

— No puede ser — se sorprendió — Pe-Pero si él me lo prometió. ¡No! — se exaltó junto con el fruncir de sus cejas — No quiero morir, no aquí, no hoy, no por favor.

¿Pero ahora que se supone que iba hacer?

— Que alguien me ayude — imploraba en susurros y desesperantes lágrimas — Por favor no me hagas daño. Yo solo... yo solo quería, ¡Quería saber quien me observaba! —dijo en un grito.

Y continuó gritando con desesperación, al borde de enloquecer. Pues ella no estaba loca.

No lo estaba.

— Yo solo quiero volver el tiempo atrás y hacer que nada de esto pasó. — Trató de levantarse pero no podía. Él se acercaba y ella se mostraba con miedo.

Ella deseaba con la esperanza de sus orbes azules, que el otro volviera y la salvara.

— ¿Pero cómo? — solo veía su vida pasar frente a sus ojos, esperando lo peor.

Esperando la muerte, o quizás, esperando que él le abrazaba en  su cama. Deseando que le robara sus besos. Anhelando al que se robo su corazón. Quería que observabara, escuchar su voz diciendo:

— Corre y no pares...

Pero debía de afrontar la realidad. Él ya no estaba y se encontraba sola.

— No puedo levantarme, no puedo continuar, no puedo enfrentarlo sola. — lágrimas recorrían su rostro.

Aun así seguía ahí, luchando. Seguía del porque deseaba regresar el tiempo.

— Solo quiero que sea ayer por la mañana. — dijo en hilo de voz. Esperando que aquello cambiara algo de lo que ocurría.

El estaba tan cerca, pero tan cerca de ella, que podía sentir su respiración.

Ya nada importaba.

Cerró sus ojos mientras lágrimas salían de ellos y no pudo evitar recordar todo lo que recién había vivido.

¿Estaba lista?

Sí, lo estaba.

Pero, ¿Lista para qué? te estarás preguntando.

Pues asimiló todo y se preparaba para morir o formar parte de ellos.

(48 horas antes.)
___________________________________

El Diario de la bestia es una historia completamente diferente que te atrapara desde el inicio.

Acompañame en su transcurso, te aseguro que te encantará.
Costa de 10 capítulos, dos extras mas prólogo y epíologo. La historia es original, no adaptación de ninguna otra obra, película o serie.

Te aconsejo que si ya leíste la historia, la leas con la edición completa ya que se modificara pequeños fragmentos.

Muchas gracias por leer, la historia esta disponible en Fanfiction y facebook. También puedes seguirme en mi fanpage para enterarte de absolutamente todo.

Espero la disfrutes, tanto como yo escribiendola.

~Mizha.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top