Soy Mikecrack y os contaré una historia que hizo que me enamorara de mi dueño. Hace mucho tiempo formé un grupo de amigos llamado Los Compas, en el que están: Trollino, TimbaVK, RiusPlay, RaptorGamer, Sparta356, InVictor y ElMayo97. Anteriormente, Trollino, Timba y yo estuvimos en otro grupo llamado Los Portalers, que se formó el día en que nos conocimos todos. Los Portalers estaba compuesto por TinenQa, ManuCraft, Timba, Trollino y yo. Empecemos desde el principio: Trollino y yo ya nos conocíamos de antes, él es mi dueño y yo su mascotita, jeje. Nos hicimos amigos de Timba, y él nos presentó tanto a Tina como a Manu.

Vamos al día en que todos nos conocimos y formamos el grupo:

—Bueno Mike, acuérdate de comportarte. Timba nos quiere presentar a unos amigos suyos, por favor —me dijo Trollino seriamente.

—Pero vamos a ver, ¡ni que yo me metiera en líos queriendo, Trolli! —dije bajando mis orejas, sinceramente.

—A veces eso parece, cachorrito —me dijo, sentándose a mi lado—. Perdón, ya sabes que normalmente tengo muchas cosas en la cabeza y una de ellas es tu bienestar, mi perrito...

—Ya lo sé, Trolli —le abracé y le lamí la mejilla.

A lo lejos, pude apreciar la silueta de Timba y dos chicos más. Una chica de pelo rosa con un jersey de creeper y un... ¿Zombi? Bueno, ¿quién soy yo para juzgar? Soy un perro que habla por los codos, la verdad, jajaja.

—¡Hola Timba y compañía! —dijimos Trollino y yo al unísono.

—Hola Trollino, hola Mike, ¿cómo estáis? —preguntó el chico de pelo azul—. Os presento a TinenQa, una chica bastante astuta que nos puede ayudar con el tema de este portal que apareció. Ella viene de otra dimensión en la que los creepers no son monstruos, sino todo lo contrario: son humanos. Nos puede ayudar con herramientas y pociones. Y este zombi de aquí es ManuCraft. No es un zombi hostil, sino todo lo contrario. Es un zombi bastante inteligente que sabe de tecnología y hacer pociones. Él nos puede ayudar en cualquier cosa sin que tengamos problemas.

—Hola, soy Tina, es un placer conoceros, Trollino. Y qué perrito más lindo —dijo Tina con una leve sonrisa.

—¡Oíste, Trolli! ¡Me dijo lindo!

—Yo soy Manu, no tenéis por qué temerme. No os comeré ni os mataré por la noche, jaja. Estoy aquí para ayudar en todo lo que sea posible —sonrió el zombi—. No os preocupéis, en verdad soy un experimento fallido que no salió del todo bien. Quisieron intentar revivirme como si fuera un aldeano zombi, pero como no lo soy, fallaron.

—Pues es un placer conoceros. Entonces, ¿queréis ayudarnos con todos estos portales que están apareciendo de la noche a la mañana? —dijo Trollino.

—¡Pues claro! —dijeron ambos—. Queremos ayudaros en lo que haga falta, pero necesitaremos un nombre, ¿no creen? —dijo la chica de pelo rosa.

—Tienes razón —añadí yo—. ¿Qué tal si nos llamamos Los Portalers?

—Es un buen nombre —dijeron todos a la vez.

Un mes después de convivencia y preparación, Tina quiso hablar conmigo a solas sobre asuntos amorosos.

—¿Qué ocurre, Tina? —pregunté algo confundido.

—Oye Mike, he estado observándote tanto a ti como a Trollino, Timba y Manu —me comentó.

—Entiendo.

—No quiero meterme donde no me llaman, pero estás enamorado de Trollino, ¿verdad? —dijo a lo que procedí a sonrojarme.

—¿Qué quieres decir, Tina? —pregunté, pareciendo un tomate.

—Es que cada vez que te veo a su lado, cambia mucho la forma en que miras. Por ejemplo, no es lo mismo cómo miras a Timba a cómo miras a Trollino. Cuando miras a Trolli se te iluminan los ojos y te quedas embobado, jaja —quiso añadir ella.

—Bueno, la verdad, Tina, no te lo voy a negar. Me gusta bastante y me hace muy feliz. Además, él me rescató, ¿sabes?

—Claro que lo sé, pero intenta disimular un poco que se nota mucho que estás enamorado de él, por favor, jaja —me comentó—. Sois tan lindos. La verdad, quisiera tener a alguien especial como tú y Trolli.

Pues bueno, chicos, aquí dejo el primer capítulo mejorado. Seguramente seguiré con el rumbo de la historia, pero estará completamente cambiada respecto a lo que era antes. ¡Os quiero!