Narra Vero

Estábamos en la casa después del emocionante y romántico momento en el bolerama a go go cuando tocaron a la puerta, abrí y era Manuel con su perrito Galileo. 

- Hola Manuel y Galileo, ¿Que los trajo por aquí?.- pregunté. 

- Hola Vero, pues es que invité a Amelia al autocinema y como Eva todavía sigue en el bolerama a go go con JJ, Rubén y Sofía están trabajando en el dinner, no sé con quién dejar encargado a Galileo.- me explicó. 

- No te preocupes, si quieres déjalo aquí y ya cuando regreses lo vienes a recoger.- propuse. 

- Si claro, perfecto, entonces cuídalo mucho, gracias Vero.- dijo Manuel, se fue y cerré la puerta. 

- Chicos, vengan por favor.- dije a los demás. 

- ¿Qué pasó Vero?.- preguntó Simón. 

- Ay que bonito perrito.- dijo Martín  emocionado. 

- Se llama Galileo, es de Manuel, nos encargó que lo cuidáramos mientras el se iba con Amelia al autocinema.- comenté. 

- Ay este perrito es un amor, me recuerda mucho a Malta, la mascota de Isaza.- dijo Alejandro. 

- Si, no saben cuanto la extraño.- dijo Isaza nostálgico. 

- Galileo, da la pata.- ordenó Isa y luego luego se la dio. 

Todos en Manzanares queremos a Galileo, es un perrito muy simpático. 

- Ay, ¿Que tal si le damos un bañito?.- preguntó Juan Pablo. 

- Si mi amor qué buena idea.- le dije con una sonrisa. 

- Solo que tenemos un problema, en la casa no hay shampoo para perros.- recordó Nath. 

- Pero podemos usar el shampoo de Vero, de seguro le deja el pelo oliendo rico.- dijo Isa. 

Y lo fuimos a bañar entre todos y después lo secamos y lo cepillamos. Luego le dimos de comer y lo sacamos a pasear. 

Un rato después, cuando Galileo se quedó dormido nos pusimos a ver una película y después de la película nos fuimos a organizar lo del show de la próxima semana en Club 57.   

- Ok Maca, ¿Qué más?.- preguntó Juan Pablo. 

- El vestido azul y ya no sé que mas.- confesó ella. 

- Isa.- dijo Vero. 

- Despuntarse el cabello, comprar el vestido azul, practicar la coreografía, arreglar los maquillajes y asegurarse de que los micrófonos estén para todos.- recordó Isa. 

Tras un par de horas, Manuel vino por Galileo y todos nos fuimos a dormir, bueno antes, Juan Pablo y yo nos pusimos a ensayar nuestra canción para nuestro solo en Club 57. 

Al día siguiente nos fuimos a Club 57 para la presentación en solitario de Juan Pablo y mia, ya estábamos a punto de salir al escenario cuando nos dimos un beso corto y rápido.  

- Y a continuación, el solo de esta semana.- anunció Amelia con alegría.  

- Vamos es nuestro turno.- me susurró. 

Cuando finalizó la presentación y el programa nos fuimos directamente a nuestro camerino. 

- ¡¿No fue increíble?!.- preguntó emocionada Maca. 

- Ay si fue como una película de amor.- contestó Isa. 

- Pero no es la de la bella y la bestia, no, no, no.- dijo Sofi. 

- Y tanto que querías un solo para ti y Juan Pablo, que lo conseguiste Vero.- comentó ilusionada Nath. 

- Si, estar con él es un sueño, un maravilloso sueño del que probablemente algun dia despierte.- dije algo decaída. 

- Pero aunque ellos se vayan a su tiempo, nos vamos a seguir teniendo el uno al otro.- dijo Isa. 

- Las rosagatas y Morat siempre unidos.- complemento Maca. 

*Saludo de rosagatas*

- Gracias chicas.