"Ojalá pudiéramos tener hijos", se había quejado Hizashi un día, viendo algún tipo de película mientras Shouta trabajaba en algunas cosas para su programa de radio.

"¿Por qué no podemos?" Shouta preguntó sin mirar hacia arriba.

"¿Quieres decir biológicamente o...?" Hizashi rió, moviéndose para mirarlo.

"Podríamos adoptar", señaló Shouta.

"Somos criminales buscados, Sho. La única razón por la que nos salimos con la nuestra con el programa de radio es porque lo hacemos de forma independiente y trabajamos solos. Si trabajara en una estación real, nos atraparían," le recordó Hizashi. "Ser evaluados para adoptar un niño definitivamente nos atraparía".

"Podríamos… secuestrar a algunos", sugirió Shouta, mirando hacia arriba cuando su esposo jadeó.

"¿Cómo pudiste siquiera sugerir tal cosa?" cuestionó Hizashi, viéndose horrorizado. "No me llevaré a un niño de su familia".

"Me refiero a niños en malas situaciones", defendió Shouta. "Hay toneladas de niños por ahí que son abusados ​​por sus padres o padres adoptivos, y nadie está haciendo nada al respecto. No los estaríamos alejando de sus familias, los estaríamos salvando".

"Ese es un buen punto," concedió Hizashi. Y esa conversación puso en marcha el plan.

=============

Durante los siguientes meses, estuvieron atentos a los niños en sus rutas de patrulla habituales. Como vigilantes, no era raro encontrarse con niños en peligro. Sin embargo, el hecho de que estuvieran en el lugar equivocado en el momento equivocado no significa que su vida familiar sea mala. Es por eso que también pidieron algunos favores de sus conexiones más criminales.

Estuvieron atentos a los niños en sus trabajos remunerados. Porque bueno, si el traficante para el que fueron contratados para asesinar tuviera un hijo, no podrían dejar a ese pobre niño solo, ¿verdad? Desafortunadamente, no tuvieron esa suerte. Toda la escoria de la que fueron contratados para limpiar la sociedad no tenía hijos o no tenía custodia.

Eventualmente, sin embargo, Hizashi y Shouta eligieron sus objetivos. Shinsou Hitoshi, de 10 años, era un huérfano con un quirk de lavado de cerebro que estaba siendo abusado en el sistema de cuidado de crianza debido a su quirk de "villano". Midoriya Izuku, de 10 años, fue abandonado por su padre, descuidado por su madre y brutalmente intimidado por sus compañeros de escuela, todo porque no tenía quirk. Y, por último, Toga Himiko, de 11 años, estaba pasando hambre y condicionada para ignorar su quirk requisito de ingestión de sangre.

En preparación para sus hijos, despejaron el estudio y la oficina para su… otro trabajo, y trasladaron todo a un apartamento de una habitación al final del pasillo que pudieron alquilar. La sala de estar habitual se convirtió en el nuevo estudio de Hizashi y el dormitorio se convirtió en la nueva oficina. Tuvieron suerte de que los trabajos de asesinato pagaran tanto. Tampoco era el único trabajo que tenían.

Hizashi estaba emocionado de preparar las habitaciones de los niños, pero Shouta le recordó que probablemente solo deberían proporcionar muebles básicos. De esa manera, los niños pueden elegir su decoración, ropa y demás. Fue fácil sobornar al rubio para que dejara la decoración en paz con la promesa de ir de compras con los niños más tarde. Por ahora, ordenaron muebles y artículos básicos en línea.

Finalmente, estaban listos para recibir a sus hijos. Como había tres niños pero solo dos chicos, decidieron buscar a Himiko por la mañana y a los niños por la tarde. Tenían memorizadas las rutas de los niños hacia y desde la escuela y sería fácil interceptarlos. Himiko fue más fácil de tomar de lo que alguno de ellos esperaba honestamente.

==============

Hizashi tenía el cabello suelto y vestía jeans y una camiseta sencilla. Un gran contraste con su disfraz de vigilante. Así, pasaba como un civil promedio si nadie investigaba sus antecedentes o lo veía usando su peculiaridad. Esperó en el camino habitual de Himiko a la escuela, en un área tranquila con poca gente alrededor. Pocos testigos. Muy pronto, ella estuvo a la vista, caminando lentamente.

"¿Estás bien?" preguntó, deteniéndola cuando ella pasó a su lado. Ella lo miró sin comprender por un momento antes de sonreír débilmente, una imitación de estar bien.

"Estoy bien", respondió ella, aunque su piel pálida le decía lo contrario. "Dormí hasta tarde y me perdí el desayuno. Sólo un poco de hambre, eso es todo."

Después de que la tomara, tendría que enseñarle a no ser tan abierta con los extraños. "¿Podría traerte algo de comer si quieres?" él ofreció.

"Ah, la comida normal no funcionará. Tiene que ser…" se desvaneció con una mueca.

"¿Sangre?" preguntó Hizashi, sosteniendo un vial que había sacado antes de que vinieran aquí. Sus ojos se abrieron como platos y toda aprensión desapareció de su expresión cuando lo alcanzó. "Ah ah. Ven conmigo y podrás tenerlo."

Ella estuvo de acuerdo de inmediato y él la condujo a la siguiente esquina donde estaba estacionado Shouta. Él la hizo pasar al asiento trasero, colocándose detrás de ella. "Conduce", le dijo a Shouta después de entregarle la sangre. Él la observó de cerca, esperando el momento en que el sedante hiciera efecto.

=============

Izuku e Hitoshi resultaron ser un poco más difíciles. Por un lado, tuvieron que separarse, Hizashi persiguiendo a Hitoshi y Shouta persiguiendo a Izuku. Y por dos, ninguno de los dos estaba completamente privado de un nutriente como lo había estado Himiko. Tenían un poco más de lucha en ellos.

Shouta encontró a Izuku que ya lucía un moretón en la cara y quemaduras en su uniforme. Se interpuso en el camino del chico. "Estás herido."

"Um..." Izuku se congeló donde estaba.

"Puedo tratarlos", ofreció Shouta. "Ven conmigo."

El chico lo miró con los ojos muy abiertos por un momento antes de salir disparado, corriendo en la dirección de donde venía. "¡Esperar! Estoy tratando de ayudar", gritó Shouta, corriendo tras él. Y maldita sea, si el niño era rápido, corriendo por las calles laterales y esquivando varios obstáculos.

"Niño, no voy a lastimarte", insistió Shouta, tratando de encontrar un punto de vista más alto en esta área residencial.

"¡Eso es lo que diría un secuestrador!" Izuku replicó. Y bueno, no se equivocó. Secuestrarlo era el objetivo aquí.

"Sé que te están lastimando en la escuela y los maestros no están haciendo nada al respecto", confesó Shouta. "Quiero ayudar. Soy un vigilante. Salvo a la gente".

Una cabeza de pelo verde y esponjoso asomaba por detrás de una valla. Aparentemente, había irrumpido en el jardín de alguien. Buena estrategia. "¿Un vigilante?" el chico cuestiono.

"Sí", respondió Shouta, manteniendo el contacto visual con el niño asustadizo.

"¿Cómo me ayudarías?" Izuku preguntó con obvia sospecha. Y realmente no podía decir, 'secuestrándote', ¿o sí?

"Primero, me gustaría ver qué tan mal están tus heridas y tratarlas. Tengo un botiquín de primeros auxilios", dijo Shouta, esquivando la respuesta real. Sacó el kit que en realidad tenía como prueba. El chico salió tentativamente de su escondite y Shouta se le acercó lentamente.

El niño se quitó la chaqueta y se subió la manga para revelar una quemadura en la parte superior del brazo, justo por encima del codo. Shouta limpió la herida y la vendó antes de revisar su rostro. Le indicó a Izuku que mirara hacia arriba para poder ver el moretón que se envolvía debajo de su mandíbula. Al mismo tiempo, levantó una jeringa que había estado escondiendo hacia el cuello del niño.

Izuku protestó por el agudo pinchazo de la aguja, pero rápidamente se derrumbó en los brazos de Shouta.

=============

Hizashi estaba pasando por un momento mucho más difícil. Se había acercado a Hitoshi, frunció el ceño ante los cortes en la cara del chico y no pudo hacerlo hablar. "Sé que tus padres adoptivos te maltratan. Puedo darte un mejor hogar", se había ofrecido. Pensó que Hitoshi aceptaría hasta que el chico se acercó lo suficiente como para patearlo entre las piernas y salir corriendo.

Recogiendo su alma destrozada y su orgullo, corrió tras el niño. Cuando lo alcanzó, tomó a Hitoshi entre sus brazos para evitar que se quedara fuera de su alcance otra vez. El niño le mordió la mano. Fuerte. Habiendo experimentado cosas peores, Hizashi pudo apretar los dientes y soportarlo mientras luchaba por sacar el sedante de su bolsillo. Antes de que el niño pudiera soltarse, una aguja se deslizó por su cuello y la pelea lo abandonó cuando perdió el conocimiento.

"¿Come te fue?" Shouta preguntó cuando se encontraron en el auto. Podía distinguir a Izuku, ya dormido en el asiento trasero.

"El mío me pateó, corrió y me mordió cuando lo atrapé," hizo un puchero Hizashi.

"Esperemos que sean más comprensivos cuando se despierten", dijo Shouta, ayudándolo a llevar a Hitoshi al asiento trasero con Izuku. Cinturones de seguridad en ambos niños, por supuesto. Condujeron de regreso al apartamento, acostando a los niños en su cama donde Himiko aún dormía. Les mostrarían a los niños sus habitaciones más tarde como una sorpresa.

Trajeron un par de sillas y esperaron a que sus nuevos hijos se despertaran. Izuku se movió primero, deteniéndose cuando los vio a ellos y a los otros dos niños. Hizashi lo saludó, asegurándole suavemente que estaba a salvo mientras el niño intentaba despertar a los otros dos niños. Despertó a Himiko y Hitoshi en ese orden. Himiko parecía confundida mientras que Hitoshi solo se veía a la defensiva.

"¿Qué estamos haciendo aquí?" preguntó Izuku, con los ojos llenos de preocupación y miedo.

"¡Esta es su adopción sorpresa!" exclamó Hizashi. "¡Somos sus nuevos padres!"

===============

Traduciendo uno de mis fanfics favoritos, dios como amo este fic

No esperen un horario de actualización, subiré capítulos cuando tenga tiempo por semana <3

By the way, yo hice la portada, a que está bonita? La hice en 10 minutos pq me había olvidado que se tenia que hacer portada jaksjs

(1625 palabras)