Microrrelato; pensamientos acumulados luego de las 12 de la noche; BHR.

Baekhyun se siente solo, tan solo. Escribe palabras sin sentido, unicamente para perder más tiempo de la noche cuando sabe que debe levantarse a las seis de la mañana. Pero es un lío, sentirse así, una vez más después de tanto tiempo. Usa emojis de caras sonrientes, nada fuera de lo común con sus amigos. No le cuenta a nadie que se bañó solo en la piscina de su casa por una hora pensando en absolutamente nada, flotando, mirando al cielo, respirando su soledad por la boca. Se durmió por accidente sobre su cama en la tarde y despertó horas después abrazando con fuerza una almohada, mirando por el borde corrido de la cortina en la ventana y sin moverse, tratando de adivinar si eran horas de la madrugada o el ocaso previo al anochecer. No había notado antes que podía ser tan similar, el vivir y el morir de algún fenómeno natural. Toma su móbil, son las once. En ese instante se comienza a dar cuenta de la contaminación dentro suyo, que lo envuelve, que lo come; él intenta hacer que se detenga, pero la siesta descuidada anterior hizo que la enfermedad antes controlada se propagara fácilmente. Habla por teléfono, le cuenta un poco, realmente poco, a su persona especial. Intenta recibir el consuelo que le entregado, pero se le hace difícil. Entonces comienza a escribir a las 00.28 de la noche y termina a las 00.40, sin sentir pena de sí; experimentando la pesadez de ser él mismo sobre su cuerpo, la presión claustrofóbica apretando su cabeza, las garras de su enfermedad imaginaria arañándolo por dentro. Vuelve a ver la hora, marcan las 00.42. Se duerme pensando que no despertará al día siguiente, hace lo mismo por muchas noches-y, sin embargo, siempre vuelve a abrir los ojos.