Ahora que estás aquí (Dr. Stephen Strange)*

Prólogo: Crees que Stephen te engaña con Christine por lo que le dejas, y tiempo después solucionan las cosas.

LolaHatake4
Advertencia: aquí tienes un bebé, alusión a posible infidelidad. Masturbación masculina, dirty talking, elogios, conversación de haber dado a luz, alusión a breeding kink (exitarse con la idea de quedar embarazada o embarazar a alguien más. No es necesario desear quedar embarazada o embarazar a alguien, si no que es disfrutar el riesgo que conlleva tener relaciones sexuales sin protección CON CONSENTIMIENTO).
○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○

Strange y tu llevaban ya diez meses casados, y tenían un bebé de solo dos semanas.

Un día le pediste si podía acompañarte para comprar implementos para su hijx ya que aún faltaban algunas cosas para su habitación, sin embargo Stephen te dijo que debía atender unos asuntos en Kamar-Taj, por lo que no podría ir contigo.

Más tarde cuando ibas de vuelta al Sanctum donde estabas viviendo con Stephen, llevabas a tu bebé en una cangurera en tu pecho durmiendo y un par de bolsas en tus manos, pasaste fuera de un café donde viste a Stephen hablando alegremente con Christine.

Él te había prometido que ya no había nada entre los dos, y sin embargo ahí estaba riendo y charlando con ella.

Te acercaste y decidiste encararlo, sin embargo no oíste ni una de sus palabras y volviste lo más rápido que pudiste al Sanctum que estaba a una cuadra de ahí.

Strange te siguió y trató de hablar contigo, pero lo único que consiguió fue que le lanzaras tu anillo de bodas en la cara y te llevaras una maleta con tu ropa y un bolso con la ropa de tu bebé.

Stephen se quedó devastado en su habitación, mientras que tu te quedaste en la Torre donde Tony arregló una habitación especial para ti y tu hijx y así tuvieran su espacio y comodidad.

Todos los Vengadores estaban más que felices con tu bebé ahí, mientras que Stephen trataba de acercarse a ti y pedirte que volvieras, pero no lo conseguía.

Stephen no dormía bien, no comía, y definitivamente no estaba bien. Te necesitaba a ti y a su bebé, necesitaba a su familia.

Finalmente después de casi un mes completo accediste a verle y hablar sobre lo que había ocurrido.

Stephen te explicó que Christine le había invitado a su boda, y si bien no le creías mucho, él te lo probó mostrándote la invitación.

Después de varias horas hablando, al fin volviste con el al Sanctum después de arreglar el malentendido, y él te prometió no volver a tener contacto con Christine y tu le prometiste escucharle la próxima vez.

—————

–Okey... N/T/B al fin se durmió, fue difícil pero lo conseguí.–Dijo Stephen soltando un suspiro con una sonrisa mientras entraba a la habitación.
(Nombre de Tu Bebé)

–Te dije que no sería fácil.–Reíste mientras se acercaba a ti donde estabas en la cama y se recostó encima de ti dejando su cabeza apoyada en tus pechos y abrazándote.

–Sí... pero aún aún estoy feliz de tenerles de vuelta aquí conmigo. El Sanctum de sentía muy solo sin ustedes, además de que Wong tampoco estaba.–Te dijo con una sonrisa, apoyándose en sus brazos para verte a la cara.

–Mmm... yo también te extrañé mucho.–Le dijiste con una sonrisa dejando una mano en su mejilla, y te acercaste para besarle mientras tu mano se deslizaba por su cuerpo hasta meterla bajo sus pantalones.–¿Por qué no me dejas demostrarte cuanto?

–¿Estás segura? Sabes que aún no podemos tener relaciones, hace poco diste a luz.–Te dijo viéndote con cierta preocupación.–No puede haber penetración todavía.

–¿Y quien habló de penetración?–Le preguntaste con una sonrisa tomando su miembro con tu mano y dándole un suave apretón.

Stephen soltó un pequeño gruñido y escondió su rostro en tu cuello mientras su miembro se erectaba.

–Diablos, querida...–Dijo en voz baja apretando tus caderas con sus manos.

–Aquí estoy, cariño. No me voy a ir a ningún lugar.–Le dijiste con una sonrisa dejando besos en su mejilla y mandíbula, mientras movías tu mano en su miembro.

Stephen dejó ir un gemido muy bajo, a la vez que comenzaba a embestir sus caderas en tu mano.

–Eso es... imagina que soy yo, que estás hundido dentro de mi y me vas a volver a llenar con tu semen... que va a chorrear por mis piernas fuera de mi.–Le susurraste al oído provocando que soltara un pequeño quejido y moviera sus caderas más rápido.–Muy bien... lo estás haciendo muy bien.

–Mierda querida... eres... e-eres maravillosa...–Dijo agitado en tu cuello mientras sus caderas embestían tu mano de una forma más desordenada.

–Puedo sentir que estás cerca, vamos... moja mi mano y tus pantalones con tu semen.–Volviste a susurrar en su oído con una sonrisa pícara.

Stephen soltó un quejido y finalmente se corrió sin previo aviso en tu mano dejándola empapada por completo, y sus pantalones quedando con una mancha muy húmedos.

Siguió embistiendo por un par de segundos antes de colapsar encima de ti con tu mano aún entre sus cuerpos.

Su respiración estaba agitada, mientras tú otra mano acariciaba su cabeza.

–¿Cómo te sientes?–Le preguntaste dejando un beso en su mejilla.

–Mucho mejor sabiendo que estás aquí.–Soltó un suspiro aliviado y besó tu cuello, abrazándose a ti con fuerza.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top