Una vez que se separara de sus nuevos amigos para salir en busca de su también nuevo amigo ojiazul, Bonnie recorrió todos los rincones que conocía del patio del internado.

Sus piernas ya no daban más, pero estaba decidido a encontrar a su amigo. Según le habían contado, él la había pasado muy mal antes de huir, y que también había dicho y hecho cosas que Bonnie no podía creer que su amigo las hizo. Sin embargo, él no se iba a rendir, era su nuevo amigo del que estábamos hablando, y como todos lo conocemos, cuando Bonnie tiene algo en mente, nada ni nadie puede intervenir.

Caminó hasta un rincón muy recóndito del patio, cuando oyó unas risas. Siguió el sonido de estas para encontrarse una escena completamente congelada.
Supo de inmediato que su amigo era el causante de esa helada.

Se metió entre en hielo y la escarcha de aquel sector, ignorando el dolor que sentía al ver tanta vegetación muerta y siguiendo aún el sonido de risas y voces proviniendo del centro de todo ese congelado lugar.

Entonces, detrás de un árbol, se encontraban tres chicos sentados en frío suelo compartiendo divertidos abrigados por una improvisada fogata. Uno de ellos era de cabellos rosas, otro de cabellos blancos con algunos toques rosas y el otro, el cual Bonnie podía reconocer, era de cabellos cafés.

"¡Freddy!", exclamó el pelimorado cuando vio a su amigo y corrió hacia donde este se encontraba.

"¿Bonnie?", el castaño sonrió levantándose del suelo, recibiendo a su amigo con un fuerte abrazo, "¿Q-Qué estás haciendo aquí?"

"Vine a buscarte", el ojirosa sonrió tímidamente, lo cual causó ternura a los tres chicos presentes, "Todos te buscábamos, estábamos muy preocupados por ti"

El ojiazul se sorprendió, "¿P-Preocupados... Por m-mí?"

"¡Claro que si!", sonrió el pelimorado una vez más abrazando al castaño, "Eres nuestro amigo, y nos preocupaste mucho cuando huiste... Rogábamos que no te haya pasado algo, las peores situaciones pasaron por nuestras cabezas de que algo te haya pasado. Tuvimos que cubrirte todo el día con los profes, para que no te regañaran o tuvieras problemas después con el director ¡y en los recesos te buscábamos por todas partes! Creo que recorrimos todo el internado en los pocos minutos que duran los recesos, pero como no te encontrábamos, seguimos buscando después de clases ya que tú... Eh... ¿E-Estás bien? ¿Freddy?"

El castaño ni siquiera se había percatado que lágrimas caían de sus ojos. Se había emocionado de verdad con las palabras del ojirosa, por lo que contaba que sus nuevos amigos habían hecho por él. Nadie jamás se había preocupado tanto por él...
¿En verdad lo habían hecho por él? Todo ese esfuerzo, todo ese riesgo de ellos también tener problemas, ¿por él?
No pudo evitar llorar por tal muestra de afecto.

"E-Estoy bien, B-Bonnie", lloraba el castaño con una sonrisa de oreja a oreja, "E-Es solo que n-no puedo creer que h-hayan hecho todo eso por m-mí..."

Bonnie solo sonrió.

"¡Por supuesto que lo hicimos por ti! Nos asustaste tanto, no queríamos que nada malo te sucediera", el pelimorado rió, "Hubieras visto lo histérica que estaba Chica cuando los chicos nos contaron que huiste, nos mandó enseguida a buscarte. Por primera vez en mi vida vi a el mismísimo The Golden Boy correr como un desesperado, sin importarle su peinado o su ropa. TownTrap tenía la ventaja de que corría tan rápido como un león, pero se arriesgaba a mucho usando sus poderes públicamente. SpringTrap te buscaba por todas partes y siempre volvía a tu casillero, con la esperanza de encontrarte allí. Hasta Foxy corrió como nunca lo he visto correr, también estaba preocupado por ti, aunque no quisiera admitirlo"

"W-Wow...", suspiró el castaño, tratando de aguantar las lágrimas, limpiándose de sus mejillas las que ya había derramado, "E-Eso es... B-Bueno... Y-Yo... Y-Yo no merezco t-todo eso, B-Bonnie"

El pelimorado se cargó más en el abrazo, acariciando tiernamente la espalda de Freddy, a la vez riendo inocentemente, "No digas eso, Freddy, eres nuestro amigo y un chico genial, mereces esto y mucho más"

Antes de que el ojiazul pudiese decir algo, escuchó algunos sollozos que sabía que no le correspondían a él. Se separó del abrazo para voltearse y encontrarse a los dos chicos con quien compartía hace unos minutos, llorando y consolándose entre ellos dos.

"Eso es muuuuuuuuuuuy lindo", lloraba el pelirosa sonriente, acariciando la espalda de su amigo con ternura.

"Esa es una linda amistad, bro", dijo el peliblanco, limpiándose las lágrimas para luego limpiar las de su amigo y mirarlo a sus ojos amarillos, "Te quiero, Félix"

El pelirosa se sonrojó, "También te quiero, Fede", ambos se abrazaron fuertemente.

"No homo, bro", dijo Fede en el abrazo a lo que Félix solo rió.

Freddy solo sonrió ante esa escena, y luego miró a Bonnie, quien sonría a aquellos dos chicos.
Tal vez de verdad eran sus amigos.
Amigos de verdad por una vez en su vida.
Después de tantos abusos de todo el mundo, al final había encontrado a gente que lo valoraba por quien era.
Pero, ¿en verdad merecía todo eso?
¿Qué hizo él para ser llamado amigo?

"Gracias a ti somos una banda, Freddy", dijo Bonnie como si leyese la mente del ojiazul, "Tú nos uniste en primer lugar, y si no fuera por ti, Chica, Foxy y Golden no serían mis amigos y yo seguiría siendo un don nadie... excepto para Bon, claro"

"G-Gracias, Bonnie", suspiró el castaño con una sonrisa sincera, "Gracias por encontrarme"

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"¡FREDDY!"

Todos los desesperados adolescentes que buscaron y buscaron toda la tarde, exclamaron al ver a su amigo extraviado todo el día, de la mano de Bonnie, Félix y Fede.

Chica corrió para darle un abrazo tan fuerte que casi lo bota al suelo, "¡FREDDY! ¡ESTABA TAN PREOCUPADA!"

"Ejem..."

"Quiero decir... ¡ESTÁBAMOS TAN PREOCUPADOS!", se corrigió la rubia al escuchar la queja de los demás chicos, quienes al ver que Chica por fin dejaba respirar al castaño, se acercaron también, preocupados.

"¡Tío, me asustaste tanto! Casi me matas"

"¿Estás bien, brother? ¿No te hiciste daño?"

"Freddy, no vuelvas a hacer eso, me preocupaste mucho"

"Eh... Tú, que bueno que apareciste"

Freddy solo sonrió ante la preocupación de sus nuevos amigos, así que les dio una sonrisa tranquilizadora, y dijo, "Estoy bien, chicos, g-gracias por... por todo"

Los cuatro Aliums sonrieron al escuchar el agradecimiento de su nuevo amigo, antes de unirse en un gran abrazo grupal para consolar al castaño.

Los dos chicos anteriores no perdieron el tiempo y se unieron al abrazo grupal también, ya sintiéndose parte de los amigos del ojiazul.
Fue uno de los momentos que marcó a Freddy en aquel internado. Solo faltaba que cierta voz en su cabeza se apareciera y se disculpase por todos los problemas que causó, pero gracias a la discusión que ellos habían tenido, era muy poco probable.

Entonces, llegaron las dos chicas que anteriormente habían estado con Félix y Fede, una de ellas con cabeza gacha y la otra tratando de animar a la desanimada.

"Chicas, ¿qué pasó?", preguntó el pelirosa, cuando vio a su amiga tan deshecha.

La chica pelirroja acarició la espalda de su amiga en un intento de animarla, y habló, "Nos fue mal con los profesores", dijo casi riendo.

La peliazul levantó la mirada, "¡Me creyeron loca!", exclamó, para luego mirar al castaño de particulares poderes, "¡Por tú culpa! ¡Tú eres el causante de esa nevada, ¿no?!"

"B-Bueno... Y-Yo..."

"Tranquila, Lilly", calmó el peliblanco con una sonrisa tranquilizadora, "Fue solo un accidente, ¿no, Freddy?"

El castaño asintió vivaz, "L-Lamento haberte causado problemas"

La mirada seria de la chica peliazul cambió por una más tranquila, luego de reír un poco, "Está bien, tal vez solo exageré... No puedo juzgarte, yo tampoco tenía control de mis poderes hace un tiempo"

Freddy solo sonrió, "Gracias..."

Ella suspiró, "Soy Lilly, y controlo el agua"

"Y-Yo soy Freddy... Y bueno... Creo que ya sabes mi poder"

"¡Hola, yo soy Abby!", habló la pelirroja, "¡Controlo la luz!"

"Es un placer, chicas", respondió el ojiazul con una sonrisa, un tanto más confiado.

"Bueno, fue lindo conocerlo, queridos...", empezó Félix, acercándose a sus amigos y llevándoselos lentamente, "...Pero con mis niñas nos merecemos una charla de chicas, ¿no Lilly?"

"T-Tal vez...", la peliazul tenía que admitir que seguía algo molesta por la vergüenza que pasó con los profesores, y sabía que hablar con sus amigos le ayuda siempre a calmarse.

"¿Te olvidas de mí, bro?", comentó Fede siguiendo a sus amigos, que se estaban retirando ya.

"Nunca, cariño", sonrió el pelirosa, "También puedes formar parte de nuestra charla, mi querido amigo"

Fede solo rió, y con un gesto se despidió de su nuevo amigo castaño, para seguir el camino detrás de los tres Aliums.

Después de una larga charla entre los adolescentes con el castaño, todos decidieron que fue un día muy largo para todos y ya deberían volver a sus habitaciones.
Excepto TownTrap, que pidió hablar en privado con Freddy, antes de irse.

Los demás estuvieron de acuerdo para luego retirarse a sus respectivas habitaciones.

Freddy, de todas maneras, estaba nervioso, ¿qué era lo que quería TownTrap que necesitaban estar a solas?
Rogaba porque no fuera por la escenita que Fred montó.

"Ahora entiendo porque no querías quitarte los guantes"

Un escalofrío recorrió el cuerpo del chico castaño.

"¿¡Q-Qué...!? N-No, es que-"

El chico mitad león solo rió y luego colocó su mano en el hombro del ojiazul en una forma de calmarlo.

"Tranquilo, tío", dijo el pelinaranja con una sonrisa, "No eres ni el primer ni el último Alium que pierde el control de sí mismo cuando usa sus poderes"

Freddy se impresionó.

"¿E-En serio?"

TownTrap rió entre dientes, "¡Claro! Y te contaré de un caso muy cercano, que es mi amigo y compañero de cuarto, Eak"

Freddy abrió los ojos con interés cuando notó un ligero sonrojo en las mejillas del ojinaranja. No pudo evitar sonreír.

"Él tiene un poder parecido al mío, solo que en lugar de ser león, él es un águila", el sonrojo se hizo mayor, "Hasta hace un año que su actitud cambiaba totalmente cuando se transformaba en águila, hasta que me hice cargo de su caso y logré entrenar sus poderes"

Freddy sonrió pícaro, "¿Y eso fue antes o después de que te empezase a gustar?"

El sonrojo de TownTrap llegó a hacer tal y como el cabello rojizo de Foxy.

"¿Q-Qué? ¡N-No! ¡Eak n-no me gusta!", tartamudeó el pelinaranja nervioso.

"TownTrap... Es claro que te gusta", sonrió el castaño.

El ojinaranja solo bajó la mirada, "¿Soy tan obvio?"

Freddy solo rió, calmando a su amigo de que él era muy bueno empatizando con las personas que aprecia, y que sus gestos no demostraban tanta obviedad como el pelinaranja creía.

El ojiazul intentó aconsejar a su amigo, sin embargo, él tampoco tenía muchos conocimientos en el amor, pues nunca se había enamorado.
Pero de todas formas, hicieron un trato.

TownTrap le ayudaría a controlar sus poderes, a cambio de que él le ayudase con Eak.

Aunque a pesar de todos los intentos que haga TownTrap, Freddy sabía que de nada servía, pues no dependía de él...

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¡Holas!

Lamento no haber actualizado antes, pero he estado muy ocupada con la escuela.
I'm sorry, wey.

Pero bueno, apenas pueda actualizo, que el siguiente capítulo tendremos más de Fred.
Están advertidos :)

- Natta