Humana Parte 2 | Rise Leo

⭐ Leo x Fem T/N
⭐ Leo edad: 19 años
⭐ 🔞 NSFW | Smut
Nota: para más contexto, leer la primera parte.

⚠️ Advertencia: transmisión en vivo y donaciones, interacción virtual, historia extensa, lenguaje vulgar.

Tus manos temblaban mientras te dirigías a la sección de mensajes privados. A pesar de tu nerviosismo, algo en su mirada antes de cerrar el stream te daba un atisbo de esperanza que te motivaba a hablarle por chat.

Con un profundo suspiro, escribiste un mensaje y pulsaste en enviar.

[tn_user]: Holaa ;) y bueno... aquí estoy.

Para tu sorpresa, Neon respondió casi de inmediato.

[Neon]: Hola linda :)

[Neon]: Entonces...

[Neon]: ¿Qué tenías que decirme?

Tardaste unos minutos en decidir cómo responder. Entre justificarte extensamente o soltar una declaración sencilla. Finalmente, te inclinaste por algo breve. Apenas presionaste "enviar" sentiste cómo tu pecho se contrajo de nervios.

[tn_user]: Bien... me había mantenido bastante oculta porque... mmm, soy humana :P

El ícono de escritura parpadeaba. La espera fue insoportable, aunque solo pasaron unos segundos antes de que su mensaje llegara.

[Neon]: Jajaja, ¿en serio? Pensé que me dirías algo mucho más grave :P

La relajación que sentiste fue inmediata, pero también una pizca de incredulidad. ¿Eso era todo? Apenas comenzaste a escribir una respuesta cuando otra notificación llegó.

[Neon]: ¿Pero por qué lo ocultaste?

Rápidamente, llegó otro mensaje suyo.

[Neon]: Ok, ok... eso fue una pregunta tonta. Obviamente lo hiciste porque eres humana. Pero… ¿por qué no me lo contaste antes? ¿Por qué nunca me escribiste en privado?

[tn_user]: ¡Es que eres una tortuga mutante! Y, no sé… asumí que me rechazarías al saber que soy de una especie diferente :/

[Neon]: Hey, no soy racista… o lo que sea que se diga para eso -_-

[Neon]: Aún así, tengo que admitir que me sorprende un poco… pero no me disgusta saber tu secretito ;)

[tn_user]: ¿De verdad?

[Neon]: Sí...

[Neon]: Pero ahora que sé que eres humana, ¿puedo ver una foto tuya? Quiero conocerte :) <3

El mensaje te dejó congelada por un instante. Pedir una foto parecía algo sencillo, pero para ti era un paso enorme. Habías pasado tanto tiempo cuidando tu anonimato que ahora, enfrentar esa solicitud, te llenaba de nervios. Sin embargo, había algo en su tono, en la manera en que lo pedía, que te hacía sentir extrañamente cómoda.

[tn_user]: Jaja, ¿seguro que quieres romper el misterio tan pronto?

[Neon]: Vamos, linda… tú ya me has visto todo, literalmente. Ni siquiera sé cómo te ves :(

Su mensaje te sacó una risa. Quizá esto no era tan complicado como imaginabas. Revisaste rápidamente tu galería, buscando una foto que fuera natural pero favorecedora. Elegiste una de tus últimas vacaciones, donde lucías un lindo traje de baño y una sonrisa relajada, y sin pensarlo mucho, la enviaste. 

[tn_user]: Bueno... aquí tienes. Espero no decepcionarte. 

El silencio que siguió fue breve, pero cada segundo parecían horas mientras esperabas su respuesta. Finalmente, un nuevo mensaje apareció. 

[Neon]: Wow...

El corazón te dio un vuelco. ¿Qué significaba ese "wow"? Otro mensaje llegó poco después. 

[Neon]: Eres muy hermosa...

[Neon]: No sé cómo pudiste pensar que no me gustarías >:(

Sonreíste mientras un suspiro de alivio escapaba de tus labios. Todo el temor que habías acumulado se desvaneció de inmediato. Aunque ya era tarde, pasaron varias horas más hablando en privado. Su conversación giraba en torno a conocerse más allá de los streams, explorando detalles sobre sus vidas, hobbies, gustos, y todo aquello que despertaba la curiosidad por el otro. A medida que intercambiaban mensajes, quedaba claro que Neon era un chico gracioso y simpático, alguien muy agradable con quien platicar. Entre líneas, no podían evitar coquetear, hacer referencias a sus anteriores streams y, por supuesto, sextear de manera descarada; expresándose directamente las ganas que sentían el uno por el otro y lo mucho que deseaban pasar el rato juntos.

[Neon]: Te juro que no puedo dejar de pensar en ti... Lo único que quiero ahora es verte en persona.

[tn_user]: Y si nos conocemos, ¿qué me harías? ;)

[Neon]: Mmm... depende de lo que tú quieras que haga, linda. Aunque creo que ya te imaginas unas cuantas cosas... ;)

Neon, fiel a su naturaleza impulsiva, te invitó a su departamento para conocerse en persona, en lo que podría considerarse una cita. La propuesta era tan tentadora como peligrosa. El solo pensar en encontrarte cara a cara con alguien que, aunque sentías cercano, seguía siendo un desconocido —y además, un mutante— en algún rincón de la Ciudad Oculta, un lugar totalmente ajeno para una neoyorquina como tú, te llenaba de emociones encontradas. El hecho de que todo ocurriera en su territorio —en su departamento, donde no tendrías control alguno y estarías completamente vulnerable— solo aumentaba el riesgo. A pesar de todas las advertencias que tu mente intentaba imponerte, no pudiste resistir la tentación... y aceptaste.

Fuiste tú quien eligió el lugar para el encuentro, un sitio que conocías bien en la ciudad y que te hacía sentir cómoda. Neon aceptó sin problemas, mostrando su entusiasmo por verte. Cuando finalmente llegó el día, te preparaste con cuidado, escogiendo un atuendo que destacara tus atributos. Elegiste una linda blusa que realzaba tu figura y una falda corta para que tus piernas se llevaran todo el protagonismo. Quería impresionarlo, y el pensamiento de su reacción hizo que te sintieras aún más emocionada y nerviosa a la vez.

Te detuviste frente al edificio que habías propuesto como punto de encuentro. Revisaste tu teléfono, lista para avisarle que habías llegado, pero antes de escribir el mensaje, sentiste un toque ligero en el hombro. Te giraste rápidamente y te encontraste con un chico un poco más alto de lo que esperabas, portando shorts y esa hoodie que reconociste de inmediato. Al levantar la mirada, te encontraste con Neon, quien además de traer su antifaz puesto, se ocultaba parcialmente bajo la capucha de su sudadera.

Hola —saludó con una sonrisa cálida—. Por fin nos conocemos.

Neon...

Llámame Leo —se inclinó hacia ti para murmurar con un tono cómplice—. Neon es solo mi nombre artístico.

Te guiñó un ojo y soltaste una leve risa, relajándote un poco ante su actitud encantadora.

De acuerdo, Leo —sonreíste.

Leo sacó las manos de los bolsillos y extendió una hacia ti.

¿Vamos? —preguntó con suavidad.

Asentiste, aceptando su mano, sintiendo el calor de su palma contra la tuya. Caminaron juntos entre la multitud, y aunque su mirada se mantenía fija hacia adelante, tú no podías evitar mirarlo de reojo. Había algo surrealista en todo aquello: Neon, ahora Leo, estaba a tu lado, sosteniéndote de la mano como si se conocieran de toda la vida. Sin previo aviso, giró hacia una calle más tranquila y tú lo seguiste sin cuestionarlo. El bullicio de la gente quedó atrás, y ahora el entorno era mucho más silencioso. Luego, doblaron en un callejón estrecho y desolado. Al detenerse, soltaste su mano instintivamente y diste un paso atrás.

Creí que íbamos a tu departamento —dijiste frunciendo el ceño.

Leo suspiró, como si hubiera anticipado tu reacción.

Sí, lo sé... pero para llegar allí necesito hacer esto —se giró hacia un rincón del callejón, donde comenzó a hurgar detrás de un basurero.

Cuando sacó lo que parecía ser una espada, tu corazón comenzó a latir con fuerza. Inmediatamente te pusiste en alerta, retrocediendo otro paso mientras tus ojos buscaban una posible ruta de escape. Tu instinto te decía que algo estaba mal, pero antes de que pudieras reaccionar, Leo, con su espada, trazó un rápido movimiento circular en el aire. En cuestión de segundos, un destello brilló frente a ti, y al abrir los ojos de nuevo, un portal luminoso aparecía en la pared. Tu boca se abrió por la sorpresa, incapaz de procesar lo que acababas de presenciar.

Leo se giró hacia ti, con una mano extendida.

Es difícil de explicar y, siendo honesto, no creo que tengas muchas ganas de escucharme hablar sobre cosas mágicas ahora mismo —Hizo una pausa, mirándote con una sonrisa—. Solo... confía en mí.

La incredulidad se mezclaba con la curiosidad. Tus ojos viajaban entre el portal, la espada y él, tratando de encontrarle lógica a algo que claramente escapaba de la realidad que conocías. La idea de seguirlo parecía una locura, pero había algo en su mirada y en su voz que te impulsaba a confiar. Con el corazón latiendo desbocado, estiraste tu mano y la colocaste sobre la suya. Leo sonrió y, sin soltarte, ambos cruzaron el portal.

En un abrir y cerrar de ojos, ya estaban en su habitación. ¿Cómo? No tenías ni idea, y ni siquiera tuviste tiempo de cuestionarlo. Antes de que pudieras articular palabra, Leo comenzó a moverse por el espacio, señalando detalles aquí y allá mientras te daba un breve tour.

Bienvenida —Leo extendió los brazos con una sonrisa divertida, mostrándote la habitación—. Y aquí es donde sucede la magia.

Su entusiasmo era contagioso, y aunque todavía estabas intentando asimilar el extraño viaje por el portal, no pudiste evitar sonreír ante su actitud. Leo se dejó caer en la orilla de la cama, relajado, mientras tú explorabas la habitación con la mirada. Tu atención se detuvo en un rincón en particular. Era imposible no reconocerlo: el escritorio, la computadora y la icónica silla donde lo habías visto innumerables veces durante sus transmisiones. Una pequeña parte de ti no podía creer que estabas ahí, viendo de cerca lo que antes solo habías conocido a través de una pantalla.

Eres la primera persona que traigo aquí —dijo de pronto, haciendo que lo miraras de nuevo—. Ni siquiera mis hermanos saben que rento este lugar.

Frunciste el ceño, confundida por su confesión.

¿Por qué?

Leo se encogió de hombros, jugando con el dobladillo de su sudadera.

Es mejor así. Todos necesitamos un lugar para despejarnos de los problemas, ¿no? Esto es... mi espacio.

Asentiste, comprendiendo más de lo que esperabas. Había algo reconfortante en esa honestidad; en el modo en que compartía contigo un rincón tan íntimo de su vida.

Por cierto —dijo Leo—. Hay algo que me causa mucha curiosidad de ti.

¿Ah, sí? ¿Qué cosa? —preguntaste, arqueando una ceja con curiosidad.

¿De dónde sacas tanto dinero para las donaciones en el stream?

Su pregunta y el tono asombrado en que lo dijo te sacó una pequeña risa.

Solo puedo decirte que vengo de una familia muy bien posicionada —respondiste con una sonrisa divertida.

Leo entrecerró los ojos, como si estuviera intentando armar un rompecabezas en su mente.

¿Perteneces a la mafia o algo así?

Para nada —negaste con una sonrisa amplia—. Mi familia es dueña de una cadena de hoteles de lujo.

Leo parpadeó sorprendido, asimilando la información.

Vaya, eso explica mucho.

A decir verdad, habías construido una imagen de Leo completamente distinta al chico que tenías frente a ti. El Neon que conocías —o creías conocer— en pantalla era desinteresado, un poco arrogante y siempre rodeado de un aire de superioridad. Pero en este pequeño lapso con él, ese personaje no se había hecho presente. Leo era encantador, sí, pero también amable, simpático e incluso un poco tierno.

¿Sabes? Tenía otra idea de ti —dijiste finalmente, rompiendo el silencio.

Leo ladeó la cabeza, intrigado.

¿A qué te refieres?

Pues, eres muy distinto fuera de cámara.

Notaste cómo un leve rubor coloreaba sus mejillas, algo que no esperabas en absoluto de alguien tan seguro de sí mismo. Rió con cierta timidez y se encogió de hombros.

Bueno, linda, tengo que actuar un poco para ellos —admitió, desviando su mirada hacia la computadora—. Supongo que el "personaje" ayuda a mantenerlos entretenidos... Espero no decepcionarte.

Negaste lentamente mientras te acercabas a él. Te sentaste a su lado, tan cerca que casi podías sentir el calor que emanaba de su cuerpo.

No me decepcionas —dijiste con una pequeña sonrisa—. Me gusta conocer esta parte de ti.

Sus miradas se encontraron, y aunque ninguno decía una palabra, la tensión entre ustedes hablaba por sí sola. Sus sonrisas se desvanecieron lentamente mientras la cercanía aumentaba. Podías sentir su respiración cada vez más cerca, y tus ojos, casi por instinto, se posaron en sus labios justo cuando los suyos hacían lo mismo con los tuyos.

Leo fue quien tomó la iniciativa. Su mano subió suavemente hacia tu rostro, apenas rozando tu piel, y se detuvo en tu mejilla. Sus dedos eran cálidos y seguros, y ese simple gesto te hizo cerrar los ojos un momento. Cuando los abriste, él ya estaba inclinándose hacia ti, y antes de que pudieras procesarlo del todo, sentiste el roce de sus labios contra los tuyos. El beso fue suave al principio, como una pregunta esperando ser respondida. Pero cuando respondiste, la presión y la intensidad aumentó ligeramente. Leo mantuvo su mano en tu mejilla mientras la otra se apoyaba ligeramente en tu cintura, acercándote más a él. Tus manos encontraron su lugar alrededor de su cuello, acercándolo aún más, como si quisieras que el espacio entre ustedes desapareciera por completo. Pronto, el beso se volvió más apasionado; sus lenguas se enredaban juguetonamente entre sí, al mismo tiempo, sus manos se deslizaban por tu espalda baja, hasta el borde de tu blusa... Pero ambos se vieron interrumpidos por un sonido estridente que rompió el momento.

Leo se separó de ti de inmediato, sacando su teléfono de su hoodie para apagar rápidamente la alarma.

Lo siento —dijo, un poco apenado—. Es una alarma que pongo para recordarme empezar los streams a tiempo.

Asentiste, comprensiva. Sabías bien cómo manejaba su horario de transmisiones.

¿No harás stream hoy? —preguntaste con curiosidad.

No, linda, quiero pasar este rato contigo... —respondió con una sonrisa, aunque sus ojos, casi por instinto, se desviaron hacia su computadora—. A menos que...

¿A menos que...? —insististe, notando su mirada.

Leo soltó una risa y negó rápidamente.

Nada, nada. Solo se me ocurrió una tontería.

Dímelo. ¿Qué cosa?

Él dudó un momento antes de responder, con un tono juguetón.

A menos que quieras aparecer en mi stream.

Lo miraste sorprendida, procesando su propuesta. Un instante después, una pequeña sonrisa se formó en tus labios.

Claro.

¿De verdad? —preguntó Leo, claramente asombrado por tu respuesta.

—asentiste—. ¿Por qué no? Será divertido.

Leo te observó por unos segundos más, asegurándose de que realmente estuvieras cómoda con la idea. Luego tomó tu mano y te llevó hasta su escritorio. Encendió su computadora y rápidamente ingresó a la web oculta y abrió la plataforma XYokai. Sus dedos volaron por el teclado mientras ajustaba las configuraciones necesarias para el stream: ángulos, filtros, y algunos ajustes técnicos que desconocías pero que él manejaba con naturalidad.

¿Debería usar algo para cubrirme el rostro o…? —preguntaste, algo nerviosa.

No te preocupes, yo me encargo de que nadie te reconozca —dijo, guiñándote

Con cuidado, inclinó la cámara hacia abajo, asegurándose de que solo sus cuerpos fueran visibles en el encuadre. El monitor mostraba una vista ajustada donde ni su rostro ni el tuyo aparecerían, lo que te hizo sentir más tranquila. Leo entonces te tomó suavemente de la cintura, guiándote para que te sentaras sobre una de sus piernas mientras terminaba de ajustar el ángulo. Su toque no te incomodaba; al contrario, hace tiempo deseabas sentirlo así de cerca.

¿Lista?

Lista.

Y con un solo click, el stream comenzó.

A los pocos minutos de haber iniciado la transmisión, el contador de espectadores ya marcaba cientos, y ese número seguía subiendo con rapidez. Podías ver cómo el chat explotaba con mensajes que iban desde la más pura curiosidad hasta bromas y comentarios llenos de emojis. Aunque no te veían directamente, sabías que toda esa atención estaba puesta en ti. 

Leo, ahora completamente en su papel de Neon, moduló su voz a ese tono tan atractivo y seductor característico de él.

¡Hey, chicos! —saludó—. ¿Por qué tanto alboroto? 

El chat respondió con más comentarios, algunos escribiendo en mayúsculas y otros llenando sus mensajes de signos de exclamación y emojis de sorpresa. 

¿Ohh, ella? —continuó Neon, fingiendo un tono de inocencia mientras señalaba hacia ti—. Bueno, les dije que les compensaría lo de la última vez, ¿no? 

Una risa ligera escapó de tus labios al escuchar su forma de dirigirse a su audiencia. Era imposible no notar lo cómodo que se sentía en su personaje, y a pesar de estar fuera de la cámara, también sentías algo de la emoción que generaba estar en el centro de la atención compartida. 

El chat se llenó de preguntas como «¿Es tu novia?» y «¿Quién es ella?» así como peticiones «¡Neon, preséntala!» 

Tranquilos, tranquilos —interrumpió Neon—. Solo puedo decirles que es alguien... muy especial. 

Aunque sus palabras fueron ambiguas, su tono bastó para que las especulaciones aparecieran en el chat. Te miraste con Leo brevemente, compartiendo una pequeña sonrisa privada que los conectaba en medio de todo ese caos digital.

De repente, la notificación de la primera donación se hizo presente.

[Vykox ha donado $6] «Mándame un saludo, Neon 🥺🥺🥺»

Leo rió suavemente antes de responder, con la misma simpatía característica de su personaje.

Saludos, Vykox. Y gracias por tu apoyo, amigo —Su tono era relajado pero lleno de carisma, lo suficiente para mantener a su audiencia enganchada—. Eso sí, chicos, me disculpo de antemano. No podré estar leyendo ni respondiendo todos sus mensajes esta vez —hizo una pausa, y entonces sentiste su mano posarse suavemente sobre tu muslo, muy cerca del borde de tu falda—. Porque estaré ocupado con esta hermosura.

Por un instante, te estremeciste ante la intensidad de las reacciones de sus seguidores, pero la seguridad con la que Leo manejaba la situación te ayudó a relajarte. Te apoyaste ligeramente contra él, riendo suavemente, mientras observabas cómo su público seguía comentando frenéticamente, tratando de descifrar quién eras y cuál era tu relación con él.

Chicos, nada de hate —exclamó seriamente—. No me gustaría que mis moderadores los bloquearan.

Sus palabras parecieron surtir efecto, y la actividad en el chat disminuyó. Neon se giró ligeramente hacia ti y, con una sonrisa que solo tú podías ver, susurró en tu oído:

¿Quieres continuar con lo de hace rato?

Asentiste y volviste a envolver tus brazos alrededor de su cuello, uniendo tus labios con los suyos retomando el beso. Aunque los usuarios no pudieran ver cómo se estaban besando, sí escuchaban los sonidos de sus bocas devorándose y sus jadeos al hacerlo. Además, Neon comenzó a escabullir su mano por debajo de tu falda en dirección a tu muslo, apretándolo ligeramente. Bajaste tu mano hacia tu falda y la subiste un poco, colaborando para hacer más interesante el stream. Neon sonrió contra tus labios al percatarse en la forma que comenzabas a jugar con su audiencia y no se quejó, más bien dejó que tú marcaras el ritmo.

Sin dejar de besarlo, te acomodaste sobre su regazo, dándole la espalda a la cámara. Sus manos descendieron hasta tus glúteos, donde se detuvieron para apretarlos con una fuerza que arrancó un suave jadeo de tus labios. Él aprovechó la posición para levantar un poco más tu falda, dejando que el encuadre le hiciera favor a tu lindo trasero. Neon recorría tus piernas y nalgas con sus grandes manos mutantes, dándote palmaditas que apenas y se marcaban en tu piel, pero te robaban suaves gemidos que, además de excitarlo a él, calentaban a sus seguidores.

[bxby990 ha donado $5] «Dios tiene a sus favoritas :(»

Sonreíste entre besos, disfrutando de la donación que acababan de hacer. Te encantaba ser la favorita de Neon, pero aún más, te encantaba cómo él no dudaba en presumirte frente a los miles de yōkais que lo seguían en el stream.

Tus besos descendieron lentamente hasta su cuello. Lo marcaste con suavidad, reclamándolo como tuyo. Mientras lo hacías, comenzaste a mover tus caderas de forma sugerente contra su regazo. Sentías su erección creciendo bajo ti, presionando con firmeza a través de las telas que los separaban. La fina tela de tus bragas apenas mitigaba la sensación de su bulto rozándose contra tu intimidad. La fricción hacía gemir a Neon, provocando un calor inmediato entre tus piernas; no pudiste evitar mojarte al instante. Sus dedos se aferraban con fuerza a tus glúteos, ayudándote a moverte sobre él, haciendo como si follaran, pero aún manteniendo la ropa como barrera.

Mmm~ —Neon gimió suavemente cerca de tu oído, su aliento cálido erizándote la piel. Después, murmuró—. ¿Podemos hacerlo?

Levantaste la mirada, encontrándote con la suya. Ambos estaban ligeramente ruborizados. No necesitaste pensarlo demasiado; respondiste con una sonrisa y asentiste con la cabeza.

Te levantaste ligeramente de su regazo, tus manos apoyándose en sus hombros para equilibrarte. Neon deslizó hacia abajo sus shorts y bóxers, dejando al descubierto su dureza. Lo miraste brevemente, sintiendo cómo el calor en tu rostro se intensificaba. Con delicadeza, Neon llevó sus manos a tus bragas, corriéndolas hacia un lado para dejar expuesta la entrada de tu vulva. Todo en sus movimientos denotaba cuidado y paciencia, como si quisiera asegurarse de que te sintieras cómoda. Sus manos volvieron a tus caderas mientras sostenía su miembro, guiándote para que te acomodaras sobre él. Respiraste profundamente al sentir su punta húmeda rozar tu vulva. La idea de su tamaño te hizo tragar saliva, pero decidiste continuar, bajando con cuidado. Tus paredes, cálidas y estrechas, comenzaron a adaptarse lentamente a su forma mientras soltabas un suave gemido, sintiendo cómo él se abría paso en tu interior.

En ese momento olvidaste por completo que estaban transmitiendo en vivo, pero era un hecho que los seguidores estaban bien atentos a todo lo que sucedía en sus pantallas.

Neon llevó sus manos a tus caderas y comenzó a moverte con suavidad sobre él. Tus manos permanecían apoyadas en sus hombros, ayudándote a mantener el equilibrio mientras tus caderas se deslizaban hacia adelante y descendían de nuevo, haciéndote sentir todo su grosor llenándote por completo. Un gemido se escapaba de tus labios con cada descenso, mezclándose con el sonido de su respiración pesada. Recostado en su silla, Neon no apartaba la mirada de ti, completamente absorto en tus expresiones de placer. Tus ojos entrecerrados, tus labios entreabiertos y los ligeros temblores de tu cuerpo lo tenían cautivado. A pesar de que su atención estaba en ti, una parte de él permanecía atenta al stream, cuidando cada detalle. Sin que te dieras cuenta, Neon ya se había girado en su silla para ofrecer un mejor ángulo hacia la cámara sin interrumpir el ritmo que llevaban. Sus manos se encargaron de mantener tu falda levantada, revelando lo justo para que los espectadores pudieran disfrutar de la escena sin perderse un solo detalle.

[dann_333 ha donado $5] «Qué buen culo se carga la humana 😏»

Neon dejó escapar una risa baja y traviesa antes de darte una pequeña nalgada. Sonriendo, tomaste su rostro entre tus manos y lo atrajiste hacia ti, devorando sus labios con ansias.

Ahora, con más confianza y completamente adaptada a su tamaño, comenzaste a moverte con mayor seguridad, acelerando el ritmo. Tus caderas subían y bajaban con intensidad, provocando que el sonido húmedo de su polla entrando y saliendo de ti se hiciera más evidente. Sus manos permanecían firmes en tus caderas y sus dedos se aferraban a tu piel con fuerza, guiándote y marcando el ritmo, creando un vaivén ruidoso y obsceno por el choque de sus pieles y sus gemidos de placer.

¡Ah! N~neon~ —gemías, solo para ser callada momentáneamente por sus labios.

Neon no podía ocultar lo excitante que era para él escucharte gemir, aunque en el fondo deseaba oírte jadear su verdadero nombre. Sin embargo, cualquier sonido que escapara de tus labios lo mantenía completamente fascinado. Él, por su parte, tampoco contenía sus reacciones; sus gemidos profundos y gruñidos graves, tan característicos de su mutación, resonaban en el cuarto.

Tus movimientos sobre él se volvieron más atrevidos; pequeños brincos que lograban que su miembro se hundiera aún más en tu interior, haciéndote perder el control. La razón parecía desvanecerse con cada embestida, dejándote completamente a merced del ritmo que Neon te marcaba. Tu cuerpo reaccionaba por instinto, entregándose al cúmulo de sensaciones placenteras que te invadían desde tu vientre hasta tu entrepierna. Te sentías acalorada , y sin pensarlo, te deshiciste de tu blusa y luego de tu sostén, dejando tu torso desnudo frente a él. Los ojos de Neon se oscurecieron al observar tus senos al descubierto, moviéndose al compás del vaivén de tus caderas. No perdió tiempo y atrapó uno de tus pezones con su boca, su lengua masajeándolo mientras sus labios lo succionaban. Neon continuó, alternando entre ambos pechos, dejando pequeñas marcas rojizas con cada chupetón.

[aly.78_ ha donado $8] «Lo mejor que he visto en la plataforma ❤️»

Lo estás haciendo excelente, linda —susurró a tu oído—. Parece que te adoran... tanto como yo.

No pudiste articular una sola palabra; tus gemidos desesperados bastaban para transmitirle lo que sentías, y para Neon, eso era más que suficiente.

Tu cuerpo pedía a gritos sus estocadas.  Abrazaste su cuello con fuerza, tus frentes se rozaron, y con la voz rota, suplicaste entre jadeos que no se detuviera. Siseabas cerca de su boca por lo bien que se sentía su longitud arremetiendo contra tu estrecho coño humano. Tus paredes se aferraban a su circunferencia, apretando su grosor y contrayéndose cada vez que Neon tocaba el punto más profundo de tu interior. En cuestión de minutos, tu cuerpo ya se encontraba temblando sobre él y tú solo gemías alto, abrumada por la sensación de intenso deseo.

El chat estallaba de comentarios mientras todos observaban cómo te rendías completamente al placer que Neon te ofrecía. Tus piernas comenzaron a flaquear y él se aferró a tus glúteos, levantándote y ayudándote a moverte con un ritmo firme y constante. Cuando finalmente alcanzaste el orgasmo, dejaste escapar un grito agudo que se ahogó contra su hombro. Neon te sostuvo firmemente, sus brazos envolviéndote en un cálido abrazo mientras tu cuerpo temblaba sin control, completamente dominado por el placer. Sus manos acariciaron tu espalda, tratando de calmarte en medio de las oleadas de sensaciones que aún te recorrían.

¿Estás bien? —murmuró agitado.

Sí... —respondiste, aunque tu voz temblaba ligeramente. Era la primera vez que experimentabas un orgasmo tan abrumador, y aún intentabas controlar las sensaciones residuales que invadían tu cuerpo—. Pero... aún no te hago terminar —añadiste en un tono preocupado, levantando la mirada hacia él.

Neon soltó una pequeña risa, cálida y sincera, antes de besar suavemente tu frente.

No te preocupes por eso, linda.

Sus palabras te reconfortaron profundamente. El hecho de que no te presionara y priorizara tu bienestar te hizo sentir aún más atraída hacia él.

Después de unos momentos, Neon echó un vistazo rápido a la pantalla. Sabía que tenía que encargarse de finalizar el stream. Con una respiración todavía agitada, se acercó en su silla hacia su escritorio.

Chicos, creo que hasta aquí llegamos hoy —anunció en un tono travieso—. Mi chica necesita descansar, y yo también. Espero que lo hayan disfrutado tanto como nosotros.

El chat suplicaba que el stream continuara, pero Neon simplemente los ignoró. Sin decir nada más, terminó la trasmisión y regresó nuevamente su atención a ti.

¿"Tu chica"? —preguntaste, arqueando una ceja con una mezcla de curiosidad y diversión.

¿Te molesta? —replicó, observándote con una ligera sonrisa traviesa.

Negaste, dejando que una sonrisa sincera iluminara tu rostro.

No. De hecho, me encanta.

Desde ese día, tú y Leo comenzaron a pasar más tiempo juntos, construyendo una relación que iba mucho más allá de la lujuria inicial. No todas las citas terminaban en momentos íntimos; muchas veces disfrutaban de pequeñas cosas, como largas caminatas, conversaciones profundas o tardes relajadas jugando videojuegos en las que ambos se olvidaban del mundo exterior. Tampoco fue la última vez que apareciste en sus streams. Lo que comenzó como un momento espontáneo y atrevido se convirtió en una costumbre que disfrutaban ambos, aunque no tanto para satisfacer a la audiencia, sino porque les divertía compartir esa complicidad en pantalla y presumir lo bien que se la pasaban juntos.

ʕ⁠´⁠•⁠ᴥ⁠•⁠'⁠ʔ Hola, soy la escritora, Mafer.

He aquí la segunda y última parte de esta mini historia, espero que les haya gustado 💖 nos vemos en el siguiente oneshot, bai 👀





Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top