【𝙲𝙰𝙿Í𝚃𝚄𝙻𝙾 𝟹𝟷】

𝐣𝐮𝐞𝐯𝐞𝐬, 𝟏 𝐝𝐞 𝐟𝐞𝐛𝐫𝐞𝐫𝐨 𝐝𝐞 𝟐𝟎𝟐𝟒

𝓓afne

melvega: ¡sos una artista, dafne! ↴

dafnehildebrandt: te amo mel🫦

dafnehildebrant_fans: te quedó increíblemente impresionante💚💚

isadora.sanchez: posta, eso es una obra de arte ↴

dafnehildebrandt: tú si sos una obra de arte amiga

emiemiemi: amoooooooooooo!!❤️ ↴

dafnehildebrandt: yo a vos emi

juanicar: ¡eeeeeeeeeeh! ¿para cuando un retrato de tus amigos más personales? ↴

matiasrecalt: ¡banco! ¡tenés un talento increíble!😘 ↴

vogrincicenzo: ¡sí! tu arte es lo más, dafne ↴

santivacanarvaja: ¡me parece re genial la idea! atte: todos los de la nueva banda pop ↴

dafnehildebrandt: bueeeeee, voy a tratar de hacer lo que pueda

juani_x_dafne: matías le comentó un beso a dafne 😭😭 😭😭

anonimo2468: ¿en serio tanto revuelo por esto? No le encuentro la vuelta ↴

fans_de_mati: para mí, es bastante común... tampoco le veo nada del otro mundo ↴

enzofans: yo tampoco quiero ser aguafiestas, pero no me parece para tanto. es solo un dibujo, ¿no? ↴

dafnehildebrandt: son re boludas (con todo el afán de ofender), nadie les pidió que vinieran a tirar mierda acá ↴

juanicar: devoró ↴

pipegonzalezotano: escuché que había bardo, ya vine

𝐌𝐄 𝐒𝐎𝐑𝐏𝐑𝐄𝐍𝐃𝐈Ó 𝐆𝐑𝐀𝐓𝐀𝐌𝐄𝐍𝐓𝐄 𝐄𝐍𝐂𝐎𝐍𝐓𝐑𝐀𝐑𝐌𝐄 𝐂𝐎𝐍 𝐔𝐍𝐀 𝐃𝐈𝐕𝐄𝐑𝐒𝐈𝐃𝐀𝐃 𝐃𝐄 𝐂𝐎𝐌𝐄𝐍𝐓𝐀𝐑𝐈𝐎𝐒 𝐒𝐎𝐁𝐑𝐄 𝐌𝐈 𝐓𝐑𝐀𝐁𝐀𝐉𝐎, algunos llenos de aprecio y elogios, mientras que otros destilaban una crítica ácida y sin contemplaciones.

Los positivos provenían mayormente de personas cercanas, de aquellos que me habían visto inmersa en el proceso creativo, testigos de las horas de esfuerzo y dedicación que había invertido en mi obra. En cambio, los comentarios negativos parecían surgir de cuentas desconocidas, voces anónimas que arrojaban juicios desde la distancia, sin comprender del todo el trasfondo y la pasión que había detrás de cada trazo.

Decidí no dar demasiada importancia a los comentarios negativos; después de todo, yo misma era consciente del esfuerzo y la dedicación que había invertido en esa obra. Cada línea trazada, cada sombra y cada matiz eran el resultado de las horas que le había dedicado.

Mientras repasaba los posts de Instagram, sumergida en un mar de fotografías, una notificación repentina de Juani capturó mi atención. Era un mensaje, finalmente obteniendo respuesta a la consulta que le había enviado temprano esa misma mañana.

Guardé el móvil en el bolsillo mientras mi mente comenzó a maquinar, reviviendo cada instante compartido con Matías. Cada risa compartida, cada gesto amable y cada mirada cómplice. Sin duda, sentía una atracción hacia él, algo inexplicable que no podía explicar fácilmente con palabras. Pero al mismo tiempo, era consciente de la importancia de no precipitar las cosas. Sabía que era crucial permitir que las emociones se asentaran, que cada paso se diera de manera natural y sin forzar nada.

Cuando llegó la hora de comer, descendí las escaleras con el estómago retumbando de hambre. La idea de preparar pasta se apoderó de mi mente, convirtiéndose en un deseo. Con paso decidido, me dirigí hacia la encimera y busqué los ingredientes necesarios.

Comencé llenando una olla grande con agua y añadiendo una buena cantidad de sal para darle sabor a la pasta. Mientras el agua comenzaba a calentarse, seleccioné cuidadosamente el tipo de pasta que utilizaría, decantándome por unos espaguetis largos que sabía que serían el lienzo perfecto para la deliciosa salsa que tenía en mente.

Una vez que el agua comenzó a burbujear con entusiasmo, agregué los espaguetis, observando con satisfacción cómo se hundían lentamente en el agua hirviente. Con una cuchara de madera en mano, removí suavemente la pasta, asegurándome de que cada hebra se cocinara de manera uniforme y sin pegarse en el fondo de la olla.

Mientras la pasta burbujeaba en la olla, decidí aprovechar el tiempo para preparar la salsa. En una sartén grande, calenté un poco de aceite de oliva y añadí ajo picado y tomates frescos, dejando que los sabores se mezclaran.

Una vez que la pasta estuvo al dente, la escurrí con cuidado, reservando un poco de agua para ayudar a aligerar la salsa. Luego, añadí los espaguetis a la sartén con la salsa caliente, mezclando todo con cuidado para asegurarme de que toda la pasta estuviera impregnada con el delicioso sabor de la pasta recién preparada.

Finalmente, me serví la pasta en un plato, espolvoreando queso parmesano rallado por encima como toque final. Con cada bocado, disfruté de la combinación perfecta de sabores y texturas, saboreando cada momento de esta comida casera.

Mientras me deleitaba con cada bocado, permitiendo que los ricos sabores inundaran mi paladar y me transportaran a un mundo de placer culinario, decidí dar un vistazo a las notificaciones en mi teléfono, buscando una distracción sutil. Entre las notificaciones que llenaban la pantalla, una notificación destacaba por encima de las demás: un mensaje de Matías.

Una chispa de curiosidad se encendió dentro de mí. Recordé que esta mañana no había recibido ningún mensaje suyo, como era habitual, especialmente para compartir las impresionantes fotos del amanecer que capturaba. ¿Se habría olvidado? Sin perder un segundo, pulsé en la notificación.

Dejé el móvil a un lado, sintiendo cómo el calor ascendía por mis mejillas ante la sinceridad de las palabras de Matías. Las palabras tengo ganas de verte resonaban en mi mente como una suave melodía, llenándome de una mezcla reconfortante y emocionante.

Continué disfrutando de los espaguetis, saboreando cada bocado mientras mi mente seguía dando vueltas a la invitación de Matías. Decidí que esperaría a terminar mi comida para enviarles un mensaje a mis amigas para conocer su opinión.

NO SE OLVIDEN DE VOTAR Y COMENTAR!!!!❤️❤️❤️

💌nota de la autora:
la imagen que sube dafne a instagram es de lesyeuxdelynne en pinterest!!!