Jadon Sancho

Su cabello acomodado en una cola de caballo, sus labios pintados de rojo, top rojo acompañando de un saco y falda blanca, junto con botas negras largas solo incrementaba las ganas de hacerla mía. Pero mi enojo, coraje y orgullo eran más potentes.

Cabe resaltar que su actitud también me prendía -Eras tu la de hace rato con Rashi en la llamada, cierto?- cuestiono.

Mar me mira extraño -Llamada? No sé a qué te refieres?

-Mentir solo empeora las cosas, bebé- coqueteo.

-No soy tu "bebé". Además que sigo furiosa contigo.

Alzo una ceja -Por qué no me dijiste que vendrías? Hiciste que Rashi me mintiera y el pobre ya tiene muchos problemas como para que tú lo metas en tu dramas.

Ella adopta una expresión de ofendida abriendo la boca en forma de "o" -Disculpa? Te recuerdo que mi "drama" eres tu!

Le sonrío -Me encanta sentirme importante.

-Idiota- Mar intenta irse pero la tomo por su cintura a tiempo.

-Lo siento, de acuerdo?- confieso sincero. Ella me mira sospechosa -Por todo. Fui un completo arrogante e inmaduro. No estaba en mi mejor momento y el ignorarte jamás fue la solución. Mis acciones no tienen excusa. Discúlpame, Marlene.

-Crees que te voy a perdonar así de fácil?- cuestiona.

Ahora soy yo quien me enfado -Qué no te es suficiente? Dios! Qué más quieres?

-Con esa actitud? Nada de ti, gracias!

-Soy yo quien siempre termina disculpándose y tu pretendes siempre ser la víctima cuando claramente me ofendiste y llamaste de cosas! Creo que yo también merezco respeto o al menos una disculpa!- defiendo.

Mar observa a su alrededor -Jadon, en cualquier momento vamos a llamar la atención. Se supone que es la noche de Danny y Scott. Así que será mejor que arreglemos esto más tarde- pide.

Yo me niego, la tomo por su mano para llevarla a uno de los cuartos de la casa de McTominay y así poder tener más privacidad -Aquí no interrumpimos a nadie.

-Por qué insistes, Jadon?

La tomo por los costados de sus brazos -Quiero que las cosas entre los dos estén bien. Odio estar peleado contigo y odio más cuanto pasa el tiempo y tu sigues enojada conmigo- confieso.

Alza una ceja -De acuerdo- acompañada de una sonrisa -Lo lamento. Lamento acostarme con alguien más- responde haciéndome sentir sumamente celoso y furioso.

Intenta escapar pero soy más fuerte y rápido que ella, así que la acerco para poder besarla ya que me moría por hacerlo -Te odio- digo en contra de sus labios.

-Pero bien que disfrutas de mis labios- responde seductora.

-Ya te extrañaba- revelo mientras mis manos aprietan más su pequeño cuerpo.

Sus dedos suben hasta mi cabello para jugar con este -Puedo notar.

La tomo por los muslos para cargarla y ella suelta un gemido. Con ello la llevo hasta la cama y empezamos a desvestirnos para hacer el amor con fuerza. Luego de unos apasionantes minutos, nos vestimos.

-Cada ves que lo hacemos, es mejor que el anterior- se me escapa decir.

-Díceselo a mis bragas- las levanta desgarradas gracias a mi.

Las tomo de sus manos -Yo me las quedo- sonrío burlón mientras las coloco en mis bolsillos.

Mar rueda los ojos con una sonrisa -Ahora tendré que estar toda la noche sin ellas.

Sigue su camino a la puerta pero impido que la abra -Estamos bien?

La castaña me sonríe para después besarme en corto -Estamos bien, Jadon- sus ojos se desvían a mi cuello -Oh! Te dejé labial por ahí...

Estaba a punto de quitármelo pero tomo sus dedos -Déjalo ahí. No me interesa que esté ahí.

-Apuesto que eso se lo dices a tus chicas?

-Solo dejo los tuyos porque son los únicos que me significan más para mi- beso sus dedos y por fin nos bajamos.

Para nuestra suerte, la cena apenas había comenzado. Me siento a un lado de Rashi y Anthony, es el primero quien me pregunta dónde estaba -Dónde estabas?

-Comiéndote a Mar?- pregunta Elanga.

-Más respeto para ella, por favor- pido serio.

Anthony se disculpa -Era lo más obvio. Todos están aquí, y los vimos irse arriba.

-Buscábamos más privacidad para arreglarnos- excuso.

Rashi es quien habla -Así que ya se disculparon?

Le sonrío -Estamos bien.

-Era de esperarse. Sus peleas no duran tanto, sobre todo cuando cualquiera de los dos necesite del otro- insiste Elanga.

-Hijo de...- iba a contestar pero soy interrumpido por Scott.

El escocés pide nuestra atención, después se dirige a Danny dedicándole un gran discurso por los años que han estado juntos. Después de lagrimas y muchas emociones encontradas, Scott se arrodilla para pedirle matrimonio. La británica acepta de inmediato con el anillo en su dedo, se levantan para besarse con pasión mientras todos aplauden para celebrar.

Mientras tanto, por alguna extraña razón miro a Mar quien estaba feliz por Dann, observo sus gestos de sorpresa, alegría y orgullo haciéndome pensar en muchas cosas que he vivido con ella, nuestra relación que tenemos ya desde hace mucho tiempo incluyendo nuestros altos y bajos.

Con ello, empecé a imaginar como me sentiría el día que Mar encuentre a alguien con quien quiera casarse y yo tenga que tragarme como ella es feliz con alguien que no sea yo. No tengo ni la menor idea por qué exagero si ella me ha dejado en claro que no busca una relación con alguien. Es solo que odio la idea de que algún día un chico quiera competir por ella cuando claro está que yo soy su hombre y nadie más.