○•○•○ Veinte ○•○•○

El hostal volvió a estar en silencio a las once de la mañana, el grupo de amigos se fue a turistear y Yoongi se fue a la casa hogar. Los demás inclinos eran silenciosos, algunos eran estudiantes.

Fue entonces que subieron a la habitación. Se arreglaron para irse, Taehyung tomo la maleta y bajaron. Nadie dijo nada, ambos tenían cosas que pensar.

En el aeropuerto Jimin no pudo evitar que una lagrima se le resbalara, la limpio rápidamente antes de que el alfa lo viera. No esperaría a que se fuera, solo lo se despediría e iría, si se quedaba podría no dejarlo ir.

-Supongo que esta es la despedida -anuncio Jimin entristecido. Le costaba no llorar o decirle adiós al chico que amo por años.

-En unas semanas volvernos a vernos, será como antes -el alfa se percató de lo decaído que estaba el omega. Quería animarlo.

-Taehyung yo... -el nudo en la garganta le impidió hablar. La visita se le nublo por las lágrimas.

El alfa dejo la maleta para arroparlo entre sus brazos, acuno la cabeza de Jimin entre sus manos llevándola a su pecho. En esa posición el omega escuchaba el latir del corazón del alfa.

-Lamento que termináramos de esta manera -dijo Jimin entre llanto. Debía soltarlo, sin embargo, sus manos se aferraban al cuerpo del alfa.

-Espero algún día puedas perdonarme -la voz de Taehyung se entrecorto.

Jimin se separó del alfa para mirarlo. Taehyung lloraba de la misma manera que él.

-No llores -pidió el omega limpiándole las lágrimas al alfa. Se pregunto cuál sería la primera reacción de Taehyung al enterarse de que no se verían por años ¿Se enojaría? ¿Lloraría? No sabía el orden pero ahora sabía que haría las dos.

-Enserio no quería lastimarte -dijo el alfa apenas entendible por el llanto.

-Lo se.

Sin darse cuenta unieron sus frentes, lloraron juntos. El omega sostenía las mejillas del alfa y este lo abrazaba por la cintura. Entre palabras de perdón y comprensión unieron sus labios en un beso doloroso. Lento y tortuoso al saber que sería el último. El deseo de rogar por que se quedara creció dentro de Jimin, así que tuvo que alejarse.

-Adiós Taehyung. Recuerda que eres el mejor amigo que pude tener -acaricio la mejilla húmeda del alfa por última vez.

-Lo seremos por siempre -Taehyung se aferró a la mano en su mejilla, poco a poco esta se deslizo como agua hasta dejar su mano sin calidez.

La imagen que cada uno vio del otro fue una que dolería por mucho tiempo. El pecho del alfa se oprimió al ver como el omega se alejaba. Del bolsillo derecho de su pantalón saco las llaves de su casillero en el trabajo, en ellas portaba el llavero que Jimin le obsequio a los ocho años, el llavero tenía una foto de ellos dos que sus padres tomaron ese verano en la playa, los dos sonreían. La escondió del omega luego de que se burlara de el por ser tan cursi siendo que él se lo había regalado por eso lo portaba en unas llaves que Jimin no veía.

-Por siempre -apretó el llavero llevándolo a su pecho.

Mantengamos este amor en una fotografía
Creamos estos recuerdos para nosotros mismos
Donde nuestros ojos nunca se cierran
Nuestros corazones nunca se rompen
Y el tiempo siempre esta congelado
Así que puedes mantenerme dentro del bolsillo de tus pantalones rotos
Sosteniéndome cerca hasta que nuestros ojos se encuentren
Nunca estrás solo
Espera a que llegue a casa
ED SHEERAN - PHOTOGRAPH







Al salir del aeropuerto subió al primer autobús que encontró sin importar a donde iba. Debía estar lo más lejos para no regresar corriendo a los brazos del alfa. Paro el llanto para no ser visto raro. Unas cuantas paradas después bajo del autobús en una zona desconocida. El lugar parecía desierto por lo que se permitió llorar, le dolía el pecho, su lobo aullaba de dolor, el dolor se sentía fuerte ya que atreves del lazo la tristeza invadía igual. Esa misma noche comenzaría a romper el lazo, una vez que Taehyung estuviera en la capital.

De regreso al hostal Yoongi lo recibió. Namjoon también estaba presente. Antes de entrar escucho unas voces discutiendo, supuso que eran ellos. Cuando el omega se acercó a Jimin, el alfa bufo molesto quizás por ser dejado de lado, se retiró dejándolos solos.

-¿Todo bien? -preguntó Jimin. Para entonces ya no lloraba.

-Eso debo de preguntar yo. Discutir con Namjoon es mi pan de cada día -Yoongi quiso bajar la mirada y abrazarse a sí mismo, en cambio extendió los brazos al frente -¿Quieres un abrazo?

En el rostro de Jimin se dibujó una sonrisa desganada. Camino hacia el omega con los brazos extendidos aceptando el abrazo, volvio a llorar humedeciendo la camisa del chico.

-Se fue. No lo volveré a ver -susurro Jimin.

-¿Estás seguro que es lo mejor?

-Tiene que serlo. No podemos estar juntos.

-Llora todo lo que quieras, aquí estoy -Yoongi le acaricio el cabello como aun niño.

No se sintió muy reconfortante a diferencia del abrazo que se dio con Taehyung. El aroma era diferente, el aroma mezclado de café y chocolate ya no estaba, desapareció. Lloro más fuerte sabiendo que ya no volvería a percibirlo.

Paso la tarde acostado en la cama lamentándose. Durante la adolescencia se imaginaba distintos escenarios en los que el alfa confesaba que estaba enamorado de él, que amaba su aroma, en otros planeaba confesarse y era aceptado. Dejo de hacerlos porque no pasarían, acepto ser únicamente el mejor amigo sin esperar más. Le dolía terminar de esta manera.

Mas calmado llamo a sus padres, debía solucionar el problema.

-Hola, cariño ¿Como te encuentras? ¿Es doloroso romper el lazo? -su papá omega sonaba feliz de escucharlo y a la vez preocupado.

-Hola pa, estoy bien -trato de sonar creíble. Hizo una pausa para respirar profundo, luego hablo -recuerdas que me ofrecieron estudiar en el extranjero.

-¿Quieres irte? -la voz del omega al otro lado de la línea se apagó. Jimin escucho como su papá hablaba con su padre contándole lo que sucedía.

-Hijo, hola soy yo -era la voz de su padre alfa. Habían puesto el altavoz.

Los imagino sentados en el sofa, su padre alfa sosteniendo a su papá omega el cual tenía un aroma demasiado dulce. Sus padres se conocieron durante su adolescencia y quedaron flechados casi al instante. Ellos eran la prueba de que algún día encontraría una persona que lo amaría y el correspondería. Su padre alfa amaba el aroma de su pareja y creyó que a Taehyung le gustaría el de él. No fue así.

-Hola. Me gustaría ir a Europa -dijo sin rodeos.

-¿Es por Taehyung? -esta vez su padre no sonó molesto con su amigo. Ambos padres estaban preocupados.

-Enserio me gustaría ir -evito dar la razón, aunque era evidente que se iba por el alfa.

-Hablaremos cuando regreses.

-Es que no quiero regresar. Si regreso no me querré ir -Jimin se acurruco entre las sábanas.

-Piénsalo con calma Jimin. Primero ve universidades, una vez que tengas algo volveremos a hablar.

-Lo haré y les llamare.

-Te queremos cariño -su papá omega quien se mantuvo en silencio se despidió.

-También los quiero. Adiós.

Finalizando la llamada comprendido que no sería tan fácil irse al extranjero. Teniendo el celular en la mano en lugar de buscar universidades decidido marcar el número que comenzaba a volverse costumbre marcar.

Un timbre. Dos timbres... una voz.

-Alo ¿Quién habla?

Jimin se levantó de golpe. La voz no era la de una grabadora y no le estaba diciendo la línea que ya se sabía.

-Oye has estado marcando este número durante días, tengo un montón de llamadas registradas y no dices nada -la voz sonaba a la de una mujer.

Las palabras simplemente no salían.

Hola guys

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