Nita ama a Sandy.

Lo ama porque es suave y cálido, hay algo en él que lo vuelve más pequeño a la vista de lo que es, y eso hace a Nita tener sentimientos extraños sobre querer arroparlo y abrazarlo tan cerca de su pecho cada vez que un bostezo sale de su boca (lo que es casi siempre).

Amar a Sandy es algo blando, como comer ositos de goma en verano; lo sabe por las ocasiones donde lo observa dormir debajo del tronco de algún árbol, con el ceño fruncido en su rostro gracias a la luz del sol que siempre logra golpearlo directamente en la cara sin importar cuántas veces cambie de lugar; y es en esos momentos, cuando el sol desciende sobre las hojas, que Nita siente está explosión, algo pegajoso en su estómago que le hace desear acercarse y lamer donde las mejillas se han vuelto rojas como sus gomitas favoritas.

Y si bien el sentimiento usualmente es así, algunas veces, amarlo para Nita se siente raro, diferente de una manera que no sabía que existía.

Porque si bien amar a Sandy es suave, en realidad Nita no lo es de ninguna forma o manera con él ni nadie.

Esto se demuestra en los raros días donde Sandy está lo suficientemente despierto como para querer divertirse; porque a veces cuando juegan atrapadas y Nita se encuentra a punto de agarrarlo, siente esta necesidad que le golpea como una roca en la cabeza de saltar sobre su espalda para hacerlos rodar en el césped, con Nita al final hallando un asiento en medio de su columna para inmovilizarlo, el cuerpo atrapado retorciéndose en la tierra mientras intenta en vano encontrar una escapatoria de su agarre. 

Pero como Sandy es suave mientras que Nita no, sus intentos serían un fracaso y sucedería algo que casi no ocurre entre ellos e iniciaría una pelea; Sandy jugaría sucio y le lanzaría tierra en los ojos para hacer que se despiste, a lo que Nita en respuesta rasguñaría sus brazos con fuerza, la sangre saliendo de su piel morena abierta en diagonal, no diferente a marcar árboles y ver el ámbar correr por el tronco. Ante eso Sandy haría un ruido pequeño y herido como un conejo aún vivo entre sus dientes, pero sonaría tan claro que el grito se grabará con crayones dentro de su estómago. Entonces ambos lucharán más, Sandy lanzaría patadas y puños, pero no serviría de nada porque Nita siempre ha sido la más fuerte entre los dos y, al final, sin importar cuánto Sandy se retuerza y grité para que lo deje salir de su agarre, Nita no cedería y entonces... Nita se acercaría y haría..., haría..., haría algo que por ahora no sabe que es pero sería cien veces mejor que todo eso.

Pero bueno, el punto es que últimamente son esta serie de pensamientos los que siempre generan en Nita sentimientos divertidos en el vientre que no entiende y, que a su vez, le hacen querer averiguar más cosas que no comprende el porqué su cerebro cree que son algo importante para ella necesitar saberlo ahora, ¿No sería como lo imagina y Sandy sería lo suficientemente fuerte para lograr sacarse a Nita de encima?, ¿A qué olería el sudor de Sandy con el suyo cuando terminará la pelea?, ¿Cómo lucirían los rasguños y moretones que Nita dejaría en sus brazos?, ¿Serían profundos?, ¿O podría separar la piel con sus dedos y ver el músculo?

Más importante, ¿Cómo sabría la sangre que quedará atrapada detrás de sus uñas?

Es obvio mencionar que Nita nunca intenta realmente encontrar las respuestas todas a estas preguntas, primero, porque supone que tirar a Sandy y golpearlo contra el suelo no sería algo educado, simplemente no lastimas a las personas que amas porque sí, o eso le han dicho; en segunda razón, siempre termina dejando de lado la idea en cada oportunidad al darse cuenta que lo más probable que sucediera si Nita lo inmoviliza es que Sandy se quedaría ahí sin siquiera intentar levantarse, parpadeando de esa manera que indica que está confundido pero muy cansado como para preguntar y que por eso aceptará lo que Nita haga con él; lo cual le quita algo a la escena que su mente ha imaginado.

Y en realidad ese es el problema por qué, ¿Cuál se supone que es ese algo que le hace querer pelear con Sandy?, ¿Qué es lo que convierte a este pensamiento para Nita en un plato de spaguettis?

Nita no lo sabe, pero tampoco es que le importe, aunque algunas veces logra darse cuenta los momentos en que este pensamiento decide salir del arbusto.

Pongamos de ejemplo ahora.

Nita había querido ir a Candyland para tomar (léase: robar) unas gomitas, y Sandy terminó uniéndose a él en vez de su hermano porque últimamente le habían estado gustando unos dulces raros que saben a tamaurindo y que son blandos.

Al final no terminaron consiguiendo nada, pues cuando llegaron al castillo se dieron cuenta que Mandy y Chester estaban peleando de nuevo; lo que si bien en otro momento hubiera sido la oportunidad perfecta para agarrar todo lo que pudieran e huir sin preocuparse por ser atrapados, esta vez no fue así ya que los dulces habían sufrido las peores consecuencias de la pelea.

Así que aquí están, los dos caminando en silencio de regreso a dónde se habían reunido en la mañana. El único movimiento en la plaza solitaria siendo las ratas de lata que limpian, probablemente culpa del evento que siempre hay los fines de semana.

Entonces son sólo los dos en la plaza muy amplia, y Nita está enojada.

Y no malinterpreten a Nita, le encanta pasar tiempo con Sandy sin gente alrededor, y en otro momento probablemente creería que está oportunidad era mejor que el día donde toro ofrece 2x1, pero queda de más señalar que no está teniendo un buen día, por lo que lo único que quiere hacer es alejarse los más rápido que pueda para entrar a cualquier evento y pelear así con alguien de forma segura, Nita no quiere problemas de nuevo con los hermanos robots por lastimar gente fuera de un mapa.

Es con esto en mente, que Nita se promete que quien sea que se interponga en su camino de violencia sufrirá de un destino peor del que tenía preparado para cualquier otro brawler del equipo contrario, sin importar que muy probablemente eso le gane otro papel de color que no entiende lo que dice.

Que es, en el momento justo después de terminar ese pensamiento, cuando Sandy decide detener su caminata para tomar su mano y dirigirlo a la dirección contraria de dónde están los mapas.

Nita quiere lastimarlo, pero no de la forma que le hace sentir cosas raras en la panza.

Sandy lo saca de ese pensamiento cuando se detiene y la mira.

—se que no son gomitas... —dice la mejor persona y a quien Nita más ama en el mundo mientras se acerca a una máquina expendedora y mete con su mano libre tres monedas. —pero es mejor..., a volver con las manos vacías..., ¿Verdad?

Sandy aprieta unos botones, pero Nita no presta atención a este hecho porque sólo puede concentrarse en la forma en que el sol de la mañana lo ilumina como una especie de Dios dador de golosinas.

Este pensamiento se confirma como acertado después de que la máquina haya tirado su premio por no lastimar gravemente a Sandy. Sin soltar sus manos unidas él toma la bolsa que tiene un dibujo de la chica abeja y se lo extiende. Nita no pierde tiempo y lo agarra con una velocidad demasiado impresionante si puede decirlo; piensa que probablemente debe verse como lucen las personas de rodillas en esas pinturas que una vez vio cuando junto a Leon fueron al castillo del señor bote de basura para hacerle una broma al hombre de rojo.

Nita mira su regalo y después a los ojos cansados, repite la acción dos veces y dice con la mayor sinceridad que puede reflejar en su tono las palabras.

—cásate con Nita. —Sandy se ríe, suave y sin mucho esfuerzo como es todo lo que hace; la luz del sol desciende porque ya es tarde y la sonrisa que queda forma un hoyuelo en su mejilla.

Es como si Bo tocara la campana de caza. 

Los colmillos de Nita de pronto pican con la necesidad de morder a Sandy con fuerza en ese agujero de su mejilla hasta el punto en que la sangre empiece a brotar, para después dedicarse a lamer como un dulce relleno de miel los agujeros del tamaño de sus caninos; Nita aprieta la mandíbula en la carne y de un tirón arranca un pedazo de mejilla con sus muelas para masticar como un mejor sustituto de las gomitas no conseguidas hoy, el sonido que Sandy produce abriendo un agujero en su estómago que lo consume todo.

Hay sangre escurriendo por su barbilla que Nita limpia con ayuda de su lengua cuando traga, entonces Sandy tose y la carne entre sus dientes desaparece. Nita levanta su mirada de donde había planeado querer dar un bocado y ve a Sandy con esa expresión en la que una ceja apenas se levanta, la que siempre hace cuando Nita se comporta de manera extraña, como no decir algo en más de 5 minutos.

Sacudiendo la cabeza para centrarse y dejar de lado la visión de la sangre, Nita suelta el agarre de sus manos para con diez garras apretarlo fuerte al punto en que cruje, ve a Sandy abriendo los labios para quejarse, pero antes de que pueda decirle algo Nita desenfunda los dientes y con más fuerzas de las que debería muerde...

Nita desgarra de un tirón la parte superior de la bolsa con sus caninos y esta se revienta dentro de su boca, una explosión de muchas pastillas de miel que caen en la acera sin poder recuperarse porque Sandy ya no le permite comer comida del suelo.

Hay cuatro debajo de su lengua que se sienten igual que la sangre que se espesa y Nita traga con dificultad, el plástico que no se había dado cuenta que quedó atrapado entre sus mejillas le raspa la garganta tras el movimiento y hace que casi se ahogue; cuando las pastillas caen en su vientre no son el peso de su estómago, se da cuenta con decepción, si es que la comparación tiene algún sentido.

Sandy por su casi muerte se ríe, el sonido más alto y de alguna manera más suave que la vez anterior, lo cual no le ayuda a intentar evitar acercarse más con la intención de dejarlo desangrado como un cadáver blando en el pavimento.

A pesar de esto, Nita logra controlarse por la pura fuerza de su terquedad, aun cuando la situación es como tener una galleta de chispas en equilibrio sobre tu nariz que no puedes comer porque te lo han dicho. Y si bien no es alguien que huye porque Nita no es cobarde, ella toma la muy sabia decisión de retirarse; así que se despide sin tocarlo (por lo cual Sandy lo ve raro pero suertudamente no dice nada) y cada uno vuelve a su casa sin sangre.

.
.
.
.
.

Excepto Nita, a quien le prohíben jugar una semana por "brutalidad en exceso".

HOLA, HOLA

Explicar cómo es la excitación siendo asexual es muy complicado, así que si no se comprendió muy bien una disculpa, ni yo lo entiendo siendo sincero :p

Igual se que nadie me pregunto pero mi HC de Nita favorito que he creado es que al vivir en el bosque y siendo hermana de un oso, Bo tuvo que entrenarla para cazar cuando escuchara una campana, esto tras un accidente muy desafortunado al ver por primera vez a Crow, pero hey, al final ellos se hicieron amigos, así que todo termino bien =)

Pero X, mi plan es subir un capitulo cada dos días en el mejor de los casos, por lo que mínimo esto debería estar terminado en dos semanas, máximo este mes (que es lo más probable XD)

Y bueno, muchas gracias por leer; preguntas, sugerencias o mensajes que me pregunten que rayos con mi vida son aceptados.

Nota para tener en cuenta: lo que viene sube como 5 rayas de tono 👍

Chao ✌️✌️✌️✌️