Después de la victoria sobre Majin Buu y sus secuaces, Celeste y sus aliados regresaron al Templo del Torneo del Poder para descansar y recuperarse. Sin embargo, su breve período de tranquilidad se vio interrumpido cuando recibieron una invitación que cambiaría el curso de su viaje.

Gohan: Chicos, hemos recibido una invitación muy especial. Los Dioses de la Destrucción de diferentes universos nos desafían a un enfrentamiento.

Vegeta: ¿Los Dioses de la Destrucción? Eso suena a un desafío realmente poderoso. ¿Estamos listos para enfrentarlos?

Celeste: Si queremos proteger el multiverso, debemos estar dispuestos a enfrentar cualquier desafío. Aceptemos la invitación y mostremos lo que somos capaces de hacer.

Decididos a poner a prueba sus habilidades y demostrar su valía ante los Dioses de la Destrucción, Celeste y sus aliados aceptaron el desafío y se prepararon para la batalla.

Al llegar al lugar del enfrentamiento, se encontraron con los Dioses de la Destrucción de diferentes universos, cada uno con su propio poder y personalidad única.

Goku: ¡Esto es emocionante! Estamos a punto de enfrentarnos a los seres más poderosos del multiverso.

Gohan: Será un desafío como ningún otro, pero estoy seguro de que podemos hacerlo.

El enfrentamiento comenzó con una serie de intensas batallas. Celeste y sus aliados lucharon valientemente contra los Dioses de la Destrucción, utilizando todas sus habilidades y poderes para enfrentarlos.

Vegeta: ¡No nos detendremos hasta que hayamos demostrado que somos los mejores!

Celeste: ¡Luchemos con todo lo que tenemos! No dejemos que el miedo nos detenga.

A medida que avanzaba el enfrentamiento, Celeste se encontró cara a cara con el Dios de la Destrucción de otro universo, conocido por su fuerza y ​​habilidad sin igual.

Celeste: ¡Estoy lista para enfrentarte! Demuéstrame de qué estás hecho.

La batalla fue feroz, con golpes rápidos y poderosos ataques. Celeste y el Dios de la Destrucción se igualaron en fuerza y habilidad, cada uno empujándose al límite.

Celeste: ¡No me rendiré! Lucharé hasta el final.

Con un último esfuerzo, Celeste lanzó un ataque final que sorprendió al Dios de la Destrucción y lo derrotó.

La multitud estalló en aplausos y celebraciones, reconociendo el poder y la habilidad de Celeste.

Goku: ¡Increíble, Celeste! Has demostrado que eres una luchadora formidable. Estoy orgulloso de luchar a tu lado.

Celeste: Gracias, Goku. Pero esta victoria es de todos nosotros. Juntos, superamos cualquier desafío.

Después del enfrentamiento, los Dioses de la Destrucción reconocieron la fuerza y el valor de Celeste y sus aliados. Se dieron cuenta de que el multiverso estaba en buenas manos y prometieron apoyarlos en su misión de protegerlo.