—Acá ven, vamos Buckbeak, esto es para ti—

Harry y Ginny corrían por el bosque prohibido que estaba oscuro por las horas de la noche, el azabache agarraba la cadena de Buckbeak y jalaba un poco, el hipogrifo se limitaba a ir tras el animal muerto que Ginny agitaba en el aire, la chica miraba al frente de vez en cuando para no caer

—Ven, camina—Harry se sentó para amarrar al hipogrifo y Ginny le tiró el animal muerto a Buckbeak—¿Y ahora qué?

—A rescatar a Sirius—

Ginny subió la colina

—¿Cómo?—

—No lo sé Harry—

El azabache la siguió y juntos dejaron atrás al hipogrifo. Corrieron hasta que cuando salieron estaban viendo el perfil del sauce boxeador, vieron a una sombra de un señor hacer algún hechizo con su varita que hizo que el sauce se quedara quieto

—Es Lupin—dijo Ginny reconociendo a lunático, el hombre lobo entró al sauce boxeador y luego vieron a un profesor

—Y ahí viene Snape

—¿Hay que esperar?—preguntó Harry con la vista fija en la entrada del árbol

—Hay que esperar—Ginny asintió y se sentó en el tronco de un árbol. Harry la imitó

—Cuéntame más

—¿Sobre qué?

—Sobre lo que te dijo Sirius, parecías contento ahí

—Si bueno. Me dijo que podía vivir con él

—¿En serio?, ¡Harry eso es fantástico!

Ginny casi saltaba sobre el para abrazarlo

—Muy fantástico pero al parecer tendré que volver con los Dursley

—¿Por qué?

—Sirius...aún...su vida

—Aún no es segura—terminó Ginny por él

—Exacto

—Tranquilo Harry, pronto estarán juntos

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—Al menos alguien se divierte

Comentó Ginny al ver como Buckbeak jugaba con las aves que volaban y se comía unas cuantas

—Ginny

La castaña-rojiza se giró a su mejor amigo

—Antes...en el lago cuando estaba con Sirius, vi una sombra. Esa sombra obligó a los dementores a irse

—Con un patronus

Harry miró confundido a su mejor amiga

—Snape se lo dijo a Dumbledore, el patronus es un hechizo muy poderoso y solo ese podía hacerlo

—Era papá...el fue quien lanzó el patronus

—Pero Harry, el está

—Muerto lo sé

A Ginny se le encogió el corazón al escuchar decir tan normal a Harry que sus padres estaban muertos

—Solo te digo lo que vi

Harry volvió su vista al piso y Ginny incómoda vio al frente, ya estaban saliendo del sauce

—Ahí estamos

Ambos Gryffindor se levantaron y vieron la escena de la que horas antes fueron parte

—Sabes, cuando la vida de Sirius no sea tan peligrosa me iré con el, no regresaré con los Dursley. Me iré al campo a vivir con él. Podremos ver el cielo, le gustará después de estar en Azkaban

Harry tenía un brillo en los ojos cuando volteó a ver a Ginny, ella solo sonreía de boca cerrada

La idea de que Harry sea feliz con Sirius sonaba increíble

—Es hora

Harry y Ginny salieron corriendo por el bosque prohibido, en busca de Sirius para poder ayudarlo. Los quejidos uy los gruñidos eran mucho más fuertes por la cercanía

Cuando dejaron de correr, vieron al Harry del pasado al frente de Lupin convertido en lobo, lo iba a atacar

Sin pensarlo, Ginny puso sus manos a los lados de su boca simulando un megáfono e imitó un aullido de lobo. Harry se paró detrás de ella y le agarró las muñecas

—¿Qué haces?

Ginny se separó y miró la escena tratando de llamar la atención del lobo

—Salvo tu vida

El licántropo desvió su mirada de Harry para fijarla en el dúo

—Gracias, ahora viene por nosotros

Lupin corría hasta los dos mejores amigos

—Si, no lo pensé. ¡Corre!

Ginny corría y esquivaba las ramas y piedras que le interrumpían el paso, Harry detrás de ella

Cuando ya no podían correr más, se refugiaron en un árbol, se pegaron para no ser vistos y se agarraron las manos

Decir que Ginny no temía por su vida y por la de Harry sería mentir

El licántropo aulló y en menos de un minuto ya estaba detrás del árbol donde los Gryffindor se encontraban

Ginny agarró la mano de Harry y lo jaló un poco retrocediendo, salieron por detrás del árbol pero se quedaron quietos cuando escucharon un bufido tras ellos. Se voltearon lentamente y vieron a Lupin detrás de ellos, el hombre lobo se paró en dos patas alertando a los chicos

Ginny se llevó las brazos a la cara y se volteó, Harry la rodeo con sus brazos abrazándola para brindarle la protección necesaria

La castaña-rojiza ya pensaba lo peor hasta que Buckbeak apareció y empezó a atacar al licántropo con sus garras y pico, le gruñó y el lobo se fue. El hipogrifo se volteó hacia los mejores amigos

—Merlín que horror—dijo Ginny con las manos en la boca y apoyándose en el pecho de Harry, el azabache la abrazó y apoyó su mentón en la cabeza de su mejor amiga mientras le sobaba un brazo

—Supongo que el profesor Lupin tuvo una mala noche

Una brisa helada llegó soplando las hojas, Harry y Ginny sospechaban que era y levantaron sus caras aún en su posición anterior

El aire fue más fuerte y en el cielo se podían ver cientos de dementores

—Sirius. Vamos

Harry agarró la mano de Ginny y sin soltarse salieron corriendo. Ginny le soltó la mano a Harry cuando llegaron al lago, el azabache avanzó un poco más que su amiga

Podían ver al Harry del pasado junto a Sirius, él gritaba cuando los dementores le querían dar el beso

—Es horrible Harry

—Descuida, mi papá vendrá—tranquilizaba el azabache confiado—Él hará el patronus

Harry y Sirius se estaban muriendo

—En un minuto. Ahí, justo ahí—señaló un lugar más alejado de donde estaban, daba una vista directa hacia donde estaban Harry y Sirius del pasado

—Escúchame, nadie vendrá—le decía Ginny temiendo por la vida de su mejor amigo

—Tranquila, vendrá. Papá vendrá

A Ginny se le volvió a romper el corazón al escuchar decir eso a Harry, ella sabía que ni con magia los muertos podrían revivir

—Los dos...se están muriendo

Esa frase fue lo que hizo que Harry saliera corriendo

—¡Harry!

—¡Expecto Patronum!—

Una niebla espesa y blanca azulada salió de la varita de Harry y seguido, un ciervo

Ginny sabía lo que era, un patronus, un patronus de cuerpo entero. De los más difíciles de conjurar

Ese ciervo alejó a todos los dementores, ese ciervo hizo que el mejor amigo de Ginny, el chico del cual estaba enamorada, se salvara

Cuando el patronus se acabó, Harry y Ginny fueron por Buckbeak, el azabache ayudó a su mejor amiga a subir en el hipogrifo y luego, delante de ella, subió él

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Ginny tenía que admitir que volar en Buckbeak no era nada parecido a volar en escoba y Ginny tuvo muy claro cual prefería, en vez del movimiento suave de sus escobas, sentía el azarando hacia atrás y delante. No era nada cómodo

—¡Tenías razón!—gritó Harry para que Ginny lo escuchase—No vi a papá en el lago. ¡Era yo!, era yo mismo lanzando el encantamiento. Supe que lo lograría porque, lo había intentado ¿Parece lógico?

Ginny no dudó ni un segundo en responder

—¡No!. Pero no creo que...

El grito que tuvo que aguantar interrumpió a la castaña-rojiza, Harry gritaba emocionado mientras Buckbeak descendía

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Llegaron a la celda más alta de la torre oscura, donde Sirius se encontraba sentado

—¡Bombarda!—gritó la castaña-rojiza apuntando al candado que colgaba de la celda, este salió volando y la puerta se destruyó

Todos volvieron a montarse en Buckbeak para luego salir volando, Ginny al frente manejando los movimientos del hipogrifo, Sirius al medio y Harry al último

Sirius no paraba de hacer gestos y sonidos de felicidad

Llegaron de nuevo al patio de Hogwarts y bajaron los chicos, Sirius ayudó a Ginny a bajarse de Buckbeak y le agarró la mano para guiarla, Harry los siguió

—Les estoy eternamente agradecido por esto—les comentó una vez estaba un poco más tranquilo—A los dos

—Quiero ir contigo—suplicó Harry

—Quizás después, por ahora mi vida es muy impredecible—comentó acercándose a Harry, cogiéndolo de los hombros y agachándose a su altura—Y además...tu debes estar aquí

—Pero eres inocente

—Pero tú lo sabes—Sirius a este punto ya había hecho sentar a Harry

Ginny regresó con Buckbeak pues esa conversación se estaba tornando personal

—Lo hiciste muy bien Buckbeak, eres un buen hipogrifo—el animal solo hizo su típico sonido cuando la castaña-rojiza lo acarició

—Tenemos que prepararte ¿Si?—hizo que la cabeza del hipogrifo quede frente a la suya haciendo contacto visual—Llevarás a Sirius a un lugar seguro y tú irás a uno también ¿De acuerdo?

El animal solo emitió un sonido de afirmación

—De acuerdo Buckbeak, eres un buen hipogrifo, ¿Verdad?—Ginny tenía que ejercer un poco de fuerza para mantener quieto y tranquilo al hipogrifo—Te voy a extrañar Buckbeak. Cuídate

Ginny terminaba de acomodar la cadena cuando Sirius llegó y ella se apartó un poco para que Black se pudiera subir sobre el hipogrifo

—De veras eres la mejor hechicera de tu edad—dijo Sirius haciendo sonreír a la castaña-rojiza—Y aquí entre nos, hasta mejor que Hermione

Sirius y Buckbeak avanzaron y Harry y Ginny los siguieron hasta que los vieron perderse en el aire

—Debemos irnos—Ginny jaló a Harry cuando escuchó la primera campanada

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Harry y Ginny corrieron por el colegio hasta que doblaron el último pasillo, en la puerta de la enfermería se encontraba Dumbledore cerrando la puerta

—¿Y bien?—preguntó el anciano cuando los estudiantes llegaron hasta el

—Está libre, lo hicimos—dijo Harry

—¿Qué cosa? Buenas noches—se despidió el director con una mano para ir escaleras abajo

Los dos Gryffindor se miraron confundidos y entraron a la enfermería. Ahí vieron sus cuerpos, sus yo del pasado usando el giratiempo y desapareciendo

—¿Qué hacen ahí?—preguntó Ron en la misma posición como cuando lo dejaron, Hermione solo sonreía—Si estaban allá. ¿Qué pasó?

Ron lucía demasiado confundido y parecía estar ordenando todo en su mente

—¿Tú sabes de qué está hablando?—preguntó Ginny esperando que Harry le siguiera la corriente

—No lo sé—contestó Harry siguiéndole la corriente a su mejor amiga—No es posible estar en dos lugares al mismo tiempo

Al escuchar que su mejor amigo usó sus palabras contra ella, Ginny rió y volteó para un lado, finalmente miró a Harry riendo con una sonrisa la cual el azabache correspondió

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—¿¡La abrieron!?—preguntó la casi pelirroja cuando vio el paquete de la saeta de fuego que iba destinada a Harry abierta casi completamente

—No queríamos—respondieron Fred, George y Ron rápidamente con miedo de lo que su hermana llegara a hacerles

Los que estaban cerca solo apuntaron a los gemelos y a Ron rápidamente como si su vida dependiera de ello, y como no hacerlo, si Ginny molesta era peor que el mismo diablo

—Eso es de Harry, no debieron abrirlo

—Perdón zorro rojo, pero era inevitable—dijo George abrazando a su hermana por un hombro

—¿Chocolate hermosa, bella y preciosa hermanita?—ofreció Fred llegando a su lado y abrazándola por su otro hombro

—Ni lo pienses Tweedledum y tú tampoco me ofrezcas nada Tweedledee, dénselo a Ronald o a alguien más

—¿Tweedledum

—Y Tweedledee?

Preguntaron Fred y George

—Son dos gemelos de Alicia en el país de las maravillas, un cuento muggle. Ahora tapen esto antes de que Harry venga—Ginny apuntó a la escoba con el resto del papel que lo envolvía

Intentó ver si decía quien la enviaba peor solo vio una pluma, una pluma de hipogrifo

—Harry, ¿Cuándo te la dieron?—oyó que Neville le decía al azabache

—¿Puedo montarme en ella Harry? Claro después de ti—decía Seamus

—¿De qué hablan?

—Cállate. Déjalo pasar, em, no quisimos abrirla, estaba mal envuelta y ellos me obligaron—se excusó Ron

—Claro que no—contraatacaron Fred y George

Ginny estaba sentada al lado derecho de Harry quien aún estaba parado, el elegido removió el único papel restante y se reveló la saeta de fuego

El manillar es de  pulido, y el cepillo puede ser de abedul o avellano según la preferencia personal. Se dice que proporciona más potencia a gran altitud, mientras a los que les gusta la dirección de precisión prefieren las de avellano. Las piezas de hierro de la escoba fueron fundidas por duendes (primera vez en una escoba), lo que incrementa la estabilidad y la potencia en condiciones adversas, además de prevenir el deslice en los agarres.

La saeta de fuego también dispone de un  inquebrantable, estupendos balance y precisión, y flota a una altura razonable al soltarla

—Es la más rápida del mundo—comentó George

—¿Quién la envía?—preguntó Harry emocionado

—Nadie sabe—respondió Ron

—Venía con esto—dijo Ginny sonriendo de lado mientras sostenía la pluma de Buckbeak, Harry la vio y le sonrió a su mejor amiga

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Todos salieron emocionados del colegio hacia el patio, todos corriendo emocionados por ver a Harry montar su nueva saeta

Cuando Ginny salió vio a Draco, Crabbe, Goyle y Pansy viendo a todos con enojo, Ginny solo sonrió de lado e hizo un gesto militar para luego seguir a sus mejores amigos

Harry se subió a la saeta y apenas hizo un movimiento, la escoba empezó a volar con gran rapidez, Harry gritaba por el repentino movimiento y todos lo vitoreaban

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—¡Mamá Ronald se comió mi tarta de fresa!—gritaba Ginny quejándose

—¡Ella se comió mi pollo!—excusaba Ron

—¡Ese pollo no tenía dueño!

—¡Decía Ron!

—¡Decía Ran!

—¡Ronald no hazle una nueva tarta de fresa a tu hermana, Ginevra hazle un nuevo pollo a Ron!

—¡Pero mamá!—gritaban Ron y Ginny

—¡Ni una sola palabra hagan ca...!

Una explosión se escuchó en el baño de la casa

—¡Fred y George Weasley!

Fue lo único que se escuchó después de eso

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| Ginny y el prisionero de Azkaban |