Primer capítulo: tijeras.

La danza de las tijeras, también conocido como saqras o gala, éste baile consiste en movimientos de piernas complicados, incluso acrobáticos, en todo momento se ha de tener unas tijeras en la mano derecha.

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Los tres countries miraban boquiabiertos la forma en como su hermano embestía el piso con sus piernas, bajando una por una las rodillas de lado y subiendo con saltos, para luego darse un “mortal” o voltereta y caer de pie en el suelo.

El atuendo también era muy llamativo, lleno de colores brillante, hojuelas de escarcha, detalles dorados y un gorro con un flequillo que tapaba la frente. Después de que el peruano terminó su presentación, se sentó para recuperar aire, el baile era desgastador.

Ahora la pregunta era: ¿Quien carajos en este mundo podría hacer eso? o ¿Existiría alguien que haga lo mismo?

----Mira compa, muy increíble y todo, pero...----los demás lo miraron para que pudiera controlar su siguiente frase y tenga cuidado con sus palabras. ----eh...¿Quién va a bailarlo?

La sonrisa del menor bicolor se amplió, sacándose el gorro se levantó para acercarse a ellos.

----¿Quién crees que hace lo mismo que yo, pero con dragones?---- después de quedarse pensando ambos no tenían una respuesta asegurada, Chile nisiquiera quería analizarlo. ----Ugh, ¿Coronavirus?

----¡Ah! Si si po, él hace casi lo mismo. ----expuso el chileno acordándose igual que todos que empezaron a expresar acertividad.

----Pero che, ¿Cómo vas a llamar a alguien que está en cuarentena? Yo no voy a arriesgarme. ----afirmó el argentino sacándole la sonrisa a su menor.

----No seas marica oe, si se puede. ----dijo con el ceño fruncido, capaz no me tenía miedo a nada, mirando a México sonrió de forma dulce de nuevo. ---- Llámalo porfa, Mex.

Éste sacó su teléfono sin rechistar, no quería que su hermanito le respondiera como a Argentina, además todos en ese grupo sabían que de todos los latinos, el mexicano tenía de contacto a casi todos los países.

[...]

----Mòxīgē, espelo que sea– cof, algo impoltante...----dijo no pudiendo evitar los estornudos, haciendo que los demás latinos alrededor de alejaran con expresión de susto. Por suerte su boca tenía máscara quirúrgica.

México era el que estaba más cerca de su amigo, igual que el peruano, quién estaba sonriendo como si nada pasara. ----P-pues...

----Enrealidad yo te llamé. ----El gallardo bicolor comenzó a explicar el tema y el porque de la llamada, le explicó porque tenía tantas bolsas, para que servían, sobre el tipo de baile que le había preparado,etc. ----Y deseo que tú bailes conmigo.

El asiático se quedó callado, él era la primera persona que se quedaba tanto tiempo a su lado sin flaquear desde que contuvo esa enfermedad maldita, lo miraba esperando una respuesta y continuaba a pesar de las veces que estornudara, comenzó a mirar más de cerca al de menor estatura acercándose «peligrosamente» a su rostro tranquilo, esperando al menos una petición de que se alejara.

Sus hermanos murmuraban con dirección al blanquirrojo que tenga cuidado o que se fuera un poco más atrás, pero enrealidad nada de eso pasó, China separándose de Perú, asintió dándole la respuesta que el más pequeño esperaba.

----¿'T-tas seguro? ¿No estabas enfermo? ----le preguntaba preocupado, y es que la verdad el chino no había considerado su situación, solo aceptó sin pensarlo, el rostro del peruano era simplemente encantador. ----¿China?

----我能做到 [Puedo hacerlo.]----Afirmó mirando a su amigo de al lado, remangando las mangas de su hanfu (vestimenta tradicional), estaba determinado, no quería quedarse sin hacer nada solo por tener un virus, ese podría ser un excelente método de distracción que le haría olvidar al menos un rato de su situación.

Luego se vió a un peruano, pequeño a comparación traerle una bolsa con la vestimenta y las botas tradicionales en la otra mano. El de estrellas doradas comenzó a ojear aquellas prendas una vez las tuvo en sus manos, comparada a la suya, tenía mucho más colores neón y se notaba los detalles dorados más intensos.

[...]

----Ay, csm deberías usar más seguido hombreras. . .----decía el chileno tocando el traje en la parte de los brazos, extrañando a China el repentino cambio de actitud.

----Sin duda te queda excelente, pero haber si realmente eres digno de llevar tanta biodiversidad en ti. ----presumía el blanquirrojo, con el mismo traje que el más alto, se acercó hacia su mayor para entregarle el gorro y colocarselo, dándole en la mano derecha unas tijeras afiladas que debía poner en el índice y el pulgar. Alejándose unos metros de él le sonrió desde la lejanía para ponerse en posición recta.

El chino, por reflejo hizo lo mismo que él, apartándose de ese punto para quedar ambos en las esquinas del escenario, estaba perdido pero trataría de llevarle el ritmo al perucho.

Perú empezó cuando la música inició con una tonada de violín y arpa tranquila, agachándose en cunclillas para subir una pierna y luego la otra coordinadamente. Al principio fue difícil para la potencia agarrar coordinación después de agacharse, pero luego de analizarlo un poco, el movimiento se parecía mucho al baile típico de Rusia.

Pero ese solo era el principio...

Después de unos segundos haciendo ese paso siguió volteando su cuerpo de lado para caer con la rodilla pegada al suelo, luego la otra pierna, y así repetidamente. China hacía un mueca de puro dolor sintiendo el golpe de sus delgadas piernas chocar contra el piso, por otro lado, el peruano lo estaba haciendo mucho más rápido y sin expresiones más que una sonrisa de lado por ver qué se le hacía difícil a la potencia.

Siguiendo, las manos de Perú cayeron en el piso impulsando su cuerpo hacía delante para dar una voltereta, apenas regresó a estar parado siguió bailando con sus piernas, obviamente sin dejar de mover las peligrosas tijeras.

El rostro del chino palideció, tenía un objeto peligroso en su poder y falta de experiencia en el baile, ¿Que más faltaba para terminar (de nuevo) en el hospital?, Aún así, se inspiró mucho por la forma ágil y eficaz en la que el otro se movía, su sonrisa era tan hermosa como los pétalo de un cerezo recién eclocionado.

Con una sonrisa en el rostro, olvidó por completo su agotamiento y temor, saltando para dar un giro en el aire y caer de pie, siguiendo con el baile, esta vez mucho más cerca el otro país más pequeño.

Ambos bajaban y subían agitando las tijeras al compás, mirándose fijamente de frente uno a uno, daban giros de vez en cuando, el peruano se alegró de ver a su contrario más emocionado, agarró su mano para darse otra voltereta, esta vez apoyando su peso e impulsandose gracias al cuerpo del chino, el cuál casi se cae al perder el equilibrio.

Río un poco viendo como caía sentado  sobre el suelo, respirando erráticamente mientras su mano estaba en el piso y la otra en su pecho, apretando esa parte del traje. Los demás latinos, que hasta ahora solo miraban sorprendidos la emoción que se traían esos dos mutuamente (excepto Chile, él miraba su teléfono), se alarmaron al ver la decaída de China.

----¡A la verga! ¡Se partió la madre, ayudenlo!----Los tres de allí fuera del escenario saltaron hacia éste, corriendo hacia el de estrellas doradas.

Perú se acercó más lentamente, estando un metro más lejos que el chino, estirándole un brazo para que tomara su mano y se levantara.

----谢谢啦[Gracias.]----agradeció estremeciéndose ante el toque de sus manos tersas y fuertes, trató de sonreír pero solo consiguió hacer una mueca extraña, aún así el peruano le correspondió.

----Eres un gran bailarín. ----Decía sonriendo con sus ojos, su mano aún unida con la contraria hizo un movimiento como de saludo, el chino siendo muy reservado con el contacto físico se sintió raro, pero le gustaba esa rareza.

----Oshe wacho, ¿No se supone que tenés que usar vestido?----Mencionó agarrando la prenda blanca con una falda promedio, mostrándoles lo que debería estar usando en ese momento. Perú se rascó la nuca recordando, había olvidado ese detalle de quién sería el hombre y quién la mujer.

----Pues...me olvidé causa, ¿China, podemos hacerlo de nuevo? Si tú quieres...

----我....[Yo...]----El tono rojizo de sus mejillas se volvió rosado, ese vestido mostraba mucho y para él, eso sería como una minifalda, además que ver a un hombre vestido de mujer sería extraño, para ellos parecía lo más normal, además, muy en el fondo le gustaría ver cómo son esa fuertes piernas que se movían ágilmente en el escenario.----Cla...

----¡Good moornig, motherfuckers!----

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