Se encontraba solo tocando su guitarra, sentado sobre su cama con un sentimiento de tristeza inundando su resquebrajado corazón.

Nunca se había sentido tan deprimido desde que lo último que le quitaron.

Siempre lo estuvo pero jamas lo había sentido tan fuerte como ahora.

La melodía de su guitarra era su único consuelo.
Nadie más había ido a verlo.
No había salido de casa desde entonces.

Uno se preguntaría por la preocupación

¿Qué pasó con el de celeste y blanco?

El sol parecía no querer salir a mostrarse, no parecía querer que lo vieran como antes solía hacerlo, no parecía querer que vieran su dolor porque sabía que si derramaba una sola lágrima enfrente de ellos se derrumbaria por completo y podría hacer más daño de lo que ya hace en su propio mundo.

Sus palabras lo habian lastimado.
No hacia falta la crueldad para rechazarlo.
Pero siempre debían lastimarlo, como si fuera tradición de todos los días, meses o años.

"𝙏𝙤𝙙𝙤 𝙙𝙚𝙘𝙖𝙣𝙩𝙖 𝙚𝙣 𝙩𝙪 𝙖𝙢𝙤𝙧..."

Había ido con sus manos en la espalda para que no viera la carta que llevaba.

"𝙔 𝙚𝙣 𝙢𝙞 𝙙𝙤𝙡𝙤𝙧"

Se acercó a su amor secreto, y con un susurró tímido atrajo su atención, con temor pero confiado e ilusionado mostró su carta a quien creía que podía llegar a sentir lo mismo que él.

"𝘾𝙧𝙚𝙤 𝙚𝙣 𝙩𝙪 𝙨𝙤𝙣𝙧𝙞𝙨𝙖, 𝙘𝙧𝙚𝙤 𝙚𝙣 𝙢𝙞 𝙨𝙞 𝙩𝙚 𝙫𝙚𝙤 𝙝𝙤𝙮... 𝙮 𝙢𝙚 𝙥𝙚𝙙𝙞́ 𝙦𝙪𝙚 𝙣𝙤 𝙢𝙚 𝙧𝙞𝙣𝙙𝙖"

Su corazón no podía aguantar otro golpe más...

"𝘾𝙧𝙚𝙤 𝙚𝙣 𝙩𝙪 𝙚𝙨𝙩𝙧𝙚𝙡𝙡𝙖, 𝙚𝙣 𝙖𝙦𝙪𝙚𝙡𝙡𝙖, 𝙦𝙪𝙚 𝙗𝙪𝙨𝙘𝙤 𝙚𝙣 𝙢𝙞 𝙨𝙪𝙚𝙣̃𝙤 𝙢𝙚𝙟𝙤𝙧 𝙥𝙖𝙧𝙖 𝙥𝙤𝙙𝙚𝙧 𝙡𝙪𝙘𝙝𝙖𝙧"

Su carta se rompió en pedazos que en cámara lenta caían al suelo junto con su amor.

Risas por parte de quien amo escucho y lo hizo romper por completo.

Podían armarlo las veces que quisiera.
Seguiría físicamente allí

Pero su alma, mente, corazón y todo lo que lo hacían él ya se habían hecho polvo y fueron arrastrados y estar por el viento seco de su dolor y soledad.

Esto es un corto de Argentina obviamente.
Y no mencione a ningún país en específico para que ustedes mismos se pudieran imaginarse a quien se les cante la gana

(Yo me imagine a Perú o a Chile lol)