•×Habian pasado ya varios días,semanas..desde que termine en la calle y efectivamente mi dinero se acabó, no me enorgullecia pero empecé a mendigar, al principio la gente mostro compasión por mi, por mi barriga que iba creciendo y por mi linda apariencia pero a medida que pasaba el tiempo y sin un baño adecuado empecé a deteriorarme y a sufrir hambre constantemente, el dinero era más difícil de conseguir y moría de frío en las noches.

Este día no fue mejor que los otros, conseguí algo de monedas para Pan al menos pero un niño me lo robo, no lo podía perseguir así que él se llevó mi único dinero para comer

─Resiste por favor..

Me decía a mi misma cada día para no volverme loca, el hambre era insoportable y tarde o temprano iba a morir sin haber tenido en mis brazos a mi bebé, las lágrimas caían por mis mejillas ante esa idea, no podía arrepentirme ya de la decisión que había tomado y no iba a volver arrastrandome a la vida de antes.
Me senté en el callejón donde dormía y me arrope con una sabana vieja y comencé a sollozar nuevamente mientras acariciaba mi vientre y sentía a mi bebé el simple de echo de sentirlo me hacía llorar hasta quedarme dormida y eso fue lo que hice, llorar no me servía de nada pero no tenía otra respuesta ante esta situación..

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No se cuanto tiempo había pasado pero mis ojos hinchados se abrieron pesadamente por un delicioso aroma, termine de despertar y mire un plato de comida recién hecho delante mio, la baba comenzó a caer por la comisura de mis labios y sin dudarlo tomé el plato para comenzar a comer como loca, era un sabor tierno y casero un sabor me hacía sentir calidez en mi pecho y llenar mi estómago, ni siquiera había visto el rostro de la persona que me lo dio pero si escuche una pequeña risa de su parte pero no de burla si no de ternura.

Cuando termine el plato entero una mano que llevaba guantes negros se acercó a mi mejilla con una servilleta para limpiarme, en ese momento levante la mirada y mi vista borrosa por las lágrimas se aclaró enfocando a un hombre alto, rubio pero con mechas violetas, con unos ojos amables color violeta, era realmente era guapo y de Inmediato lo reconocí, era el hombre que la había caído el café en su ropa

─¿Estaba delicioso? ─Pregunto con una voz tranquila y suave

─S-Si.. ─Baje mi cabeza avergonzada─G-Gracias

─No tienes que agradecer, ¿por que estas en la calle?

─E-Es una larga historia la verdad.. ─Cuando dije eso me extendió su mano y lo mire confundida

─¿Te importaría contarme mientras vamos a mi casa?

Me sonrió con amabilidad y mis ojos se llenaron de lágrimas de felicidad, algo que lo alarmó al principio pero realmente estaba feliz,estaba feliz que sentía que alguien era amable conmigo por primera vez en mucho tiempo, acepte la invitación y en su coche lujoso me llevo a una gran casa realmente preciosa, cuando entre mi cabeza daba vueltas, estaba decorada de forma elegante y moderna, realmente me daba miedo caminar por ese lugar ¿y si tiraba algo valioso? No tenía dinero para pagar, estaba asustada con la cola entre mis piernas cuando puso una mano en mi cabeza haciendo que me calmara

─Ve a bañarte, te tengo un conjunto de ropa nuevo y de paso nos presentamos.

Asenti a lo que dijo y con sus indicaciones llegue al baño, allí también el pánico me invadió estaba lleno de cosas lujosas que me sentía fuera de lugar pero después de mucho me hizo bien tomar una ducha de agua tibia, al verme al espejo con la cara y el cuerpo limpio no pude evitar volver a llorar pero también no debía ser ingenua ¿por que este hombre estaba siendo amable conmigo después de haberle arruinado la ropa con el café?, aunque estaba feliz también debía estar precavida por el bien de mi bebé.
Cuando salí a la habitación encontré un camisón cómodo y me lo puse, era realmente suave, por curiosidad me dirigí al armario y encontré mucha ropa costosa de mujer, ¿acaso era casado? Me pregunte mientras bajaba y miraba los retratos y el que busca encuentra.

Encontré un retrato del hombre al lado de una mujer hermosa, era una foto de bodas, aprete los bordes del largo camisón y baje a la Sala principal donde me estaba esperando con aperitivos que sin duda se me antojaron al verlos.

─Ven siéntate ─Tomo mi mano y me llevo al sofá de terciopelo negro─Sientete en casa.

─Ammm...de verdad muchas gracias, usted está siendo muy amable conmigo apesar de ese accidente hace varias semanas.

─¿Hablas de eso? ─Asenti a lo que dijo─Eso ya pasó y no era ropa tan valiosa solo un modelito horrible.

─No me parecía asi...─Susurre sobando mi brazo y no pude evitar comerme uno de los chocolate que me habían babear, de seguro mi cara fue graciosa cuando lo comí ya que lo escuche volver a soltar esa risita adorable ─A-amm..y también quiero preguntar ¿usted por que me ayuda?

─Veras.. ─Se sentó derecho en su lugar ─El día que me derramaste el café decidí seguirte, te escuche discutir con ese hombre por tu departamento y como te despidieron y te dejaron sin hogar, pasaba todos los días pasaba por tu callejón y te veía luchando por tu embarazó, también como llorabas, pensé "esa mujer es muy fuerte si no se ha rendido" Aun cuando eres una niña a plena vista eres fuerte y con determinación y eso me gusto.

─B-Bueno parece que usted conoce esa mínima parte ─Rasque mi mejilla avergonzada─Este camisón es de embarazada ¿a su esposa no le molesta? ─Mire el anillo en su dedo pero el nego con la cabeza

─Desafortunadamente mi esposa y yo no podemos tener hijos, ya pasaron cinco años y no pudimos concebir así que supongo que no le molestara que uses esa ropa, después de todo solo estaba ahí empolvandose y muchas cosas de bebé que dudo que usemos pronto así que ¿que tal si usted se queda con esas cosas?

─¿Q-Que? ─Mis orejas saltaron de sorpresa y mi cola se movió de emoción─¿E-Enserio esta bien?

─Claro que si, usted las necesita más que nosotros ─Me sonrió y me extendió su mano─Olvidaba presentarme, Soy Vil Schoenheit

─Soy [T/N] Lunder mucho gusto.

Con una sonrisa estreche su mano y mi corazón estaba brincando de emoción y felicidad.