𝙋𝙊𝙑 𝙆𝙀𝙉 𝙎𝘼𝙏𝙊

Después de entrenar a Emi , me despedí apresuradamente, listo para dirigirme a mi siguiente partido de béisbol. Había estado jugando excelente y parecía que nada podía detener mi racha ganadora. Estaba completamente enfocado en el juego y en mantener la buena racha, pero una parte de mí también disfrutaba del reconocimiento y la atención que venían con ello.

El juego fue emocionante y llevé a mi equipo a la victoria una vez más. La multitud rugió de alegría y sentí la adrenalina corriendo por mis venas. Después del partido, mientras me dirigía a los vestuarios, me encontré con Naomi, una de las porristas y una amiga de mucho tiempo. Habíamos estado hablando mucho últimamente, y en algún momento, las cosas comenzaron a volverse más personales de lo que deberían.

Naomi me felicitó por el juego y en un momento de debilidad, la besé. Fue un beso apasionado, y en ese momento, olvidé todo lo demás. La emoción del juego, la euforia de la victoria y la conexión con Naomi me hicieron perder la noción de lo que estaba haciendo.

De repente, escuché una voz familiar detrás de mí.

—¡Que carajo ¿es en serio Ken?!—era _____, su voz temblando de incredulidad y dolor.

Me aparté rápidamente de Naomi, el remordimiento golpeándome con fuerza. Miré a Sakura, su rostro lleno de traición y desconsuelo.

—_____, no es lo que parece...—empecé a decir, desesperado por explicarme.

—¿No es lo que parece?—repitió ella con incredulidad—Eres un estúpido, Ken. Creí en ti, confié en ti, y esto es lo que obtengo. Desde el principio supe que no podía cambiar esa parte arrogante y egoísta de ti.

Traté de acercarme a ella, pero ella retrocedió, levantando una mano para detenerme.

—No te acerques. Sabía que siempre habría una parte de ti que nunca cambiaría. Pensé que podrías ser diferente, que podríamos tener una vida juntos, pero me equivoqué. Eres igual de insensible y traicionero que siempre.

Naomi, claramente incómoda, intervino con una expresión burlona.

—¿En serio pensaste que alguien como Ken estaría solo contigo? Vamos, querida, él merece a alguien que esté a su altura.

Las palabras de Naomi fueron crueles y no ayudaron en nada. _______, con la cabeza en alto y la espalda recta, respondió con firmeza:

—Disfruta mientras puedas. Las personas como tú y él no entienden lo que es el verdadero valor de una relación. No necesito a alguien que no sepa apreciar lo que tiene.

_____ se dio la vuelta y se alejó rápidamente. Me quedé allí, sintiéndome impotente y arrepentido. Había arruinado todo por un momento de debilidad, y ahora no tenía idea de cómo arreglarlo.

Regresé a casa sintiéndome como un completo idiota. Sabía que había lastimado a _____ de la peor manera posible.

Mi padre estaba en la cocina, leyendo un libro. Me miró con curiosidad cuando entré.

—Ken, ¿qué pasa?—, preguntó, notando mi expresión sombría.

—No está aquí— dije, sintiendo un nudo en la garganta—Se a ido ¡Maldita sea!

Mi padre frunció el ceño.

—¿A qué te refieres con que se fue? ¿Qué pasó?—

Le conté lo que había sucedido después del partido, incluyendo el beso de Naomi y la reacción de _____.

—Definitivamente, eres un tonto—Dice mi padre dándome un golpe en la cabeza— Por cierto, ella me dejó un sobre. No sé qué hay dentro, pero parece importante—dijo, entregándome el sobre.

Abrí aquel  sobre y mi expresión cambio—esto... es una prueba de embarazo. _______está embarazada—Dije sobresaltado

—Si hijo, felicidades—Dice mi padre con sarcasmo

Me quedé paralizado. No podía creerlo.
—¿Qué? ¿Cómo es posible que no me lo haya dicho?

El silencio llenó la habitación mientras procesaba la noticia. Mi padre me observó con una mezcla de desaprobación y compasión.

Me sentí atrapado entre la culpa y la desesperación. Sabía que tenía que encontrar una forma de hablar con _____, de remendar mi error y enfrentar todo.

—Papá, ¿crees que todavía tengo una oportunidad?—pregunté, mi voz temblando.

—Eso depende de ti, Ken. Tienes que demostrarle que puedes cambiar, que puedes ser el hombre que ella y el bebé necesitan—respondió mi padre, con una mirada severa pero comprensiva.

𝙋𝙊𝙑 _____

Antes de tomar mi vuelo a Estados Unidos decidí llamar a la única persona que podía confiar

—Haru, soy yo, _____— dije, tratando de mantener mi voz firme.

—Primor tiempo sin escuchar tu voz, oye ¿qué pasa? Suenas rara—respondió Haru con preocupación.

—Necesito un lugar donde quedarme por un tiempo. ¿Puedo quedarme contigo?— le pregunté, esperando que dijera que sí.

—Por supuesto, _____. Siempre eres bienvenida aquí. ¿Qué ha pasado?— preguntó Haru, ahora claramente preocupada.

—Sabes es complicado. Te lo explicaré todo cuando llegue—dije, intentando contener las lágrimas—Gracias, Haru. No sé qué haría sin ti

El vuelo a Estados Unidos fue largo y agotador. Llegué a Miami y me dirigí directamente a la casa de Haru. Ella me recibió con los brazos abiertos y un cálido abrazo

—Vaya que guapa estás hermanita, estás a salvo ahora. Ven, entra—dijo Haru, llevándome al interior de su gran apartamento

Haru era una mujer impresionante, morena, alta y esbelta como yo, pero con una melena de rizos  que caían en cascada por su espalda. Siempre había admirado su estilo y su confianza.

Nos sentamos en el sofá y le conté todo lo que había sucedido

—Ay cariño, no puedo creer lo que has pasado. Eres increíblemente fuerte, pero muy tonta—dijo Haru, apretando mi mano—¿Y cómo te sientes sobre el bebé?

Fruncí el seño al escuchar que era una tonta, aunque era verdad — Sobre el bebe es abrumador, Haru. No sé cómo manejar todo esto. Pero sé que tengo que ser fuerte por mi hijo—respondí, sintiendo una mezcla de miedo

—por cierto ______ quien era tu pareja, jamás me contaste algo—Dice Haru dudosa

—Lo debes de conocer, el el famoso béisbolista de Ken Sato maldito—Dije

Escuché una carcajada por parte de Haru—Es enserio ay no hermanita—Dice ella para seguir riendo

En ese momento la puerta principal se abrió drásticamente, entrando un hombre de cabello negro ligeramente ondulado y sus ojos azules me miraban con intensidad.

—Hola, Haru—Dijo saludándola, después para mirarme a mí— y dime ¿Quién esta preciosura?— preguntó Alex, observándome con interés.

—Deja de observarla así—Dice pegándole en el brazo —Alex, esta es mi hermana ______ . Ella acaba de llegar de Japón

—Mucho gusto,_______. He oído mucho sobre ti, y vaya que eres mucho más guapa en persona— dijo Alex, estrechándome la mano—Dime ¿A qué te dedicas?

—Soy científica— respondí, un poco incómoda con su mirada evaluadora.

—Interesante. Tienes una presencia muy fuerte y una belleza única. ¿Alguna vez has considerado trabajar como modelo?— preguntó Alex, sorprendiéndome.

—¿Modelo? No, nunca lo había pensado— respondí, riendo nerviosamente.

—Bueno, cariño, si alguna vez cambias de opinión, házmelo saber. Podrías tener un futuro brillante en la industria— dice  Alex, sonriendo entregandome una targeta

—Ignoralo _____ es mi manager, al igual tiene razón serías una excelente modelo aunque por lo del bebé quien sabe—Dice ella

—Espera ¡Estás embarazada! Vaya que envidia no ser tu esposo—Dice Alex decepcionado

—¡Callate!—Grita Haru

𝘌𝘺𝘺𝘺𝘺, ¿𝘤𝘰𝘮𝘰 𝘦𝘴𝘵𝘢𝘯?
¿𝘘𝘶𝘦 𝘵𝘢𝘭 𝘭𝘦𝘴 𝘦𝘴𝘵𝘢 𝘱𝘢𝘳𝘦𝘤𝘪𝘦𝘯𝘥𝘰?
𝘓𝘦𝘴 𝘨𝘶𝘴𝘵𝘢𝘳𝘪𝘢 𝘲𝘶𝘦 𝘩𝘢𝘺𝘢 𝘷𝘦𝘯𝘨𝘢𝘯𝘻𝘢
𝘘𝘶𝘦 𝘳𝘢𝘺𝘪𝘴 𝘱𝘦𝘳𝘥𝘰𝘯𝘦 𝘢 𝘱𝘢𝘱𝘪 𝘬𝘦𝘯 𝘲𝘶𝘦 𝘰𝘱𝘪𝘯𝘢𝘯
𝘱𝘰𝘳 𝘤𝘪𝘦𝘳𝘵𝘰 𝘨𝘳𝘢𝘤𝘪𝘢𝘴 𝘱𝘰𝘳 𝘦𝘭 𝘢𝘱𝘰𝘺𝘰 𝘥𝘦 𝘵𝘰𝘥𝘰𝘴    🫶🏻🫶🏻🫶🏻

Espero que les este gustando 😭😭👊🏻

Hasta la próxima 🏎️🏎️🏎️🏎️🏎️🏎️🏎️🏎️