—¡Esto es tu culpa!

—Mira quién lo dice, la chica que no dejaba de arrojarme rocas cuando dije que era suficiente.

Aquel par se echaba la culpa por no conseguir el primer puesto ninguno de los dos, sin embargo al recibir una señal de la comisaria Shelly debían permanecer dentro del mapa, a causa de un par de fallos hasta arreglar dicho problema, quedándose sin más remedio que quedarse juntos hasta las respuestas de la sheriff.

La luna comenzaba a levantarse logrando cubrir las esquinas del cielo con su enorme capa azul y violeta sobre aquellas nubes negrisas, la luz brillante y colorida de la luna comenzaba a asomarse por los pequeños espacios del cielo proyectando sutiles patrones de luz contra los lagos o incluso entre los arbustos.

Ambos chicos seguían atrapados en el mapa, sin ninguna respuesta por parte de la comisaria, estaba comenzando a oscurecer y solamente se podía escuchar la respiración del otro acompañado de una suave melodía por parte de la naturaleza. Vaya situación tan incómoda, quién diría que se quedarían atrapados en una situación así, hasta que uno decidió romper el hielo.

—Y dime, sandías.

Habló la osezna, acercándose un poco hasta su distancia dejando un pequeño espacio no muy cerrado entre ellos.

—¿Te has sentido últimamente bien en las últimas partidas?. —Preguntó la de gorro quien lo miraba atentamente.

Por otro lado Sandy, no sabía cómo reaccionar o qué responder ante su pregunta, el apodo lo dejo atónito.

—Me parece que si, si se puede decir de esa manera...¿Y tú?.

Haciendo un Vaivén con su mano respondió a su pregunta.

—Creo que debería organizar mis planes de estrategia.

Ahora jugaba con una rama haciendo garabatos en la tierra. 

—¿Has tenido mala racha?.

Ella negó con la cabeza aún jugando con la ramita —Mi padre no me permite arriesgarme tanto...dice que es demasiado arriesgado para nita, ya no soy una niña pequeña; nita no entender porque papá Bo ser tan sobreprotector.

La ramita se rompió y ella abrazó sus piernas hundiendo su rostro casi al instante.

—Pues, yo pienso que eres genial en el campo —Dijo Sandy, para mirar el cielo visionando como este se estaba llenando de estrellas.

Ella lo miró.

—¿Sandy cree eso de nita?

Él asintió y acarició su cabeza —Por supuesto, eres bajita pero tienes estrategia, pequeña —Dijo halagador, pero burlón a la vez.

—¡No soy pequeña!

Exclamó haciendo un puchero dándole un golpe en su hombro. Sandy rió y sobó la parte golpeada.

—Al menos yo no vivo debajo de un puente —Dijo a la defensiva insistiendo que sandy vivía debajo de un puente, al menos eso creía cuando se conocieron.

—Ja-ja muy graciosa.

Ambos rieron y entablaron una larga charla en espera de los comisarios, dándose el tiempo suficiente para conocerse más a fondo. Nita contaba anécdotas tan graciosas y Sandy solo podía reír; escuchándola con atención como pudo ser un desastre de pequeña, causándole problemas a su padre y haciendo bromas con su hermano; nita pudo contarle una vez que leon le hizo una broma de hacerse invisible y asustarla, obligándola a hacer sus deberes o haciendo travesuras. No la culpemos, hay cosas que ella no entiende algunas cosas, eso se le hizo tierno.

Sandy también contaba anécdotas, sobre como se escondía en los arbustos para poder curarse pero siempre llegaba alguien y lo eliminaba, eso le causaba carcajadas a la menor. Era injusto se estaba burlando de él, sin embargo; era la primera vez que la escuchaba reír.

Eso lo hizo sonrojarse, se veía tan linda debajo de la luz de la luna.

_¿𝙎𝙚𝙧𝙞́𝙖 𝙚́𝙨𝙩𝙖 𝙪𝙣𝙖 𝙜𝙧𝙖𝙣 𝙤𝙥𝙤𝙧𝙩𝙪𝙣𝙞𝙙𝙖𝙙?_Pensó Sandy. 

Es demasiado pronto, además si leon se entera me matará, aunque, el riesgo valdría la pena ¿Oh no?

La luz reflejándose en su piel canela y el brillo de sus ojos lo tentaron demasiado.

—Nita...

La nombrada paró de reír y puso atención al mayor dejando un mechón de su cabello sobresalido detrás de su oreja. Eso le causó escalofríos.

—Y-Yo...

Tartamudeó nervioso, que débil es para no mirarla.

—¿Pasa algo Sandy?

Mierda, ¿Que hago ahora? Ella me está mirando fijamente, ¡DEJA DE HACERLO!

—Yo...bueno, me preguntaba si...¿Puedo...besarte?.

Y el silencio incómodo inundó su espacio, podría jurar que uno de los dos quería salir corriendo del lugar, y esa no era nita.

—¿Qué es besar, Sandy?

Aquellas palabras lo dejaron helado, ¿Acaso no sabía que era besar?.

Pero por supuesto, ella no conoce la variedad de las cosas, mucho menos sabrá lo que es besarse con alguien más, idiota.

—¿No lo sabes?

Ella negó con la cabeza —¿Eso se come?.

Mierda, en éstos momentos no sabía si reír o llorar, algo tan común en él y totalmente nuevo para ella.

—No, no se come en realidad.

—¿Entonces qué es?.

Sandy se sonrojó y rascó su nuca aún más nervioso —Bueno...

Tragó en seco y soltó un suspiro pesado.

—Existen varios tipos de besos, puedo mostrarte algunos.

Nita se quedó muda por unos momentos, no sabía si era peligroso o algo mucho peor. Su padre la asesinaría si se entera que fue algo peligroso; nuevamente el silencio incómodo se hizo presente, sandy no sabía que decir o que pensar.

Es demasiado arriesgado para ambos, no quería meterse en problemas y mucho menos meter a nita en líos con su padre. Ésto es estúpido.

—Olvídalo, no es necesario que sepas lo que es-.

—Enséñame.

Sus oraciones fueron interrumpidas ante su respuesta, dejándolo en shock.

—¿L-Lo dices enserio?

Ella asintió sin ningún pero —Enséñame a besar, Sandy, nita querer aprender a besar también como Sandy.

La luna cada vez más se reflejaba en el cielo nocturno, proyectando su destello por las esquinas del mapa, la brisa suavemente golpeó el cuerpo de ambos haciendo un pequeño baile con sus cabellos y vestimenta; Mientras se miraban fijamente el uno al otro.

—De acuerdo.. —Siseó rendido y se puso de rodillas frente suyo —Solo, haz lo mismo que yo.

Nita asintió e imitó la acción de Sandy, colocándose de rodillas frente a él y poniendo sus manos en sus piernas.

—Bueno, empecemos con algo despacio.

Nita asintió atenta.

Sandy se acercó no muy apresurado a ella tomando con delicadeza su mano, casi al instante para dejar un beso en esta.

—Este tipo de beso es como un saludo, en específico para las doncellas.

Ladeó su cabeza aún confundida por su respuesta ¿Porque dijo que en específico para las chicas? ¿Acaso ya había hecho este saludo a otras damiselas? Se sentía engañada.

—Existe otro.

Y ella prestó atención otra vez, colocando sus manos nuevamente en sus piernas. El morocho se acercó tranquilo, lo suficiente para quedar al roce de sus narices; y justo a su lado dejó chocar sus labios con su mejilla.

No sabía que pasaba pero, sentía cosquillas en su estómago, pero ni siquiera tenía también.

Sandy cortó distancia casi de inmediato.

—Este tipo de beso se llama beso en la mejilla, se conoce de dos formas; puede ser como otro típico saludo o incluso por cariño.

Expresó un tanto tranquilo, pero por dentro estaba muriendo no sabía cómo se estaría viendo ante los ojos de ella. Se sentía ridículo.

Nita sintiéndose injusta quiso también experimentar aquella extraña acción, así que se acercó lo más tranquila a su oponente e hizo la misma acción que su compañero hace unos segundos atrás. Eso le costó un carmesí en sus mejillas.

—¿Existen más, Sandy?

Dijo ella, esto de besar era totalmente nuevo incluso se podía escuchar como golpeteaba su pecho.

Sandy no dijo nada, simplemente desvío la mirada avergonzado. Sabía perfectamente que llegaría a uno que le pueda costar su pellejo, sin embargo ella estaba tan angustiada de saber todo al respecto.

—Bueno, existen muchos más pero...Hay uno específicamente que quiero enseñarte.

Rascó su nuca y en seguida miró hacia otro lado.

—¿Y cuál sería, Sandy?

Cuestionó la chica intrigada, quería saber todo respeto al extraño caso llamado besar. Era difícil quitarle algo nuevo que deseaba saber, eso sí es un gran problema para Sandy.

—Si eso es lo que deseas, te lo mostraré.

Siseo, regresando su mirada nuevamente a ella chocando con sus ojos penetrantes. Se reincorporó y se apoyó sobre sus piernas, su estatura era algo superior a la de la morocha, por ende se inclinó un poco a su nivel quedando frente a frente.

—Solo, relájate y respira hondo —Sugirió Sandy con los nervios de punta.

Nita obedeció y tomando un poco de aire lo miro aún más confusa, ¿Así se hace? 

—Muy bien, ahora... —Hizo una breve pausa y tragó saliva —Cierra tus ojos.

Ella lo miró con desconfianza haciéndola retroceder.

—Tranquila, no te haré daño, confía en mí —Le brindo una tenue sonrisa.

Lo miró y nuevamente se acercó hasta estar a su alcance y volver a respirar como anteriormente lo hizo, relajó su cuerpo y finalmente cerró sus ojos suavemente.

—Pase lo que pase, no muerdas —Titubeó y ella  negó con la cabeza.

Sandy sonrió enternecido  tomando un suave color melocotón en sus mejillas y llevando cuidadosamente sus manos al rostro de la  osezna le brindó pequeñas caricias con su dedo pulgar, para hacerla entrar en confianza, eso la hizo ronronear.

Sandy tragó en seco y armando se de valor, finalmente lo hizo; con sutil delicadeza presionó sus labios con los de nita, eran extremadamente suaves, con un ligero sabor a miel y moras silvestres. ¿Y que era ese aroma a vainilla? Es como si fuera un perfume que no dejaría de usar.

Por otro lado Nita se sorprendió al sentir aquel contacto en sus labios, abrió sus ojos encontrándose con Sandy invadiendo su espacio personal, estaba a punto de empujarlo y golpearlo, pero, la presión en sus labios se lo impedía. ¿Qué demonios era ésto? Y ¿Porque se siente bien?
Tenía miedo, sentía que su pecho iba a reventar, el calor subió a sus mejillas haciendo que se pintaran de un color carmesí, el Vaivén en sus labios la hizo perder la cordura, nuevamente cerrando sus ojos y rendida ante sus encantos se dejó llevar por la nueva sensación.

Al no saber cómo reaccionar ambos se quedaron quietos por unos cuantos segundos, para separarse con cuidado, soltando un par de bocanadas de aire y  con el ritmo cardíaco acelerado.

Sandy quitó sus manos cuidadosamente con el temor de que fuera a romperse. Ninguno emitía ni una sola palabra, prácticamente se habían quedado mudos.

—Eso es besar nita... —Aclaró cabizbajo y rascó su codo.

Ambos miraron en diferentes direcciones hacía la nada, y, nuevamente nita volvió a jugar con una ramita y para disimular los nervios.

—Sandy...

Nuevamente volvió a romper el hielo, el nombrado giró a verla, la sangre se le subió a la cabeza repentinamente, en un abrir y cerrar de ojos la tenía demasiado cerca, casi acorralado entre ella y uno de los muros del mapa.

—¿Qué sucede? —Sugestió sintiendo el rostro hirviendo.

—Nita... quiere intentarlo de nuevo —Chilló, su voz se hizo pequeña lo que casi le provoca un para cardíaco al ojeroso.

—¿Q-Qué? —Titubeó y comenzó a sudar —¿Estás segura?

Ella asintió e inconscientemente se sentó en su regazo —Nita, quiere otro.

La oscuridad y la luz de la luna hicieron una mezcla perfecta, su fina capa oscura hacía que sus ojos se iluminarán.

—Por favor —Siseó intrigada e imitando su acción anterior, colocó sus  manitas en su rostro. 

—De acuerdo, solo, uno más —Le susurró para acercarse lo suficiente para poder besarla de nuevo.

Ambos suspiraron y cerrando sus ojos comenzaron un vaivén con ambos labios, nuevamente ese suave sabor dulce regresó, prácticamente se estaba volviendo adicto. Ahora nita le seguía el ritmo, suave y lento; aprendió rápido.

Sumisa ante sus encantos, comenzó a repartir caricias sobre sus mejillas, pareciera que sus ideas se sincronizaron. Suavemente las manos de Sandy comenzaron a deslizarse por su espalda hasta llegar a su pequeña cintura, eso la hizo estremecer, no de ser por la intensidad del momento estaría bajo tierra. Por unos momentos sus manos permanecieron quietas hasta que comenzaron a tomar el control sobre ellas mismas, haciendo pequeños círculos sobre sus caderas y logrando mover un poco su vestido azulado.

Debido a la falta de aire tuvieron que separarse y con la respiración agitada se miraron fijamente. Nuevamente no sabían cómo reaccionar, solo se limitaron a reír.

—Nita... Yo-.

Rápidamente tuvieron que separarse trás escuchar la voz de la pelimorada no muy lejos de su rango, como pudo acomodó su vestido e intento disimular los nervios.

—¡Nita! —Exclamó Bo el nombre de su hija mientras corría a abrazarla —Gracias a los ancestros, ¿Estás herida?

—No papá, nita estar bien  —Afirmó la osezna tratando de calmar a su padre —Sandy me protegió.

El nombrado ya de pie, saludó disimulando el leve sonrojo que llevaba en sus mejillas.

—Te agradezco —Dijo Bo, para llevarse a su hija no sin antes agradecerle a shelly y colt por encontrarla.

Ni si quiera pudieron despedirse, solo podía verla alejarse.

—La salida está por allá Sandy, lamentamos mucho la tardanza —Se disculpó la pelimorada.

—No te preocupes shelly —Le sonrió decidido a irse por el camino indicado, al salir se encontró a sus padres.

—Aquí vamos de nuevo Sandy.

Buenoo, aquí está el especial del que había hablado, hice un esfuerzo por hacerlo de 2 mil palabras máximo para que no se vea tan feo porque siento que no quedó como esperaba.

Posiblemente le de un extra para saber que paso después del beso entre ellos sjskkzks no sé.

En fin espero que les haya llegado a agradar, hasta aquí mi reporte Joaquín ✌️💞