Jisung salió apresuradamente del salón una vez que acabó su última clase, se iba a ir solo ya que sabía que Minho todavía le faltaba una hora para que su última clase acabara y también porque no quería ver a Minho.

No lo malentiendan, tenía miedo a que Lee lo rechazara, es por ello que estaba evitando al alfa.

Empezó a caminar hacia el departamento que vivía con su padre, soltó un suspiro ya que sabía que su padre otra vez iba a llegar tarde, no le gustaba estar solo mucho tiempo tampoco le gustaba mucho que él y su padre vivieran en el departamento.

Quería regresar a su casa, con su mamá y sus hermanas.

Pero sabía que no era buena idea, aunque tampoco iba a negar que ahora estaba mejor ya no había gritos, regaños o reproches para él, ahora vivía más tranquilo, ya no lloraba por las noches pensando del porqué su madre y sus hermanas no lo querían.

Sabía que su mamá y sus hermanas le habían causado un poco de daño (mucho pero era algo que Jisung no iba aceptar en voz alta), pero aún así las quería y mucho.

Una vez llegó al frente del departamento que vivía hizo una mueca al ver todo el desorden que tenían él y su papá. Tenía que limpiar el lugar.

Sabía que con eso iba a distraer un poco su mente, que estaba pensando en cosas que quería olvidar y así tal vez también dejar de pensar un poco en Minho y en la declaración que hizo.

Sin más se puso a limpiar el lugar, después de dejar su mochila en su habitación.

[...]

Minho se encontraba enfrente del departamento de los Han, llevaba más de quince minutos tocando la puerta pero nadie le habría.

Estaba pensando en llamar al señor Jinyoung pero no lo quería preocupar, así que mejor decidió irse ya que tenía que ir a comprar unas cosas.

Le mandaría mensajes a Jisung y esperaría a que le contestara, tal vez el omega no le quería abrir la puerta ya que no quería hablar con él o estaba enojado por algo que hizo y eso fue la causa que se enojara con él, así que le iba a dar su tiempo.

Sin saber que el omega estaba dormido en su cama, después de haber limpiado por una hora el departamento. Si Minho había venido dos horas después de que salió de la universidad.

Sunggie bonito <3

Sung bebé 

Vine a tu departamento pero
me fui ya que no abría nadie.

Si estás enojado conmigo 
por algo que hice, dime.

Por favor, tenemos que hablar.

Omega voy esperar tu mensaje.

También tenemos que hablar 
por lo que me confesaste.

Avísame si necesitas algo,
Espero tu mensaje.

Perdón si te molesto mucho

Te quiero omega.

Después de los mensajes el alfa se puso en marcha a su casa. Su alfa estaba triste de que su omega no le contesta los mensajes.

Minho estaba buscando algo que hizo mal, para saber de que tenía que pedir perdón. De repente su teléfono sonó y lo sacó rápidamente con esperanza de que fuera Jisung, pero su sonrisa se borró al ver que era Hyunjin.

- Ah, eres tú - fue lo primero que dijo Minho cuando contesto la llamada.

- Joder se que me amas pero no te emociones tanto, amigo - dijo con sarcasmo.

- No estoy para tus bromas, Hyunjin - dijo serio.

- ¿Quieres ir a tomar algo y me cuentas que paso? - preguntó Hyunjin al escuchar a Minho.

- Creo que está bien - pauso - Te veo en el mismo bar de siempre - sin más colgó la llamada.

Unos veinte minutos después los dos alfas se encontraban en la barra con una cerveza cada uno.

- Cuéntame - pido Hyunjin.

- Ni yo sé, hoy Jisung se me declaró y ni tiempo me dio de procesar esa información - dijo con su ceño fruncido.

- ¿Y ya le dijiste que también te gusta? - preguntó con mucha curiosidad - ¿Por qué? - pregunto una vez vio a Minho negar.

- Se fue de la universidad una vez salió de sus clases y pensé que me iba a esperar para que lo llevara como siempre - le dio un trago a su bebida - Y fui a su departamento y no abrió la puerta - los ojos de Minho brillaban más como si quisiera llorar pero estaba reteniendo sus lágrimas.

- Joder amigo.

El encargado de la barra dejó el vaso de cerveza enfrente de Minho.

- Lo siento por interrumpir y por meterme en su conversación - dijo el mesero - Pero escuché un poco de su conversación así que si me dejan darles mi opinión sobre esto quiero decirles que los omegas cuando se les declaran a alguien se vuelven un poco inseguro por el miedo de ser rechazado - soltó un suspiro - O no le abrió la puerta porque estaba dormido o su celo.

- Minho - Hyunjin lo llamo.

- Mande.

- ¿No dijiste que Jisung estaba ocupado y cansado por la mudanza? - pregunto.

- Si.

- Que tal que llegó a dormirse, también me habías comentado que le gusta dormir mucho - le volvió a recordar.

- Puede ser.. - murmuró para sí mismo.

- Oh, por su celo - comento el mesero haciendo que Lee y Hwang voltiaran a verlo - Muchos omegas les gusta dormir en su época de celo, son muy mimosos, en vez que querer sexo - les explico.

- Pero Jisung no está en celo, bueno en la mañana que nos vimos no estaba - les dijo.

- los celos llegan en la madrugada, en la mañana, tarde o en la noche, Lee - le recordó Hyunjin.

Minho se quedó pensando tal vez una de esas posibilidades.

- Tal vez puede ser - les dio la razón, ahora sabía que Jisung no estaba enojado con él, pero le preocupaba que el omega estuviera inseguro por su confesión.

Después de eso platicaron un rato y ahora sabía el nombre del mesero que era Seo Changbin y que trabajaba ahí de medio tiempo, también que estaba enamorado de un omega hermoso de nombre Lee Félix.

Después se retiraron del lugar para que cada uno se fuera a su casa.

[...]

El señor Jinyoung iba entrando al departamento cuando sintió el aroma de fresas con chocolate por todo el departamento, se apresuró a buscar a su hijo.

Llegó a la habitación de Jisung y abrió la puerta la escena que se encontró era que su hijo estaba tapado con una sábana, dormido con un puchero en sus labios, vio que estaba sudando así que decidió despertarlo para que tomara un supresor y que se diera un baño.

Su hijo estaba en celo, él sabía cómo cuidar a su hijo ya que desde el primer celo (que fue cuando se presentó) de Jisung lo cuidó y todavía sigue haciéndolo. Su esposa, nunca fue capaz de cuidarlo, cuidar aquel niño de entonces que no sabía que estaba pasando en su cuerpo y ni mucho menos por qué le dolía mucho su panza.

- Bebé - lo llamó suavemente, cosa que sabía que no iba a funcionar - Jisung - lo volvió a llamar pero ahora más fuerte.

- Mmmh - balbuceo algo que ni el señor Han entendió.

- Vamos Sunggie, levántate a tomar un baño - le pidió.

- ¿Por qué? - pregunto algo confundido.

- Entraste en celo, cariño - le dijo - toma el supresor y date un baño - le pidió a lo que Jisung asintió.

El omega se puso de pie y fue a la cocina por agua y su padre le dio la pastilla, después de tomársela espero unos cinco minutos a que hiciera efecto, para después darse un baño.

Mientras que el mayor decidió hacer la cena para los dos.

En casa de los Lee se encontraba la señora Lee regañando a su hijo, ya que llegó con unas cervezas de más.

- ¿Que te he dicho de tomar de más si más a manejar? - pregunto. 

- Que no maneje en ese estado - agacho su cabeza.

- Entonces, ¿Por qué lo haces? - volvió a preguntar.

- Perdón - se disculpó - Solo que estaba platicando con Hyunjin y el mesero de ese bar y se me fue un poco mano - claro no le dijo que también fue por Jisung.

- No si ustedes solo buscan momentos para ir a beber - le comento negando la cabeza.

- ¿Quien busca momentos para beber? - preguntó el señor Lee que acababa de llegar.

- Tu hijo y su amigo - le contestó.

- Minho espero y no hayas manejado - le dijo el señor Lee cuando escuchó la respuesta de su esposa y vio a Minho que bajó la cabeza - No lo vuelvas hacer o le dices adiós al carro y a tu moto.

- Está bien, no lo volveré hacer - le aseguro.

- ¡¿Minhyun, solo le vas a decir eso?! - preguntó alzando la voz.

- ¿Quieres que lo regañe más? - le preguntó fruncido el ceño.

- ¡Pues claro, le pudo haber pasado algo en el camino! - exclamó alterada. Su hijo era lo más apreciado que tenía aparte de su esposo.

- Está bien, mujer - le aseguro - Espero y no haya próxima Minho, que si hay, el regaño va hacer más fuerte - le comento.

Sabía que ya no podía regañar como antes a su hijo, ya tenía veintiún años y ya estaba trabajando, aunque sea medio tiempo lo haciendo en su empresa, ganaba ya también su dinero. Comprendía a su esposa, también sabía que era lo más preciado que ella tenía o más dicho ellos tenían.

- Ya no va a ver la segunda vez, Padre - le aseguro.

- Bueno, ahora si pasamos a cenar que tengo hambre - comentó el alfa mayor.

Ya en la mesa los tres Lee's se pusieron a cenar, Minho solo escuchaba a sus padres hablar de cosas de la empresas o eventos que teníamos que ir.

- ¿Cómo está Jisung, Minho? - preguntó su madre.

Minho se tensó en su lugar - Está bien... eso creo - lo ultimo lo susurro más para el mismo.

Los señores Lee se olvidaron de ver ellos mismos y decidieron no meterse más en ese tema.

- Que bueno - la señora Lee sonrió - Espero y pronto lo vea otra vez.

Minho iba a contestar pero a su teléfono entró una llamada, sacó su teléfono de su pantalón y vio que era el señor Jinyoung.

Con el ceño fruncido contestó la llamada - ¿Hola?

- Minho, hijo - escuchó la voz del señor Jinyoung que se escuchaba un poco agitado.

- ¿Pasa algo? - preguntó con preocupación haciendo que su madre le preste atención a la llamada.

- Si, lo que pasa es q- - no pudo terminar de decir la frase ya que unos llantos se escucharon.

- ¿Ese es Jisung? - preguntó Minho, parándose de la mesa.

- Si -soltó un suspiro - Mi hijo entró en celo y nunca se a portado así, su omega está pidiendo por ti - soltó haciendo que Minho se quedara quieto en su lugar - Se que no es adecuado pedirte esto pero, ¿crees que podrías venir a tranquilizarlo? - pregunto. 

- Si, si claro yo voy para allá - dicho eso colgó la llamada.

- ¿Minho, qué pasa? - preguntó su padre.

- El señor Jinyoung- - no pudo seguir hablando ya que su madre lo interrumpió.

- ¿Le pasó algo a Jisung? - preguntó con preocupación.

- Entro en celo y su padre me llamó para decirme que si podría ir ya que su omega pide por mi - informo.

- No puedes ir - la señora Lee, dijo.

- ¿Que, por qué no? - preguntó con confusión Minho.

- Tu alfa se puede descontrola más si son predestinados, lo va a querer marcar - le informo.

- Pero tampoco voy a dejar que Jisung o su omega la pasen mal - le aseguro.

- Cariño, acuérdate que los omegas se sienten rechazados si no ven a su alfa cerca - le recordó el señor Lee a su esposa.

- Vamos a ir contigo - dijo la señora Lee, confiaba en su hijo pero a veces su lado alfa puede traicionar a su lado humano.

- Está bien - dijo eso se apresuró a ir por a su habitación para tomar dos supresores.

Después bajó y sus padres ya lo esperaban en el carro.

Esa noche iba a ser muy larga para todos.