17. Cardigan.

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Minho estaba haciendo un solo de guitarra moviendo su cabello largo al ritmo de la melodía mientras el sudor bajaba por su frente y cuello, Chris estaba a su lado aplaudiendo y alentando a su amigo.

La batería sonaba también con tanta energía que las bocinas podrían romperse, los gritos y los cuerpos sudando chocando entre si durante todo ese pedazo de la canción.

Y Hyunjin solo podía verlo a él. Minho era una estrella, una que brillaba en los escenarios, por los pasillos de la escuela, en las calles mientras alimentaba gatos o simplemente descansando en su cama.

Se odio al saber que llegando a su casa dibujaría la escena que estaba presenciado, el solo de guitarra termino con una sonrisa del chico emocionada viendo a la audiencia. La canción termino y los gritos siguieron.

Miss Murder era la última canción que iban a tocar, habían tocado canciones que la banda ya tenía como propias intercalando con covers y esta era la primera vez que tocaban esta canción, así que la audiencia estaba realmente extasiada.

—¡Joder!— gritó Chaeryeong dando saltitos—. ¡Ellos en serio son increíbles!

La audiencia eran de unas 150 personas, era la primera vez que tocaban con un grupo tan grande y ellos en serio los habían amado. Estaba feliz por ello.

Cuando todo termino y subió otra banda al escenario en grupo ya estaba esperando afuera del estudio a sus amigos. Había venido una nueva chica a verlos gracias a Jeongin quien platicaba en estos momentos con ella, Felix estaba temblando de la emoción.

Felix y Chris no llevaban muchos meses siendo pareja y aún así el pecoso estaba tan entregado al bajista que trataba de ir a cada una de las presentaciones de la banda, se le podían ver sus ojos brillosos de la emoción cuando lo veía. Al poco tiempo los cinco chicos salieron con ropas más cómodas y gritando felices por el suceso de hace unas horas.

Minho aún tenía las manos temblorosas.

—¡Lo hice Hyun!— gritó acercándose a él, abrió los ojos sorprendido al ver el cardigan café con líneas blancas que Felix se había llevado de su closet, le quedaba grande tanto en largo como en las mangas que tapaban sus manos, se veía bien en él—. ¿Me viste?

—Te ví— le sonrió chocando los cinco que Minho le estaba ordenando—. Te dije que lo harías.

—Aún estoy temblando— le enseñó sus manos que sí estaban temblando—. Oh Dios.

—Lindo cardigan, no es algo de tu tipo— dijo esperando una sonrisa divertida más lo único que recibió fue al chico alzandose de hombros.

—No es mío, se lo quite a Lix— paso su mirada al pecoso que platicaba con Chris—. Espero que no sea regalo de Chan— dijo haciendo una mueca.

—No es de él— le nego con la cabeza guardándose el detalle de que era suyo—. Se te ve bien.

—A mi todo me queda bien— le guiño el ojo abrazando su cuerpo—. ¿Me dejaras quedarte en tu casa? ¿Por favor?— el chico ladeó su cabeza haciéndole ojitos, y diciendo la palabra mágica. Esperaba que Minho no se diera cuenta que usando esa palabra podría obtener de Hyunjin todo lo que quisiera—. Si no puedo está bien, le diré a Jeongin.

—Puedes— le respondió esperando no sonar tan desesperado—. Mis padres te adoran, además lo has hecho en otras ocasiones.

Porque era así, Felix era quien pasaba mucho rato en su habitación y en las noches de los fines de semana luego se agrego a la ecuación Minho, el que se quedará la primera vez fue más un error aún así se reprendió así mismo el hecho de que disfrutará ver a Minho en su ropa y en su cama.

Cuando su mente era débil ante el castaño apretaba la púa que llevaba en su cuello, solo para que... Ya sabes, pusiera los pies en la tierra.

—Corrección, tu madre me adora— se cruzó de brazos—. Tu padre siempre me ve como si fuera una mala influencia para su perfecto chico— las pequeñas manos del castaño fueron directo a su chamarra que comenzó a cerrar mientras alzaba su mirada—. ¿Crees que soy mala influencia?

Sus ojos eran inocentes, su sonrisa divertida y sus manos estaban muy calientes, no quería alejarse de él.

—No lo eres— en cambio a lo que en realidad quería hacer, dió un paso atrás—. Eres buen chido.

Y eso pareció hacer feliz al más bajo por lo que asintio y se enrollo mas en el cardigan:—Vamos— con un movimiento de cabeza el castaño señaló al grupo que estaba todo junto esperando solo a ellos, dejándoles intimidad—. Chris dijo que nos llevaría a un restaurante muy genial, según él.

Ambos se acercaron al grupo que al verlos comenzaron a movilizarse, la noche la pasaron genial con risas y estupideces que seguramente estarían grabadas en el celular de Chaeryeong.

Fue ahí cuando Minho y él se despidieron de los demás comenzando a caminar. Hablaban de la nueva canción que el castaño estaba ensayando, aunque su mente repasaba el ¿Por qué?, ¿por qué Minho pediría quedarse en casa de alguien más? Gracias a Jeongin, Jisung y Felix sabía que la mayor parte de los fines de semana el castaño pedía asilo con sus amigos, no era regular entre semana pero a veces podía suceder.

Ahora no solo era en casa de los tres mencionados si no también en la suya y aunque tenía mucha curiosidad intentaba no preguntar. Minho se ponía serio e incómodo.

—Escupelo— dijo de repente el castaño sacándolo de sus pensamientos, lo miro confundido—. Puedo escucharte pensar, tonto.

—Oh— miro hacía la calle solitaria iluminada solo por las farolas—. No es nada.

—¿Te estás preguntando por qué te pedí permiso para quedarme en tu casa?... ¿Otra vez?— preguntó metiendo sus manos en los bolsos del cardigan y pareciendo más pequeño de lo que en realidad es.

—No debes decirme si no quieres— se apresuro a decir, caminando más cerca de él.

—Mi madre es una idiota— respondió después de unos segundos en silencio—. Alcohólica y esa mierda— no alzó la mirada ni siquiera para verlo—. Los fines de semana suelen llegar hombres a la casa, y bueno ya sabes es incómodo.

Su corazón se agitó, hubo un piquete doloroso de preocupación.

—Son unos idiotas— el chico lo dijo con enojo—. Prefiero estar en casas ajenas que en la mía.

—Minho...— quiso decir algo más sin embargo el chico lo paro en seco, con una sonrisa leve.

—Tranquilo, no pasa nada— se alzó de hombros, Hyunjin se odio, eso debería estarle diciendo él no al revés—. Me he acostumbrado lo suficiente para que no me importe, solo paso el fin de semana afuera de mi casa y luego todo vuelve a la normalidad.

—Sabes que puedes quedarte cuando quieras— le dió una mueca intentando que se viera como una sonrisa—. No importa cuando.

—Gracias Jinnie— el castaño le sonrió con alegría—. Me gusta dormir en tu casa, sueles ser muy cálido.

Hyunjin dejo salir una risa nerviosa ante el comentario, sintiendo en su pecho una calidez a la que le tenía un miedo tremendo. La noche paso "normal" con ellos en la habitación, Minho en su cama jugando con su nintendo y él dibujando a escondidas al castaño.

Fue una buena noche.

Y entonces algo sucedió. Había una nueva chica en la escuela y de pura casualidad tenía bastantes clases con él, era linda e inteligente le agradaba bastante platicar con ella.

Su nombre era Lía, tenía ojos seductores y en serio era muy linda.

Pero lo que le había puesto los pelos de punta fue que esta chica usaba las servilletas de su alma gemela. La primera vez que lo noto pensó que su vista le había fallado la segunda vez la chica le regaló una y casi corriendo llegó a su casa para comparar ambas servilletas dándose cuenta que eran el mismo diseño.

Su corazón palpito con fuerza esperanzado porque si ella era su alma gemela entonces era muy linda, atenta, divertida e inteligente.

Y entonces su mente puso la sonrisa melosa de Minho en sus pensamientos y su pecho se apretó, rodó los ojos. Ellos no eran nada, solo amigos que se llevaban bien y que podían compartir ropa o artículos del otro.

Siguió tomando su malteada cuando la chica se sentó frente a él sonriendo con una bandeja en sus manos:—¿Puedo sentarme?— preguntó con su voz dulce.

—Adelante— le sonrió—. ¿Qué tal tus clases?

Y antes de que la chica pudiera contestar, la voz juguetona de Minho se escuchó sentandose alado de él poniéndolo en alerta Jeongin también se sentó en una de las bancas rodando los ojos.

—Jinnie— se lamento el chico con un puchero—. El idiota de Yang está siendo más idiota de costumbre.

—No creas que porque está Hyunjin aquí no te seguiré regañando por la estupidez que hiciste— el chico parecía cansado, como si Minho fuera su hermano pequeño y el ya se hubiera hartado de ser complaciente—. Oh, hola— saludo a Lía que solo le sonrió—. Perdón por la escenita, soy Jeongin— saludo con amabilidad.

—Lía— contesto dejando ver sus hoyuelos y acomodando sus cabellos que tenían un bonito color magenta.

Entonces Minho miro hacia enfrente viendo a la chica, Hyunjin pudo ver el cambio de comportamiento y de emociones en sus ojos. Se sentó recto sin separarse mucho de su cuerpo y con una bonita sonrisa hablo:—¿Quién es?— preguntó a Hyunjin viendo que Lía le sonreía esperando a que contestará.

—Minho Lía, Lía Minho— los presento algo nervioso, Minho se veía muy raro las emociones que mostraban sus expresiones no concordaban con las que sus ojos gritaban.

—Me gusta el color de tu cabello Lía— dijo Minho poniendo una mano en su rodilla y mirando los cabellos largos de la chica con intriga—. Te queda a la perfección.

Hyunjin casi se atraganta con su bebida, Minho hacía pequeñas acaricias en su rodilla como si le estuviera diciendo algo implícitamente; no sabía si le gustaba o lo espantaba.

—Me gustan tus piercing— dijo la chica señalando a su propia ceja pero mirando la pieza en el rostro de Minho—. ¿No te dolieron? Estoy interesada en hacerme uno.

—Oh no para nada— con su mano le resto importancia—. No duele nada si quieres puedo recomendarte un buen perforador.

—Sería de mucha ayuda— le sonrió la chica achicando sus ojos y alzando su ceja derecha. Su sonrisa llena de condescendencia, ¿por qué lo veía así?

Ambos se miraban teniendo una conversación "amena", Hyunjin miro a Jeongin para pedir auxilio más lo único que encontró fue una sonrisa divertida y cansada. El rubio no supo cuando su mano paso al muslo de Minho dejándola descansar ahí, el castaño lo miro de reojo con una sonrisa más melosa que antes como si hubiera conseguido justo lo que quería.

Maldito bastardo. Aunque quiso ocultar el hecho de que su corazón se sintió aliviado al ver que Minho no lo apartaba no quitó la pequeña mano de su propia rodilla.

—Bueno— la chica miro su reloj en su celular viéndose horrorizada—. Me tengo que ir— se levantó de la silla  para despedirla, la chica se acercó a él poniendo su mochila sobre el hombro derecho, con lo que no contaba fue con los labios de Lía besando la esquina de sus labios—. Adiós Jinnie— dijo con una voz muy dulce sonriéndole con lo que parecía timidez dando una última mirada a Minho que fingía revisar su celular.

—Adiós Minho— le dijo la chica sonriente.

—Le diré a Hyunjin que te pase el contacto para el perforador— dijo con amabilidad agitando su mano, se levantó también Jeongin sostuvo su mochila esperándolo—. Adiós Jinnie— pudo escuchar a la perfección como el castaño ocupo el mismo tono que Lía solo que más marcado, burlándose—. Vámonos Yang— su voz cambio a la que usaba normalmente.

La cabeza de Hyunjin estaba en corto circuito, ¿qué mierda estaba pasando? Sin dejarlo ir lo tomo del brazo, Minho lo miro con una ceja alzada.

—¿Qué mierda paso hace rato?— y se escuchó mucho más irritado de lo en verdad estaba, los ojos de Minho pasaron de la confusión a no mostrar emoción alguna. Eso lo asustó un poco.

—Nada— se cruzó de brazos—. No paso nada.

—Minho, ella puede ser mi alma gemela— dijo algo frustrado, más que nada por él no por Minho, porque sí ahí estaba la gran posibilidad y aún sabiéndolo estaba seguro que correría a  dirección de Minho no de Lía, Jeongin que estaba con una mueca incómoda abrió los ojos con sorpresa acercándose. Ni siquiera había notado que se había alejado un poco.

—Pues perdón— Minho se veía realmente sorprendido, aún así cambio su actitud a la de siempre despreocupada y confiada—. No pensé que te importaran esas cosas a tal grado. Lo siento.

—¿Por qué no debería importarme?— le preguntó sorprendido y algo a la defensiva, sabía que a Minho no le preocupaba ni tantito su alma gemela pero jamás lo había escuchado decirlo en voz alta —. ¿En serio no te importa?

—Había encontrado un remplazo— sus ojos lo vieron con un sentimiento que a él mismo le daba miedo admitir—. Pero, está bien. No me interpondré más— tomo la bebida que estaba en la mesa dándole un sorbo—. Ni siquiera te gusta la fresa— lo miro divertido sacudiendo el vaso haciendo que los hielos se golpearan entre si—. Me lo llevaré. Nos vemos el fin de semana.

Dió media vuelta y se fue, Hyunjin supo que la había cagado bien en grande.

—Oye él te seguirá hablando si eso te preocupa— dijo Jeongin con una mueca incómoda—. Actuará con normalidad.

—Si...— se pasó las manos por su cabello, ¿por qué se sentía tan mal?

—¿Y ella en serio es tu alma gemela?— preguntó curioso viendo el lugar por donde la chica se había ido.

—Tengo mis sospechas— suspiro—. La otra vez ví un dibujo en una de sus carpetas parecido a uno que yo le envié a mi alma gemela y...— saco la servilleta que Lía le dió hoy—. El primer regalo fue una servilleta idéntica a esta.

Jeongin la tomo, abriendo los ojos sorprendido parpadeando varias veces.

—Ni siquiera las venden en tiendas físicas, las tienes que comprar por línea— explico—. No muchos las tienen.

—Si... Son muy únicas— dijo Jeongin, pareciendo que quería decir otra cosa—. Lo... Lo sé porque mi sobrina tiene unas iguales, sus papás las compran.

Hyunjin asintio, viendo un tinte de nerviosismo en sus ojos ¿por qué estaba nervioso?

—Pronto será junio, así que pensé que tal vez daré algo llamativo y me sacare de las dudas— alzó los hombros—. Aunque Lía no toca la guitarra.

—¿Eso tiene algo ver?— preguntó Jeongin aún estupefacto.

—Mira— se quitó su collar y se lo dió, Jeongin parecía tenso—. Es lindo, ¿no? Pero ya sabes Lía no toca la guitarra.

—Es muy lindo— sonrió devolviendo el collar—. Oye necesito ir con Chae— suspiro alejándose—. Nos vemos el fin de semana.

Hyunjin vio raro el comportamiento de Jeongin, nego con la cabeza su mente lo enviaba a la plática/pelea con Minho.

Mierda, ¿Qué debía hacer ahora?

Era aterrado ver qué... Minho cumplió su palabra. Estaba actuando igual que siempre, el chico fue físico con sus amigos todo el tiempo no era raro verlo dando abrazos platónicos a todo el mundo.

Fue lo mismo con él, Minho no mencionó nada más seguía hablando con seguridad con él, riendo y siendo meloso como siempre.

Y eso lo ponía con los pelos en punta, en serio creía que ser ignorado era  mejor que esto. El dijo que había encontrado un remplazo tal vez ahora ya tenía uno más.

Y eso dió una punzada en su pecho, eso no importaba. De pronto el sonido armónico de la banda comenzó a sonar por todo el lugar, Minho estaba más eufórico de lo normal, rasgaba las cuerdas como si estuviera enojado.

La cuarta canción era un cover que para sorpresa de todos lo cantaría Minho, era la primera vez que tocaban la canción, sabía cuál era porque el chico la había estado ensayando hace unos días.

Blood in the cut de k.flay.

—Esta canción— su voz sonaba agitada—. Me la enseño un idiota que está en el público— Hyunjin miro confundido, Chris y Sana estaban riendo mientras que Jisung golpeaba los platillos lentamente negando la cabeza divertido—. ¡Espero que estés feliz de hacerme sentir mal, Jungwoo! ¿¡Están listos!?

Y con esas palabras la canción comenzó entre gritos y brincos de la multitud, fue un dueto entre él y Sana.

Siempre le sorprendió lo mucho que cambiaba la chica arriba del escenario luciendo tan ruda pero también sexy, súper diferente a su verdadera personalidad amable y tierna. Su mente seguía reproduciendo el nombre que Minho había gritado, miro a la multitud que brincaba cantando en coro la canción.

No fue hasta que vio a un chico alto de cabello pintados en blanco, sonriendo viendo directamente al escenario, a su lado estaba otro chico más bajo pero musculoso pareciendo divertido y hablando con él.

—Es el ex de Minho— le gritó a Jeongin lo más que pudo.

Su estómago cayó, ¿cómo que ex? Pues parecía que otra vez se hablaban o algo por el estilo, puso atención a la canción... Por algo Minho decidió cantarla hoy.

Cuando la banda termino y subieron los siguientes Hyunjin espero junto a Felix a los chicos, estaba nervioso de verlo y bastante conciente si es que el otro chico venía por aquí.

—¿Todo bien?— el pecoso lo miro preocupado—. Te he visto en las nubes.

—Lo estoy— sonrió, por la mueca de su amigo supo que no le creyó aún así le dió una mirada comprensiva y asintio.

A los minutos Minho llego con el mismo cardigan de hace unos meses, Hyunjin no había mencionado absolutamente nada y dejo que el chico se quedará con el.

—¿Le regalaste tu cardigan?— preguntó Felix, el rubio le dió una mirada aterrada, el castaño miro desconcertado a ambos—. Se te ve bien Min.

—¿Es tuyo Jinnie?— preguntó sonriendo—. Creí que era tuyo Lix.

—O no, yo solo lo tome prestado— dijo el rubio—. Me parece lindo que compartan ropa.

—Si...— susurró tocando su cuello incómodo.

—¿Puedo devolverlo?— Minho dijo sin expresión.

—¡No!— nego con un grito, dió una tos al ver el rostro de ambos—. Puedes usarlo.

Minho quería decir algo, pero la voz emocionada de un chico alto y de cabellos blancos los saco a los tres de su burbuja.

—¡Minmin!— Minho volteo con una sonrisa abrazando de inmediato al alto, Hyunjin vio la interacción incómodo—. ¡Estuviste genial! Changbin estuvo realmente sorprendido aunque este no sea su ambiente.

—Pense que no vendrías— el castaño le dió un golpe en su hombro uno amistoso—. Empecé a sentirme solo— después de decir eso, volteo para verlos y tomando el brazo de Jungwoo los acerco—. Woo, Felix y Hyunjin, chicos él es Jungwoo.

Ambos asintieron saludando, Minho y el tal Jungwoo se veían con bastante historia lo que le hizo sentirse horrible. Tal vez estaba exagerando pero de verdad sentía su corazón llorando por enojo y tristeza.

No debía sentirse así, en primer lugar el mismo fue el idiota con Minho. Siguiendo pistas que tal vez no eran realidad, porque en su mente había una pequeñísima pisca de esperanza en que Minho fuera su alma gemela.

La noche había pasado lenta y tortuosa, tuvo que soportar ver a Minho junto a Jungwoo, y lo peor de todo el guitarrista lo había evitado durante toda la noche.

Holaaa. ¿Cómo están?

Espero que bienn, les quiero agradecer por apoyar este pequeño proyecto. ✨🖤

Sin nada más que decir, bye bye. 🖤

-Annie ☾-