Capítulo catorce

Advertencias: Contenido NSFW+18.

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Dazai rebotaba encima de Chuuya, era un ambiente más lascivo que erótico, pero ambos parecían estar emergidos en el placer. Dazai siguió moviendo las caderas para asegurarse de tener muy profundo a Nakahara.

—¡Se siente muy bien! —sollozó cuando Chuuya puso fuerza en sus empujes encontrando a Dazai a mitad de camino—. Más, más.

Nakahara siguió empujando hasta que Dazai salpicó su pecho de fluido blanco y un par de empujes feroces lo enviaron al final. Jadeando sostuvo las caderas del castaño hasta que superó su propio orgasmo—. Fue delicioso.

"Delicioso" el castaño se inclinó sobre su pecho para besar los labios de Nakahara, sus labios tocaron la mejilla del más bajo porque al parecer se dió cuenta de sus intenciones y lo esquivó rápidamente. En cambio regresó el gesto en su mano derecha.

"Es bueno intentar cosas nuevas en pareja" Dazai recordó las palabras dichas por Fyodor. "lamentablemente creo que a él le gusta ese tipo" Se acostó a lado de Chuuya y rendido besó su hombro—. Oye Chuuya.

El de ojos azules estaba cansado, pero aún así obligó a responder—. ¿Qué ocurre?

—¿Quisieras intentar algo nuevo conmigo? —preguntó tímido ante la idea de indagar en su vida amorosa. ¿Akutagawa le gustaba tanto? No lo sabía pero también quería averiguarlo.

Chuuya suspiró—. ¿Qué quieres intentar? —ya podía imaginar que no era algo menor, pues ni siquiera lo habría preguntado.

—Ese chico, Akutagawa…podríamos tener un trío…

Chuuya se alejó como si tuviera lepra—. ¿Qué mierda dijiste? —tardó unos segundos en procesar la propuesta—. ¿Piensas en hacer un trío después de follar conmigo? Hay algo gravemente mal contigo —se puso de pie y alcanzó su ropa para vestirse a prisas—. De verdad eres jodidamente increíble —lo dijo en el mal sentido, pues sus ojos picaban y las lágrimas amenazaban con caer en cualquier segundo.

¿A Dazai ya no le bastaba usarlo como un juguete sexual? ¿Quería más? Chuuya se hizo un sin fin de preguntas. Él genuinamente quería a Osamu, rogaba por su bienestar y aunque no esperaba lo mismo a cambio, quería creer que al menos estaba en esa delgada línea de gustarle.

Ese es el problema cuando tú amor no es correspondido, Chuuya lo sabía, y podía vivir con el rechazo de Dazai, por eso fue que se negó a darle más afecto del que él mismo quería darle, para no asustarlo, pero eso era muy distinto a ser despreciado.

—Creo que te gustaría hacerlo —el castaño se estiró para tomar su brazo y tratar de detenerlo—. Pensé que él te gustaba…

—¡No me toques! —gritó y sin contener más sus sentimientos giró mostrando que gruesas lágrimas caían hasta su barbilla—. ¿Por qué mierda me gustaría? ¿Siquiera sabes de algo que me guste? —corrió hasta la entrada principal y salió del departamento azotando la puerta.

Al castaño le costó un poco entender lo sucedido, cuando pudo articular más palabras, lo único que salió fue un "Lo siento"; pasó del éxtasis a él dolor por un comentario fuera de lugar que hizo. Jadeando por aire el castaño se abrazó a sí mismo, aunque tampoco era diferente a lo que hacía Chuuya.

Fue directo a la ducha para asearse aún llorando—. Te odio, te odio tanto —dijo una y otra vez mientras tallaba su piel fuertemente. Incluso si solo tenían sexo nunca se sintió usado, pero ahora se odiaba más a sí mismo por permitir que le doliera—. ¿Por qué no puedes quererme? —preguntó al aire con tanta lástima de sí mismo.

Era difícil aceptar que Dazai le robó el corazón y que anhelaba con todas sus fuerzas tener el suyo.

Dazai tenía ojeras, y le dolía todo, esa fue su principal razón para no levantarse ni a comer, seguía tan abrumado por lo de ayer.

Pensó que las cosas con Chuuya estaban bien cuando se apareció en su departamento con un plato de comida y le preguntó por su día. Dazai se emocionó tanto que lo terminó arrastrando a su habitación para ofrecerle sexo oral y algo más, y antes de darse cuenta, Chuuya lo empujaba a su habitación entre manoseos nada sutiles.

Lo arruinó todo, pero no fue con mala intención, solo quería estar seguro de la comodidad y el placer de Chuuya. Tal como le dijo Fyodor, probar cosas nuevas era algo positivo y que los ayudaría a mejorar su comunicación.

No se movió hasta que la alarma que sonaba una hora antes de su directo programado lo asustó. La transmisión empezaba a las siete pm. Se levantó mareado y avanzó hasta su refrigerador sin ánimos de comer, pero si bebió agua. Se encerró casi media hora en el baño dándose una ducha y secando su cabello lo mejor que pudo.

A pasos torpes buscó en su armario el juguete más llamativo de su colección y un montón de lubricante transparente. Ni se molestó en ponerse ropa linda, directamente estaba desnudo.

—Chuuya no paga mis cuentas después todo —se dijo a sí mismo para darse ánimos de empezar—. Hola, bienvenidos a mi canal. Espero que estén bien, yo estoy fantástico, así que comenzaré a estirarme.

Las donaciones no tardaron en llegar. >>Luces desanimado<<

—G-gracias por decírmelo —comentó sarcástico y con prisa se llenó la mano de lubricante, lo esparció tanto como pudo. Se acomodó sobre el juguete y aunque era incómodo y molesto no se quejó en voz alta cuando se deslizó sobre él.

>>Lo que daría por coger contigo<<

Eso lo llenó de soberbia—. Lo sé, yo también lo haría —las palabras venenosas salieron para Chuuya por si acaso estaba viéndolo—. Yo podría mandarles un mensaje al azar y quedar con alguno de ustedes en cualquier hotel y tener sexo —sonrió pues eso le dió el máximo de donativos permitidos por la plataforma—. Veo que les gusta la idea…sí eso sería interesante. Podría tener a quién yo quiera.

Su boca sucia siguió escupiendo maldiciones, y estaba cada vez más cerca del orgasmo. Chuuya no soporto seguir viendo y cerró la transmisión. Estaba dolido.

No le importaba si Osamu decidía contar sobre su relación en internet frente a un montón de desconocidos.

Pero le dolía saber la verdad.

Dazai tenía razón, pudo enviarle mensajes a cualquier otro seguidor y la invitación para tener sexo, ¿Entonces que hacía diferente a Chuuya? Nada, no había un motivo para ser escogido, salvó que vivía a lado, pero nada más.

Nakahara se dió un golpe en la frente "Me odio por suscribirme a su página".

Mientras tanto Dazai alcanzó el orgasmo gimiendo su nombre, rogando porque fuera a su habitación para reclamarle, y así tener una excusa para pedirle perdón y prometer que no volvería a pasar si Chuuya era completamente suyo.

El chat se puso eufórico.

>>¿Quién es Chuuya? LoL<<

>>Que envidia si te folla<<

>>¿Habrá alguna colaboración?<<

>>¿Entonces tiene novio?<<

Sin ánimos de dar explicaciones, Dazai apagó la transmisión y se quedó acostado hasta que sus piernas tuvieron fuerza para moverse. Alcanzó su celular para revisar los ingresos de su arduo trabajo, abrió la mensajería solo para cerciorarse de ver todas sus notificaciones.

>>No puedes responder a este chat<< Chuuya lo había bloqueado. Rápidamente revisó en sus otras redes sociales y en todas era lo mismo.

"Oye sobre esto. Es algo solo físico ¿Lo entiendes verdad?" Estaba harto de repetirse una y otra vez lo idiota que fue al decirle eso hace meses.


Soporten panzonas, les prometo que el dolor vale la pena, lo veo como una expiación para ambos que han cometido errores.
-Honey

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