Capítulo 8 Los Deseos que recorren las Estrellas ꪜ

Deseos, todas las personas en el fondo de sus corazones albergan muchos deseos que anhelan cumplir, pero son tan profundos porque inconscientemente deducen que las probabilidades de que vayan a cumplirse son escasas. Hoy es un día especial, porque ya estamos en el mes de "Fumizuki" donde es el día de las estrellas en honor a Vega y Altair amantes de la constelación de Lira.

— Ara, ara finalmente es 7 de Julio —declaró Kanae al entrar al comedor donde sus hermanas le esperaban— buenos días Shinobu, Kanao

— Buenos días, Nee-san

— ¡Buenos días!

— Vaya, Kanao está igual de emocionada ¿verdad?

— Solo es 7 de Julio... —susurró Shinobu restandole importancia

— ¡No es cierto! —exclamó Kanae con lágrimas en sus ojos— ¡Shinobu, es un día muy especial!

— Es el mes de las letras (Fumizuki)

— ¡No! Bueno tienes razón en parte, pero este mes es declarado así porque durante el Tanabata es nuestra costumbre ofrecer poemas y escritos con deseos para Orihime y Hikoboshi, Shinobu

— Ah, te referias a eso...

— Ya me iba a dar un buen susto si no recordabas tan importante fecha

— Shinobu-nee ¿vas a escribir algún deseo?

— Siempre lo he hecho Kanao, solo estaba bromeando

— Ara, ¿para quién escribirás este año? —la pregunta tomó por total sorpresa a Shinobu quien se sonrojó levemente

— Shinobu-nee va a escribirle a alguien —repitió Kanao también sonrojada pero muy curiosa al respecto

— No voy a escribirle a nadie, solo pediré salud y bienestar para todos

— ¿Qué harás tú, Kanao?

— Bueno...

— De seguro vas a escribir para Tanjiro-kun ¿verdad? —habló Kanae con una dulce sonrisa en su rostro

— E...Eso...

— Nee-san vas a hacer que Kanao se convierta en un tomate... —negó Shinobu

— ¡Ara, ara es que Kanao es muy linda!

No importaba la situación su hermana mayor siempre veía algo lindo y encantador en las personas. Shinobu la conocía perfectamente y por eso es que siempre se preocupaba pues Kanae era tan buena que le gustaba "adoptar" a todo el mundo, no se sorprendería si se convirtiera en la madre de la nación o algo similar

— Por cierto Shinobu, hoy va a ser un día de chicas

— Ya lo tuvimos hace unos días, nee-san

— Pero me siento muy apenada porque te perdiéramos ese día —se lamentó Kanae con una expresión triste— todas queremos reponerlo

— Ya les había dicho que no es necesario, no fue su culpa ni intención —susurró en respuesta levemente apenada por la situación y también un poco feliz en el fondo.

Normalmente odiaría su estatura ya que muchas veces era objeto de burla por ello, además de ser considerada algo "tierno" por sus amigas, sin embargo ese día había agradecido internamente haberse perdido entre el tumulto de gente pues su maestro de puntos menos le había ayudado mostrando una faceta más amable a diferencia de su expresión fría y neutral de siempre, incluso sus manos eran cálidas

— Shinobu

— ...

— ¿Qué estás pensando? —cuestionó divertida Kanae— ¡tienes las mejillas rojas!

— ¡No es cierto! —negó rápidamente— ¿verdad Kanao?

— ...

— ¿Kanao...? — volvió a insistir en espera de que su hermana pequeña lo negara

— Lo siento Shinobu-nee, pero es cierto... —susurró la mencionada con cierta timidez

Ambas hermanas observaban fijamente a Shinobu. Kanae bastante divertida y emocionada por la situación a diferencia de Kanao que parecía no comprender del todo la situación y quizás la hubieran interrogado de no ser por el suave sonido del timbre que indicaba que alguien había llegado, Shinobu no esperó ni un segundo y se lanzó hacia el recibidor para ver de quien era o más bien para escapar de sus hermanas.

— ¡Shinobu-chan! ¡te extrañé! —exclamó Kanroji, quien no dudó en abrazar o quizás aplastar a Shinobu de la emoción

— Dios, Mitsuri siempre te lo he dicho —suspiró Ruri a su lado

— ¡Lo siento, lo siento!

— Cuando Nee-san hablaba de visitas se refería a ustedes —comprendió Shinobu al verlas, aunque le alegraba que fueran ellas en parte

— ¿Quiénes más iban a ser? ¿acaso ya conseguiste novio Shinobu? —cuestionó Ruri mientras picaba sus cachetes divertida

— No es eso, Ruri-san...

— Oh, ¿es así? Me enteré que uno de tus maestros te trajo a casa... al parecer da Educación Física y es conocido por ser frío y estricto

— Nee-san... —susurró Shinobu hacia su hermana quien negó rápidamente

— No era necesario enterarme por Kanae, Giyuu-nii es un conocido —añadió Ruri al ver la cara de confusión en Shinobu

— ¿Le conoces?

— Algo así, aunque parezca frío usa interiores decorados con salmón —soltó causando un gran sonrojo en Shinobu

— ¡¿Cómo... sabes eso?! —inquirió avergonzada ante tal afirmación

— Tsutako-nee me lo dijo en una ocasión, tiene una hermana mayor

— Ya veo... —susurró cabizbaja al sentir que no conocía casi nada de esa persona y Ruri lo notó pues esa era su intención

— ¡Bien! Dejemos eso para después y pongámonos en marcha —les interrumpió Kanae antes de dar una mirada a Ruri quien negó en respuesta

— Veamos, hay que preparar la comida, las tarjetas, las varas de bambú, el incienso... oh, no es mucho

— No, porque son invitadas y no podíamos dejar que se encargaran también de la limpieza, por eso lo hicimos ayer

— Oh, Kanae-nee también tenemos ya la varas de Bambú —les confirmó Kanao trayéndolas

— Eso nos deja la comida, las tarjetas y el incienso

— No hay problema, yo traje uno —habló Mitsuri con un incienso que extrajo de su bolso

— Entonces eso nos facilita todo, gracias Mitsuri-chan

— Bueno, hay que dividirnos

— Es verdad... entonces, yo ayudaré en la cocina junto a Kanao y Mitsuri, Shinobu y Ruri pueden encargarse de adornar las varas de bambú y preparar las tarjetas ¿si?

— Entendido

— ¡Bien, manos a la obra! —exclamó Ruri entusiasmada

Kanae en compañía de Mitsuri y Kanao se instalaron en la cocina para decidir que clase de comida podrían preparar hoy, sin embargo después de darle varias vueltas se decidieron en preparar varios de los platillos tradicionales para esa fecha lo cual incluía "Yakisoba", "Okonomiyaki", "Yakitori" y si les daba el tiempo un poco de "Takoyaki"

— Bien, yo me encargaré del Yakisoba —pidió Kanae mientras se preguntaba si había suficiente Salsa Yakisoba y mayonesa

— Entendido, yo me quedaré con el Yakitori —respondió Mitsuri inmensamente contenta al pensar en el delicioso pollo con salsa

— Entonces, me tocaría el Okonomiyaki —lo bueno de este platillo es que podía hacer en gran cantidad y a su vez llevarle un poco a Tanjiro

— ¡Si!

Una vez cada una decidió el platillo en el que trabajaría el ambiente se llenó de conversaciones divertidas sobre la universidad y sus día a día en la academia Kimetsu, por otro lado Shinobu y Ruri estaban sentadas en el tatami rodeadas de papel de diferentes colores para formar las tiras de papel o Tanzaku junto a algunos adornos sencillos que decorarían las varas de bambú para hacerlas más bonitas.

— ¿Parece una estrella? —cuestionó Ruri a lo que Shinobu asintió— las manualidades no son mucho mi fuerte, pero si es trabajar sobre un molde puedo apañármelas

— Ciertamente, tampoco se me daban del todo de niña —coincidió Shinobu al terminar de cortar dos tiras y ponerles la respectiva cinta roja para poder colgarla

— ¿Ya tienes en mente que escribirás? —inquirió Ruri con una sonrisa divertida

— Quizás pida salud o que pueda culminar bien mi último año

— No me refiero a eso, ya sabes... quizás... ¿un deseo de amor? ¿un poema?

— ¿Por qué escribiría eso?

— ... —la expresión de Ruri decía muchas cosas entre ellas "¿es en serio? tortuga"— Se supone que son deseos que llegaran a Orihime y Hikoboshi ¿verdad? No crees que sería aburrido leer sobre ello a algo más bonito y romántico, después de todo esperan un año para verse —no es que deseara hacer menos los deseos de Shinobu, pero tal ocasión especial solo sucedía una vez al año

— Un año...

— Imagina que tienes una persona que quieres mucho... ¿no anhelarías verla todos los días? ¿no desearías tener así sea un minuto para observarla?

— Eso... —sus pensamientos la traicionaron trayendo a su memoria a Giyuu cosa que le puso nerviosa

— Bueno, solo digo... al final es tu decisión, pero creo que se debería aprovechar la buena vibra que trae esta fecha ¿no crees?

— Tal vez... —susurró al ver fijamente una de las tiras de papel en sus manos

— Ya sabes lo que dicen ¿no? —inquirió Ruri antes de recitar un pequeño poema del Tanabata

"La Doncella Tejedora,

Ayer, por hoy

Pasó el anhelo;

Yo, de ayer,

Hoy piensa con cariño."

— El anhelo siempre estará en nosotros, en nuestra persona amada y tal vez mañana luego de verla por un breve tiempo pueda recordarla con cariño hasta volver a encontrarnos

— Muy romántico —le molestó Shinobu al ver la seriedad en su amiga, algo muy poco común

— Pronto lo entenderás querida Shinobu —fue lo único que dijo Ruri para luego concentrarse en terminar las tiras de papel

El tiempo siguió entre el descanso en el almuerzo junto a un rato de divertidas conversaciones y anécdotas pasadas para finalmente retornar a sus tareas y eso de las cinco de la tarde comenzar a arreglarse. Todas estaban entusiasmadas con sus kimonos siendo el más encantador el de Shinobu de un suave tono púrpura decorado con algunas flores de glicina y solo por eso decidió dejar su corto cabello a medio recoger siendo sujetado por su accesorio de mariposa de siempre

Las fotos no se hicieron esperar para luego compartirlas en sus redes sociales y así ver que sus amigos y familia también estaban disfrutando. Ellas por su parte decidieron cenar primero y eso de las once de la noche escribir sus deseos en las tiras de papel.

Pasado el tiempo notaron que se quedaron sin bebida y algunos dulces, por lo que Shinobu se ofreció para ir a la tienda de conveniencia que quedaba cerca del puente, a pesar de que se ofrecieron para acompañarla Shinobu se las arregló para escaparse, no le tomó mucho tiempo llegar y comprar lo que necesitaba, sin embargo no esperaba tener un encuentro tan oportuno en la mitad del puente que tenía vista al río.

— ¿Tomioka-sensei? —cuestionó al ver que se trataba de Giyuu, también llevaba unas compras con él— ¿qué hace aquí?

— Oh, Kocho... —susurró al verla dejándose brevemente llevar por el atuendo inusual en ella— solo tomaba un respiro, están muy bulliciosos en casa

— Ara, ¿es así? —rió Shinobu divertida al imaginar la situación

— ¿También fuiste de compras?

— Así es, nos quedamos sin bebidas y dulces —respondió Shinobu mientras se acercaba a la baranda en la que estaba inclinado su profesor— ¿Es interesante ver el río, Tomioka-sensei?

— Más que interesante, es como si me calmara y también me recordará que un día conviví con él...  Kocho, ¿te gustan las mariposas?

— Si, me gustan

— ¿También te gusta la farmacéutica y estudiar venenos?

— ¿Cómo lo sabe?

— Solo una corazonada ¿quizás? —cuestionó observándola fijamente

— Ni siquiera está seguro —masculló Shinobu avergonzada

— Kocho, mira —le pidió señalando el cielo

— ¿Qué? ¡oh!

¿La palabra "hermoso" era suficiente para describir lo que veían sus ojos en ese momento? La vista era tan embellecedora y profunda... las estrellas habían formado un hermoso puente en el cielo uniendo a los amantes que se esperaban cada año para poder verse. Shinobu sintió una extraña sensación instalarse en su pecho, de repente sentía que podía comprender esos sentimientos de anhelo junto a una sensación de tristeza y nostalgia.

— Es hermoso... —susurró sin despegar su mirada del cielo

— Si, es hermosa... —soltó Giyuu en respuesta captando la atención de Shinobu, después de todo su mirada no estaba dirigida hacia el cielo sino puesta en ella

— Espero hayan sido capaces de encontrarse —añadió Shinobu mientras se reprendía mentalmente al pensar que su comentario iba dirigido a ella

— Es seguro que así fue —concordó Giyuu mientras se volteaba hacia ella y extendía su mano abierta

— ... —normalmente debía bromear en un momento así, pero sentía que no era el instante para hacerlo, la mirada de Giyuu tan azulada simplemente podía anular sus acciones

Con cierto temor Shinobu posó su mano en la de Giyuu notando que era mucho más grande que la suya, Giyuu por su parte apretó levemente la mano sin atreverse a soltarla ¿estaba mal que en esos momentos recordará las escenas en que el chico atrae a la chica hacia si o le besa la mano? Porque bueno, la idea llegó a la mente de Shinobu, sin embargo su profesor de puntos menos solo la agitó de arriba a abajo simulando el apretón de manos o saludo dejando a Shinobu totalmente perpleja y avergonzada.

— Espero contar contigo, señorita presidenta —habló Giyuu para finalmente soltar su mano— fue un gusto verte hoy, pero ya deberías volver a casa o se preocuparán

— ¿Eh...? —aún seguía perdida en su mar de emociones, pero se obligó así misma a dibujar una sonrisa en su rostro para luego despedirse.

Kocho Shinobu no fue capaz de manejar la situación como normalmente lo haría, simplemente no podía y el solo hecho de haber vuelto a tomar su mano le había dejado confundida y con el corazón corriendo como loco en su pecho ¿qué era esto? Casi al llegar al final de puente la fuerte voz de Giyuu se hizo presente en sus oídos dejando paso a una corriente extraña recorrer su cuerpo

— Kocho, te ves muy bien hoy —exclamó para captar su atención— soy tu maestro, pero lo digo con mucho respeto

Sin más que agregar Giyuu tomó la dirección contraria, mientras Shinobu al ver la hora en su reloj echo a correr con las cosas pues ya llevaba más de treinta minutos tarde, pasó el parque quedaba en el lugar hasta perderse en una de las esquinas donde sin ser vistas Kanae y Ruri reían divertidas.

Al llegar Shinobu encontró únicamente a Kanroji y Kanao que le dijo que su hermana y Ruri habían salido a buscarla, sin embargo no pasó mucho para que ambas aparecieran en el patio con una gran sonrisa en sus rostros. Ahora que estaban todas finalmente procedieron a escribir sus deseos, dibujos o poemas en las tiras que antes habían preparado.

— Mi deseo... —susurró Shinobu al ver la tira de papel de color púrpura frente a ella— es al parecer un fuerte anhelo

No importa cuando lo pensara esos eran sus verdaderos sentimientos y deseos en esos momentos, más que un poema Haiku era... sus emociones la que la estaban moviendo en esos momentos. Por su parte Giyuu se disculpó con su hermana por la tardanza para luego recibir una tira de papel de su amigo Sabito.

— Este año debes escribir una, Giyuu

— Si, tienes razón... —susurró al tener claro que es lo que escribiría en el pequeño papel de un suave tono azulado

Para Giyuu, el detalle de las flores en el kimono de Shinobu le traían recuerdos, sin embargo sentía que era una flor que la identificaba bastante, junto al ligero aroma que percibió al tomar su mano siendo la esencia de la misma Wisteria. Solo que para él Shinobu aún estaba lejos brillando con su propia luz y determinación

De nuevo habían tomado sus manos, causando un torrente de emociones en ambos siendo que un lado se frenaba en aceptarlos y el otro comenzaba a experimentarlos e inconscientemente atesorarlos, al menos solo por hoy podía permitir tal deseo con la seguridad y esperanza de que el puente de estrellas llevaría sus deseos a los amantes que se anhelaban todos los años para volver a encontrarse.

— "Anhelo" —susurró una mujer de largos cabellos rojos sin dejar de observar hacia la gran luna que iluminaba el cielo.



¡Hola a todos! Disculpen la demora en la actualización, pero tenía pendientes unos especiales así que se retrasó ;u; así mismo me disculpo pues este capítulo estaba planeado para el 7 de Julio, but el tiempo, los pendientes y Wattpad que me odia no me dejaron subirlo, así que disculparan que la fecha ya haya pasado ;; ¡espero sea de agrado! A decir verdad estaba bastante emocionada por este capítulo, ya que se ve la relación de ambos en sus inicios aún ignorantes de todo lo que les espera uwu

Pd: ¿Quién será la mujer de cabellos rojos? ¿amigo o enemigo?

Att: Andysakurai15

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