Solo les diré que desde este capítulo en adelante va a ver puro bardo y lágrimas. Así que prepárense.

-Estas nerviosa?- Yujin le froto el hombro a Wonyoung .

-Algo... ¿y tú?

-También. Pero Eunbi nos ayudó a estudiar, estaremos bien- Wonyoung le dio una media sonrisa asintiendo y recargando su cabeza en su hombro.

Negándose a darle un beso en público, vio por el rabillo de su ojo a un anciano viéndolas con una mirada de desagrado. No era que se avergonzara, pero no iba a arriesgarse a que le hicieran daño a Yujin por una muestra de afecto.

Volteó a ver a su novia quien se encontraba ajena a la situación mirando por la ventana del autobús.

-Mira, es Yena y Yuri- Wonyoung levantó su cabeza levemente y vio a las susodichas por la ventana subiéndose al autobús también.

-Hola- Saludaron ambas sentándose detrás de Wonyoung y Yujin.

-¿Están nerviosas?- Wonyoung volvió a preguntar.

-No mucho. Pero más vale que todas quedemos ¿me escucharon?- Yuri exclamó.- No quiero estar en una universidad donde no estén ustedes

-¿Nosotras o Yena?- La rubia golpeó a Yujin en el brazo.

-Habló de todas en general... incluso Eunbi

-Ella es una maldita cerebrito, estaremos bien

(...)

-¿Donde está la enana?- Yuri murmuró tomando la mano de Yena tratando de ver entre la multitud de estudiantes.

Hoy era su gran día.

Cursando su último año de instituto debían presentar su examen para la universidad.

-Iré a buscarla...- Yuri soltó la mano de Yena y se hizo paso entre la multitud.

Yena miro a Wonyoung quien se veía tensa y nerviosa, lentamente se acercó a ella.

-¿Estas bien?- Le susurró.

Wonyoung negó con la cabeza.

-Te diré después ¿está bien?- Yena sabía que no era él momento exactamente adecuado para hablar. Solo le asintió y se colocó al lado de ella frotándole el brazo, Wonyoung le regaló una media sonrisa sintiéndose aliviada de que Yena no presionara tanto el tema.

-Ahí está...- Yujin dijo quien no había visto la interacción entre Yena y Wonyoung. Las dos últimas voltearon a ver al mismo lugar donde Yujin habia divisando a Eunbi caminando hasta ellas.

-Buenos días- Dijo con una sonrisa.

-¿No vienes con Nako?- La sonrisa de Eunbi se desvaneció.

-Ohh- Yena empezó.- ¿Ya tuvieron su primera pelea cierto?- Eunbi sólo rodó los ojos.

-Solo no quiero hablar mucho de eso en este momento- La pequeña se encogió de hombros.

-Ow, mi pequeña- Wonyoung la abrazó revolviéndole el cabello.- Todo se va solucionar, ¿podemos saber por qué ocurrió todo?

-Bueno, su amiga Miru se le declaró ayer y... bueno yo fui testigo de todo eso

-¿Estabas ahí cuando ocurrió?- Eunbi asintió

-No estamos "peleadas" o al menos no exactamente, es solo que... Miru parecía no saber nada acerca de mi relación con Nako, como si no les haya contado que estamos saliendo, al contrario de ustedes que lo supieron en él primer momento

-¿Qué hiciste después de que Miru le dijera?- Yujin preguntó.

-Yo, solo me fui

-¿Hablaste con ella?- Esta vez fue Wonyoung.

-No... no desde anoche

-¿No crees que debes hablar con ella? Estas tomando perspectivas que quizás son

-Lo sé- Eunbi bufó.- Me sentí horrible en ese momento, quiero decir, ¿que no hay un código de amigas para eso? En ese de que no te puede gustar la misma persona que le gusta a tu amiga. Miru era una muy buena compañera, ahora entendí por qué dejo a hablarme...

-Existe ese código- Yujin la tomó de los hombros de forma protectora, daba ese aire de cuando un padre le da una lección a un hijo mientras miran el horizonte

-Pero es tonto ¿sabes? Ósea, míranos ahora, a Yena le gustaba Yuri cuando ella era mi novia y Choi y yo somos amigas ¿no?

Yena asintió, aún era incómodo hablar de ese tema aunque a Yujin parecía ya no importarle.

-Pero...

-Quizás Miru dejo de hablarte porque sabía que tú y Nako se gustan. Era más que obvio...- Yujin rió.- Pero tienes razón, no debes pensar demasiado en ello, sólo prométenos que hablaras con ella más tarde ¿sí?- Yujin alzó su meñique y Eunbi lo entrelazo sonriendo.

-Tienes razón ¿Dónde está Yuri de todos modos?

-Oh, de hecho ella fue a buscarte- Yena se levantó sobre la punta de sus pies tratando de ver si podía ver a Yuri a distancia, pero había demasiado alumnado en el lugar.

-¿Como la vamos a encontrar así?

-Yo sé como...- Eunbi rió.- Gigantes, cárguenme- Le indicó a Yujin y Wonyoung quienes arrugaron el entre cejó con desagrado.

Tomaron a Eunbi de sus caderas y la elevaron lo suficiente. La pequeña aclaró su garganta antes de agarrar una gran cantidad de aire.

-¡¿Yena quieres salir conmigo?!- Grito ahuecando sus manos alrededor de su boca con una voz grave, simulando ser un hombre.

A lo lejos se vio como una cabellera castaña se daba la vuelta como el exorcista con una notable expresión de molestia.

-¡Ella es mía!- Yuri gritó de vuelta empujando a distintas personas comenzando a correr hacia donde las chicas estaban.

-La encontré - Chilló con satisfacción y las menores la bajaron.

-¡Kwon Eunbi!- Yuri la golpeó en el brazo una vez que había llegado.- Realmente creí que un chico había dicho eso- Hizo un puchero y jalo a Yena hacia ella.

-¿Crees que alguien va venir a hacerlo y gritarlo?- Wonyoung rió.- Sería como si un ladrón fuera a robar y al salir del banco llamará a la policía

-Esta bien- Dijo alargando las palabras soltando a Yena -Fue algo dramático- Hizo un puchero.

-Oww- Yena le sonrió.- Que linda Jjoyul- Le pellizco las mejillas dándole un beso esquimal rozando sus narices.

-Deaj, amor- Eunbi rodó los ojos.

(...)

Una voz detrás de un altavoz decía el nombre de cada alumno y el aula donde se presentaría su examen.

Era algo nuevo para todas las chicas, había chicos ahí, estaban acostumbradas a ver cabelleras largas todos los días.

Se les permitió dar un Tour por el lugar, verificando dormitorios y salones para las diferentes asignaturas y especialidades.

Wonyoung y Yuri obviamente se enamoraron del salón de música.

Eunbi tuvo un orgasmo visual al ver el laboratorio.

Yujin sólo mantuvo la misma expresión todo el tiempo, ella de verdad quería estar ahí.

Yena por su parte miraba indecisa cada rincón. Un sentimiento de miedo la invadió porque de un momento a otro, se sentía indecisa con lo que realmente quería ser por el posible resto de su vida.

Eunbi y Yujin fueron a la misma aula para su examen, y las otras tres chicas tocaron en una sola respectivamente.

En el salón de Yena una mujer bajita, de piel blanca y cabello oscuro dio las indicaciones que debían seguirse.

-Mi nombre es Krystal Jung y espero ver algunos rostros por aquí después de esto. Seré quien vigile su examen- Sonrió sin perder su toque de seriedad.

Su mirada se encontró con la de Yena y está la evito rápidamente.

Durante todo su examen se sintió amenazada por esa mirada, simplemente la mujer no dejaba de verla. ¿Quién diablos es? Ella no quería saberlo de todos modos.

Con todas sus fuerzas ignoró el hecho de sentirse observada.

Una vez que acabo el examen, con un suspiro interno se levantó de su lugar, y se dirigió hacia la mujer dándole el gran cuaderno lleno de preguntas.

-Choi Yena...- La mujer susurró.- Suerte durante los resultados- Yena tragó saliva asintiendo y saliendo del aula.

Al salir diviso a Wonyoung y Eunbi sentadas en una banca.

Sintió su teléfono vibrar en el bolsillo de sus jeans, rápidamente lo saco observando el mensaje en las notificaciones.

[Jessica mum 18:00]

Suerte cariño. Lo harás bien.

Sonrió para sus adentros. Observando el reloj, habían pasado casi cuatro horas desde que entró al aula. Podía sentirse la presión de los demás chicos en él.

-¿Cómo les fue?- Yena se sentó a lado de Wonyoung.

-Ñe...- Eunbi de encogió de hombros

-Fácil supongo- Wonyoung suspiro.- ¿Te das cuenta Yena? Nos conocemos desde los quince años, y ahora vamos a entrar a la universidad- Yena sonrió

-Estas muy sentimental hoy. Pero si, si me he dado cuenta, y estoy feliz por eso

El resto del día paso normalmente, todas aun realmente nerviosas por los resultados que se darían en unas semanas después, al salir del lugar fueron a comer algunos bocadillos, era un trayecto no muy largo pero si se llevaría su tiempo. Yena fue acompañar a Wonyoung a su casa, tenía que hablar con ella sobre lo sucedido en la mañana.

-¿Me dirás ahora?- Dijo suavemente sentándose en el borde de la cama.- Sé que algo pasa Wonyoung , ¿por qué no has querido decirme?- Wonyoung suspiro

-Es sólo que...el divorcio de mis padres ya es legal, y mi padre sigue insistiendo en que le dé una respuesta sobre volver con él a Canadá... ¿Sabes? Ni siquiera recibí algún consuelo hoy de parte de él, nada como "Suerte en el examen" "Lo harás bien" o alguna monería... El sólo...nada- Bajo la mirada al suelo, comenzaba a sentir un nudo en la garganta.- Nada a comparación con mi madre- Yena la miró con compasión, sólo se acercó a Wonyoung dejando que ella recargara su cabeza en su hombro mientras ella le frotaba la espalda con dulzura, Yena no encontraba las palabras exactas para decirle, todo lo que podía hacer era estar ahí para Wonyoung, y Wonyoung agradecía eso.

-Yujin no lo sabe aún ¿verdad?- Yena rompió el silencio luego de unos minutos.

Sintió como Wonyoung se tensó.

-Yo... eh, no- Dijo apenas.

-¿Por qué Wonyoung ? Han pasado casi cuatro meses de eso

-Lo sé- Wonyoung bufó separándose de Yena.- Ni siquiera he hablado con mi madre sobre eso, es decir, no puedo, simplemente no puedo. Pero no hace falta que lo haga ¿cierto? Yo...No voy a irme con el- Yena la miró con cautela, seguía sin saber que decir.

-¿Pero le dirás?- Wonyoung se encogió de hombros

-Supongo

-No es de suponer Wonyoung- Yena reiteró.

-Podemos sólo... ¿No hablar de eso?- Yena suspiró

-Esta bien, no te obligare a nada

(...)

-¿Crees que estén hablando sobre lo sucedido en la universidad?- Yujin dijo mirando a Eunbi y Nako hablar en la lejanía.

-No lo sé- Wonyoung se encogió de hombros.

-Espero y lo hagan, nunca había visto a mi pequeña de esa manera

-¿Pequeña?- Yujin repitió riendo.- Es mayor que nosotras

-Igual así es una de la más pequeñas de las cinco, no puedo creer que tenga novia..- Dijo fingiendo llorar.

Yujin negó con la cabeza riendo.

-Tengo historia a primera hora, ¿te veo en el almuerzo?

-Sabes que si- Wonyoung le sonrió dejando un casto beso en sus labios y ambas se dirigieron a su salón de clases en direcciones opuestas.

(...)

-Entonces, agregando el reactivo al tubo de ensayo...

Maldita sea, esto es tan aburrido.

Yuri terminó de anotar la redacción que su maestro de química estaba dictando mientras que Eunbi hacia el experimento con esa misma redacción.

Yuri observó a la chica más pequeña mezclar las sustancias en los tubos de ensayo donde uno de ellos cambio de color. La pequeña sonrió, el experimento estaba resultando.

Tomó otro tubo moviéndolo entre sus dedos mientras sacaba la lengua levemente en forma de concentración. Yuri mantenía su codo apoyado en la encimera del laboratorio y su mano sosteniendo su barbilla.

-Eunbi, ¿puedes ayudarme con esto?- Nako hablo desde la mesa de atrás. Eunbi no respondió y fue directamente hacia ella.

Yuri suspiro por enésima vez durante el día. Yena se había enfermado y no había asistido, y eso la estaba carcomiendo lentamente.

Ya había pasado una semana desde el examen de admisión, quizás Yena estaba algo estresada, o quizás fue su culpa ya que en su última cita pelearon y le dejo caer parte de su helado en el cuello de Yena.

Yena le había estado mirando el trasero a una chica en el parque donde estaban, la chica paso a su lado y Yena simplemente no lo evitó, Yuri le estaba contando sobre el trabajo que podría conseguir a medio tiempo para poder comprar un auto, no quería el dinero a sus madres, quería ser o al menos tratar de ser independiente.

Fue su ira lo que la llevó a hacer eso, Yena se disculpó un millón de veces, la excusa que dio fue: "Sus pantalones tenían mierda de pájaro, no era mi intención. Perdóname princesa" Yuri sonrió sin pensarlo, Yena era un Pato tonto pervertido.

Miro a Eunbi una vez más, la pequeña dándole instrucciones a su novia de como mezclar el contenido.

El profesor tomó una llamada y salió del laboratorio. La castaña comenzó a sentir un hormigueo en el estomago por lo que paso por su cabeza.

Tomo uno de los tubos de ensayo, quien sabe que contenía exactamente, y simplemente lo vació en otro. Sus ojos se ensancharon en cuanto la sustancia empezó a cambiar de color y leve espuma comenzaba a crecer.

-Eunbi...- Llamó.

-Yuri, ¿qué diablos hiciste?- Wonyoung llegó a la mesa que Yuri compartía con Eunbi.

-Eh...- El contenido dentro del tubo empezó a estallar como si de una fuente de agua se tratará. Las chicas dentro comenzaron a gritar y salir del aula totalmente despavoridas.

-¡Jo Yuri!- Eunbi gritó tratando de sostener el tubo. La fricción hizo estallar el poco contenido en la cara de Eunbi y Wonyoung dejándolas de color azul.

-Mierda...- Yujin entró al salón debido a los gritos que había escuchado.

-¿Qué le pusiste?- Eunbi preguntó algo molesta.- ¿Pusiste butano?

-¿Eso es malo?- Yuri preguntó con una sonrisa nerviosa.

-Fue divertido- Wonyoung sonrió limpiando su rostro con el dorso de su mano.- Pero no vuelvas a hacer algo así o te pateare el trasero

-¿Estas bien?- Yujin le preguntó.

-Si sólo es... no se- Se rió.- ¿Quieres que te de un beso?- Intento abrazarla pero Yujin rápidamente se hecho hacia atrás.

-No necesito de un beso para saber que estas bien, te creo- Le sonrió.

-¿Quién hizo esto?- El profesor llegó furioso, frunció el ceño viendo los rostros de Eunbi y Wonyoung.

-Fui yo...- Yuri se acercó al profesor, este se cruzó de brazos.

-Yo también...- Eunbi se colocó a un costado de Yuri.

-Saben perfectamente que está prohibido hacer cosas no adecuadas en los experimentos ¿Hace falta repetirlo?- Ambas niñas negaron con la cabeza.- Acaban de hacerme perder una clase entera- El maestro suspiro apretando el puente de su nariz.- Vayan a la sala del conserje y limpien este desastre. Mañana les diré sobre su sanción- Diciendo eso el profesor tomó sus cosas y se fue.

-Y creo que yo también iré a limpiar este desastre- Wonyoung salió.

-Iré a acompañarla- Yujin se encogió de hombros y acompañó a su novia.

(...)

-¿Hablaste con Nako finalmente?- Yuri colocó el trapeador en su contenedor terminando de limpiar el suelo de la extraña sustancia azul.

-Algo así...- Eunbi tomó el trapo entre sus manos y lo arrugó trazando círculos en la mesa limpiando también.

-¿Como que algo así?- Eunbi suspiro

-No lo sé...Yo estaba en mi periodo en ese momento, y ella estaba en su último día, supongo que eso nos hizo más sensibles en el momento en que ocurrió, o más bien sólo a mí- Yuri rió

-Eso es lo peor que te puede pasar- Eunbi la volteo a ver con una mala cara.- No, no me refiero a eso Eunbi, lo que quiero decir, es que es comprensible ¿me entiendes?- Eunbi hizo una mueca.

-Es vergonzoso

-Entonces las cosas no están arregladas del todo aún ¿no?- Eunbi negó.

-Ella me dijo que no podría suceder nada, solo son... amigas y esas cosas, me pidió que confiara en ella, y lo hago, de verdad, es sólo que...

-No confías en Miru- Yuri la interrumpió.

-No... Y no me cae del todo bien, no más

-¿Por qué no se lo dices a Nako? Habla con ella- Eunbi gruño apoyando los brazos en la mesa.

-No puedo...- La menor rodó los ojos.

-Deberías poder, ¿por qué no puedes?- Una tercera voz se escuchó en la sala.

Mierda, maldeció Eunbi.

-Nako- Yuri soltó una risa nerviosa.

-¿Puedes dejarnos a solas por favor?-

No, no lo hagas por favor.

-Claro- Sonrió.

Te mataré Jo Yuri.

-Oh no...- Yuri señaló a Eunbi con su dedo.- No me mires con esa cara de sargento mal pagado, debes hablar con ella- Yuri tomó su bolso

-Yo ya termine mi parte de todas formas y debo ir a ver a Yena- Salió por la puerta pero volvió a entrar.- Perdón por meterte en este embrollo con el profesor de química, prometo no volver a jugar con nada- Volvió a sonreír y salió.

Podemos sólo... ¿acabar con esto y ya?

-¿Aún no confías en mí?- Nako tomó las manos de Eunbi.

La mayor desvío la mirada

-Sabes que sí, solo que no en Miru- Nako suspiro

-Ella no es nada, eso lo sabes ¿verdad? No sé que pensaba ella al decirme eso, cuando ella ya sabía que yo salgo contigo. Te quiero sólo a ti- Eunbi se sonrojo.

Yuri quien las veía desde el marco de la puerta del salón escondida sonrió también.

(...)

-Buen día Jessica~shi

-Oh Yuri~ah- Jessica sonrió.- Buen día también. Te tardaste en llegar ¿todo está bien?- Yuri aparcó su motocicleta negra a un lado del pequeño jardín delantero de la casa de Yena, Jessica al parecer estaba haciendo trabajos de jardinería.

-Un pequeño contra tiempo eso es todo... ¿puedo pasar a ver a Yena? ¿Cómo sigue?- Jessica rió, mientras regaba la última hilera de girasoles.

-Ella me contó lo que ocurrió- Yuri tragó duró.- Sé que trajo consecuencias para Yuri pero... Fue genial lo que hiciste

Los ojos Yuri se abrieron como platos

-¿De verdad?

-Si...- Volvió a reír.- Al menos no terminó con un gran moretón en un ojo... Hice eso una vez, aclaro, fue un accidente -Se excusó levantando los brazos como si se estuviera rindiendo -Tiffany me dejó caer una botella de agua congelada en la cara- Siguió riendo.- Recuerdo que ella tenía el cabello teñido de rojo en ese momento, solía llamarla Hell Fany, eso me causó muchos golpes y cicatrices- Yuri rió también.- Aun así, por favor cuida bien de ella ¿sí?- La menor le asintió sonriendo.- Yena está en su habitación

A pasos sigilosos Yuri entró a la habitación de la mayor.

Sonrió al ver a Yena envuelta en un acolchado dormida, con pañuelos a un lado suyo y la televisión estaba encendida en el canal de niños, Yena estaba viendo Doraemon.

Se sentó en el borde de la cama viendo a Yena dormir, tocó su frente con la palma de su mano inmediatamente haciendo una mueca de disgusto al sentir la temperatura.

-Tienes fiebre gran boba- Susurró.- Sólo a ti se te ocurre dormir con un acolchado tan grande, eso sólo te dará más calor- Yena gruño en señal de protesta cuando Yuri trato de sacarle el acolchado.- Yena por favor- Yuri tiro lo más fuerte que pudo y Yena volvió a quejarse poniéndose una almohada en la cara.- Eres tan terca, no sé que haré cuando me case contigo, posiblemente te ponga veneno en la taza de café en nuestra primera semana- Dijo dejando la gran manta a un lado.

-¿Quien dijo que me casaría contigo?- Yena se destapó la cara.- Y si así fuera, si yo fuese tu esposa, me tomaría ese café - La cara de poker de Yuri era épica. Yena rápidamente se arrepintió de sus palabras y se lanzó a abrazar a la chica.

-No es cierto...- Yuri trató de sacarse del abrazo pero Yena la apretó más.- Por supuesto que me casaría contigo- Su voz sonaba algo ronca debido a la gripe.

-Hazte a un lado- Yuri la empujó pero nuevamente Yena no la soltó.- Vas a contagiarme el resfriado

-¿Y?- Yena sonrió pegando su mejilla a la de Yuri.

-Sentía mucha culpa de camino aquí, me arrepentía por haber puesto helado en tu espalda y hacer que te enfermaras, ahora veo que lo mereces- Yuri se rindió y se cruzó a brazos.

-Lo sé, Jessica me molestó por haber hecho eso, ya dije que lo siento- Volvió a besarla en la mejilla

-Aparte... Yo no tomó café

-Como digas Yena, ¿Te has tomado tu medicamento ya?- Yena se separó sonriendo.

-Si- Asintió con firmeza.

-¿Te duchaste con agua tibia?

-Agua a temperatura ambiente, doble si

-¿Te has sentido mejor? Aún tienes fiebre...

-Me siento mejor contigo aquí... triple si- Yuri se sonrojo.

-Eres una boba... ¿Pero quien no se siente mejor conmigo?- La golpeó levemente en el brazo.- Estaba muy preocupada y aburrida por ti

-Hmm...- Yena ladeo su cabeza mirando a Yuri detenidamente, roso la mejilla de la mayor con su dedo, sacando una especie de polvo azul.- Aun así, veo que encontraste algo para tu aburrimiento ¿qué es esto Yuri~ah?- Yena frunció el ceño, limpiando su dedo.

-Fue en clase de química- Suspiro.- Mezcle unos elementos que no eran y... ¡pum! Todo exploto terminando en las caras de Wonyoung y Eunbi

Yena rió.

-Diablos, pagaría por ver eso

Yuri la interrumpió

-Te recuerdo que ya estas pagando por ello, por ver el trasero de otras chicas estas aquí enferma

-¡Hamyul! ¡Ya te dije que lo que siento!- Yena rogó.

-Lo sé, pero lo mereces- Yena bufo.

(...)

-Ácido sulfúrico con una densidad relativa de uno en ochenta y cinco tiene un punto de fusión de diez, treinta y seis grados centígrados, un punto de ebullición de trescientos cuarenta grados, y es soluble en agua en cualquier proporción

-Por favor dime que esa era la última...- Yena se dejó caer en la cama.

-Para tu suerte, si- Yuri sonrió guardando su libreta dentro de su mochila.

-Gracias por los apuntes de hoy- Yena le sonrió observando como Yuri se sentaba a horcajadas sobre ella. Recostándose en su pecho.

Yena comenzó a jugar con el cabello de Yuri como de costumbre, su fiebre ya había bajado y se veía mucho mejor.

Pasaron algunos minutos y el pecho de Yena bajaba y subía tranquilamente, quizás si estaba cansada después de todo.

Yuri decidió ponerse ahora al lado de Yena acariciando con una mano la cintura de la chica debajo de su camisa y la otra su cuero cabelludo. Hasta que unos gritos la interrumpieron.

-Ella no está aquí

-Vamos Tiffany, sé que ella está aquí

-¡No está! De todas formas, si lo estuviera, no dejaría que la vieras, no tienes nada que hacer aquí- Yuri frunció el ceño, Tiffany se oía bastante molesta.

Quitó a Yena de su pecho dejándola recostada cuidadosamente, apagó el televisor y salió a la sala ocultándose detrás de la esquina de la pared.

-Tiffany...por favor...

-Eh dicho que no Krystal- Dijo firme.

-¿Que estás haciendo aquí?- Jessica entró a la sala, su voz estaba temblorosa y se veía el miedo en su rostro.

-Jessica...- La otra mujer susurró -Quiero ver a Yena- Yuri abrió los ojos como platos. ¿Por qué quería verla?.- Yo...

-No, no vas a verla. Ya te lo dije ella no está aquí- Tiffany se colocó a un lado de Jessica tomándole la mano.

-¿Por qué quieres verla? ¿Por qué ahora? Ya pasado demasiado tiempo...- Jessica musitó.

-Lo sé, y lo lamento

-No, no lo lamentas- Tiffany interrumpió furiosa.- No sé cómo nos encontraste, no sé qué buscas exactamente. Tu misma lo dijiste. "Yena no es mi hija, no la quiero en mi vida" y sólo te esfumaste. ¿¡Por qué diablos llegas ahora!?

-¡Quiero conocer a mi hija! ¡No puedes impedirlo para siempre!

-Ella técnicamente no es tu hija Krystal, no debe importarte

-Técnicamente ella tampoco es la tuya Tiffany

-¿Qué es todo esto?- Yuri se sobresaltó al ver a Yena a un lado de ella vestida con unos buzos apretados Nike y una jersey negra holgada, tenia su entrecejo arrugado en señal de confusión.

-Yena...- La rubia se estremeció. Reconocía a la mujer.

-¿Qué es esto..?- Repitió. Como un impulso, ella busco la mano de Yuri rápidamente entrelazándola con la suya.- ¿Quién es ella?

-Soy tu madre- Dijo firme tratando de acercarse a ella.

-No lo eres- Tiffany la empujó con rabia.

-Miyoung... basta- Jessica soltó la mano de Tiffany acercándose a Yena. Tiffany se estremeció al escuchar su nombre en coreano.

-¿De qué está hablando? ¿A qué se refiere?- Yuri sintió su mano aún más apretada.

-Krystal... Krystal era una amiga mía. Ella tuvo un accidente que la dejo estéril- Jessica miro a Yena directamente a los ojos.

-Yo en ese momento tenía problemas con mis padres, ellos me habían echado de casa cuando les conté mi preferencias- Continuó.- Me enteré de lo que la había ocurrido, ella estaba muy enamorada de un hombre - Dijo mirando a Krystal, y esta bajo la mirada.- Pero como imaginarás, el ya no quería nada con ella. Y sólo me ofreció hacerlo- Cerró los ojos y suspiro.- Me pagó por... Llevarte en mi vientre, no tenía nada que perder realmente, y yo necesitaba dinero más que nada, estaba desesperada...- Sus ojos estaban comenzando a cristalizarse.- Fueron tiempos muy, muy difíciles. Conocí a Tiffany en ese entonces, pero justo cuando naciste, cuando ella iba a llevarte...- Yuri sentía su pecho oprimirse. Esto era demasiado.- Recuerdo que te tenía en mis brazos, admirando lo pequeña y delicada que eras... Ella sólo entró, tiro su maldito cheque en mi cara y salió- Dijo con rabia mirando a Krystal -No podía dejarte sola, a pesar de que no tenía nada en el mundo, te tenía a ti- Sollozó.- Lo lamento...- Yena ya tenía lágrimas bajando por sus mejillas.

-¿Por qué no me lo dijiste antes..?

-Jessica creía que no era prudente hacerlo, lo haríamos en su momento por supuesto- Tiffany intervino.

-Dijiste que mis padres habían muerto- Yena sollozo también.- ¡Sigo sin entender!

-Para mí ellos estaban muertos...- Jessica volteo a ver a Krystal.- A pesar de todo

Yena negó con la cabeza.

-Tu eres mi hija Yena...- Jessica tomó la mano libre de Yena -Lo eres sobre todas las cosas, te lleve conmigo nueve meses...

Yuri presenció la falta de calor en su mano izquierda. Yena había salido de la casa corriendo.

-¡Yena!- Jessica trató de ir tras ella pero Krystal la detuvo.

-Déjala que vaya...necesita enfriar su cabeza después de lo que paso- Jessica quito la mano de Krystal de su hombro con brusquedad.

-Por favor Yuri... Ve por ella, no quiero que su resfriado empeore o algo así, no podemos dejarla sola del todo- Tiffany pidió tomando a Jessica en un abrazo protector. Jessica estaba sufriendo.

Yuri sólo no dijo nada y agarró su casco que estaba en el sillón y salió tan rápido como pudo.

Haciendo rugir su motocicleta lo más rápido que podía, buscaba a Yena entre las calles del vecindario.

Comenzó a preocuparse aún más después de treinta minutos sin ninguna señal de ella.

Ya estaba comenzando a anochecer.

Llegó hasta un parque cerca de su casa. Vio a Yena sentada en un columpio desde lejos.

Yuri se acercó a ella con lentitud, le dolía el corazón ver a Yena así.

-¿Puedo?...- Yuri señaló el columpio al lado de Yena, esta sólo asintió mirando hacia la nada.

Yuri suspiro.

-¿Estas bien? ¿Quieres hablar de lo que paso?- Dijo con suavidad.

-No estoy bien...No entiendo nada - Yena la miró con los ojos acuosos.- ¿Por qué apareció así? ¿Por qué nunca me lo dijeron?

-Jessica~ssi tenía sus razones..- Yuri tomó la mano de Yena entre la suya.- Jessica quería protegerte..- Yena sólo lloro más.

Yuri se levantó de su asiento abrazando a Yena. Igual a como Tiffany lo había hecho.

Se sentía tan impotente por no poder hacer nada, sólo estar ahí para su novia.

-Tienes que volver a casa...- Yuri dijo después de unos minutos y de que el llanto de Yena se apaciguara.

-No quiero... No, por el momento...- Se limpió las lágrimas con la manga de su suéter.

-¿Crees que podría...?

-Sí, puedes quedarte conmigo- Yuri la interrumpió. Yena le dio una media sonrisa y la volvió a abrazar.

-Sólo tienes que prometerme que mañana a primera hora volverás y hablaras con ellas- Yena asintió.

Yena se sentó en el asiento trasero de la motocicleta de Yuri colocándose el casco de esta, aferrándose a su cintura buscando protección.

(...)

-Ya las he llamado...- Yeeun entró a la habitación de Yuri seguida de Sunmi.

-Están al tanto de que estas aquí

-Gracias...- Yena murmuró.

Yuri se sentó a un lado de ella tomándole la mano de nuevo.

-Quiero que sepas Yena...- Sunmi le tomo la otra mano libre.- Una madre siempre hace lo que le cree correcto para su hijo, Jessica te adora con su vida, Tiffany igual, ellas siempre estarán para ti, no lo olvides ¿está bien?- Yena asintió con una leve sonrisa.

-Toma...- Yeeun le entregó una aspirina y un vaso de agua.- Espero y tu resfriado no empeore

-Gracias...- Repitió, tomando el medicamento en sus manos.

-No hay de que- Sonrieron.- Buenas noches- Dijeron ambas y salieron.

Yena tomó la aspirina dejando el vaso de agua en la mesita de noche de Yuri.

-Todo estará bien...- Yuri abrazó a Yena por los hombros.- Debes descansar un poco, recuerda que aún estas enferma- Yena sonrió

-Si, mamá- Yuri se recostó jalando a Yena hacia ella.

Yena se relajó escuchando los latidos del corazón de Yuri.

-¿Puedo quedarme con tu camiseta?- Yena preguntó.

-¿Por qué la quieres?

-Por que huele a ti...es como si estuviera contigo todo el tiempo- Yuri agradeció que estaban a oscuras, sólo así podría esconder su sonrojo.

-Por supuesto mi patito - Le dio un beso en los labios luego en la cien.- Buenas noches

-Buenas noches...- Dijo de vuelta.

Mañana se va a terminar este fic. Quedan como unos tres o cuatro capítulos. Y como yo siempre suelo publicar dos por días estaría acabando mañana.