III

Maxime y Gru se dirigían a la cocina para buscar pistas del posible robo, el silencio entre los dos era algo incómodo, a Gru normalmente esto no le importaba, pero ahora... Se sentía más incómodo de lo normal, si antes no era suficiente, ahora lo es más.

Ambos entraron a la cocina, buscando alguna posible pista.

—¿Tienes algo que nos ayude a encontrar pistas? Ya sabes, con tus gadgets de espía.— Exclama Gru, finalmente rompiendo el silencio entre los dos, de una manera algo burlona.

Maxime solo rodó los ojos, mientras buscaba entre sus casas.

Bueno, tengo estos visores de rayos X, tal vez sean de ayuda.— Él le entregó uno a Gru.

Gru solo suspiró y se los puso para ver si podía encontrar algún mínimamente sospechoso, después de un rato, algo llama su atención, un cuadro que parace ocultar un frasco.

—¡Oh! Ya te encontré— Dice el calvo orgulloso, para después retirar el cuadro y mostrar una caja fuerte, lo que parque llamar la atención de Maxime.

—Ah, ¿Qué encontraste ahí, Mon ami?— Cuestiona el castaño, poniéndose a su lado.

—Solo déjame decirte que encontré lo que tú no pudiste, jajaja.— Se burla Gru mientras desbloquea la caja fuerte.

Ante eso Maxime roda los ojos, visiblemente molesto, pero más curioso por ver el contenido de la caja fuerte.

Una vez abierta, Gru tomó el frasco victoriosamente. —¡Ajá! Te tengo... ¿¡Qué!?— Exclamó sorprendido al ver el frasco detenidamente. —¿¡Receta secreta de salsa!?

—¡Oh jajajajajaja! Parace que no eres tan brillante como creías ser, Gruser~— Maxime se ríe burlonamente, mientras se recarga en la espalda de Gru y frota la barbilla de él. Ciertamente se sentía algo frustrado por no encontrar ninguna pista del posible ladrón, pero ahora, genuinamente disfrutaba burlarse de la arrogancia de Gru.

Gru solo gruñó de frustración, para después empujar a Maxime, aunque... No iba negar que esa acción por parte de francés lo había puesto un poco sonrojado... De todas formas, ésto había sido una completa perdida de tiempo.

—Y aunque él fuera el Macho, dudo mucho que escondiera algo tan catastrófico como el suero PX41 en una cocina, digo, no creo que sea tan estúpido.

—Maxime, no ayudas.— Gruñe el hombre calvo con enojo.

En eso, ambos hombres escuchan los pasos de otra persona en el restaurante, lo que los puso alerta, ¡Tenían que salir de ahí pronto!

.

.

.

Una vez que salieron del centro comercial en el auto de Maxime, ambos hombres estaban en completo silencio, es decir, casi los atrapaban allanando propiedad ajena, si no fuera por los Minions haciendo sus estupideces en los asientos traseros, habría un silencio absoluto.

Mientras Maxime conducía, decidió romper el hielo.

—Te recordaba mejor en los años de escuela.— Dice el castaño de repente, lo que hace a Gru levantar una ceja.

—¿A qué te refieres con eso?

—No lo sé, digo... No digo que no lo seas, pero yo recuerdo muy habilidoso en ese entonces, he de admitir.— Exclama Maxime.

Ésas palabras toman desprevenido a Gru, ¿Maxime le acaba de decir un... Cumplido?

—Uhh, bueno...— Gru sentía la obligación de devolver el cumplido, pero, ¿Cómo? Él y Maxime nunca se llevaron bien.

Claro que, tal vez si tuvieras mejores secuaces no te verías tan patético hoy en día, tus secuaces casi hacen que nos atrapen.

La expresión de Gru vuelve a ser seria, ¿En serio? Después de darle un cumplido, ¿Le sale con ésto? —¡Ja! Lo dice el chico que hablaba con las cucarachas, dime, Maxime, ¿aún tienes esa obsesión por ese asqueroso insecto?

Él castaño inmediatamente se mostró algo avergonzado, pero no dejaría que Gru se metiera bajó su piel. —Las cucarachas son mucho mejores secuaces que tus... ¡Bolas amarillas con patas! ¡Y no era una obsesión! Solo yo pude apreciar la verdadera belleza de esos insectos.

—Jajaja, por Dios, ¿Te éstas escuchando ahora mismo? Suenas igual que en la secundaria jajajaja.— El hombre calvo se ríe de forma burlona, lo que hace que Maxime se enoje.

—¡Uhg! ¡Soyez silencieux!— Él grita muy molesto.

Oh, lo siento, ¿te hice enojar~?—Gru continúa burlándose, por lo que Maxime solo escucha sus burlas mientras continúa conduciendo.

.

.

.

Una vez que llegan a la casa de Gru, éste se baja, para después mirar a Maxime, aún tenía un cumplido de devolver.

—¿Sabes, Maxime? No eres tan arritante como recordaba.— Exclama el hombre calvo, no era el mejor cumplido del mundo, pero algo es algo.

Maxime se ve algo sorprendido por el cumplido, tal vez sintendose un poco halagado, antes de que pudiera decir algo, Gru ya se había adentrado en su casa.

.

.

.

Hola! Así como siempre, presentándome meses después de la última actualización, en fin

Sé que es corto, pero voy a dejarlo así, espero que el siguiente capítulo sea un poco más largo.

Bueno ya me void 👀

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top